Quito. 26 jul 2001.400 comités de Vigilancia se quedaron sin
representantes. En total se presentaron 996 solicitudes para la
renegociación.
La renegociación de deudas de Filanbanco, mayores a 50 000 dólares, que
se realizaban en la Unidad de Reestructuración de Créditos (URC) está en
veremos.
Una vez cerrado el Banco hace una semana, los 400 comités de Vigilancia
que lideraban el proceso y concentraban una cartera de 373,7 millones de
dólares se quedaron sin representantes. Por ello, la Unidad suspendió
todas las negociaciones hasta que se defina qué futuro de la cartera
total que bordea los 859 millones.
Según los registros de la URC, existen 996 solicitudes con documentación
completa que buscan reestructurar obligaciones por 859,6 millones de
dólares, repartidas entre: Pacífico, Filanbanco, los bancos privados,
bancos cerrados de la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) y otros.
También hay incertidumbre en los clientes, ya que una parte de la cartera
de Filanbanco entrará a un fideicomiso, que será manejado por los bancos
privados.
Los deudores se preguntan si se mantendrán o no los acuerdos que se
establecieron, ya que hubo casos en los que se fijaron plazos desde uno
hasta diez años. Hasta la fecha existen 30 casos terminados, 200 en
trámite y el resto en negociaciones. En su momento, el Superintendente de
Bancos dijo que se respetarán los acuerdos.
La mayoría de deudas se concentra en el sector agrícola. Oswaldo Tamariz,
director de la URC en Guayaquil, reconoce que la paralización afecta a
los clientes, ya que retrasa la reestructuración y las deudas acumulan
intereses. Pero explicó que la cartera que manejará la banca privada será
de más fácil negociación porque no habrá las limitaciones de Ley que
tiene la banca Estatal.
"Los deudores, eventualmente, podrán negociar en mejor condición con los
privados. Son clientes que tienen buenas garantías y ganas de pagar sus
obligaciones".
Ayer la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE) dijo que la
auditoria Price Waterhouse Coopers aún no recibía la información para
calificar la cartera que entrará al fideicomiso.
Para Leiner Paredes, presidente de la Cámara de Industrias de El Oro, las
autoridades deben agilizar la distribución de la cartera a los privados.
"La demora perjudica al Estado y a las empresas".
Y la recuperación de deudas está estancada. A pesar de que Filanbanco
conversó con la Universidad de Guayaquil para que se encargue del cobro
de la cartera de consumo, eso no se concretó. Además, aún existen
obligaciones en la URC y otras inmovilizadas por los ex accionistas.
Para León Roldós, rector de la Universidad de Guayaquil, Filanbanco nunca
definió los mecanismos de recuperación. "Montar un operativo para cobrar
a los pequeños deudores sonaba muy mal. Eran minucias frente al total.
Las deudas deben cobrarse al pequeño y grande deudores".
Los otros bancos continúan negociando
Los procesos de reestructuración de las deudas que maneja la Unidad de
Reestrucutración de Créditos (URC) con el sistema financiero, excepto
Filanbanco, esto es con los bancos: Pacífico, los del Estado y de la AGD,
se reanudarán la próxima semana.
Para Oswaldo Tamariz, director de la Unidad, esas negociaciones no se
pueden suspender ya que los problemas que se han dado están
exclusivamente centrados en los comités de Vigilancia donde Filanbanco es
el único acreedor. Además, los bancos abiertos quieren mejorar la
calificación de esas deudas para no provisionar y mejorar sus resultados.
Hasta la fecha existen 596 comités de Vigilancia donde intervienen los
bancos privados y estatales que sí pueden negociar. Solo en el Pacífico
se esperan reestructurar 143, 1 millones de dólares y 134,3 millones en
los bancos cerrados que están en la AGD.
Según Tamariz, para que no haya problemas en las negociaciones se
vigilará para que Filanbanco no se quede sin sus respectivos flujos de
pagos. "La Unidad controlará los acuerdos".
El 88 por ciento de los clientes se reparten en Guayaquil y Quito. El
resto se ubican en Azuay, Loja, El Oro, Manabí, Tungurahua, Cotopaxi,
Ibarra y Chimborazo.
Sobre los servicios
Los casilleros de seguridad * Filanbanco atenderá a los clientes que
tienen casilleros de seguridad en sus instalaciones a partir del próximo
lunes. Sin embargo, se aclaró que para realizar una atención ordenada a
los más de 3 000 usuarios de este servicio en todo el país, la atención
se realizará basada en un calendario.
Las tarjetas de crédito * Filanbanco también informó que los clientes que
tienen tarjetas de crédito pueden seguir realizando transacciones con sus
tarjetas de crédito Filancard, Visa y Mastercard. Incluso los clientes
que tienen tarjetas de crédito internacionales. Los estados de cuenta
serán entregados una vez que se venda esta parte del negocio.
Los requisitos * Los clientes que retiran sus depósitos de hasta 300
dólares solo tienen que presentar su libreta de ahorros y su cédula.
"El trámite es similar al de un retiro de depósitos".(Texto tomado de
El Comercio)
representantes. En total se presentaron 996 solicitudes para la
renegociación.
La renegociación de deudas de Filanbanco, mayores a 50 000 dólares, que
se realizaban en la Unidad de Reestructuración de Créditos (URC) está en
veremos.
Una vez cerrado el Banco hace una semana, los 400 comités de Vigilancia
que lideraban el proceso y concentraban una cartera de 373,7 millones de
dólares se quedaron sin representantes. Por ello, la Unidad suspendió
todas las negociaciones hasta que se defina qué futuro de la cartera
total que bordea los 859 millones.
Según los registros de la URC, existen 996 solicitudes con documentación
completa que buscan reestructurar obligaciones por 859,6 millones de
dólares, repartidas entre: Pacífico, Filanbanco, los bancos privados,
bancos cerrados de la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) y otros.
También hay incertidumbre en los clientes, ya que una parte de la cartera
de Filanbanco entrará a un fideicomiso, que será manejado por los bancos
privados.
Los deudores se preguntan si se mantendrán o no los acuerdos que se
establecieron, ya que hubo casos en los que se fijaron plazos desde uno
hasta diez años. Hasta la fecha existen 30 casos terminados, 200 en
trámite y el resto en negociaciones. En su momento, el Superintendente de
Bancos dijo que se respetarán los acuerdos.
La mayoría de deudas se concentra en el sector agrícola. Oswaldo Tamariz,
director de la URC en Guayaquil, reconoce que la paralización afecta a
los clientes, ya que retrasa la reestructuración y las deudas acumulan
intereses. Pero explicó que la cartera que manejará la banca privada será
de más fácil negociación porque no habrá las limitaciones de Ley que
tiene la banca Estatal.
"Los deudores, eventualmente, podrán negociar en mejor condición con los
privados. Son clientes que tienen buenas garantías y ganas de pagar sus
obligaciones".
Ayer la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE) dijo que la
auditoria Price Waterhouse Coopers aún no recibía la información para
calificar la cartera que entrará al fideicomiso.
Para Leiner Paredes, presidente de la Cámara de Industrias de El Oro, las
autoridades deben agilizar la distribución de la cartera a los privados.
"La demora perjudica al Estado y a las empresas".
Y la recuperación de deudas está estancada. A pesar de que Filanbanco
conversó con la Universidad de Guayaquil para que se encargue del cobro
de la cartera de consumo, eso no se concretó. Además, aún existen
obligaciones en la URC y otras inmovilizadas por los ex accionistas.
Para León Roldós, rector de la Universidad de Guayaquil, Filanbanco nunca
definió los mecanismos de recuperación. "Montar un operativo para cobrar
a los pequeños deudores sonaba muy mal. Eran minucias frente al total.
Las deudas deben cobrarse al pequeño y grande deudores".
Los otros bancos continúan negociando
Los procesos de reestructuración de las deudas que maneja la Unidad de
Reestrucutración de Créditos (URC) con el sistema financiero, excepto
Filanbanco, esto es con los bancos: Pacífico, los del Estado y de la AGD,
se reanudarán la próxima semana.
Para Oswaldo Tamariz, director de la Unidad, esas negociaciones no se
pueden suspender ya que los problemas que se han dado están
exclusivamente centrados en los comités de Vigilancia donde Filanbanco es
el único acreedor. Además, los bancos abiertos quieren mejorar la
calificación de esas deudas para no provisionar y mejorar sus resultados.
Hasta la fecha existen 596 comités de Vigilancia donde intervienen los
bancos privados y estatales que sí pueden negociar. Solo en el Pacífico
se esperan reestructurar 143, 1 millones de dólares y 134,3 millones en
los bancos cerrados que están en la AGD.
Según Tamariz, para que no haya problemas en las negociaciones se
vigilará para que Filanbanco no se quede sin sus respectivos flujos de
pagos. "La Unidad controlará los acuerdos".
El 88 por ciento de los clientes se reparten en Guayaquil y Quito. El
resto se ubican en Azuay, Loja, El Oro, Manabí, Tungurahua, Cotopaxi,
Ibarra y Chimborazo.
Sobre los servicios
Los casilleros de seguridad * Filanbanco atenderá a los clientes que
tienen casilleros de seguridad en sus instalaciones a partir del próximo
lunes. Sin embargo, se aclaró que para realizar una atención ordenada a
los más de 3 000 usuarios de este servicio en todo el país, la atención
se realizará basada en un calendario.
Las tarjetas de crédito * Filanbanco también informó que los clientes que
tienen tarjetas de crédito pueden seguir realizando transacciones con sus
tarjetas de crédito Filancard, Visa y Mastercard. Incluso los clientes
que tienen tarjetas de crédito internacionales. Los estados de cuenta
serán entregados una vez que se venda esta parte del negocio.
Los requisitos * Los clientes que retiran sus depósitos de hasta 300
dólares solo tienen que presentar su libreta de ahorros y su cédula.
"El trámite es similar al de un retiro de depósitos".(Texto tomado de
El Comercio)
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