Río de Janeiro. 20.02.94. El presidente brasileño, Itamar Franco,
se comportó de forma inadecuada durante el desfile de las
escuelas de samba del carnaval de Río de Janeiro, cuando fue
fotografiado con una modelo y actriz semidesnuda, según una
encuesta que publica hoy el diario "O Estado de Sao Paulo".
La encuesta, realizada telefónicamente por la firma
"Informestado", fue contestada por 220 ciudadanos de Sao Paulo,
de los que 110 eran hombres y 110 mujeres.
Sólo el 30 por ciento de los encuestados consideró adecuada la
actitud del gobernante con Lilian Ramos, que el domingo por la
noche entró en la cabina de Franco vestida con una camiseta corta
y sin ropa interior.
El 90 por ciento de los preguntados afirmó que la "aventura" de
Franco no es motivo para la apertura de un juicio político de
destitución similar al que precipitó la renuncia de su antecesor,
Fernando Collor (1990-1992), que fue acusado de corrupción.
No obstante, un 68 por ciento sostuvo que el escándalo
comprometió la imagen del presidente.
El 69 por ciento de los paulistas encuestados opinó que las
fotografías y reportajes publicados por los medios de
comunicación representan un descuido del presidente, mientras que
el 31 por ciento consideró que suponen una intromisión en su vida
privada.
Para el 30 por ciento de los entrevistados, el comportamiento de
Franco demuestra que es un ingenuo, mientras que un 25 por ciento
considera que no le importa la opinión pública y otro 21 por
ciento opina que el gobernante no podía rechazar una "embestida
femenina".
"O Estado de Sao Paulo" también publica una información que
apunta la posibilidad de que la entrada de la modelo en el
camarote ocupado por Franco habría sido "planeada".
El gobernante asistió al desfile de las escuelas de samba del
carnaval carioca celebrado entre la noche del domingo y la
madrugada del lunes desde el palco de la Liga Independiente de
las Escuelas de Samba (LIESA), controlada por jefes del juego
ilegal detenidos y condenados a seis años de prisión por delitos
económicos.
El periódico dice que la intervención de Lilian Ramos habría sido
decidida dos días antes del desfile, durante una cena a la que
asistieron el presidente de la LIESA, Paulo de Almeida, la modelo
y otras diez personas.
La reunión tuvo lugar en "Satyricon", un centro nocturno del sur
de Río de Janeiro, y su anfitrión fue De Almeida, que además es
diputado por el Partido Social Demócrata.
Empleados del establecimiento declararon al diario que el nombre
del presidente fue mencionado varias veces por los contertulios.
Lilian Ramos ha asegurado que no actuó de forma premeditada y que
fue invitada al reservado por De Almeida, quien le dijo: "vamos,
él es buena gente y gusta de mujer grande como usted".
"Pido disculpas al presidente Itamar, a quien yo jamás pensaría
en perjudicar; pido disculpas a la nación brasileña, al pueblo
que yo amo y que siempre me enalteció, y a la Iglesia", dijo la
modelo en declaraciones que publica hoy el diario "O Globo", de
Río de Janeiro.
Franco, añadió, "es un dulce, un caballero, una persona
interesante" y "no puedo negar que pienso en un romance" con él.
La modelo, que negó ser una prostituta y a quien se impidió
participar en el desfile de las escuelas de samba campeonas que
cerró hoy el carnaval carioca, aseguró que "estoy viviendo un
cuento de hadas".
La "aventura" carnavalesca de Franco centra también el editorial
de hoy del diario "O Estado de Sao Paulo", que lamenta que Brasil
haya dado otra oportunidad para que el mundo se ría a carcajadas
del país. (EFE) (8A)