Cinco bases aéreas y dos navales
Los primeros aviones estadounidenses llegarÃan a Colombia en menos de un mes, según voceros de Defensa
El documento que permite la utilización de bases colombianas por soldados estadounidenses ya está listo para la firma, que se dará en una semana, según fuentes del Ministerio de Defensa colombiano.
El Tiempo de Colombia, que accedió a dicho texto, señaló que uno de los puntos que quedó establecido y el primero que expuso la delegación colombiana en la reunión del pasado viernes, en Washington, es que Colombia avale cada movimiento que se haga en las bases.
Cada base militar tendrá un coronel que el Gobierno colombiano nombrará como responsable de supervisar las acciones estadounidenses.
El documento final, que será presentado por la comisión del Gobierno al Consejo de Estado para consulta -según la publicación-, está dividido en varios capÃtulos que contienen 20 puntos básicos, con tres grandes temas: la presencia del personal estadounidense en Colombia, los términos para la realización de operaciones y el intercambio de información.
"La única bandera que ondeará en esas bases será la colombiana", dijo Freddy Padilla, jefe de las fuerza militares, quien vigiló desde Bogotá la negociación. Según fuentes del Ministerio de Defensa, este acuerdo tendrá una duración de 10 años.
Ayer, el presidente de Colombia,
Ãlvaro Uribe, afirmó que el polémico acuerdo con Washington, para que militares estadounidenses ocupen bases en su paÃs "es un paso en la dirección correcta. Nuestra polÃtica no tiene reversa. Hay que derrotarlos (a los terroristas) totalmente".
Según el diario colombiano, no hay claridad sobre la inmunidad que tendrÃa el personal estadounidense que esté en las bases colombianas. En el documento, se establece que habrá excepciones a la inmunidad en casos de extrema gravedad.
A través de una fuente del Ministerio, se conoció que los primeros aviones aterrizarán en Colombia en menos de un mes.
Uribe aceptó ir al encuentro de la
Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), con la condición de que la cita no implique limitaciones para el acuerdo con los EEUU. Hasta el momento, la CancillerÃa del Ecuador no se ha pronunciado sobre este borrador que dará libre acceso a los estadounidenses en Colombia.
Entre los temas que se redactaron en dicho documento consta que el paÃs vecino compartirá información de inteligencia con EEUU en el tema del narcotráfico y terrorismo. Esto se traduce a intercambio de datos en tiempo real. Asà también, las operaciones que se realicen deben estar amparadas por los marcos jurÃdicos de ambos paÃses y al internacional, como la carta de la ONU y otros tratados. Se usarán las bases de Malambo, Apiay, Palanquero, Tolemaida y Larandia, según las necesidades y requerimientos. Militares estadounidenses se ubicarán en cinco bases aéreas y dos navales.
Finalmente, Uribe aseguró ayer que su Gobierno tiene todas las intenciones de contribuir a que las relaciones con el Ecuador se normalicen. Dijo esto dos dÃas después de que reiterara su solicitud de perdón al Gobierno de Rafael Correa, por el ataque militar colombiano contra un campamento de la guerrilla de las FARC en territorio ecuatoriano, el 1 de marzo de 2008. (MING)
Pentágono disipa miedos
El polémico acuerdo en negociación, que permitirá a militares estadounidenses usar bases en Colombia, se limitará al territorio colombiano y será para el combate al terrorismo y al narcotráfico, garantizó ayer, Frank Mora, uno de los subsecretarios del Departamento de Defensa de los EEUU en entrevista al diario brasileño O Globo.
"Quiero dejar una cosa bien clara para los brasileños: esa misión no tiene nada que ver con la AmazonÃa brasileña. Todo lo que se discute entre el Pentágono y los militares colombianos es solamente sobre Colombia", dijo Mora.
Las siete bases en territorio colombiano son la principal causa del actual deterioro de las relaciones de Colombia con el Ecuador y Venezuela.
Sin inversión en la frontera
Durante la semana pasada, algunos sujetos polÃticos expresaron su sentir respecto a la tensión que se ha creado en la región suramericana, a partir del acuerdo entre Estados Unidos y Colombia.
El vicepresidente de la República, Lenin Moreno, aseguró que el Ecuador no aceptará "bajo ninguna circunstancia" involucrarse en un eventual conflicto bélico en la región, pero que tampoco permitirá "una agresión" como la de marzo de 2008.
Mientras tanto, el ministro de Seguridad, Miguel Carvajal. aseguró que la zona fronteriza requiere una mayor inversión en educación y salud, lo cual no es posible porque se destina a equipamiento y movilización militar al menos $ 150 millones. (MING)