PolicÃa de Colombia
BOGOTÃ. La PolicÃa de Colombia ofreció una recompensa de $5 000 a quien aporte información sobre los responsables de la muerte en el noroeste del paÃs de dos niños, de 10 y 12 años y que, según los primeros indicios, recibieron varios golpes en la cabeza con piedras y palos, informaron hoy fuentes oficiales.
"Hemos ofrecido hasta 10 millones de pesos ($5 000) a quien nos dé la información que conduzca al esclarecimiento de los hechos", dijo hoy a Efe por teléfono el coronel Jesús Paredes, comandante de la PolicÃa del departamento de Chocó, en cuya capital, Quibdó, sucedieron los hechos.
"Son dos menores de 10 y 12 años que se dedicaban a recoger chatarra por Quibdó, trabajaban en una chatarrerÃa. Ingresaron a un colegio industrial, con su carretilla posiblemente, y luego entraron varios niños a jugar fútbol y encontraron a las dos vÃctimas en el suelo", expuso.
Las autoridades cuentan también con el retrato preliminar de dos hombres que al parecer se encontraban el pasado sábado en las inmediaciones del colegio donde fueron hallados los niños.
Uno de los menores falleció en el lugar de los hechos, donde se encontraron elementos contundentes como piedras y palos, y el otro falleció el martes en el hospital al que habÃa sido trasladado.
Paredes aseguró que aunque todavÃa no se conoce el dictámen de Medicina Legal se puede establecer que las vÃctimas fueron golpeadas en la cabeza en varias ocasiones hasta que acabaron presentando fracturas en el cráneo.
"FÃsicamente no se les vio ninguna herida ni sangre en las ropas, aunque como esta es la segunda zona más lluviosa del mundo habÃa mucha agua y se habÃan borrado algunas huellas", agregó.
El oficial lamentó lo sucedido e indicó que un grupo interdisciplinar está dedicado a la investigación de este hecho.
Al parecer, los niños pertenecÃan a una familia afrodescendiente de desplazados por la violencia derivada del conflicto armado en la zona del Bajo Atrato del mismo departamento y procedÃan de un estrato muy humilde, por lo que se veÃan obligados a trabajar recogiendo chatarra. EFE
BOGOTÃ. La PolicÃa de Colombia ofreció una recompensa de $5 000 a quien aporte información sobre los responsables de la muerte en el noroeste del paÃs de dos niños, de 10 y 12 años y que, según los primeros indicios, recibieron varios golpes en la cabeza con piedras y palos, informaron hoy fuentes oficiales.
"Hemos ofrecido hasta 10 millones de pesos ($5 000) a quien nos dé la información que conduzca al esclarecimiento de los hechos", dijo hoy a Efe por teléfono el coronel Jesús Paredes, comandante de la PolicÃa del departamento de Chocó, en cuya capital, Quibdó, sucedieron los hechos.
"Son dos menores de 10 y 12 años que se dedicaban a recoger chatarra por Quibdó, trabajaban en una chatarrerÃa. Ingresaron a un colegio industrial, con su carretilla posiblemente, y luego entraron varios niños a jugar fútbol y encontraron a las dos vÃctimas en el suelo", expuso.
Las autoridades cuentan también con el retrato preliminar de dos hombres que al parecer se encontraban el pasado sábado en las inmediaciones del colegio donde fueron hallados los niños.
Uno de los menores falleció en el lugar de los hechos, donde se encontraron elementos contundentes como piedras y palos, y el otro falleció el martes en el hospital al que habÃa sido trasladado.
Paredes aseguró que aunque todavÃa no se conoce el dictámen de Medicina Legal se puede establecer que las vÃctimas fueron golpeadas en la cabeza en varias ocasiones hasta que acabaron presentando fracturas en el cráneo.
"FÃsicamente no se les vio ninguna herida ni sangre en las ropas, aunque como esta es la segunda zona más lluviosa del mundo habÃa mucha agua y se habÃan borrado algunas huellas", agregó.
El oficial lamentó lo sucedido e indicó que un grupo interdisciplinar está dedicado a la investigación de este hecho.
Al parecer, los niños pertenecÃan a una familia afrodescendiente de desplazados por la violencia derivada del conflicto armado en la zona del Bajo Atrato del mismo departamento y procedÃan de un estrato muy humilde, por lo que se veÃan obligados a trabajar recogiendo chatarra. EFE
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