Las estrategias para afrontar la emergencia económica de Pacifictel llenan un cuaderno de varias páginas, pero estas no se han cumplido por lo que empiezan a salir a la luz varios aspectos de manejo interno de la entidad, que se habían mantenido en reserva y que demuestran que el año anterior se avanzó muy poco.

A diferencia de otros sectores de servidores públicos, como los maestros, que hicieron un paro de 43 días para conseguir un aumento de $10 al sueldo básico, o los salubristas, que protagonizaron varias medidas de hecho en reclamo de mínimos aumentos salariales, durante el año anterior el personal de Pacifictel fue muy bien tratado por las autoridades de la empresa, a pesar de que no se firmó un contrato colectivo pendiente.
Desde el 15 de enero hasta el 31 de agosto, la empresa canceló a sus empleados de planta $3 393 764, por concepto de horas extras. Nueve de ellos cobraron por encima de los $10 mil, para citar dos ejemplos: una operadora recibió $18 146; asimismo Rogelio Sánchez, chofer del presidente ejecutivo, Mauricio Galindo, cobró unos jugosos $13 677.
De ahí para abajo la empresa registra un listado de 37 páginas con los nombres de quienes notificaron haber laborado tiempo suplementario, "sacrificio" que fue retribuido con cifras que superan siete, ocho y nueve veces los $1 000.
En los mismos meses Pacifictel contabilizó $801 736 en préstamos a su personal. Los solicitantes se beneficiaron con rubros que iban desde $300 hasta $6 500.
Los anticipos de sueldos y bonificaciones también estuvieron a la orden del día en ese lapso y sumaron $697 794, los viáticos por desplazamientos totalizaron $685 414 y la cifra por pago de vacaciones no gozadas fue de $206 693.
Estos pagos, dispuestos por la Presidencia Ejecutiva, contradicen una resolución del Directorio, que en febrero estableció una política de austeridad, en concordancia con un decreto en la misma línea dictado por el presidente de la República, Lucio Gutiérrez.
Las salidas y los ingresos de personal también fueron parte de los hechos que marcaron 2003 en Pacifictel: entre el 1º de enero y el 31 de agosto la empresa pagó $2 352 067 a 121 personas por terminación de relaciones laborales, y se registró el ingreso de 275, con un impacto en la nómina de $222 151.
Como si esto fuera poco, Pacifictel promocionó su imagen de empresa eficiente y cumplidora con la comunidad en 29 emisoras de radio del país, lo que costó $978 707, desde el 15 de enero hasta el 31 de agosto del año anterior.
Esta es solo una parte del análisis de la gestión del presidente Ejecutivo, Mauricio Galindo, efectuada en la sesión de Directorio del pasado 25 de octubre, donde se estableció que hasta entonces no había existido un manejo adecuado y eficiente en el área de Recursos Humanos, y que había inobservado resoluciones de ese cuerpo colegiado en la suscripción de un contrato modificatorio para la ejecución de la obra civil de la construcción de la red troncal de fibra óptica Quito-Guayaquil-Machala-Huaquillas.
Entre otras supuestas irregularidades, el Directorio destacaba la división de un contrato en tres partes, para eludir niveles de autorización, así como la apertura de una cuenta en el Pinebank de Miami, sin contar con la autorización correspondiente.
Tras un análisis minucioso de las presuntas incorrecciones, el Directorio decidió remover del cargo a Galindo, luego de consignar, en el acta respectiva, que "conforme a lo establecido en la Ley de Compañías, los administradores responden ante la compañía por los daños y perjuicios causados por dolo, abuso de facultades, negligencia o incumplimiento de la Ley o el contrato social sin perjuicio de su responsabilidad penal".
La resolución fue notificada a Galindo el 27 de octubre, pero al día siguiente el gerente del Fondo de Solidaridad (entidad propietaria de Pacifictel), Milton Ordóñez, pidió que se lo reintegrara al cargo, por lo que el 29 de octubre el Directorio restituyó al presidente ejecutivo y destituyó al presidente del Directorio, David Jaramillo, quien había cuestionado la actuación de Galindo.
El nuevo presidente del Directorio, Medardo Vallejo, también dejó el cargo en diciembre y denunció supuestos malos manejos de Galindo, quien sigue en su puesto. (AA)

La contratación de nuevas pólizas de seguro se hace a paso de "tortuga"

Por tres ocasiones el Directorio conminó al presidente ejecutivo a presentar las bases para el concurso

La realización de un concurso para nuevas pólizas de seguro para Pacifictel SA es una de las asignaturas pendientes del presidente ejecutivo, Mauricio Galindo.
Dentro de cinco días vence la póliza actual, contratada con la compañía de Seguros la Unión, por lo que cualquier proceso deberá hacerse posteriormente y, según indica el directivo, esta se prorrogará hasta que se cumpla el concurso.
Pero el 31 de marzo de 2003, el Directorio autorizó a Galindo a dar por terminado el contrato con Unión y, de acuerdo con la cláusula de cancelación anticipada de cada una de las pólizas, debía pagar el valor prorrateado de la prima por el tiempo contemplado para la notificación previa de la terminación unilateral, y se le delegó para establecer un mecanismo para la designación de un nuevo broker de seguro.
El 9 de abril, el Directorio dispuso que el presidente ejecutivo elaborara las bases para designar al broker y contratar las pólizas. La orden fue ratificada el 14 de mayo.
Desde la última vez han transcurrido ocho meses y, aunque según Galindo, las bases están listas para su aprobación por parte del Directorio, luego del 15 de enero, Pacifictel deberá prorrogar el contrato vigente y quién sabe cuándo podrá contratar una nueva compañía de seguros, como es el deseo manifiesto de quienes dictaminan las políticas que deben ser cumplidas por el presidente de la institución, según consta en las respectivas actas a las que BLANCO Y NEGRO tuvo acceso, y que se hallan en poder del presidente de la República, Lucio Gutiérrez, que el 7 de abril pasado asumió la Presidencia de este y otros Directorios de empresas del sector público. (AA)

El Directorio cuestiona firma de contratos no autorizados

Una oferta de $220 mil se transforma en $270 mil

El 24 de marzo de 2003, la firma Hansen-Holm&Co hizo llegar a Pacifictel una propuesta de servicios para revisar el tráfico con los operadores nacionales, por los seis meses anteriores a esa fecha, por $220 mil.
Tres meses después, el presidente ejecutivo, Mauricio Galindo, firmó tres órdenes de trabajo a favor de la indicada compañía, por un valor de $90 mil cada una, que dan un total de $270 mil. "Es decir, $50 mil adicionales a la oferta original...", consta en el análisis a la gestión del funcionario, contenida en el Acta de 25 de octubre de 2003, cuando el Directorio lo removió del cargo.
La acusación de entonces fue que el presidente ejecutivo no había observado el artículo 4 del Reglamento de Adquisiciones, que prohíbe la división de contratos, ante lo cual, el 10 de noviembre, Galindo justificó que el contrato era para revisar tres liquidaciones de tráfico nacional e internacional: con Otecel y Conecel; con Andinatel y Etapa; y con Andinatel.
Adjuntaba un oficio del vicepresidente jurídico que decía que podría ser factible la firma de un contrato diferente por cada una de las revisiones y señalaba que Pacifictel había obtenido un beneficio de $4 800 000 por el trabajo efectuado, pero no mencionaba por qué se emitieron órdenes de pago por $50 mil más del valor ofertado.
Galindo también fue cuestionado por la firma de un contrato modificatorio con la compañía ZTE y el consorcio colombo-ecuatoriano Impresicorp, para la construcción de la red troncal de fibra óptica Guayaquil-Quito y Guayaquil-Machala-Huaquillas, sin haber estado facultado para ello.
El monto del contrato inicial con ZTE era de $23 510 288, con la modificación se lo estableció en $15 176 352 y, al mismo tiempo, la cesión de derechos permitió incorporar otro con Impresicorp, por $8 873 262.
La subdivisión del contrato fue duramente criticada en la sesión referida, pues se leyeron informes jurídicos y de la Contraloría de Pacifictel, que observaban esa actuación, supuestamente realizada sin la autorización del Directorio ni de la Junta General de Accionistas (esta última es el Fondo de Solidaridad). "Se han violado disposiciones legales y estatutarias", consta en el acta correspondiente.
En su descargo, Galindo señala que tenía las autorizaciones del caso, que la negociación evitó una pérdida de $3 millones para Pacifictel y que el Fondo de Solidaridad conocía de la negociación. (AA)

Incumplimiento de ingresos proyectados genera un déficit de $56,5 millones

La falla se registró, principalmente, en dos grandes rubros: corresponsalías y nuevos productos y servicios

El presupuesto reformado de Pacifictel, en 2003, tuvo un déficit de $56 588 972, "determinado por el incumplimiento de los ingresos proyectados por facturación", señala un informe confidencial de la Gerencia de Programación Económica de la empresa, presentado el pasado 12 de noviembre al entonces presidente del Directorio, Medardo Vallejo Villalva.
En lo principal, la falta de cumplimiento se sintió en dos grandes rubros: corresponsalías ($14 860 739) y los nuevos productos y servicios ($17 283 236), anota el informe.
En cuanto a los egresos, el mayor incremento estuvo representado en el rubro "otras obligaciones", por la constitución y aporte destinado al capital operativo de Telecsa, cuya partida fue incrementada en $10 135 935; deuda externa por compromisos con el Ministerio de Economía, por $8 406 580, y otros rubros como "vigilancia y seguros generales", indica el documento.
También el flujo de caja proyectado registró un déficit de $87 150 535, "como consecuencia del incumplimiento de las metas de ingresos por facturación, agravado por la recaudación al 50% de lo propuesto en el rubro
"corresponsalías", por lo que de esa forma se acumuló con los carriers internacionales una cartera en el orden de $48 340 032, añade el informe.
Con base en ese y muchos otros documentos del interior de la empresa, Vallejo envió una carta (29 de diciembre de 2003) al presidente de la República, Lucio Gutiérrez, en la que advierte de la grave crisis, que considera "muy delicada a mediano y corto plazo, frente a terceros o acreedores", pues señala que con los reajustes el déficit se estableció en $56 216 321.
En una gruesa carpeta adjunta, el ex presidente del Directorio, que salió a finales de año por discrepancias con el presidente ejecutivo, refiere al mandatario una serie de "incumplimientos en los procedimientos y aplicación de los estatutos sociales y demás normas y reglamentos, por parte de interesados en causar perjuicios a Pacifictel, en esferas que escapan y eluden a mi autoridad".
También pide a Gutiérrez estar muy atento a varios procesos de contratación que deberán cumplirse este año. (AA)

ENTREVISTA

Presidente de la telefónica dice que ha actuado correctamente

El capitán Mauricio Galindo niega las acusaciones. El argumento principal es que los contratos y compromisos con empresas y empleados se firmaron en administraciones anteriores, por las que ha tenido que responder

El presidente ejecutivo de Pacifictel exhibe varias carpetas de documentos que, según dice, respaldan la limpieza de su gestión, curiosamente la mayoría llegaron a la Redacción de este Diario como supuestas pruebas de cargo.

¿Por qué es tan alta la cifra de préstamos a los empleados?

Esta administración ha dado alrededor de $400 mil, de esto el ex vicepresidente administrativo, Gonzalo Abad, aprobó $246 mil, por eso le pedí que dejara la empresa.

Según los documentos fueron más de $3 millones.

Son montos de arrastre, por préstamos otorgados por otras administraciones.

Hablemos de los gastos por horas extras y del ingreso de nuevo personal.

Me había propuesto instalar 49 mil líneas telefónicas hasta septiembre de 2003, pero colocamos 52 mil, para esto el personal tenía que laborar día y noche, hubo que contratar cuadrillas de empleados y hubo un esfuerzo extraordinario en la implementación del séptimo dígito, para lo cual se trabajó prácticamente seis meses. Gracias a esto se evitó la intervención de la Superintendencia de Telecomunicaciones.

Hay un decreto de austeridad que no se ha cumplido.

Aquí se lo cumple, pero el decreto exceptúa los pagos de horas extras por operación (instalación de líneas) y por mantenimiento.

Su chofer cobró más de $13 mil por horas extras.

No he tratado de favorecerlo, en 2003 él ha recibido mucho menos que en el año 2002, porque nosotros hemos pagado lo justo a las personas.

Un maestro se pondrá "verde" de la envidia cuando lea este informe.

Yo no he puesto el escalafón, pues está contenido en un contrato colectivo.

Se han gastado $1 200 000 solo en órdenes de compra.

En una empresa tan grande como esta, usar $1 millón en repuestos es una cantidad insignificante, pero no me he gastado todo eso en una sola compra sino en cosas necesarias como cable.

¿Cómo así gasta $978 mil en publicidad radial?

Los contratos fueron firmados por anteriores administraciones y a mí me tocó pagarlos.

¿Quién le autorizó a dividir en tres partes el contrato con Hansen-Holm?

La empresa hizo tres cosas diferentes, por eso lo dividimos en tres partes de $90 mil cada una, por el monto menor a $100 mil podía manejar con mi sola firma.

Usted abrió una cuenta en el Pinebank (Miami) sin autorización del Directorio.

El cobro a los corresponsales estaba quedado y para eso debíamos hacer un factoring, mediante la apertura de una cuenta en el exterior, cuando el proceso estuvo armado lo presenté al Directorio, después de la fecha de la sesión que usted señala, pero no se abrió la cuenta.

Tengo un documento con su firma.

Solo consta como requisito previo a la apertura, que no se hizo, es decir, que solo llegamos a la fase del "papeleo".

Se cuestiona su participación en la sesión de Telecsa cuando se aprobó la tecnología, y en otra cuando se analizó el caso de Etapa.

Etapa quiere participar en el paquete accionario de Telecsa, y estamos en conversaciones con autorización del Fondo de Solidaridad.

Tampoco consultó al Directorio para dividir el contrato de la fibra óptica.

El contrato modificatorio no le costó un centavo a Pacifictel, pero teníamos que hacer la división (con la cesión de la obra civil a Impresicorp), en razón de que la empresa china ZTE podía demandarnos por daños y perjuicios, por incumplimientos del contrato firmado en 2001. (AA)

Presidente tomó decisiones en Telecsa cuando estaba destituido

Una cuenta en Miami y cientos de órdenes de trabajo

Aunque solo estuvo fuera del cargo entre el 25 y el 29 de octubre de 2003, el presidente ejecutivo de Pacifictel asistió a una reunión del Directorio de Telecsa cuando no ostentaba esa representación legal.
La firma de Mauricio Galindo aparece en el Acta de 27 de octubre de 2003, cuando el Directorio acogió una recomendación de Telecsa que permitía dar cumplimiento al acuerdo comercial firmado entre Andinatel y Etapa, para que esta última empresa pudiese participar en Telecsa en base a una valoración adecuada de la compañía.
La Empresa de Telecomunicaciones Móviles del Ecuador (Telecsa) está conformada por Andinatel y Pacifictel, cada una de las cuales es dueña del 50% de las acciones.
El 25 de octubre, cuando Galindo fue destituido, los miembros del Directorio de Pacifictel se quejaron porque el funcionario había asistido a una reunión extraordinaria de la Junta General de Accionistas de Telecsa (29 de julio de 2003), en la que se aprobó la tecnología a ser aprobada por dicha compañía, sin tener la autorización correspondiente.
En carta del 10 de noviembre, el presidente ejecutivo respondió que él es uno de los tres directores que tiene Pacifictel en Telecsa, quienes asistieron a las reuniones en que se aprobó el presupuesto de la empresa.
Otro tema espinoso para Galindo es la gestión de apertura de una cuenta en el Pinebank de Miami, cuyo proceso previo tampoco estuvo autorizado por el Directorio. Mediante esa cuenta se buscaba abrir un servicio de cobranza por tráfico de corresponsalía internacional.
Este Diario tiene una copia del documento denominado Corporate Authorization Resolution, de ese banco, en el que están registradas dos firmas, una de ellas atribuida a Galindo, pero este niega que efectivamente se haya abierto la cuenta y señala que el Directorio fue informado posteriormente de ese procedimiento.
Otro de los aspectos que motivó la fugaz remoción del presidente tuvo que ver con la generación de órdenes de trabajo y de compras "no contempladas en los reglamentos", por un valor que supera los $1 200 000" (solo hasta fines de agosto).
Esta especie de "caja chica" registra montos que van desde menos de $1 000 hasta otros que rebasan los $40 mil y hay de todo: pagos por publicidad, reparación de ascensores, servicios de limpieza, compras de suministros de oficina, impresoras, adquisición de candados... en fin. (AA)

PUNTO DE VISTA

La corrupción se combate con hechos, no con discursos

El informe que presenta BLANCO Y NEGRO puede provocar la furia no solo de los de trabajadores del Estado que cada cierto tiempo tienen que enfrentarse en las calles para buscar que se les incremente unos cuantos dólares a sus salarios, y de quienes laboran en empresas privadas solventes, pero ganan sueldos que apenas les alcanzan para vivir con decoro.
Las pruebas de los privilegios y las prebendas de quienes laboran en Pacifictel, son un asunto que no solo está opuesto a la realidad del país, sino que raya en el desorden, la negligencia y hasta la corrupción; por lo que provoca coraje.
Y es que la evidencia de pagos de miles de dólares por concepto de horas extras, mientras en el país rige un decreto de austeridad, es la muestra palmaria de cómo se escamotea el poco dinero con que cuentan las arcas fiscales, lo que equivale a quitar el pan a los niños que reciben una ayuda alimenticia o un medicamento a quienes mendigan por salud en los hospitales públicos.
Lo peor es que de estos hechos conoce el propio presidente de la República, pero el régimen no ha hecho nada para detener este despilfarro.
Intervenir de manera urgente en Pacifictel es un asunto de supervivencia económica y de decisión moral. Intervenir y sancionar a quienes le están birlando al país su futuro, pagando a un chofer $13 mil mensuales por horas extras; poniendo en riesgo las instalaciones al no haber renovado su contrato y burlándose de la Ley. Y es que la corrupción se combate con hechos, no con discursos. (TFF)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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