El Comando Sur del Ejército de los Estados Unidos devolvió hoy a las Fuerzas Armadas del Ecuador 15 botes tácticos tras reacondicionarlos para el control de los ríos fronterizos con Colombia y la lucha contra el narcotráfico en la región.
La entrega de este material militar renovado, hecha pública en una ceremonia en la ciudad de El Coca, se enmarca en el trabajo conjunto que desde 2007 ha llevado a cabo el Comando Sur con el Ejército ecuatoriano para capacitar unidades castrenses en la zona.
La ceremonia contó con la presencia de, entre otros, el Contraalmirante del Comando Sur estadounidense, Robert Parker, quien calificó el apoyo de su país con este reacondicionamiento como "muy importante", pues, aseguró,
"ayudará a las Fuerzas Armadas ecuatorianas a preservar la soberanía de Ecuador".
Parker insistió además en que la ayuda brindada es "en coordinación" con el Ejército ecuatoriano y aseguró que "es importante hacerlo así hoy en día, con las presiones económicas que tenemos ambos países, para hacerlo más eficaz".
Desde el lado ecuatoriano, el general Hugo Villegas, encargado de la lucha antinarcóticos en la zona, explicó que las 15 embarcaciones ya eran ecuatorianas, pero que el grupo militar estadounidense ha cambiado los motores "con unos modernos tipo turbo jet" que funcionan con diesel en vez de gasolina.
Eso, se refirió Villegas, "incrementa la potencialidad de este tipo de material", con lo que "actualmente se puede operar en las embarcaciones con nueve hombres, que es la dotación, armados, equipados, y con gran facilidad para patrullar los ríos Putumayo y San Miguel, principalmente", que son de aguas menos profundas.
Según el general ecuatoriano,
"es necesario el apoyo de todos los entes de la sociedad que luchan contra el narcotráfico, contra las diversas amenazas que se han hecho trasnacionales", y el apoyo estadounidense se basa en "convenios de Defensa, de intercambio de experiencias y de material para luchar contra amenazas comunes".
El Comando Sur de los
Estados Unidos "normalmente" aporta entre $5 y $7 millones cada año a las
Fuerzas Armadas de Ecuador, según el comandante estadounidense Robert Gaddis.
Gaddis explicó que, junto con la entrega del material militar, se llevaron a cabo "sesiones de patrullaje, operaciones fluviales, inserción, extracción y simulacros de batalla".
Las unidades militares estarán así preparadas para internarse en las zonas accesibles solamente por agua o por aire, para interrumpir el flujo de drogas y el establecimiento de bases de operaciones por parte de grupos irregulares armados.
Estados Unidos dejó de operar en la base militar ecuatoriana de Manta en septiembre pasado, después de 10 años de operaciones de control de narcotráfico sobre todo por vías marítimas.
Para Parker, ésta
"fue una decisión de Ecuador el no renovar el acuerdo, y es una decisión soberana" que, aseguró, su país entiende.
"Claro que va a tener un efecto en la posibilidad de poder detener a narcotraficantes en las aguas marítimas, pero a la vez estamos muy agradecidos por el tiempo que tuvimos el acuerdo", añadió el contraalmirante.
Parker afirmó, además, que
el Comando Sur "apoyará a Ecuador en la medida en que el Gobierno ecuatoriano quiera", y dijo "entender las presiones políticas y económicas" que puedan existir en ambos países.
El contingente ecuatoriano en El Coca dispondrá ahora de más de 40 botes tácticos y aproximadamente 550 soldados entrenados y capacitados en colaboración con
Estados Unidos. (EFE)