En Ecuador circulan alrededor de 12 marcas de agua que no son aptas para el consumo humano
De 27 marcas de agua analizadas casi la mitad no cumple con los parámetros sanitarios de ley
UNA ENVASADORA fue suspendida; a otra, las autoridades le retiraron el registro sanitario. En Quito aún no hay sanciones al respecto.
En el Ecuador se comercializan alrededor de 140 marcas de agua envasada, según estableció la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso.
Algunas no son aptas para el consumo humano y otras incumplen las normas de calidad y rotulación exigidas por el Instituto Nacional de Normalización (Inen).
En conjunto con el Instituto de Higiene Leopoldo Izquieta Pérez, la Comisión analizó una muestra de 27 marcas de agua. Este análisis reveló que 12 de ellas no deberían comercializarse, porque no cumplen los parámetros sanitarios.
El estudio se hizo en Guayaquil, Machala y Quito. El Congreso inició la investigación a raíz de que un diputado halló gusanos al momento de destapar un botellón de agua. También llegaron denuncias de varios ciudadanos. Así lo manifestó el presidente de la Comisión, Alfredo Castro.
Los análisis del Izquieta Pérez establecieron que el agua que se expendía en las dos ciudades costeñas sobrepasaba los límites de tolerancia establecidos para aerobios. La presencia de estas bacterias implica falta de sanitización y contaminación.
El agua que se vendía en la capital no cumplía con los parámetros de dureza establecidos por el Inen. Esto quiere decir que la cantidad de minerales disueltos en el líquido era superior a lo permitido.
El consumo de agua contaminada produce enfermedades gástricas. Hace un mes se presentó un brote de diarrea en Galápagos que afectó a 60 personas; la causa fue el consumo de agua embotellada.
Tras una inspección sanitaria, las autoridades suspendieron a cinco envasadoras porque no realizaban buenas prácticas en el proceso de manufactura.
En Guayaquil, una envasadora fue clausurada temporalmente. A otra, las autoridades le retiraron el registro sanitario.
En Quito todavía no hay una sola sanción. El comisario de Salud (e), Marcelo Torres, dice que a sus manos no llega aún el informe del Izquieta Pérez; el intendente, Pablo Santos, anuncia una audiencia de juzgamiento para los próximos días.
Santos también indica que la resolución para declarar a una marca de agua no apta para el consumo humano e impedir su comercialización es responsabilidad única del Inen. Este, por su parte, dice que ya cumplió con su misión. (GT/AA)
La revisión se hizo en sitios de expendio
EL ANÁLISIS DEL CONGRESO no indica si la contaminación se realiza en las plantas o en la distribución
A la investigación se sumaron las intendencias de Policía de Pichincha, Guayas y El Oro, la Defensoría del Pueblo, el Inen y direcciones de Salud.
En Quito se recogieron muestras de las siguientes marcas: Manantial, Tradicional, Vivant, H2Ola, Pure Water, Splendor, Evián, All Natural, Sumesa, Fontana y Dasani.
En Guayaquil fueron analizadas muestras de All Natural, Premium, Sumesa, Fontana, Cielo, Sirena, Hiperpurificada Milagro, Clean Water, Montana, Aqua Bella, Edén y Agua del Pacífico.
En Machala: Manantial, Colina, Las Peñas, Amazonas, Dafonte, Premium, Agua Bella, Fontana, Pure Water, Dasani, Cristalina, Las Rocas y Sana.
De las 12 marcas analizadas en la capital, cuatro no cumplían con los parámetros de dureza y magnesio. Once no tenían los requisitos de rotulado que determina la norma Inen N1334-1:2000.
Las muestras tomadas en Guayaquil señalaron que cuatro contenían una cantidad de aerobios superior a los límites permitidos.
En Machala, cinco rebasaban el límite de aerobios y dos no cumplían con los requisitos de nitritos.
La Comisión interinstitucional no se tomó la molestia de recoger las muestras de agua en las plantas envasadoras. Lo hizo en supermercados y mercados de sectores populares de las tres ciudades. (GT/AA)
"Hubo ligereza en la toma de muestras"
EL REPRESENTANTE de H2Ola no descarta iniciar acciones legales por daño moral, en contra de Castro
Hubo falta de procedimientos y ligereza por parte de la Comisión al hacer el análisis del agua. Así lo manifiesta Teddy Crow, gerente comercial de la compañía Resgasa, envasadora de All Natural.
Indica que los comisionados tomaron muestras en locales comerciales donde el agua pudo haber sido manipulada. Si los botellones son expuestos al sol, se reduce la vida útil del producto, señala.
De igual forma se pronunció Juan Faine, de Agua Tradicional, quien aseguró tener certificaciones de la Universidad Central, del Izquieta Pérez y de un laboratorio privado que avalan la calidad de su producto, Pero no las hizo llegar a BLANCO Y NEGRO.
En cambio, Crow remitió un oficio de la ex intendenta de Policía del Guayas, Guisella Padovani, en el que asegura que All Natural es apta para el consumo humano.
Miguel Cantos, abogado de H2Ola, también cuestiona el informe de la comisión interinstitucional, porque habría causado daño moral a su representada. Incluso no descarta la posibilidad de demandar al Izquieta Pérez y al diputado Alfredo Castro, presidente de la Comisión.
Añade que su empresa tiene el registro sanitario en regla, al igual que el permiso de funcionamiento de la planta envasadora. (GT/AA)
Adulterar el agua tiene multas "ínfimas"
Los procedimientos de envasado se realizan rústicamente; la condición de las cisternas y tuberías es incierta
Los procedimientos de envasado se realizan rústicamente; la condición de las cisternas y tuberías es incierta
La Comisión Interinstitucional no detectó que algunas empresas colocan su agua en botellones que pertenecen a otras envasadoras. Para protegerse de esto se creó una Asociación de Productores Industriales de Agua.
La empresa Gamapodru, envasadora de Pure Water, denunció que durante algún tiempo sus bidones habían sido llenados ilegalmente con agua de la procesadora Pro-Quito, denominada Agua Luz.
Por eso pedía a la Comisaría de Salud decomisar esos bidones y sancionar a la infractora.
Durante la investigación, el comisario de la zona sur, Germán Ayala, verificó que esto se hacía en la calle Ambrosio Acosta 570, al sur de Quito, y convocó a la correspondiente audiencia de juzgamiento.
Finalmente, el 12 de junio pasado decomisó los bidones y prohibió a Pro-Quito volver a llenarlos con Agua Luz. También impuso una multa de ¢20, equivalentes a los 5 000 sucres que dice la ley.
Gamapodru también denunció a Agua Buena. Esta empresa respondió que no se responsabilizaba por poner su producto en los bidones de Pure Water.
El representante, Carlos Estrella, señaló que la culpa era de los distribuidores.
Esta empresa, ubicada en El Condado (norte de Quito), fue denunciada, por la misma causa, por Tesalia. El comisario decomisó los bidones e impuso una multa de ¢40.
También hubo denuncias en contra de Aqualine e Hidro2 Glug Glug. Las multas siempre fueron las mismas: de 20 a 40 centavos de dólar. (GT/AA)
Plantas "piratas" tenían permisos
Guasmo: una casa tenía bidones que llenaban con agua de una cisterna
Las empresas denunciadas de competencia desleal tenían permisos de funcionamiento y registros sanitarios.
Los permisos los conceden las Comisarías de Salud y certifican que las plantas tienen los equipos y las condiciones higiénicas necesarias para ofrecer un producto apto para el consumo.
En tanto, los registros sanitarios son concedidos por el Instituto Izquieta Pérez. Estos garantizan que los productos y los envases no sean tóxicos. Además, cada producto debe cumplir una norma Inen que define, clasifica y enuncia los componentes que debe o no tener.
El presidente de la Comisión de Defensa del Consumidor, Alfredo Castro, refiere que una planta del Guasmo, en Guayaquil, funcionaba en una casa de dos pisos a medio construir.
Allí había envases de todas las marcas. Estos eran llenados con el agua de una cisterna, que a su vez era abastecida por un tanquero.
No obstante, en ese lugar tenían listo el permiso de funcionamiento. (GT/AA)
Los bidones se asean a la ligera
A TESALIA algunos botellones llegan con orina, combustibles y saliva
En un estacionamiento del sector de La Mariscal, en Quito, llenaban botellones con agua de la llave, cuenta Eulalia de Suárez, vecina del lugar.
Ella dice que vio una cantidad considerable de recipientes regados en el piso y a dos hombres que los llenaban con mangueras. Luego los sellaron y los subieron a una camioneta.
Añade, con asco, que los botellones eran enjuagados superficialmente antes de ser llenados con el líquido vital.
Asimismo, en las imágenes de un operativo efectuado por autoridades del Ministerio de Salud, se observan 24 botellones en el patio de una casa, junto a fundas de desperdicios. Los bidones eran llenados con agua que salía del desagüe de una cisterna.
La falta de aseo provoca enfermedades. Ese fue el caso de un niño de 4 años que tuvo vómito y diarrea sin que los médicos se explicaran el origen de los síntomas.
Tras varios exámenes se detectó que tenía una bacteria adquirida por beber agua de un botellón.
Esto se comprobó tras tomar una muestra del líquido y someterla a un análisis.
El gerente de planta de Tesalia Springs, José Rueda, relata el mal uso que los consumidores y distribuidores dan a los botellones. Cuenta que algunos regresan con restos de combustibles, líquidos de limpieza, orina, chicle, saliva, tierra por eso la empresa los descarta.
Este procedimiento de descarte no se realiza en las plantas piratas. (GT/AA)
Nadie sabe dónde se contamina el agua; la ciudadanía pierde confianza en el producto
LAS INSTITUCIONES NO definen quién debe ejercer control. entre la intendencia, el INEN y la Comisión de Defensa del Consumidor se "tiran la pelotita"
El análisis del agua no se realizó en las plantas envasadoras, sino en los productos que se expenden en los comercios. Esto hace imposible identificar a los responsables de la adulteración.
Pese a ello, el presidente de la Comisión de Defensa del Consumidor, Alfredo Castro, entregó los resultados del análisis a los medios de comunicación.
Otro problema fue que se analizaron 27 marcas de alrededor de 140 existentes en el mercado. Por esta razón, algunos productores se quejaron de que el trabajo se enfocó en las empresas que cumplen todos o la mayoría de parámetros establecidos, pero dejó en el aire a las que piratean los productos.
Las instituciones consultadas por BLANCO Y NEGRO no coincidieron en cuál era el organismo llamado a ejercer el control sobre la calidad de líquido y su distribución.
El legislador dice que no es función de su Comisión, esta es un área de competencia del Ministerio de Salud Pública y las Intendencias de Policía de cada provincia, manifestó.
El intendente de Pichincha, Pablo Santos, en cambio, dice que a él le corresponde seguir los procesos legales, previa denuncia formal.
Estas medidas pueden ser iniciadas directamente por los afectados o por las asociaciones de consumidores.
Sin embargo, Santos dice que las medidas cautelares (certificar que un producto no es apto para venderse) debe imponerlas el Instituto Ecuatoriano de Normalización (Inen).
En esa institución manifestaron que ellos ya cumplieron la parte que les correspondía en la investigación y que lo demás es trabajo del intendente.
Este prometió que apretará el acelerador para sancionar a las empresas que constan en el informe de la investigación del Congreso. Las multas que se podrían aplicar a las empresas infractoras van desde $50 a $5 000.
La única coincidencia entre las autoridades es en el caso de los botellones utilizados por otras empresas.
La respuesta común es que la responsabilidad es del Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI).
Mientras las autoridades se tiran la pelotita, entre los consumidores se empieza a generar desconfianza hacia el agua embotellada. Ejecutivos de varias empresas consultados por BLANCO Y NEGRO admitieron que sus ventas disminuyeron en las últimas semanas.
Por ahora, los consumidores de estos productos tienen pocas seguridades. La Asociación de Productores Industriales de Agua (Apia) emprendió una campaña para advertir a la ciudadanía.
Además, en los botellones de sus marcas hay sellos de garantía. (GT/AA)
La tribuna del consumidor dice que la mala calidad del algua es un delito
La Tribuna del Consumidor remite a las Comisarías de Salud las denuncias por la mala calidad del agua, porque esto constituye un delito que debe ser sancionado, indicó su directora, María Troya.
También anotó que la mayoría de problemas de adulteración del producto se produce durante el proceso de envasado.
Según Troya, la razón de que las autoridades no reflejen interés en investigar responde a que los consumidores no exigen controles en los procesos de elaboración.
Además, indica que su organismo ofrece capacitación a las empresas para ayudarles a determinar los puntos críticos de la cadena de producción. (GT/AA)
PUNTO DE VISTA
Aguas turbias en la mesa ecuatoriana
Hace poco, en Galápagos, 60 personas cayeron enfermas y debieron ser atendidas de manera urgente. Sometidas a exámenes, se descubrió que habían bebido agua embotellada que estaba en malas condiciones.
Esto que pudiera ser un caso aislado no lo es. Y es que en nuestro país, aunque no hay un registro de todos los afectados por ingerir agua embotellada en malas condiciones, cada vez se sabe de más víctimas.
Este informe de BLANCO y NEGRO pone al descubierto que la manipulación del agua desde que sale de las empresas embotelladoras hasta el consumidor no se hace en forma adecuada, al punto de que el líquido puede enfermar al consumidor.
Pero no solamente está allí el problema. La Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso realizó una investigación de la calidad del agua de determinadas marcas que se expenden en el país, y descubrió que no cumplen con las normas de calidad. Incluso, algunas de ellas ni siquiera son aptas para el consumo humano.
El asunto es muy delicado porque no importa si el agua es comprada en las tiendas de la zona residencial de El Condado en Quito o en los Guasmos de Guayaquil, ya que en los dos lugares existe el riesgo de que los botellones contengan agua no apta para ingerir.
Los casos están descritos en este informe, que también da cuenta de los enredos legales típicos del país donde las competencias de los organismos de control se cruzan como aquí entre el INEC, las Intendencias y la Comisión de Defensa del Consumidor, lo que dificulta las sanciones.
En lo que no hay dudas ni conflictos es en concluir que la estafa y la corrupción va en aumento; pues con tal de hacer dinero, ciertas gentes pueden rebasar todos los límites.
Una vez más se comprueba que la corrupción no está solo en el sector público, sino también en el privado, desde el cual ahora se envía aguas turbias a la mesa de los ecuatorianos. (TFF) (Blanco y Negro)