Una de cada 10 personas en el mundo sufre depresión. La padecen 121 millones de habitantes. Esta patologÃa es la causa de 850 mil suicidios cada año. Del latÃn depressus (abatido, derribado), la depresión es un estado de abatimiento e infidelidad, de carácter transitorio o permanente.
En la mayorÃa de los casos, cuando el paciente describe su estado, los demás lo perciben como derribado, socavado en su potencialidad de acción y reacción. "Siente debilitada su base afectiva, está desganado y vulnerable", describe Omar Arregui, estudioso del tema.
La depresión "es depredador de la felicidad humana". Genera trastornos mentales que afectan directamente a la salud fÃsica (ver Ãconos). Los expertos la llaman la pandemia del siglo XXI, que afecta cada vez más a adultos, adolescentes y niños.
El sÃntoma más visible es un profundo sentimiento de vacÃo o tristeza; y los fÃsicos como dolor de espalda, dolor de cabeza o fatiga, que no siempre son relacionados con estos trastornos. Y es que la depresión todavÃa no es bien comprendida. Aun quienes la sufren piensan que es algo pasajero.
Impide producir en el trabajo o en los estudios. Imposiblita la capacidad de disfrute de actividades cotidianas y de la relación con otros. Juan David Velásquez, médico psiquiatra, afirma que las enfermedades mentales se convirtieron en la principal causa de discapacidad social y laboral.
Las causas son complejas: van desde lo biológico como factores genéticos, anormalidades hormonales, desequilibrio en los neurotransmisores (deficiencia en serotonina, dopamina o noradrenalina), hasta factores estresantes en la vida diaria; o a otras enfermedades.
Si la depresión y otros trastornos como ansiedad o estrés postraumático pertenecen al campo de la mente, también provocan daños al organismo: dolores, neuralgias, cefaleas, malestares estomacales, disfunciones sexuales y desórdenes hormonales, entre otros.
En la práctica clÃnica, hasta el 80% de los pacientes con depresión muestra solo sÃntomas fÃsicos, interpretados como un trastorno somático, lo que en ocasiones lleva a hacer estudios innecesarios para descartar patologÃas médicas.
Con un buen tratamiento disminuyen los sÃntomas emocionales y vegetativos, incluso en un 100% si se elevarÃa el objetivo terapéutico y se lograran suprimir los malestares fÃsicos dolorosos con medicamentos de doble acción que trabajan el equilibrio de los factores emocionales y fÃsicos de la depresión; sin dejar de lado las terapias de diálogo.
Cierto, cada vez hay más deprimidos en estos tiempos contemporáneos caracterizados por la inmediatez, pero las biografÃas de grandes personajes -dice Arregui- como Baudelaire, Tchaikovski, Newton, Goyam Suman, Chopin, Tolstoi, entre otros, demuestran cómo, a lo largo de la historia, esa introspección hacia una percepción sensiblemente alterada de lo cotidiano, de la vida y el ser, existió, no solo en sus personajes sino en la vida de estos genios y es probable que solo asà su creación haya tenido sentido.
EL ESPECIALISTA
Jóvenes y adolescentes se deprimen más durante las vacaciones
Para Gonzalo Matovelle, médico psiquiatra, la depresión o desmotivación es una enfermedad psicosocial que afecta a la sociedad: âEste es un mal discapacitante, porque los deprimidos no sienten ganas de hacer nada por ellos mismos, peor por los demás".
En la actualidad, estar desmotivado es algo muy común. Por ejemplo, en los EEUU existen 60 millones de deprimidos, de los cuales 30 millones están bajo tratamiento, pero solo 3,2 millones tienen la medicación adecuada.
A Matovelle, lo que más el preocupa es que el mal se puede presentar a cualquier edad. Desde los 5 años en adelante. El experto, asegura que esta patologÃa no se detecta fácilmente porque muchas veces un deprimido no da señales de su estado emocional.
En el Ecuador, los jóvenes y adolescentes sufren este estado con mayor frecuencia durante el verano: "Los chicos se sienten deprimidos en vacaciones porque, al encontrarse desocupados tienen tiempo de pensar en sus problemas. Esto es más alarmante si ellos tienen problemas en el colegio, se han quedado al supletorio o perdieron el año. Además de bajar su autoestima les quita las ganas de vivir". (GCA)
La salud de los chicos, con diagnóstico reservado
Uno de cada 10 jóvenes, de entre 15 y 16 años, se considera un "bebedor en potencia"
El 11% de las adolescentes madrileñas se ha provocado, en alguna ocasión el vómito, para adelgazar y un 6,8% ha utilizado laxantes. El 46% de ellas no realiza ningún tipo de deporte.
Estos son solo algunos datos de la encuesta del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo Asociados a Enfermedades no Transmisibles (Sivfret) de España, que se realizó a estudiantes, de entre 15 y 16 años, y que abordó la situación de salud de la población juvenil, su actividad fÃsica, los hábitos alimenticios, el consumo de drogas y las relaciones sexuales.
Más resultados: el 37% cree que tiene sobrepeso, pero solo el 6,1% lo tiene. En total, el 35,5% de las chicas ha seguido alguna dieta para adelgazar.
La encuesta también indica que uno de cada tres jóvenes no llega a consumir una fruta al dÃa; en la misma proporción, no ingiere la cantidad mÃnima de verduras recomendada. Se observa un exceso en el consumo de productos cárnicos y salados: uno de cada cinco jóvenes asegura que los consume más de cuatro veces a la semana.
Otro dato relevante: el 26,8% de los adolescentes ha tenido alguna vez relaciones sexuales y casi el 12% lo hizo sin usar ningún método anticonceptivo.
En cuanto a las adicciones, los chicos empiezan a ingerir drogas (tabaco, alcohol, marihuana) a partir de los 13 años. Además, el 29,3% de los adolescentes es "fumador semanal", el 21% lo hace a diario y el 8,3% solo una vez al mes. Este hábito es más frecuentes entre ellas (23%) que entre ellos (18,9%). (GCA-Internet)
DESDE EL CONSULTORIO
El broncoespasmo
1. Es la constricción (achicamiento de la luz) de las vÃas respiratorias bajas. Es una irritación desencadenada por irritantes o alérgenos. El broncoespasmo se produce por diferentes mecanismos como: infecciones virales; reacciones al polvo, al humo de cigarrillo, polen de plantas, pelo de animales (gatos o perros); reacciones al ejercicio en aire seco, al frÃo, etc.
2. La mayorÃa de niños con broncoespasmo dejan de tener este problema luego de la niñez (al crecer). Ellos no progresan al desarrollar asma bronquial, que es una enfermedad inflamatoria seria y de larga duración, cuyo cuadro clÃnico incluye al broncoespasmo.
Para evitar o disminuir el broncoespasmo en su niño se debe:
a. No permitir que se fume en presencia del niño.
b. Retire todos los peluches y si es posible las alfombras y cortinas del cuarto del niño que pueden retener polvo.
Si no se pueden retirar las cortinas y la alfombra, se debe hacer una limpieza industrial cada dos a tres meses y un aspiración diaria del polvo. En lugar de cortinas se puede usar las persianas verticales de plástico.
c. Si su niño reacciona al frÃo, entonces evite los enfriamientos súbitos. Que el niño lleve una camiseta interior.
d. Si el niño reacciona a los animales evite su contacto. Los animales como perros y gatos deben estar fuera de las habitaciones.
e. Algunos niños necesitan pruebas de alergias.
f. Si su niño tose luego del ejercicio fÃsico, debe recibir una inhalación del broncodilatador antes de hacer ese ejercicio.
LO QUE DEBE SABER
Hay algunas medicinas que puede tomar antes del ejercicio para prevenir el broncoespasmo: salbutamol, metaproterenol, terbutalina, cromoglicato, nedocromil. Pregúntele al médico cuál le recomienda.
Sin excepción, todos los pacientes que padecen de la enfermedad broncoespasmo deben realizarse regularmente pruebas respiratorias en reposo para descartar la posibilidad de que les genere asma crónica.
Antes de realizar cualquier actividad fÃsica, se les recomienda a los enfermos hacer ejercicios de calentamiento, ya que estos ayudan y preparan al organismo para tolerar los sÃntomas del broncoespasmo.
Por último, si va a ejercitarse se aconseja entrecerrar los labios para reducir la obstrucción de las vÃas respiratorias y resistir la rutina. También puede preguntarle al médico cuánto tiempo debe practicar.