Quito. 09.11.94. Volver a las "utopías del renacimiento" de la
"ciudad del sol" significa recuperar el sentido de la geografía,
de la historia y de la utopía. En ese sentido, Quito es una
ciudad paradigmática.
En la "imaginaria ciudad del sol", Tomas Campanella parte de la
definición de la configuración y estructura de las ciudad en los
siguientes términos: "En el centro de una vastísima llanura surge
una elevada colina, sobre la cual descansa la mayor parte de la
ciudad".
Quito -por geografía- es una ciudad equinoccial que nace en "la
mitad del mundo", al pie del Panecillo y en las faldas del
Pichincha; los rayos solares le caen perpendicularmente, cualidad
que le asigna, según Gustavo Guayasamín, la condición de ciudad
en la "mitad del tiempo". El propio nombre de la ciudad, según
Moreno Mora, significa "sol derecho o vertical" que viene del
dialecto poconchi de origen maya: Kih=sol y toh= derecho.
Quito -por historia- según algunas interpretaciones se organizó
en función del sol, no solo por el número y calidad de los centro
ceremoniales de adoración religiosa, sino también por la propia
disposición de las calles y plazas.
En suma, Quito es una ciudad equinoccial a la que los rayos
solares bañan perpendicularmente, lo cual le ha llevado a
desarrollar un verdadero culto a la luz. No en vano es patrimonio
de la humanidad su riqueza acumulada y su clarinada de luz de
América.
La paradoja global se asienta en Quito
Son estas cualidades que se potencian con la aprobación y puesta
en práctica de la Ley del Distrito Metropolitano de Quito. A
partir de este momento la ciudad abre una nueva fase de su
historia, porque asume la condición de metropolis; lo cual en la
situación actual significa posesionarse en el sentido de la
paradoja global: descentralización e internacionalización.
La conformación del Municipio Metropolitano
El Municipio Metropolitano de Quito tiene un sentido de totalidad
gracias a una actuación altamente diversificada, que le lleva a
definirse como un real gobierno del conjunto de la sociedad
local. El abanico de actividades es tan amplio que es factible
pensar en una reproducción de un gobierno nacional con sus
respectivos ministerios de obras públicas, educación y cultura,
salud, policía, relaciones exteriores, energía eléctrica,
vivienda, servicios, etc.
Para ello, la municipalidad metropolitana ha debido poner al día
su mercado institucional, con un alto sentido previsor del
futuro. Hay una política de reestructuración que se basa en tres
procesos interrelacionados: un fortalecimiento de su condición de
poder local, una descentralización de su gestión y una
internacionalización de sus relaciones.
En el primer caso, se percibe el incremento de funciones y
competencias, y la reestructuración de las existentes. Allí, por
ejemplo, la creación de la Dirección de Medio Ambiente, de la
Empresa de Aseo y de la Empresa de Obras Públicas; la fusión de
las empresas de Agua Potable con la de Alcantarillado y el
fortalecimiento de la Empresa de Transporte, entre otras. Y, por
otro lado, se percibe un amplio proceso de descentralización
territorial con la creación de las administraciones zonales del
Sur, Norte y Centro.
EL LANZAMIENTO INTERNA
Esta concepción de totalidad se complementa con la inserción de
Quito el concierto internacional. Sin lugar a dudas la urbe tiene
su mayor virtud en el extraordinario patrimonio histórico
cultural que ha ido construyendo, en la magestuosidad de su
andina implantación natural y en el desarrollo de un nivel de
capitalidad que va más allá del país, gracias al innegable
prestigio interno y externo alcanzado por el municipio.
La historia de la ciudad y su respeto, han permitido contar con
el Centro Histórico más grande y de mayor calidad de América
Latina, lo cual ha sido reconocido con el título de Patrimonio de
la Humanidad. Es un centro de la historia urbana en la medida en
que la ciudad lo tiene como el origen de su vida y el testimonio
de su proceso histórico. Por ello, el renacimiento de la ciudad
se logrará si se retoma el proceso desde este eje de centralidad,
respetando sus leyes, historia y gentes.
Quito lo ha hecho y es un gran ejemplo al mundo: se ha convertido
en un gran laboratorio mundial y en un lugar de encuentro de
múltiples culturas y nacionalidades. Innúmeros seminarios y
reuniones internacionales se realizan anualmente. Existe un
aporte generoso de recursos económicos y tecnológicos de Italia,
Bélgica, Estados Unidos, España, México, Argentina y Brasil.
Y, en estos días, con el otorgamiento de un préstamos sin par
-por su magnitud y características- la administración municipal
crea nuevos rumbos para el Banco Interamericano de Desarrollo y
para otros Centros Históricos de la región. Con esta iniciativa
el municipio ha forzado al BID a abrir una inédita línea de
crédito y se ha convertido en un ejemplo a seguir por otras
municipalidad del continente.
Esta condición pone a Quito a la cabeza del proceso de
internacionalización urbana. El Municipio Metropolitano se
convierte en una posibilidad de representación legítima,
democrática y ejemplar que va más allá de nuestras fronteras
patrias. No en vano nuestro alcalde Jamil Mahuad ha asumido un
importante liderazgo regional en eventos y organizaciones
internacionales, no solo representando a los quiteños y
ecuatorianos, sino también a otras ciudades y ciudadanos de la
región.
La promoción de Quito en la unión de ciudades
Se debe hacer una gran campaña para un lanzamiento de Quito al
mundo y hacia el próximo milenio. Hay bases para ello porque
Quito tiene muchas cosas que mostrar. Es un lugar nato de
convenciones internacionales, gracias a su condición ecuatorial y
al incremento de su capitalidad. Las últimas semanas mostraron a
Quito como el escenario ideal para estos eventos, donde solo el
municipio organizó tres reuniones seguidas.
Quito es un modelo o paradigma de ciudad ordenada gracias a sus
cinco planes realizados en esta última mitad del siglo. Hay un
aparato municipal que ha sabido adelantarse a los
acontecimientos. Tenemos una sociedad civil que le ha dotado de
continuidad gubernamental a la gestión urbana. Hay una real
inserción de Quito a nivel mundial que debe ser fortalecida, y
tenemos una historia y geografía con testimonios innegables.
Con todo esto y de cara al siglo XXI, la ciudad renacida tendrá
un lugar importante en el próximo siglo -el de las ciudades- y
asumirá la verdadera condición de "ciudad del sol". (12B)
"ciudad del sol" significa recuperar el sentido de la geografía,
de la historia y de la utopía. En ese sentido, Quito es una
ciudad paradigmática.
En la "imaginaria ciudad del sol", Tomas Campanella parte de la
definición de la configuración y estructura de las ciudad en los
siguientes términos: "En el centro de una vastísima llanura surge
una elevada colina, sobre la cual descansa la mayor parte de la
ciudad".
Quito -por geografía- es una ciudad equinoccial que nace en "la
mitad del mundo", al pie del Panecillo y en las faldas del
Pichincha; los rayos solares le caen perpendicularmente, cualidad
que le asigna, según Gustavo Guayasamín, la condición de ciudad
en la "mitad del tiempo". El propio nombre de la ciudad, según
Moreno Mora, significa "sol derecho o vertical" que viene del
dialecto poconchi de origen maya: Kih=sol y toh= derecho.
Quito -por historia- según algunas interpretaciones se organizó
en función del sol, no solo por el número y calidad de los centro
ceremoniales de adoración religiosa, sino también por la propia
disposición de las calles y plazas.
En suma, Quito es una ciudad equinoccial a la que los rayos
solares bañan perpendicularmente, lo cual le ha llevado a
desarrollar un verdadero culto a la luz. No en vano es patrimonio
de la humanidad su riqueza acumulada y su clarinada de luz de
América.
La paradoja global se asienta en Quito
Son estas cualidades que se potencian con la aprobación y puesta
en práctica de la Ley del Distrito Metropolitano de Quito. A
partir de este momento la ciudad abre una nueva fase de su
historia, porque asume la condición de metropolis; lo cual en la
situación actual significa posesionarse en el sentido de la
paradoja global: descentralización e internacionalización.
La conformación del Municipio Metropolitano
El Municipio Metropolitano de Quito tiene un sentido de totalidad
gracias a una actuación altamente diversificada, que le lleva a
definirse como un real gobierno del conjunto de la sociedad
local. El abanico de actividades es tan amplio que es factible
pensar en una reproducción de un gobierno nacional con sus
respectivos ministerios de obras públicas, educación y cultura,
salud, policía, relaciones exteriores, energía eléctrica,
vivienda, servicios, etc.
Para ello, la municipalidad metropolitana ha debido poner al día
su mercado institucional, con un alto sentido previsor del
futuro. Hay una política de reestructuración que se basa en tres
procesos interrelacionados: un fortalecimiento de su condición de
poder local, una descentralización de su gestión y una
internacionalización de sus relaciones.
En el primer caso, se percibe el incremento de funciones y
competencias, y la reestructuración de las existentes. Allí, por
ejemplo, la creación de la Dirección de Medio Ambiente, de la
Empresa de Aseo y de la Empresa de Obras Públicas; la fusión de
las empresas de Agua Potable con la de Alcantarillado y el
fortalecimiento de la Empresa de Transporte, entre otras. Y, por
otro lado, se percibe un amplio proceso de descentralización
territorial con la creación de las administraciones zonales del
Sur, Norte y Centro.
EL LANZAMIENTO INTERNA
Esta concepción de totalidad se complementa con la inserción de
Quito el concierto internacional. Sin lugar a dudas la urbe tiene
su mayor virtud en el extraordinario patrimonio histórico
cultural que ha ido construyendo, en la magestuosidad de su
andina implantación natural y en el desarrollo de un nivel de
capitalidad que va más allá del país, gracias al innegable
prestigio interno y externo alcanzado por el municipio.
La historia de la ciudad y su respeto, han permitido contar con
el Centro Histórico más grande y de mayor calidad de América
Latina, lo cual ha sido reconocido con el título de Patrimonio de
la Humanidad. Es un centro de la historia urbana en la medida en
que la ciudad lo tiene como el origen de su vida y el testimonio
de su proceso histórico. Por ello, el renacimiento de la ciudad
se logrará si se retoma el proceso desde este eje de centralidad,
respetando sus leyes, historia y gentes.
Quito lo ha hecho y es un gran ejemplo al mundo: se ha convertido
en un gran laboratorio mundial y en un lugar de encuentro de
múltiples culturas y nacionalidades. Innúmeros seminarios y
reuniones internacionales se realizan anualmente. Existe un
aporte generoso de recursos económicos y tecnológicos de Italia,
Bélgica, Estados Unidos, España, México, Argentina y Brasil.
Y, en estos días, con el otorgamiento de un préstamos sin par
-por su magnitud y características- la administración municipal
crea nuevos rumbos para el Banco Interamericano de Desarrollo y
para otros Centros Históricos de la región. Con esta iniciativa
el municipio ha forzado al BID a abrir una inédita línea de
crédito y se ha convertido en un ejemplo a seguir por otras
municipalidad del continente.
Esta condición pone a Quito a la cabeza del proceso de
internacionalización urbana. El Municipio Metropolitano se
convierte en una posibilidad de representación legítima,
democrática y ejemplar que va más allá de nuestras fronteras
patrias. No en vano nuestro alcalde Jamil Mahuad ha asumido un
importante liderazgo regional en eventos y organizaciones
internacionales, no solo representando a los quiteños y
ecuatorianos, sino también a otras ciudades y ciudadanos de la
región.
La promoción de Quito en la unión de ciudades
Se debe hacer una gran campaña para un lanzamiento de Quito al
mundo y hacia el próximo milenio. Hay bases para ello porque
Quito tiene muchas cosas que mostrar. Es un lugar nato de
convenciones internacionales, gracias a su condición ecuatorial y
al incremento de su capitalidad. Las últimas semanas mostraron a
Quito como el escenario ideal para estos eventos, donde solo el
municipio organizó tres reuniones seguidas.
Quito es un modelo o paradigma de ciudad ordenada gracias a sus
cinco planes realizados en esta última mitad del siglo. Hay un
aparato municipal que ha sabido adelantarse a los
acontecimientos. Tenemos una sociedad civil que le ha dotado de
continuidad gubernamental a la gestión urbana. Hay una real
inserción de Quito a nivel mundial que debe ser fortalecida, y
tenemos una historia y geografía con testimonios innegables.
Con todo esto y de cara al siglo XXI, la ciudad renacida tendrá
un lugar importante en el próximo siglo -el de las ciudades- y
asumirá la verdadera condición de "ciudad del sol". (12B)
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