SANTIAGO DE CHILE. Una serie de actividades marcan a partir de hoy en Chile la última escala de la Marcha Mundial por la Paz, que concluirá el próximo sábado en la localidad argentina de Punta de Vacas, a los pies del Monte Aconcagua, informaron hoy los organizadores de la iniciativa.
La iniciativa, que ha movilizado a miles de personas a través del mundo, se inició en Wellington, Nueva Zelanda, el pasado 2 de octubre y ha pasado por el sudeste asiático, la India, Europa, África, Estados Unidos, México, Centroamérica, y varios países de Sudamérica como Brasil, Ecuador, Colombia, Bolivia y Perú.
La idea, dijeron los organizadores, es despertar la conciencia mundial sobre la necesidad de un mundo sin guerra ni violencia, con propuestas como el desarme nuclear, el abandono de los territorios ocupados, la reducción progresiva del armamento convencional y la renuncia de los Gobiernos al uso de la fuerza.
El humanista español Rafael de la Rubia, coordinador general de la Marcha, ha sido recibido hoy en Santiago por la ONG chilena Mundo Sin Guerra y mañana será declarado huésped ilustre de la capital chilena por el alcalde de la ciudad, Pablo Zalaquett.
Para hoy está prevista en Santiago además una "cicletada" hasta la Villa Grimaldi, un antiguo centro de torturas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y mañana habrá cuatro marchas que confluirán desde cuatro puntos en la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de La Moneda.
Los organizadores, encabezados por Rafael de la Rubia y Gloria Morrison, presidenta de la ONG chilena, serán recibidos por la presidenta Michelle Bachelet en la sede gubernamental.
El otro grupo de la marcha que "va por el Atlántico" llegó hoy a Argentina y se reunirá esta tarde en Buenos Aires con la presidenta Cristina Fernández.
Los dos grupos, el que llegó por el Atlántico y el del Pacifico que está en Chile concluirán la marcha el próximo sábado 2 enero en la localidad de Punta de Vacas, en el oeste de Argentina, en la cordillera de Los Andes, frontera de ambos países. (EFE)
La iniciativa, que ha movilizado a miles de personas a través del mundo, se inició en Wellington, Nueva Zelanda, el pasado 2 de octubre y ha pasado por el sudeste asiático, la India, Europa, África, Estados Unidos, México, Centroamérica, y varios países de Sudamérica como Brasil, Ecuador, Colombia, Bolivia y Perú.
La idea, dijeron los organizadores, es despertar la conciencia mundial sobre la necesidad de un mundo sin guerra ni violencia, con propuestas como el desarme nuclear, el abandono de los territorios ocupados, la reducción progresiva del armamento convencional y la renuncia de los Gobiernos al uso de la fuerza.
El humanista español Rafael de la Rubia, coordinador general de la Marcha, ha sido recibido hoy en Santiago por la ONG chilena Mundo Sin Guerra y mañana será declarado huésped ilustre de la capital chilena por el alcalde de la ciudad, Pablo Zalaquett.
Para hoy está prevista en Santiago además una "cicletada" hasta la Villa Grimaldi, un antiguo centro de torturas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y mañana habrá cuatro marchas que confluirán desde cuatro puntos en la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de La Moneda.
Los organizadores, encabezados por Rafael de la Rubia y Gloria Morrison, presidenta de la ONG chilena, serán recibidos por la presidenta Michelle Bachelet en la sede gubernamental.
El otro grupo de la marcha que "va por el Atlántico" llegó hoy a Argentina y se reunirá esta tarde en Buenos Aires con la presidenta Cristina Fernández.
Los dos grupos, el que llegó por el Atlántico y el del Pacifico que está en Chile concluirán la marcha el próximo sábado 2 enero en la localidad de Punta de Vacas, en el oeste de Argentina, en la cordillera de Los Andes, frontera de ambos países. (EFE)
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