Quito. 5 jun 2001. Mientras el presidente del Congreso, Hugo Quevedo, se
exponía, ayer, a la pifia de los ciudadanos, cuando se dirigía a la Corte
Suprema de Justicia para presentar una denuncia en contra del diputado
Carlos González, un grupo de legisladores de la nueva mayoría efectuaba
los últimos contactos para asegurarse por lo menos los 82 votos que se
requieren para destituir a Quevedo.
"Renuncia, te van a botar", gritaban varias personas mientras Quevedo
caminaba, escoltado por seis guardaespaldas y personal de apoyo.
Freddy Bravo, ex conservador y ahora roldosista, quien se constituyó en
su principal asesor político, también lo acompañaba.
Al presentar la denuncia contra González, presidente de la Comisión de
Fiscalización, Quevedo intenta su estrategia de contraataque luego de la
arremetida legislativa que, impulsada por el PSC, ID, DP, Pachakutik, CFP
y MIN, pretende removerlo de su cargo.
Sin embargo el proceso de autodepuración de la mayoría coyuntural sufrió
un retraso en lo programado. La sesión del Consejo Administrativo de la
Legislatura, prevista para las 10h00 de ayer, se postergó para hoy en la
mañana.
¿La razón? los diputados John Argudo (ID) y Nina Pacari (Pachakutik),
integrantes de ese Consejo, estaban en el exterior.
Fuentes del Parlamento señalaron que una vez que arribó Argudo (anoche),
este Consejo tendrá hoy la mayoría para votar a favor de la resolución de
dejar sin piso la vacancia legislativa, resuelta por Quevedo la semana
pasada.
La reunión del Consejo definirá, además, la agenda para la sesión de
mañana.
La mayoría propone, como primer punto para discusión del pleno, el debate
para remover a Quevedo de la presidencia, vía resolución, y luego el
trámite, en primer debate, del proyecto de reformas a la Ley de Aduanas,
calificado de económico urgente.
En caso de un traspié, según indicó el diputado Henry Llanes (ID), los 82
diputados de la mayoría votarán por la instalación de una sesión
extraordinaria, es decir se autoconvocarán también para mañana.
Ayer, según Llanes, cada bloque informó a sus diputados sobre la
posibilidad de aplicar sanciones disciplinarias para aquellos que no
asistan al Parlamento; una advertencia similar a la que aplicaron durante
el trámite del veto parcial a la reforma tributaria.
De antemano se conoce que algunos suplentes asistirán ante la ausencia de
los diputados principales. En lugar de Alfredo Serrano (PSC) estará
Víctor Mendoza; Oswaldo Molestina (ID) se encuentra en España y será
reemplazado por Enrique Herrería; Hernán Crespo (ID) asistirá en lugar de
Marcelo Farfán; y Roberto Guayaquil (ID) en vez de René Maugé.
Estas ausencias, según el jefe de bloque de la ID, Wilfrido Lucero, están
justificadas: "está comprobado que asumieron compromisos hace tiempo".
Lucero dijo que "la salida de Quevedo de la presidencia del Congreso no
puede esperar más".
El diputado afirmó que la mayoría coyuntural "dará pasos firmes en su
decisión de depurar el Congreso".
En 40 días habrá resultados
QUITO.- En 40 días se establecerá si Hugo Quevedo es responsable de las
denuncias de corrupción que envuelven su gestión en la Presidencia del
Congreso.
Ese será el periodo que tomará la auditoría al Parlamento, afirmó ayer el
contralor, Alfredo Corral. La auditoría apunta a esclarecer las denuncias
de contratación excesiva de personal y la adquisición, con sobreprecio,
de calendarios y vajillas.
La investigación se realiza por pedido del bloque parlamentario de la
Izquierda Democrática a través del presidente de la Comisión de
Fiscalización, Carlos González. Además, se inscribe dentro de la
planificación anual de la Contraloría, sostuvo Corral.
El organismo tiene pendiente la entrega de los resultados de las
auditorías sobre las gestiones de los ex presidentes del Congreso, Juan
José Pons y Heinz Moeller.
Obligados a tomar vacaciones
QUITO.- En el noveno piso del edificio Pichincha, donde funciona el área
administrativa del Congreso, se encuentran apiladas decenas de cajas con
vajillas y vasos que tienen el sello del Congreso Nacional.
Ayer los diputados de la Izquierda Democrática, Pachakutik, Partido
Social Cristiano y Democracia Popular apuraban la devolución de esos
objetos al Departamento de Inventarios.
Son tasas, platos blancos con un sello azul, vasos con filos dorados,
entre otros utensilios.
Los bloques de la mayoría legislativa dieron la orden para que cada uno
de sus diputados entregue los objetos, que proporcionó el presidente del
Congreso, Hugo Quevedo, como una muestra de rechazo a las decisiones
tomadas durante su administración.
Pero el contraataque de Quevedo no se hizo esperar; dispuso que el 50% de
los empleados con nombramiento salgan de vacaciones por un mes mientras
dure el receso legislativo.
Durante la mañana, Marco Mariño, de la Dirección de Personal del
Parlamento, procedió a retirar las tarjetas de asistencia de aquellos
funcionarios y empleados que tendrán que acogerse a las vacaciones
obligatorias.
Incluso, algunos firmaron su asistencia para, luego, recibir la
notificación del receso.
Mariño explicó que esta acción respondía a una disposición del presidente
del Congreso.
Entre tanto, el personal de la Presidencia del Congreso apresuraba las
cosas para inaugurar la nueva sala de prensa del Parlamento en el primer
piso.
LEGISLATIVAS
Por orden del presidente del Congreso, Hugo Quevedo, ayer se encadenaron
las puertas de acceso de la sala de sesiones y se dobló el personal de
guardia en este sitio.
Ayer se consolidó el pacto PSC-MIN para lograr la destitución de Hugo
Quevedo de la Presidencia. A cambio, un número de diputados ex DP se
salvarían de la descalificación.
Los diputados que podrían ser descalificados fueron los primeros en
acudir ayer al Parlamento. El diputado del PRE, Vicente Estrada, se
reunió con Lorenzo Saá, cuestionado por la DP. (Texto tomado de El
Universo)
exponía, ayer, a la pifia de los ciudadanos, cuando se dirigía a la Corte
Suprema de Justicia para presentar una denuncia en contra del diputado
Carlos González, un grupo de legisladores de la nueva mayoría efectuaba
los últimos contactos para asegurarse por lo menos los 82 votos que se
requieren para destituir a Quevedo.
"Renuncia, te van a botar", gritaban varias personas mientras Quevedo
caminaba, escoltado por seis guardaespaldas y personal de apoyo.
Freddy Bravo, ex conservador y ahora roldosista, quien se constituyó en
su principal asesor político, también lo acompañaba.
Al presentar la denuncia contra González, presidente de la Comisión de
Fiscalización, Quevedo intenta su estrategia de contraataque luego de la
arremetida legislativa que, impulsada por el PSC, ID, DP, Pachakutik, CFP
y MIN, pretende removerlo de su cargo.
Sin embargo el proceso de autodepuración de la mayoría coyuntural sufrió
un retraso en lo programado. La sesión del Consejo Administrativo de la
Legislatura, prevista para las 10h00 de ayer, se postergó para hoy en la
mañana.
¿La razón? los diputados John Argudo (ID) y Nina Pacari (Pachakutik),
integrantes de ese Consejo, estaban en el exterior.
Fuentes del Parlamento señalaron que una vez que arribó Argudo (anoche),
este Consejo tendrá hoy la mayoría para votar a favor de la resolución de
dejar sin piso la vacancia legislativa, resuelta por Quevedo la semana
pasada.
La reunión del Consejo definirá, además, la agenda para la sesión de
mañana.
La mayoría propone, como primer punto para discusión del pleno, el debate
para remover a Quevedo de la presidencia, vía resolución, y luego el
trámite, en primer debate, del proyecto de reformas a la Ley de Aduanas,
calificado de económico urgente.
En caso de un traspié, según indicó el diputado Henry Llanes (ID), los 82
diputados de la mayoría votarán por la instalación de una sesión
extraordinaria, es decir se autoconvocarán también para mañana.
Ayer, según Llanes, cada bloque informó a sus diputados sobre la
posibilidad de aplicar sanciones disciplinarias para aquellos que no
asistan al Parlamento; una advertencia similar a la que aplicaron durante
el trámite del veto parcial a la reforma tributaria.
De antemano se conoce que algunos suplentes asistirán ante la ausencia de
los diputados principales. En lugar de Alfredo Serrano (PSC) estará
Víctor Mendoza; Oswaldo Molestina (ID) se encuentra en España y será
reemplazado por Enrique Herrería; Hernán Crespo (ID) asistirá en lugar de
Marcelo Farfán; y Roberto Guayaquil (ID) en vez de René Maugé.
Estas ausencias, según el jefe de bloque de la ID, Wilfrido Lucero, están
justificadas: "está comprobado que asumieron compromisos hace tiempo".
Lucero dijo que "la salida de Quevedo de la presidencia del Congreso no
puede esperar más".
El diputado afirmó que la mayoría coyuntural "dará pasos firmes en su
decisión de depurar el Congreso".
En 40 días habrá resultados
QUITO.- En 40 días se establecerá si Hugo Quevedo es responsable de las
denuncias de corrupción que envuelven su gestión en la Presidencia del
Congreso.
Ese será el periodo que tomará la auditoría al Parlamento, afirmó ayer el
contralor, Alfredo Corral. La auditoría apunta a esclarecer las denuncias
de contratación excesiva de personal y la adquisición, con sobreprecio,
de calendarios y vajillas.
La investigación se realiza por pedido del bloque parlamentario de la
Izquierda Democrática a través del presidente de la Comisión de
Fiscalización, Carlos González. Además, se inscribe dentro de la
planificación anual de la Contraloría, sostuvo Corral.
El organismo tiene pendiente la entrega de los resultados de las
auditorías sobre las gestiones de los ex presidentes del Congreso, Juan
José Pons y Heinz Moeller.
Obligados a tomar vacaciones
QUITO.- En el noveno piso del edificio Pichincha, donde funciona el área
administrativa del Congreso, se encuentran apiladas decenas de cajas con
vajillas y vasos que tienen el sello del Congreso Nacional.
Ayer los diputados de la Izquierda Democrática, Pachakutik, Partido
Social Cristiano y Democracia Popular apuraban la devolución de esos
objetos al Departamento de Inventarios.
Son tasas, platos blancos con un sello azul, vasos con filos dorados,
entre otros utensilios.
Los bloques de la mayoría legislativa dieron la orden para que cada uno
de sus diputados entregue los objetos, que proporcionó el presidente del
Congreso, Hugo Quevedo, como una muestra de rechazo a las decisiones
tomadas durante su administración.
Pero el contraataque de Quevedo no se hizo esperar; dispuso que el 50% de
los empleados con nombramiento salgan de vacaciones por un mes mientras
dure el receso legislativo.
Durante la mañana, Marco Mariño, de la Dirección de Personal del
Parlamento, procedió a retirar las tarjetas de asistencia de aquellos
funcionarios y empleados que tendrán que acogerse a las vacaciones
obligatorias.
Incluso, algunos firmaron su asistencia para, luego, recibir la
notificación del receso.
Mariño explicó que esta acción respondía a una disposición del presidente
del Congreso.
Entre tanto, el personal de la Presidencia del Congreso apresuraba las
cosas para inaugurar la nueva sala de prensa del Parlamento en el primer
piso.
LEGISLATIVAS
Por orden del presidente del Congreso, Hugo Quevedo, ayer se encadenaron
las puertas de acceso de la sala de sesiones y se dobló el personal de
guardia en este sitio.
Ayer se consolidó el pacto PSC-MIN para lograr la destitución de Hugo
Quevedo de la Presidencia. A cambio, un número de diputados ex DP se
salvarían de la descalificación.
Los diputados que podrían ser descalificados fueron los primeros en
acudir ayer al Parlamento. El diputado del PRE, Vicente Estrada, se
reunió con Lorenzo Saá, cuestionado por la DP. (Texto tomado de El
Universo)
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