MADRID.- La justicia española investigará las conexiones entre la organización independentista armada vasca ETA y la guerrilla colombiana de las FARC y estudiará si detiene a cinco presuntos miembros de ETA por haber impartido formación a integrantes de las FARC, indicaron hoy fuentes judiciales.
Eloy Velasco, juez de la Audiencia Nacional, principal instancia judicial española, "ha admitido a trámite la querella de la fiscalía sobre las FARC a raíz de la información que se obtuvo en el ordenador de Raúl Reyes", número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que murió en una operación contra las FARC en Ecuador en marzo.
El juez Velasco "ha pedido información a la Guardia Civil y a la policía para concretar más los hechos", añadieron las fuentes.
La fiscalía de la Audiencia Nacional, pidió hace dos semanas la investigación de esta conexión, basándose en "informaciones" de "diferentes medios de comunicación" y en los datos del ordenador incautado al número dos de las FARC.
Asimismo reclamó la detención de cinco presuntos miembros de ETA por delitos de "pertenencia a grupo terrorista, colaboración con banda armada y conspiración para cometer homicidios terroristas".
Se trata de Martín Capa, Iñaki Domínguez, José Ignacio Echarte, José Angel Urtiaga y Arturo Cubillas.
La colaboración entre ETA y las FARC data de 1993, según la fiscalía, que describe actividades de ETA con explosivos y armas en la selva colombiana, según documentos incautados en 1999 y el hallazgo de explosivos similares a los que utiliza ETA en 2002.
A mediados de 2003, al menos cuatro militantes de las FARC habrían recibido formación para manejar explosivos y habrían solicitado colaboración de ETA" para atentar en España o Europa contra personalidades colombianas, según la fiscalía.
Se trata del ex presidente de Colombia Andrés Pastrana, la ex ministra y embajadora Noemí Sanín, el actual vicepresidente colombiano, Francisco Santos, y el ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus.
A principios de ese año, miembros de ETA permanecieron durante una semana en un campamento de las FARC "manteniendo contacto con cuatro dirigentes" de la guerrilla y Capa y Domíguez "impartieron en la selva colombiana en agosto de 2007 un curso a 13 miembros de las FARC y el FLB (Frente de Liberación Bolivariana) sobre manejo de explosivos", añadió. (AFP)
Eloy Velasco, juez de la Audiencia Nacional, principal instancia judicial española, "ha admitido a trámite la querella de la fiscalía sobre las FARC a raíz de la información que se obtuvo en el ordenador de Raúl Reyes", número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que murió en una operación contra las FARC en Ecuador en marzo.
El juez Velasco "ha pedido información a la Guardia Civil y a la policía para concretar más los hechos", añadieron las fuentes.
La fiscalía de la Audiencia Nacional, pidió hace dos semanas la investigación de esta conexión, basándose en "informaciones" de "diferentes medios de comunicación" y en los datos del ordenador incautado al número dos de las FARC.
Asimismo reclamó la detención de cinco presuntos miembros de ETA por delitos de "pertenencia a grupo terrorista, colaboración con banda armada y conspiración para cometer homicidios terroristas".
Se trata de Martín Capa, Iñaki Domínguez, José Ignacio Echarte, José Angel Urtiaga y Arturo Cubillas.
La colaboración entre ETA y las FARC data de 1993, según la fiscalía, que describe actividades de ETA con explosivos y armas en la selva colombiana, según documentos incautados en 1999 y el hallazgo de explosivos similares a los que utiliza ETA en 2002.
A mediados de 2003, al menos cuatro militantes de las FARC habrían recibido formación para manejar explosivos y habrían solicitado colaboración de ETA" para atentar en España o Europa contra personalidades colombianas, según la fiscalía.
Se trata del ex presidente de Colombia Andrés Pastrana, la ex ministra y embajadora Noemí Sanín, el actual vicepresidente colombiano, Francisco Santos, y el ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus.
A principios de ese año, miembros de ETA permanecieron durante una semana en un campamento de las FARC "manteniendo contacto con cuatro dirigentes" de la guerrilla y Capa y Domíguez "impartieron en la selva colombiana en agosto de 2007 un curso a 13 miembros de las FARC y el FLB (Frente de Liberación Bolivariana) sobre manejo de explosivos", añadió. (AFP)
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