El árbitro quiteño cuenta con varios argumentos reglamentarios para su apelación. Por ejemplo, el Inspector de Arbitros maneja un reloj que jamás se detiene, mientras que el árbitro "actuará como cronometrador (Regla 5), y "la recuperación del tiempo perdido quedará a criterio del árbitro" (Regla 7) .
La misma regla dice que el partido durará dos tiempos de 45 minutos cada uno y el juez central tiene la facultad de restituirlo por cada sustitución (30 segundos), la lesión de un jugador (45s), transporte de lesionados (30s), pérdida de tiempo en saques de gol o laterales (5s, cada uno), otro motivo (ingreso de público), así lo manifiesta el estatuto de FIFA. (DSL)
l La FIFA ordena
Byron Moreno anotó en el informe arbitral del partido que los goles de Liga se produjeron en los minutos 89 y 90. El juez se respalda en el estatuto de FIFA, que señala que ningún partido dura más de 90 minutos. La reposición implica el tiempo faltante dentro de los 90 minutos habituales.
La Comisión de Arbitraje tiene la exclusiva función de designación de árbitros, pero el presidente, Patricio Viteri insiste que Moreno mintió, pues no informó sobre los minutos de adición.
La Comisión Académica de FIFA ordena que los árbitros informen cuánto, ni porque se reponen minutos de juego. Entonces, no se proporcionaron informes falsos. (DSL)
l Brazo en alto
En el cuarto gol de LDU, los jugadores de Barcelona insisten que Moreno pitó el final del partido cuando Escobar lanzó el centro para el gol de Squiavi.
El golero José Cevallos dice que por eso desistió de atajar en la última jugada y que sus compañeros también hicieron lo propio.
El árbitro dice que mantuvo su brazo izquierdo en alto porque era un tiro indirecto. La FIFA recomienda no finalizar un partido en una situación clara de peligro. Moreno acostumbra señalar el fin de un cotejo en situaciones alejadas de los arcos, levantando las manos en alto y siempre mirando el centro del campo. (DSL)
l Dos errores
El informe del inspector se refiere a la actuación del árbitro. El que redacta el juez es de los jugadores. Con estos se juzgan a los futbolistas y a la terna arbitral. Lo que está fuera de ello solo puede ser castigado con el apoyo del video. La Comisión de Disciplina sancionó a Byron Moreno con 20 fechas por la redacción del informe y no por los fallos en las sanciones durante el juego (decisiones técnicas).
La Comisión de Disciplina aplicó el artículo 142 y lo acusó de no emitir un informe que refleje la realidad. Con estas contradicciones, los argumentos del castigo se tornan vulnerables. (DSL)
Las decisiones de la discordia
Byron Moreno reconoció que tuvo su peor actuación en el cotejo entre Liga y Barcelona
Dos penales inexistentes y un fuera de lugar que tardó en ser sancionado para evitar un gol viciado de nulidad no parecen suficientes equivocaciones frente al hecho de haber añadido 12 minutos y que en este lapso un equipo virase un marcador adverso.
Todos coinciden, vencedores y vencidos, en que Byron Moreno tuvo una mala actuación en el cotejo Liga de Quito-Barcelona, incluido el propio juez, quien hace un mea culpa.
Empero, su sanción también está plagada de irregularidades por el procedimiento, la promulgación y la ejecución de la pena, de parte de la Comisión de Disciplina, que escogió un artículo improcedente para lo que ocurrió aquel día.
Moreno fue acusado y sancionado por un delito que no cometió (la redacción del informe) y ello también es infringir la ley.
Cometió un cúmulo de errores de apreciación, inusual en su recorrido de 14 años. Por ello debió ser castigado, como manda el estatuto de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) que diseñan los dirigentes, no los árbitros. La principal prueba para castigar a un referí es el informe del inspector, allí se califican (sobre 10) la presentación, el desplazamiento y el desempeño.
Luego del cotejo se descubrió que las sanciones técnicas no fueron acertadas y por ello se le calificó 4,5, es decir regular, con ello se aprestaba, de oficio, a una suspensión de un partido por cuanto era la primera en este año.
Barcelona avivó una polémica en torno al arbitraje, lo cual obligó al análisis "profundo" de la Comisión Académica, parte de la de Arbitraje, que revisó el video para cotejar si la apreciación del inspector fue equivocada. (DSL)
l Seis minutos que se duplican
Usando la séptima de las 17 reglas del fútbol, Byron Moreno decidió reponer el tiempo perdido, que a su criterio fue de seis minutos durante los 90 corridos entre Liga y Barcelona. Mas, el juez observó que sobre esa cuota hubo aspectos que exigían seguir añadiendo, como los cambios, las lesiones -fingidas o no-, la perdida de tiempo en los saques de gol y laterales que lo habrían obligado a aumentar seis minutos más. (DSL)
l La validez de los dos goles
Mientras el árbitro no pite, el partido no termina, reza un refrán futbolero. Una realidad que se puso de manifiesto el pasado domingo en la Casa Blanca, ya que en los dos últimos minutos de reposición se convirtieron dos goles.
Este período extra está a libre criterio del juez y está contemplado dentro de los 90 minutos reglamentarios, repartidos en las dos etapas de 45 que exige un partido oficial de fútbol (Regla 7). No existe el minuto 91. (DSL)
La misma regla dice que el partido durará dos tiempos de 45 minutos cada uno y el juez central tiene la facultad de restituirlo por cada sustitución (30 segundos), la lesión de un jugador (45s), transporte de lesionados (30s), pérdida de tiempo en saques de gol o laterales (5s, cada uno), otro motivo (ingreso de público), así lo manifiesta el estatuto de FIFA. (DSL)
l La FIFA ordena
Byron Moreno anotó en el informe arbitral del partido que los goles de Liga se produjeron en los minutos 89 y 90. El juez se respalda en el estatuto de FIFA, que señala que ningún partido dura más de 90 minutos. La reposición implica el tiempo faltante dentro de los 90 minutos habituales.
La Comisión de Arbitraje tiene la exclusiva función de designación de árbitros, pero el presidente, Patricio Viteri insiste que Moreno mintió, pues no informó sobre los minutos de adición.
La Comisión Académica de FIFA ordena que los árbitros informen cuánto, ni porque se reponen minutos de juego. Entonces, no se proporcionaron informes falsos. (DSL)
l Brazo en alto
En el cuarto gol de LDU, los jugadores de Barcelona insisten que Moreno pitó el final del partido cuando Escobar lanzó el centro para el gol de Squiavi.
El golero José Cevallos dice que por eso desistió de atajar en la última jugada y que sus compañeros también hicieron lo propio.
El árbitro dice que mantuvo su brazo izquierdo en alto porque era un tiro indirecto. La FIFA recomienda no finalizar un partido en una situación clara de peligro. Moreno acostumbra señalar el fin de un cotejo en situaciones alejadas de los arcos, levantando las manos en alto y siempre mirando el centro del campo. (DSL)
l Dos errores
El informe del inspector se refiere a la actuación del árbitro. El que redacta el juez es de los jugadores. Con estos se juzgan a los futbolistas y a la terna arbitral. Lo que está fuera de ello solo puede ser castigado con el apoyo del video. La Comisión de Disciplina sancionó a Byron Moreno con 20 fechas por la redacción del informe y no por los fallos en las sanciones durante el juego (decisiones técnicas).
La Comisión de Disciplina aplicó el artículo 142 y lo acusó de no emitir un informe que refleje la realidad. Con estas contradicciones, los argumentos del castigo se tornan vulnerables. (DSL)
Las decisiones de la discordia
Byron Moreno reconoció que tuvo su peor actuación en el cotejo entre Liga y Barcelona
Dos penales inexistentes y un fuera de lugar que tardó en ser sancionado para evitar un gol viciado de nulidad no parecen suficientes equivocaciones frente al hecho de haber añadido 12 minutos y que en este lapso un equipo virase un marcador adverso.
Todos coinciden, vencedores y vencidos, en que Byron Moreno tuvo una mala actuación en el cotejo Liga de Quito-Barcelona, incluido el propio juez, quien hace un mea culpa.
Empero, su sanción también está plagada de irregularidades por el procedimiento, la promulgación y la ejecución de la pena, de parte de la Comisión de Disciplina, que escogió un artículo improcedente para lo que ocurrió aquel día.
Moreno fue acusado y sancionado por un delito que no cometió (la redacción del informe) y ello también es infringir la ley.
Cometió un cúmulo de errores de apreciación, inusual en su recorrido de 14 años. Por ello debió ser castigado, como manda el estatuto de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) que diseñan los dirigentes, no los árbitros. La principal prueba para castigar a un referí es el informe del inspector, allí se califican (sobre 10) la presentación, el desplazamiento y el desempeño.
Luego del cotejo se descubrió que las sanciones técnicas no fueron acertadas y por ello se le calificó 4,5, es decir regular, con ello se aprestaba, de oficio, a una suspensión de un partido por cuanto era la primera en este año.
Barcelona avivó una polémica en torno al arbitraje, lo cual obligó al análisis "profundo" de la Comisión Académica, parte de la de Arbitraje, que revisó el video para cotejar si la apreciación del inspector fue equivocada. (DSL)
l Seis minutos que se duplican
Usando la séptima de las 17 reglas del fútbol, Byron Moreno decidió reponer el tiempo perdido, que a su criterio fue de seis minutos durante los 90 corridos entre Liga y Barcelona. Mas, el juez observó que sobre esa cuota hubo aspectos que exigían seguir añadiendo, como los cambios, las lesiones -fingidas o no-, la perdida de tiempo en los saques de gol y laterales que lo habrían obligado a aumentar seis minutos más. (DSL)
l La validez de los dos goles
Mientras el árbitro no pite, el partido no termina, reza un refrán futbolero. Una realidad que se puso de manifiesto el pasado domingo en la Casa Blanca, ya que en los dos últimos minutos de reposición se convirtieron dos goles.
Este período extra está a libre criterio del juez y está contemplado dentro de los 90 minutos reglamentarios, repartidos en las dos etapas de 45 que exige un partido oficial de fútbol (Regla 7). No existe el minuto 91. (DSL)
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