El nuevo presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, tendrá un mejor escenario para tratar la presencia de guerrilleros en Venezuela, gracias a que el gobierno saliente asumió el costo polÃtico de esa denuncia, dijo el canciller colombiano Jaime Bermúdez a un medio ecuatoriano.
"Yo creo que al próximo gobierno le queda más fácil (abordar dicha cuestión) cuando nosotros asumimos este costo polÃtico público y no al revés", señaló el canciller en una entrevista con el canal Ecuavisa.
Bermúdez defendió la decisión del presidente Ãlvaro Uribe de denunciar en la Organización de Estados Americanos (OEA), el pasado jueves, la presencia "activa" de unos 1 500 rebeldes colombianos de las FARC y el ELN en territorio fronterizo de Venezuela, pocos dÃas antes de terminar su mandato.
A raÃz de esa denuncia, el mandatario venezolano Hugo Chávez rompió relaciones con Colombia el mismo jueves y pidió al Ejército estar alerta ante una "agresión" de Bogotá apoyada por Estados Unidos, que rechazó tal posibilidad.
"Nuestra responsabilidad polÃtica y constitucional es hasta el 7 de agosto", indicó el ministro, y subrayó que para el gobierno de Uribe "hubiera sido más fácil empacar las maletas hace dos meses y pasar agachado en temas sensibles como éste" en que se han "intentado todas las fórmulas y hay que seguir intentándolas para avanzar, como llevar esto a instancias internacionales".
"Lo más fácil quizá, y de pronto aplaudido por algunos medios, hubiera sido no decir nada, pero tenemos una responsabilidad polÃtica que estamos cumpliendo, ésa es nuestra obligación", remarcó el diplomático.
La crisis colombo-venezolana será abordada el jueves en Quito en una reunión extraordinaria de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanos (Unasur), convocada por Ecuador -presidente pro témpore del organismo- a pedido de Caracas. (AFP)
"Yo creo que al próximo gobierno le queda más fácil (abordar dicha cuestión) cuando nosotros asumimos este costo polÃtico público y no al revés", señaló el canciller en una entrevista con el canal Ecuavisa.
Bermúdez defendió la decisión del presidente Ãlvaro Uribe de denunciar en la Organización de Estados Americanos (OEA), el pasado jueves, la presencia "activa" de unos 1 500 rebeldes colombianos de las FARC y el ELN en territorio fronterizo de Venezuela, pocos dÃas antes de terminar su mandato.
A raÃz de esa denuncia, el mandatario venezolano Hugo Chávez rompió relaciones con Colombia el mismo jueves y pidió al Ejército estar alerta ante una "agresión" de Bogotá apoyada por Estados Unidos, que rechazó tal posibilidad.
"Nuestra responsabilidad polÃtica y constitucional es hasta el 7 de agosto", indicó el ministro, y subrayó que para el gobierno de Uribe "hubiera sido más fácil empacar las maletas hace dos meses y pasar agachado en temas sensibles como éste" en que se han "intentado todas las fórmulas y hay que seguir intentándolas para avanzar, como llevar esto a instancias internacionales".
"Lo más fácil quizá, y de pronto aplaudido por algunos medios, hubiera sido no decir nada, pero tenemos una responsabilidad polÃtica que estamos cumpliendo, ésa es nuestra obligación", remarcó el diplomático.
La crisis colombo-venezolana será abordada el jueves en Quito en una reunión extraordinaria de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanos (Unasur), convocada por Ecuador -presidente pro témpore del organismo- a pedido de Caracas. (AFP)
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