Blanco y negro
El informe del relator de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales revela los problemas de violencia
El Plan Ecuador no cumple con garantizar una cultura de paz, según aseguran habitantes de comunidades, barrios y recintos de las provincias fronterizas, especialmente de Sucumbíos y Esmeraldas. A esto se suma que tampoco se han garantizado en cuatro años de existencia del Plan Ecuador la soberanía alimentaria, la inclusión económica y social, la integración conectividad ni un buen manejo ambiental en la frontera norte.
Esa falta de cumplimiento en lo que respecta a fomentar la paz en la frontera es confirmada por un informe presentado el 16 de junio por el relator de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Philip Alston, el cual dice que en el conflicto de Colombia se ha desbordado hacia el norte del Ecuador. "El número de grupos armados ilegales que operan en la frontera ha aumentado considerablemente. Esos grupos han cometido actos de maltrato físico y homicidios de civiles. Las fuerzas armadas del Ecuador han tenido dificultades para reprimir a estos grupos, y en algunas zonas parecen no poder o no querer hacerlo. Por otra parte, también ha habido casos de malos tratos de civiles a manos del Ejército".
Se asegura que el conflicto colombiano se ha desbordado con consecuencias sumamente negativas para quienes viven en las provincias de Sucumbíos y Esmeraldas. El documento agrega que los civiles son objeto de hostigamiento, del cobro de impuestos ilegales y de robos y de violencia por parte de una serie de agentes no estatales, como las FARC, exparamilitares y narcotraficantes.
Añade que Sucumbíos está infiltrada por las FARC desde hace mucho tiempo. "Desde comienzos de 2008, sin embargo, la presencia de agentes armados ha aumentado y se ha diversificado, la dinámica del control se ha vuelto inestable y la seguridad de los civiles se ha deteriorado. A medida que los esfuerzos de Colombia por combatir los grupos armados ilegales han arrinconado a estos en las zonas marginales de Colombia, el cruce al Ecuador se ha vuelto cada vez más frecuente", destaca Alston.
Se indica que uno de los efectos de la mayor presencia del Estado ha sido la dispersión de los campamentos de las FARC y que más de sus miembros hayan optado por vivir entre los civiles a fin de ocultar su presencia a los militares. "Esto ha incrementado las oportunidades de las FARC de cometer violaciones y ha complicado el papel de los civiles en la estrategia de lucha contra las FARC que aplica el Ejército. Esos grupos cruzan las fronteras para obtener bienes, traficar con drogas y armas, o escapar por un tiempo a la intensidad del conflicto en Colombia".
Finalmente, indica que preocupa que los grupos armados ilegales tengan bases en el Ecuador, donde los militares han encontrado armas y explosivos. Sucumbíos, dice, resulta muy atractiva para esos grupos debido a la facilidad con que se puede cruzar la frontera y encontrar suministros de todo tipo. Y agrega que la violencia ha afectado de manera particular a los ecuatorianos de las zonas rurales, los grupos indígenas y los colombianos desplazados.
Problemas básicos, sin atención
La falta de resultados de Plan Ecuador se evidencia, además, en los altos índices de desempleo y subempleo; bajos índices de cobertura y calidad de servicios básicos; alto índice de analfabetismo; desconfianza en el sistema de administración de justicia; falta de ordenamiento territorial. A ello se suman la contaminación y los efectos negativos por la explotación petrolera, de madera, minería y de palma.
Ante esto, habitantes exigen cumplimiento y resultados de la supuesta inversión que está realizando el Gobierno en la frontera. En 2011, se destinaron $6,3 millones.
El informe del relator de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales revela los problemas de violencia
El Plan Ecuador no cumple con garantizar una cultura de paz, según aseguran habitantes de comunidades, barrios y recintos de las provincias fronterizas, especialmente de Sucumbíos y Esmeraldas. A esto se suma que tampoco se han garantizado en cuatro años de existencia del Plan Ecuador la soberanía alimentaria, la inclusión económica y social, la integración conectividad ni un buen manejo ambiental en la frontera norte.Esa falta de cumplimiento en lo que respecta a fomentar la paz en la frontera es confirmada por un informe presentado el 16 de junio por el relator de Naciones Unidas sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Philip Alston, el cual dice que en el conflicto de Colombia se ha desbordado hacia el norte del Ecuador. "El número de grupos armados ilegales que operan en la frontera ha aumentado considerablemente. Esos grupos han cometido actos de maltrato físico y homicidios de civiles. Las fuerzas armadas del Ecuador han tenido dificultades para reprimir a estos grupos, y en algunas zonas parecen no poder o no querer hacerlo. Por otra parte, también ha habido casos de malos tratos de civiles a manos del Ejército".
Se asegura que el conflicto colombiano se ha desbordado con consecuencias sumamente negativas para quienes viven en las provincias de Sucumbíos y Esmeraldas. El documento agrega que los civiles son objeto de hostigamiento, del cobro de impuestos ilegales y de robos y de violencia por parte de una serie de agentes no estatales, como las FARC, exparamilitares y narcotraficantes.
Añade que Sucumbíos está infiltrada por las FARC desde hace mucho tiempo. "Desde comienzos de 2008, sin embargo, la presencia de agentes armados ha aumentado y se ha diversificado, la dinámica del control se ha vuelto inestable y la seguridad de los civiles se ha deteriorado. A medida que los esfuerzos de Colombia por combatir los grupos armados ilegales han arrinconado a estos en las zonas marginales de Colombia, el cruce al Ecuador se ha vuelto cada vez más frecuente", destaca Alston.
Se indica que uno de los efectos de la mayor presencia del Estado ha sido la dispersión de los campamentos de las FARC y que más de sus miembros hayan optado por vivir entre los civiles a fin de ocultar su presencia a los militares. "Esto ha incrementado las oportunidades de las FARC de cometer violaciones y ha complicado el papel de los civiles en la estrategia de lucha contra las FARC que aplica el Ejército. Esos grupos cruzan las fronteras para obtener bienes, traficar con drogas y armas, o escapar por un tiempo a la intensidad del conflicto en Colombia".
Finalmente, indica que preocupa que los grupos armados ilegales tengan bases en el Ecuador, donde los militares han encontrado armas y explosivos. Sucumbíos, dice, resulta muy atractiva para esos grupos debido a la facilidad con que se puede cruzar la frontera y encontrar suministros de todo tipo. Y agrega que la violencia ha afectado de manera particular a los ecuatorianos de las zonas rurales, los grupos indígenas y los colombianos desplazados.
Problemas básicos, sin atención
La falta de resultados de Plan Ecuador se evidencia, además, en los altos índices de desempleo y subempleo; bajos índices de cobertura y calidad de servicios básicos; alto índice de analfabetismo; desconfianza en el sistema de administración de justicia; falta de ordenamiento territorial. A ello se suman la contaminación y los efectos negativos por la explotación petrolera, de madera, minería y de palma.
Ante esto, habitantes exigen cumplimiento y resultados de la supuesta inversión que está realizando el Gobierno en la frontera. En 2011, se destinaron $6,3 millones.
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