Giovanni Zapata y Erwin Peñaherrera, los dos de 25 años, son categóricos: “El arte debe salir de las galerías y de los estrechos círculos culturales y debe estar al alcance de todos. Los salones de arte se deben poner en duda”. Ellos son dos egresados de la Facultad de Artes de la Universidad Central, y a través de su propuesta "Colectivo de Arte" pretenden demostrar que es posible que “el arte sea de la gente y no de los artistas ni de los especialistas”. Para esto han planteado varios proyectos, entre ellos el más importante y que ha sido invitado a una exposición desde el 15 de abril en La Coruña, España: el de una serie de afiches “que plantean lo efímero”, dice Zapata.
Estos afiches fueron pegados en varios lugares públicos de la ciudad (afueras del Ministerio de Economía, Ministerio de Turismo, Plaza Brasilia). “Pretenden plantear la miseria humana. Pero queremos que todo el mundo los pueda mirar sin necesidad de ir a una galería. Allí permenecerán, conviviendo con la sociedad, hasta que desaparezcan. No interesa si alguien los quita, o se si pega algo encima, lo importante es el efecto social que causen”, asegura Erwin Peñaherrera.
“Es que creemos en el arte efímero. Pues esta es la característica básica de esta época. El arte debe renovarse constantemente. Vivimos en un tiempo en el que todo puede disolverse en un instante. Somos seres que se van a quedar sin pasado, ese es el sentido de lo efímero”, señala radicalmente Zapata.
Estos dos chicos insisten en que el arte debe ser colectivo. "En este país hay personas que poseen cuadros de pintores famosos avaluados en miles de dólares. ¿Pero de qué sirve esto? Si nadie puede apreciar las obras, pues están en bóvedas bajo llave. Estos cuadros han perdido todo su valor artístico aunque sean muy caras. Nuestras obras están al alcance de todos".
Zapata y Peñaherrera creen además en un tipo de arte que ellos llaman de "intervención". Y tienen algunos proyectos por cumplir. "El primero es la donación de sangre. Planteamos que la obra artística está en el hecho de ofrecer nuestra sangre a otras personas, y que a través de la transfusión, esta obra se vuelve colectiva. Creemos que el arte debe tener un sentido funcional", afirma Zapata.
El otro proyecto es el de publicar una foto del artista César Benítez en la primera plana de un periódico. ¿Por qué hacer esto? Peñaherrera contesta: "Para que su obra se colectivice y desaparezca al siguiente día, para que su obra se conozca ahora y no después de que muera, aunque sea una obra efímera".
"Estamos convencidos de que el arte no es solo de los artistas. Cualquier persona puede ser artista y crear". (LAM)


El especialista

Lo efímero y la ruptura del culto forman parte del arte conceptual

"El arte conceptual es aquel que pretende llegar a la idea por encima del hecho material artístico. Esta tendencia surge a principios del siglo pasado con el Dadaísmo, que propone una serie de acciones para llegar al Happening.
Sin embargo, este llega a su clímax en los años sesenta con el Pop Art (con Andy Wharol a la cabeza). Aquí, el arte se vuelve contestatario y se pretende romper con el culto y la sacralización del objeto artístico. También se propone que lo utilitario también puede ser estético o artístico y viceversa. Se realza el objeto simple. En el caso de Wharol, las botellas de Coca-Cola o las latas de sopas Campbell. Otro caso es el de Joseph Buys.
Lo efímero es parte del arte conceptual, pero creo que se busca lo efímero como punto de partida para buscar lo trascendental.
De lo que escucho de la propuesta "Colectivo de Arte", creo que no es nuevo lo que estos chicos proponen, aunque en Ecuador no hay referentes sólidos en este tipo de trabajos. La idea de sacar las obras de las galerías para que las vea todo el mundo ya está presente en los muralistas mexicanos. Sin duda lo que ellos hacen es arte conceptual, que es la tendencia actual del arte. Se lo hace alrededor del planeta y, desde mi punto de vista esto está concitando una globalización de la cultura". Antonio Jaramillo, artista plástico, jurado en el Salón de Arte Fundación El Comercio

Sigmar Polke, un pintor que festeja la imagen y el color


El Centro Cultural Metropolitano inaugurará el próximo miercoles en Quito una muestra conformada por 40 obras de este artista contemporáneo


Sigmar Polke es considerado, dentro del arte contemporáneo, un sibarita de las formas, un transformador que juega con las imágenes y que desde cada una de sus variadas obras siempre nos mira y nos hace guiños con ironía.
Por eso, en el contexto de Quito: Capital Iberoamericana de la Cultura 2004, el Centro Cultural Metropolitano (CCM) junto con la Asociación Humbolt presentarán la exposición "Sigmar Polke: Música de origen incierto", que se inaugurará el miércoles próximo y mantendrá abiertas sus puertas hasta el domingo 9 de mayo, en las salas II y III de exposiciones temporales del CCM (García Moreno y Espejo, esquina).
La muestra permite un acercamiento a la obra de este influyente artista a partir de cuarenta imagenes de gran formato elaboradas en el año 1996, especialmente para el Goethe Institut. Estas piezas, según los organizadores de la muestra, ofrecen una visión representativa de las posibilidades estilísticas, iconográficas y formales de la obra de Polke, así como también revelan su gusto por la experimentación y la ironía. Los absurdos, extensos e hilarantes títulos que acompañan cada una de las piezas constituyen un interés en sí mismos, pues a partir de ellos el artista reflexiona acerca del papel de la obra de arte en la sociedad contemporánea.
Sigmar Polke (Alemania, 1941) es una de las figuras más importantes del panorama contemporáneo alemán y mundial; por ello ha sido merecedor de numerosos premios, entre los cuales se encuetra el León de Oro de la XLII edición de la Bienal de Venecia de 1986. Asimismo, ha realizado más de 120 exposiciones individuales en los principales museos y galerías del mundo, tales como en el Museo de Arte Moderno de Nueva York, en 1999, y el Tate de Londres, en 2003.


CANAL ABIERTO

LO BUENO


Una cobertura en el exterior no puede reducirse a las incidencias de un partido de fútbol. Y eso lo entiende bien y trabaja con toda la gracia y el esfuerzo profesional Roberto Bonafón, de Gamavisión. Lo demostró con sobradas razones en esta semana que termina. Desde Buenos Aires, sin contar con la exclusividad de una transmisión, el "abogado" (como le gusta que lo llamen) habló con medio mundo y exhibió para el televidente ecuatoriano una serie de notas que sobrepasan la coyuntura, como las entrevistas con Insúa y Asprilla. Todo eso sin descontar su presencia en la calle al hablar con las hinchadas de Ecuador y Argentina. O sea, Bonafón se entregó por completo a la reportería, habló de fútbol y de música, de poesía y de comida. En conjunto, el balance proyectado es que la reportería puede brindar toda la cosecha si la siembra es una planificación donde se opta por diversos ángulos y visiones de un mismo hecho deportivo.


LO MALO


Si Canal Uno tiene la exclusiva para transmitir los partidos de las eliminatorias, lo menos que se pide es más respeto con la pantalla y el televidente. Si cuenta con publicidad que garantiza la producción, no puede afectar la imagen al colocar los anuncios al pie de la imagen eliminando una parte de la acción de un partido de fútbol. Eso, a más de la molestia que crea en la secuencia de un partido, olvida que el mensaje no va a llegar porque sea bueno o bonito, sino porque no estorbe o elimine otra imagen. Se ignora que el espectador está consumiendo un partido de fútbol y que la publicidad llega añadida. Y si a todo eso se suma el ruido que genera el insistente recordatorio de que la transmisión la hace Canal Uno, como si el público no supiera, la oferta se vuelve fastidiosa. Solo en el partido de Colombia frente a Perú tomaron en cuenta ese problema y redujeron (¿habrá sido solo por cansancio?) la reiteración y la publicidad en la parte baja.


LO FEO


La supuesta disputa entre Canal Uno y Gamavisión se la "chanta" el programa Buenos Muchachos, de este último canal. Y para que las cosas no queden en un problema de competencia, Canal Uno tiene que editorializar para que los televidentes (muchos de los cuales no habrán visto Buenos Muchahos) se solidaricen con esa estación. Para eso, anuncian durante todo el primer tiempo del partido Ecuador frente a Argentina la lectura del editorial. La razón: la burla o mofa que hace Buenos Muchachos de la calidad de la transmisión exclusiva de Canal Uno y la "mala pata" que le hacen a la "Tricolor". El público no necesita saber ni tomar partido por los problemas empresariales de los dos canales. Sintoniza uno de ellos porque quiere divertirse o informarse. Si quieren resolver las diferencias, hay mecanismos y espacios que el televidente sabrá escoger si los acepta o no. Todo lo demás es mucho ruido para no resolver nada públicamente.


MAS SOLICITADOS
EN LA LIEBRE


VIDEOS

1. Bowling for Columbine, Michael Moore.
2. Juana la Loca, Vicente Aranda.
3. Pirates of the Caribbean: The Curse of The black Pearl, Gore Verbinski.
4. Whale Rider, Niki Caro.
5. Matrix Reloaded, Wachowski Brothers.
6. Nueve Reinas, Fabián Bielinsky.
7. 25th Hour, Spike Lee.



DVD

1. The Awful Truth, Michael Moore.
2. Lord of the Rings: The Two Towers, Peter Jackson.
3. Animatrix, Jack Fletcher.
4. One Hour Photo, Mark Romanek.
5. Gangs of New York, Martin Scorsese.
6. Peter Gabriel: Growing Up Live, Jhamish Hamilton.
7. Roger and Me, Michael Moore.

EXPLORED
en Ciudad Quito

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