IPIALES.- El canciller colombiano Jaime Bermúdez dijo que su paÃs trabaja en forma prudente y dedicada en el restablecimiento de las relaciones con Ecuador, interrumpidas desde marzo pasado tras una visita a la frontera de casi 600 km que comparten ambos paÃses.
Colombia "ha expresado que tiene toda la voluntad de normalizar las relaciones con Ecuador. En esto se trabaja con prudencia y dedicación", señaló hoy a periodistas el canciller, quien llegó a la ciudad fronteriza de Ipiales, 1 050 km al sur de Bogotá, para participar en una serie de actos de acercamiento entre las comunidades de ambos lados de la frontera.
Las relaciones entre ambos paÃses fueron interrumpidas por Quito después que tropas colombianas incursionaron en marzo de 2008 a Ecuador para dar muerte a Raúl Reyes, número dos de la guerrilla de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que habÃa establecido en esa zona su campamento.
"Seguiremos trabajando fuerte y discretamente para normalizar esas relaciones", añadió Bermúdez quien destacó que pese a los problemas diplomáticos entre Bogotá y Quito, los vÃnculos tradicionales entre los pueblos fronterizos no se han afectado.
"Lo importante es que la relación entre los dos pueblos de Colombia y Ecuador se preserve y se promueva", manifestó.
Entre los actos de acercamiento realizados se cuenta una marcha de unas 3 000 personas que recorrió el puente binacional de Rumichaca y terminó en la ciudad ecuatoriana de Tulcán, vecina de Ipiales.
Este sábado se realizó también un concierto de artistas de los dos paÃses, encabezados por populares intérpretes de cumbias y valses.
Estas iniciativas se enmarcan dentro una estrategia de la cancillerÃa colombiana denominada Plan Fronteras dirigida a mejorar las relaciones con las comunidades que viven en zonas limÃtrofes, a menudo envueltas en incidentes por la presencia de narcotraficantes, guerrilleros y delincuentes comunes.
Bermúdez aprovechó su viaje al departamento fronterizo colombiano de Nariño para reunirse allà con comerciantes de Carlosama, que han visto afectada su actividad debido a la decisión de Quito de incrementar sus controles al ingreso de colombianos.
Ecuador estableció en enero la obligatoriedad de un sello de apostilla (verificación) para los certificados judiciales que deben presentar los colombianos al ingreso a su territorio.
La implementación de esta medida ha generado largas filas de espera en el paso internacional de Rumichaca.
"Nosotros vivimos del comercio y tanta vuelta (trámite) nos quita mucho tiempo cada vez que tenemos que cruzar la frontera", dice EfraÃn Solarte, un colombiano de 47 años, mientras hace fila en los controles.
Sobre el tema, Bermúdez señaló que "se ha dado autorización al Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) para que agilice el trámite del pasado judicial, al igual que el del apostillamiento". (AFP)