El Ministerio ecuatoriano de Relaciones Exteriores
calificó hoy de "inoportuno" el abandono de Colombia, el pasado viernes, de la audiencia en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por la muerte del ecuatoriano Franklin Aisalla ocurrida en 2008.
"El abandono de la audiencia convocada por la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos para tratar el caso Aisalla, por parte del Jefe de la Delegación colombiana, es un acto inoportuno", señala la CancillerÃa en un comunicado hecho público hoy.
Añade que la exposición del Procurador, Diego GarcÃa, y los abogados, asà como la documentación presentada en Washington, "puso en evidencia la argumentación jurÃdica internacional que sustenta el caso ecuatoriano, de conformidad con las disposiciones de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos".
Al presentar esta demanda, Ecuador ha buscado que las relaciones entre estados
"se puedan construir en torno a la verdad, la justicia y el respeto irrestricto de los Derechos Humanos", anota.
Insiste en que la CancillerÃa "considera como inoportuno el retiro de Colombia de la sala, luego de que el embajador de ese paÃs realizara su exposición".
"Lo deseable y lógico hubiera sido que la delegación colombiana respondiera -durante toda la Audiencia- las preguntas que formularon los comisionados como demostración de su voluntad por esclarecer este complejo asunto", subraya.
Finalmente, la CancillerÃa observa que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos tiene "un gran reto" con este caso "porque puede marcar un precedente hacia el futuro para una relación armónica entre los estados".
Los representantes colombianos, tras ofrecer su discurso, abandonaron el pasado viernes una audiencia pública que se realizaba en el tribunal internacional por el caso de Aisalla, un ecuatoriano muerto en un bombardeo colombiano en territorio de Ecuador contra un campamento clandestino de las
FARC.
En esa operación, realizada el 1 de marzo de 2008, además de Aisalla murieron al menos 25 personas más, entre ellas el entonces número dos de la guerrilla de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), alias "Raúl Reyes" y cuatro universitarios mexicanos.
El ataque fue considerado por Quito como una violación a su soberanÃa territorial y dos dÃas después del incidente rompió relaciones diplomáticas con Bogotá, aunque ambas partes, desde septiembre del año pasado, acometen un proceso de diálogo directo para intentar recomponer plenamente su lazo bilateral.
Ecuador presentó a la CIDH, en junio de 2009, una comunicación interestatal en contra del Estado colombiano, para "que se reconozca la violación de los derechos humanos en la ejecución" de Aisalla, y tras la audiencia del viernes las autoridades decidirán si se admite esa demanda. (EFE)