Es una histora real. No hay ficción. Ambientada en la selva colombiana y en Bogotá, Germán Castro Caycedo muestra la cruda realidad que ha azotado a Colombia en las últimas cinco décadas, desde el surgimiento de los grupos guerrilleros: la violencia. La violencia en su máxima expresión y desde diferentes aristas: la miseria, la pobreza, la falta de educación, el abandono, el abuso sexual.
El personaje central es EloÃsa. A lo largo de esta narración (una vasta crónica periodÃstica al estilo de GarcÃa Márquez), la mujer se convierte en un hilo conductor alrededor del cual se entretejen una serie de situaciones dramáticas y, a partir de las que se construyen, otros dos protagonistas: Alejandro, un joven militar (el supuesto "enemigoâ que se convierte en pareja de esta campesina) y el âDemonioâ (padre biológico de la mujer), quien se torna en un fantasma que la perseguirá desde la infancia. Un fantasma que se torna en una metáfora del mal.
Los primeros capÃtulos están escritos linealmente. Hay una sucesión de relatos que trasladan al lector, a través de muchas imágenes bien construidas, a escenarios que surgen de la inmensidad selvática. Lugares impensables y fantásticos como Guayabal, el pueblo en donde "unirse a la guerrilla es tan fácil como salir una noche de la casa, esperar a que cruce la ronda y mandarle un mensaje al duro de turno", que bien pueden estar en cualquier libro de ficción, aunque como bien dice el autor âpara qué inventar si uno vive en un paÃs de ficciónâ. Muy descriptivo, Castro (un apasionado por esa verde espesura), denuncia la existencia de un sistema social en el que viven miles de hombres y mujeres acostumbrados a vivir entre el terror y la desesperanza.
Suspenso y aventura son otras caracterÃsticas de esta obra "literaria" que el autor insiste en que se trata de un trabajo periodìstico. Sà que lo es, pero tiene los tintes de una novela de amor y de guerra. En 35 años que este autor lleva como periodista, confiesa que sus libros están basados en situaciones reales. Le interesa hurgar en los hechos y tomarse el tiempo que sea necesario para construir sus historias. Mas allá de la noche le tomó un año y medio. Conoció a los personajes, EloÃsa y Alejandro en Bogotá. Cree que esta mujer es el personaje más inteligente que ha conocido. Un personaje que llega a encontrar en los libros el sentido de la vida y la respuesta para muchos interrogantes. (PAS)
EL ESCRITOR
El autor nació en Zipaquirá. Fue cronista del diario El Tiempo durante 10 años. Fue creador del programa de televisión Enviado Especial, que marcó un cambio en el periodismo televisivo colombiano. Ha ganado 10 premios nacionales de periodismo y ocho internacionales. Ha escrito 15 libros testimoniales y una novela.
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Los "Encuentros" del Banco Interamericano de Desarrollo
Esto folletos los publica el Centro Cultural del BID con las conferencias de sus invitados
El Centro Cultural del Banco Interamericano de Desarrollo se creó en 1992 y realiza un sinnúmero de actividades artÃsticas y culturales, una de ellas es la publicación de esta serie de folletos, denominada "Encuentros", que transcribe las intervenciones de destacados ponentes e intelectuales acerca de temáticas relacionadas con el quehacer del centro.
Fernando Savater participó con su conferencia titulada Educación y ciudadanÃa en la era global, Rafael Viñoly abordó el tema del espacio público y la arquitectura en una época de consumo compulsivo, El arte y los nuevos medios en Italia fue la conferencia de MarÃa Grazia Mattei, mientras que Michael Chibnik disertó sobre ArtesanÃas y mercancÃas.
Las ediciones son de 2003 y llegan a nuestro paÃs. (PEM)
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Cuento y poesÃa: dos géneros escritos por tres conocidos autores
La Universidad de Cuenca y la Casa de la Cultura, Núcleo de Azuay, presentaron, hace poco, tres libros de tres conocidos autores ecuatorianos: Palabra derramada, de Oswaldo Encalada; La voz y la sombra, de Bruno Sáenz; y Vastas soledades breves, de Raúl Vallejo. Se trata de una selección de cuentos y de poesÃas prologados por Jorge Dávila Vásquez. A Encalada, Vásquez lo considera como "uno de los pioneros del cuento breve y extraño". También dice que llegará un dÃa en que se lo ubique como uno de "los nombres más representativos de la narrativa de Ecuador". De Sáenz dice que "es de la estirpe daviliana de los "ángeles sin misión", de los inútiles puros" que están en este mundo sola y únicamente para escribir, pues es lo único que saben hacer. ¡Y cómo lo hacen!". Respecto a Vallejo añade: "Vallejo no ha dejado de aportar al cuento ecuatoriano, con su humor, su erudición y sus tremendas ganas de narrar que parecen renovarse en cada libro".
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PALABRAS EN EL TIEMPO
Los poetas y el mar
Por Jorge Dávila Vásquez
Los poetas cuencanos han amado intensamente el mar. La poesÃa es un buen complemento vacacional. Hermosea a cada mañana.
Tiempo de vacaciones en la Sierra es este. Tiempo de tomarse unos dÃas de pausa en medio del intenso tráfago de nuestras vidas. A algunos les llama la montaña, cerca de la cual vivimos todo el tiempo, a otros nos llama el cambiante clima de las costas ecuatorianas, que deben estar entre las más bellas del mundo; si no, piénsese en esos poemas de la naturaleza que son Esmeraldas, ManabÃ, la penÃnsula de Santa Elena y sus mil rincones mágicos.
Todo aquello que ahora se llama, con justicia, la ruta del sol.
Claro que un escritor tiene su sensibilidad moldeada (¿o deformada?) de tal modo, que incluso la playa más extensa e intacta, el mar más puro, el sol sobre el espejo de las aguas, le remitirán sin remedio a ese viejo maridaje entre la palabra y la belleza marina, y casi mecánicamente el paisaje al atardecer será "el mar, el mar, siempre recomenzado", de Valery, que lo metaforizaba en techo por el que andan los barcos-palomas y en clámide suntuosa tejida de diamantes extremos; el mar que era para Joyce el principio de todas las cosas; el divino hogar del multiforme Proteo, el vinoso ponto de Homero.
Y los poetas cuencanos han amado también intensamente el mar. Recuérdese si no, para citar solo unos pocos ejemplos y quizá lo mejores, a Manuel MarÃa Palacios Bravo, que compadecÃa a la grande e iracunda masa de agua; a César Andrade y Cordero, que evocaba la catedral sumergida debussyana, con un lenguaje cercano al surrealismo; a César Dávila Andrade que evocó de las aguas genésicas que labraron caracolas como catedrales; a EfraÃn Jara, que dormÃa simbólicamente para siempre al arrullo de las grandes olas de sus islas amadas; a Jacinto Cordero, que recorrÃa el perenne y magnÃfico océano del tiempo, en una especie de reencuentro con el Ulises que late en todos nosotros; o a Sara Vanegas, que en su libro Poemar, nos entregara hace ya diez años su memoria marina: "mar que me bebes gota a gota/ noche a noche// mar que me sorbes/ desde tu eternidad amarga", inscribiéndose en esa larga tradición amoroso-marina universal.
La poesÃa es un buen complemento vacacional, hermosea aún más el marco en el que respiramos unas horas de calma.
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RECOMENDADOS
Efectos sociales de la globalización
La globalización de la economÃa ha afectado a tres de los sectores exportadores más importantes del paÃs: el banano, el petróleo y las flores, y ello ha repercutido en la salud, el medioambiente, el trabajo y la tecnologÃa. El libropretende esclarecer lo que significa la globalización en el paÃs.
Declaración de Deberes Humanos
El ser humano se acostumbra a reclamar sus derechos, pero muy poco cumple con sus deberes. "La Declaración Universal de los Derechos Humanos es un semillero de esperanzas ilusorias y frustraciones masivas, que frena el desarrollo de la autoestima", dicen los autores de este texto.
Informe 2004
El mundo tuvo que enfrentar los abusos ocurridos en la guerra contra Iraq. Mucha gente vio violados sus principios elementales. Además, la injusticia social se acrecentó. AmnistÃa Internacional confÃa en que su lucha por los Derechos Humanos es un instrumento poderoso para conseguir justicia para todos.
Hacia una nueva anteda para AL
El Premio Nobel de EconomÃa 2001 explica e interpreta los fracasos de las reformas económicas que se aplicaron en América Latina. Pero, define el marco de un nuevo programa de reforma económica para la región, que se concentra en lo que los paÃses pueden hacer en el régimen internacional actual.
Ciencia y TecnologÃa
Esta revista recoge los trabajos de investigaciónbásica y aplicada en las ciencias fÃsicas y naturales. En esta entrega, Plutarco Naranjo escribe sobre los alimentos medicinales y Simón Espinosa Cordero realiza una introducción a las ciencias con su texto titulado "Del bing bang a Dolly".
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QUITO en LibrerÃa Española
1. Planeta encantado ,J.J. BenÃtez.
2. Las guerras que vienen,Ana MarÃa Salazar.
3. HegemonÃa y supervivencia,Noam Chomsky.
4. Los dueños de América, Gerardo Reyes.
5. Estúpidos hombres blancos, Michael Moore.
6. Ensayo sobre la lucidez, José Saramago.
7. Sentado entre dos sillas, Javier Ponce.
8. Páginas con cierto sentido, Ramiro Diez.
9. PolÃtica económica, Lucas Pacheco.
10.La madriguera, Abdón Ubidia.
GUAYAQUIL en El Librero
1. Padre rico, padre pobre,Robert Kiyosaki.
2. La cultura, Dietrich Schwanitz.
3. El enigma sagrado, Baigent, Leigh, Lincoln.
4. La clave del Código Da Vinci, Lorenzo Fernández.
5. Estúpidos hombres blancos,Michael Moore.
6. La culpa es de la vaca, Jaime Lopera G.
7. Los liberadores de la conciencia, Juan MarÃa Alponte.
8. Los dueños de América Latina, Gerardo Reyes.
9. Enigmas de la Biblia..., Beretta y Broli.
10.Descifrando el complot,Carlos Julio Emanuel.
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CUENCA en Sodilibros
1. Estúpidos hombres blancos,Michael Moore.
2. Harry Potter y la Orden de Fénix,J.K. Rowling.
3. ¿Quiénes somos?,Samuel P. Huntington.
4. Pepita de oro, Osho.
5. Yo soy el sendero,Saint Germain.
6. Parque nacional El Cajas, Jorge Anhalzer.
7. Hacia la mágica presencia, Saint Germain.
8. Ecuador, Editorial Everest.
9. Once minutos,Paulo Coelho.
10.Tantra,Osho.
El personaje central es EloÃsa. A lo largo de esta narración (una vasta crónica periodÃstica al estilo de GarcÃa Márquez), la mujer se convierte en un hilo conductor alrededor del cual se entretejen una serie de situaciones dramáticas y, a partir de las que se construyen, otros dos protagonistas: Alejandro, un joven militar (el supuesto "enemigoâ que se convierte en pareja de esta campesina) y el âDemonioâ (padre biológico de la mujer), quien se torna en un fantasma que la perseguirá desde la infancia. Un fantasma que se torna en una metáfora del mal.
Los primeros capÃtulos están escritos linealmente. Hay una sucesión de relatos que trasladan al lector, a través de muchas imágenes bien construidas, a escenarios que surgen de la inmensidad selvática. Lugares impensables y fantásticos como Guayabal, el pueblo en donde "unirse a la guerrilla es tan fácil como salir una noche de la casa, esperar a que cruce la ronda y mandarle un mensaje al duro de turno", que bien pueden estar en cualquier libro de ficción, aunque como bien dice el autor âpara qué inventar si uno vive en un paÃs de ficciónâ. Muy descriptivo, Castro (un apasionado por esa verde espesura), denuncia la existencia de un sistema social en el que viven miles de hombres y mujeres acostumbrados a vivir entre el terror y la desesperanza.
Suspenso y aventura son otras caracterÃsticas de esta obra "literaria" que el autor insiste en que se trata de un trabajo periodìstico. Sà que lo es, pero tiene los tintes de una novela de amor y de guerra. En 35 años que este autor lleva como periodista, confiesa que sus libros están basados en situaciones reales. Le interesa hurgar en los hechos y tomarse el tiempo que sea necesario para construir sus historias. Mas allá de la noche le tomó un año y medio. Conoció a los personajes, EloÃsa y Alejandro en Bogotá. Cree que esta mujer es el personaje más inteligente que ha conocido. Un personaje que llega a encontrar en los libros el sentido de la vida y la respuesta para muchos interrogantes. (PAS)
EL ESCRITOR
El autor nació en Zipaquirá. Fue cronista del diario El Tiempo durante 10 años. Fue creador del programa de televisión Enviado Especial, que marcó un cambio en el periodismo televisivo colombiano. Ha ganado 10 premios nacionales de periodismo y ocho internacionales. Ha escrito 15 libros testimoniales y una novela.
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Los "Encuentros" del Banco Interamericano de Desarrollo
Esto folletos los publica el Centro Cultural del BID con las conferencias de sus invitados
El Centro Cultural del Banco Interamericano de Desarrollo se creó en 1992 y realiza un sinnúmero de actividades artÃsticas y culturales, una de ellas es la publicación de esta serie de folletos, denominada "Encuentros", que transcribe las intervenciones de destacados ponentes e intelectuales acerca de temáticas relacionadas con el quehacer del centro.
Fernando Savater participó con su conferencia titulada Educación y ciudadanÃa en la era global, Rafael Viñoly abordó el tema del espacio público y la arquitectura en una época de consumo compulsivo, El arte y los nuevos medios en Italia fue la conferencia de MarÃa Grazia Mattei, mientras que Michael Chibnik disertó sobre ArtesanÃas y mercancÃas.
Las ediciones son de 2003 y llegan a nuestro paÃs. (PEM)
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Cuento y poesÃa: dos géneros escritos por tres conocidos autores
La Universidad de Cuenca y la Casa de la Cultura, Núcleo de Azuay, presentaron, hace poco, tres libros de tres conocidos autores ecuatorianos: Palabra derramada, de Oswaldo Encalada; La voz y la sombra, de Bruno Sáenz; y Vastas soledades breves, de Raúl Vallejo. Se trata de una selección de cuentos y de poesÃas prologados por Jorge Dávila Vásquez. A Encalada, Vásquez lo considera como "uno de los pioneros del cuento breve y extraño". También dice que llegará un dÃa en que se lo ubique como uno de "los nombres más representativos de la narrativa de Ecuador". De Sáenz dice que "es de la estirpe daviliana de los "ángeles sin misión", de los inútiles puros" que están en este mundo sola y únicamente para escribir, pues es lo único que saben hacer. ¡Y cómo lo hacen!". Respecto a Vallejo añade: "Vallejo no ha dejado de aportar al cuento ecuatoriano, con su humor, su erudición y sus tremendas ganas de narrar que parecen renovarse en cada libro".
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PALABRAS EN EL TIEMPO
Los poetas y el mar
Por Jorge Dávila Vásquez
Los poetas cuencanos han amado intensamente el mar. La poesÃa es un buen complemento vacacional. Hermosea a cada mañana.
Tiempo de vacaciones en la Sierra es este. Tiempo de tomarse unos dÃas de pausa en medio del intenso tráfago de nuestras vidas. A algunos les llama la montaña, cerca de la cual vivimos todo el tiempo, a otros nos llama el cambiante clima de las costas ecuatorianas, que deben estar entre las más bellas del mundo; si no, piénsese en esos poemas de la naturaleza que son Esmeraldas, ManabÃ, la penÃnsula de Santa Elena y sus mil rincones mágicos.
Todo aquello que ahora se llama, con justicia, la ruta del sol.
Claro que un escritor tiene su sensibilidad moldeada (¿o deformada?) de tal modo, que incluso la playa más extensa e intacta, el mar más puro, el sol sobre el espejo de las aguas, le remitirán sin remedio a ese viejo maridaje entre la palabra y la belleza marina, y casi mecánicamente el paisaje al atardecer será "el mar, el mar, siempre recomenzado", de Valery, que lo metaforizaba en techo por el que andan los barcos-palomas y en clámide suntuosa tejida de diamantes extremos; el mar que era para Joyce el principio de todas las cosas; el divino hogar del multiforme Proteo, el vinoso ponto de Homero.
Y los poetas cuencanos han amado también intensamente el mar. Recuérdese si no, para citar solo unos pocos ejemplos y quizá lo mejores, a Manuel MarÃa Palacios Bravo, que compadecÃa a la grande e iracunda masa de agua; a César Andrade y Cordero, que evocaba la catedral sumergida debussyana, con un lenguaje cercano al surrealismo; a César Dávila Andrade que evocó de las aguas genésicas que labraron caracolas como catedrales; a EfraÃn Jara, que dormÃa simbólicamente para siempre al arrullo de las grandes olas de sus islas amadas; a Jacinto Cordero, que recorrÃa el perenne y magnÃfico océano del tiempo, en una especie de reencuentro con el Ulises que late en todos nosotros; o a Sara Vanegas, que en su libro Poemar, nos entregara hace ya diez años su memoria marina: "mar que me bebes gota a gota/ noche a noche// mar que me sorbes/ desde tu eternidad amarga", inscribiéndose en esa larga tradición amoroso-marina universal.
La poesÃa es un buen complemento vacacional, hermosea aún más el marco en el que respiramos unas horas de calma.
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RECOMENDADOS
Efectos sociales de la globalización
La globalización de la economÃa ha afectado a tres de los sectores exportadores más importantes del paÃs: el banano, el petróleo y las flores, y ello ha repercutido en la salud, el medioambiente, el trabajo y la tecnologÃa. El libropretende esclarecer lo que significa la globalización en el paÃs.
Declaración de Deberes Humanos
El ser humano se acostumbra a reclamar sus derechos, pero muy poco cumple con sus deberes. "La Declaración Universal de los Derechos Humanos es un semillero de esperanzas ilusorias y frustraciones masivas, que frena el desarrollo de la autoestima", dicen los autores de este texto.
Informe 2004
El mundo tuvo que enfrentar los abusos ocurridos en la guerra contra Iraq. Mucha gente vio violados sus principios elementales. Además, la injusticia social se acrecentó. AmnistÃa Internacional confÃa en que su lucha por los Derechos Humanos es un instrumento poderoso para conseguir justicia para todos.
Hacia una nueva anteda para AL
El Premio Nobel de EconomÃa 2001 explica e interpreta los fracasos de las reformas económicas que se aplicaron en América Latina. Pero, define el marco de un nuevo programa de reforma económica para la región, que se concentra en lo que los paÃses pueden hacer en el régimen internacional actual.
Ciencia y TecnologÃa
Esta revista recoge los trabajos de investigaciónbásica y aplicada en las ciencias fÃsicas y naturales. En esta entrega, Plutarco Naranjo escribe sobre los alimentos medicinales y Simón Espinosa Cordero realiza una introducción a las ciencias con su texto titulado "Del bing bang a Dolly".
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QUITO en LibrerÃa Española
1. Planeta encantado ,J.J. BenÃtez.
2. Las guerras que vienen,Ana MarÃa Salazar.
3. HegemonÃa y supervivencia,Noam Chomsky.
4. Los dueños de América, Gerardo Reyes.
5. Estúpidos hombres blancos, Michael Moore.
6. Ensayo sobre la lucidez, José Saramago.
7. Sentado entre dos sillas, Javier Ponce.
8. Páginas con cierto sentido, Ramiro Diez.
9. PolÃtica económica, Lucas Pacheco.
10.La madriguera, Abdón Ubidia.
GUAYAQUIL en El Librero
1. Padre rico, padre pobre,Robert Kiyosaki.
2. La cultura, Dietrich Schwanitz.
3. El enigma sagrado, Baigent, Leigh, Lincoln.
4. La clave del Código Da Vinci, Lorenzo Fernández.
5. Estúpidos hombres blancos,Michael Moore.
6. La culpa es de la vaca, Jaime Lopera G.
7. Los liberadores de la conciencia, Juan MarÃa Alponte.
8. Los dueños de América Latina, Gerardo Reyes.
9. Enigmas de la Biblia..., Beretta y Broli.
10.Descifrando el complot,Carlos Julio Emanuel.
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CUENCA en Sodilibros
1. Estúpidos hombres blancos,Michael Moore.
2. Harry Potter y la Orden de Fénix,J.K. Rowling.
3. ¿Quiénes somos?,Samuel P. Huntington.
4. Pepita de oro, Osho.
5. Yo soy el sendero,Saint Germain.
6. Parque nacional El Cajas, Jorge Anhalzer.
7. Hacia la mágica presencia, Saint Germain.
8. Ecuador, Editorial Everest.
9. Once minutos,Paulo Coelho.
10.Tantra,Osho.
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