El sumergible tenía dos sistemas de energía para navegar hacia su destino, en México: a diésel y baterías eléctricas
Informes de la Armada de Ecuador determinaron que el sumergible o submarino hallado en un cauce fluvial de San Lorenzo del Pailón, frontera norte con
Colombia, se construyó en ese lugar y que estaba listo para zarpar.
"La estructura y partes estaban casi acabadas en el 90% y existe la posibilidad que técnicos navales de Colombia y Ecuador construyeron la nave", dijo un oficial naval que reservó su nombre. Dentro de la embarcación se encontraron 30 botellas de oxígeno, tanques para almacenamiento de combustible (aunque también estaba diseñado para funcionar con baterías, por si acaso se terminara el diésel), tablero eléctrico de 110 y 220 de voltaje y aire acondicionado.
Adicionalmente, se ubicó una bodega de aproximadamente 27m² para almacenar de 10 a 12 toneladas de droga. Según la Policía, la dimensión del sumergible es de 25 metros de largo por 6 de alto y 3 de ancho, con periscopio y dos hélices de propulsión.
En el sector de La Molina se allanó una vivienda en una finca para albergar a unas 50 personas. Allí se hallaron plantas eléctricas, así como equipos de suelda y fibra de vidrio.
Joel Loaiza, director nacional de Antinarcóticos de la Policía, dijo que el fiscal de San Lorenzo, Luis González, pidió al juez Segundo Caicedo que a José N. se le de orden de prisión preventiva.
En La Molina hay indicios de que los contratados para esta operación huyeron por Puerto Palma hacía Colombia, antes de la captura del submarino. Este es el segundo sumergible para transportar droga que descubre la Policía. El primero fue localizado el pasado 2 de junio en la provincia de El Oro (LFA)