PARÍS. El presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó hoy en París que las relaciones de su país con sus vecinos "van por buen camino", aunque admitió que no pueden cambiar "de la noche a la mañana".
"Es un proceso que va por buen camino. No se puede dar de la noche a la mañana, pero va por buen camino y creo que todo el mundo está satisfecho", respondió Santos, interrogado por la prensa sobre la preocupación europea por las relaciones de Colombia con sus vecinos, al término de una reunión en París con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Las relaciones de Bogotá con Caracas y Quito se resintieron sobremanera en los últimos dos años. Con Venezuela las relaciones diplomáticas están congeladas y con Ecuador fueron reanudadas en noviembre pasado.
"Lo que hemos hablado con los diferentes jefes de Estado aquí en Europa es que nosotros queremos tener buenas relaciones con todos nuestros vecinos y que eso va por buen camino", afirmó Santos, en su primera gira europea desde que fue elegido en los comicios del 20 de junio por más del 69% de los votos.
Interrogado acerca de si le molestó la posición del presidente saliente, Alvaro Uribe, frente a la posible asistencia del presidente Hugo Chávez a su acto de investidura, el 7 de agosto, Santos se limitó a indicar que "hacia el presidente Uribe no tengo sino agradecimiento y admiración".
Uribe dijo ayer que la diplomacia de Colombia hacia Venezuela "debe ser de fondo" y "no de cosmética o de apariencias", al comentar una eventual visita a Bogotá de Hugo Chávez para el acto de asunción.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, tiene previsto asistir a la ceremonia.
Venezuela congeló sus relaciones con Colombia en julio de 2009 para rechazar un acuerdo militar que permite que tropas estadounidenses operen en bases colombianas, negociado cuando Santos era ministro de Defensa.
Ecuador rompió sus relaciones con Colombia tras un ataque militar colombiano contra la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Ecuador del 1 de marzo de 2008 que dejó 25 muertos, incluido el jefe rebelde Raúl Reyes y un ecuatoriano.
Bogotá y Quito reanudaron los vínculos a nivel de encargados de negocios en noviembre de 2009.(AFP)
"Es un proceso que va por buen camino. No se puede dar de la noche a la mañana, pero va por buen camino y creo que todo el mundo está satisfecho", respondió Santos, interrogado por la prensa sobre la preocupación europea por las relaciones de Colombia con sus vecinos, al término de una reunión en París con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Las relaciones de Bogotá con Caracas y Quito se resintieron sobremanera en los últimos dos años. Con Venezuela las relaciones diplomáticas están congeladas y con Ecuador fueron reanudadas en noviembre pasado.
"Lo que hemos hablado con los diferentes jefes de Estado aquí en Europa es que nosotros queremos tener buenas relaciones con todos nuestros vecinos y que eso va por buen camino", afirmó Santos, en su primera gira europea desde que fue elegido en los comicios del 20 de junio por más del 69% de los votos.
Interrogado acerca de si le molestó la posición del presidente saliente, Alvaro Uribe, frente a la posible asistencia del presidente Hugo Chávez a su acto de investidura, el 7 de agosto, Santos se limitó a indicar que "hacia el presidente Uribe no tengo sino agradecimiento y admiración".
Uribe dijo ayer que la diplomacia de Colombia hacia Venezuela "debe ser de fondo" y "no de cosmética o de apariencias", al comentar una eventual visita a Bogotá de Hugo Chávez para el acto de asunción.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, tiene previsto asistir a la ceremonia.
Venezuela congeló sus relaciones con Colombia en julio de 2009 para rechazar un acuerdo militar que permite que tropas estadounidenses operen en bases colombianas, negociado cuando Santos era ministro de Defensa.
Ecuador rompió sus relaciones con Colombia tras un ataque militar colombiano contra la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Ecuador del 1 de marzo de 2008 que dejó 25 muertos, incluido el jefe rebelde Raúl Reyes y un ecuatoriano.
Bogotá y Quito reanudaron los vínculos a nivel de encargados de negocios en noviembre de 2009.(AFP)
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