El ministro de Seguridad de Ecuador, Miguel Carvajal, dijo hoy que las Fuerzas Armadas ecuatorianas desmantelaron en 2008 cerca de 170 instalaciones guerrilleras en la frontera con Colombia, y puso en duda que el país vecino tenga la voluntad de hacer lo mismo al otro lado de la línea.
En una entrevista con un canal de televisión nacional, Carvajal explicó que en 2007 se destruyeron 47 campamentos y "en 2008 se han destruido cerca de 170 instalaciones guerrilleras, lo que quiere decir que más allá de los dichos y las palabras hay hechos que demuestran claramente la voluntad política de este Gobierno".
Según el ministro de Seguridad Interna y Externa, esa realidad contrasta con la actitud del Gobierno colombiano, porque "la mayoría de las unidades de su Ejército no están en la línea de frontera".
Al referirse al anuncio que el pasado enero hizo el presidente colombiano, Álvaro Uribe, de aumentar la presencia militar en la frontera, Carvajal opinó que en el día a día "no cambió la situación".
"Los 27 mil soldados ya existen, pero no en la línea de frontera, donde únicamente existen 3 000", dijo.
"Aquí hay una imprecisión, no se habló de poner 27 mil nuevos efectivos, se habló de poner una nueva brigada en la línea de frontera. ¿Y por qué no hay operaciones colombianas en la frontera? Porque sus operaciones son entrar dos días, golpear y regresar, porque hay una fuerte presencia de irregulares colombianos", señaló.
Para Carvajal en la zona fronteriza, en territorio de Colombia, existe una "ausencia de control" del Estado, lo que afecta a Ecuador a pesar de los "dispositivos de seguridad" establecidos.
El ministro dijo que las Fuerzas Armadas de su país se tienen que enfrentar en las provincias fronterizas de Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos no sólo con zonas de control de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sino también con integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN), también colombiano.
Asimismo, indicó que también hacen frente a los grupos de antiguos paramilitares.
"Sumémosle a esto un dato aún más importante, y es que en la zona del Tumaco colombiano hay más de 14 mil hectáreas de sembríos de cultivos de coca, y en el Putumayo otras 15 mil hectáreas", explicó el ministro.
"Con esto, además de la presencia de grupos irregulares, tenemos (que hacer frente) a una economía regional basada en la coca, en una zona afectada por la guerra interna de Colombia", apostilló.
Ecuador y Colombia tienen una frontera común de unos 640 kilómetros, en su mayor parte territorio selvático, cuya inaccesibilidad facilita las actividades ilícitas de grupos irregulares y dificulta un control efectivo de la zona. (EFE)
En una entrevista con un canal de televisión nacional, Carvajal explicó que en 2007 se destruyeron 47 campamentos y "en 2008 se han destruido cerca de 170 instalaciones guerrilleras, lo que quiere decir que más allá de los dichos y las palabras hay hechos que demuestran claramente la voluntad política de este Gobierno".
Según el ministro de Seguridad Interna y Externa, esa realidad contrasta con la actitud del Gobierno colombiano, porque "la mayoría de las unidades de su Ejército no están en la línea de frontera".
Al referirse al anuncio que el pasado enero hizo el presidente colombiano, Álvaro Uribe, de aumentar la presencia militar en la frontera, Carvajal opinó que en el día a día "no cambió la situación".
"Los 27 mil soldados ya existen, pero no en la línea de frontera, donde únicamente existen 3 000", dijo.
"Aquí hay una imprecisión, no se habló de poner 27 mil nuevos efectivos, se habló de poner una nueva brigada en la línea de frontera. ¿Y por qué no hay operaciones colombianas en la frontera? Porque sus operaciones son entrar dos días, golpear y regresar, porque hay una fuerte presencia de irregulares colombianos", señaló.
Para Carvajal en la zona fronteriza, en territorio de Colombia, existe una "ausencia de control" del Estado, lo que afecta a Ecuador a pesar de los "dispositivos de seguridad" establecidos.
El ministro dijo que las Fuerzas Armadas de su país se tienen que enfrentar en las provincias fronterizas de Esmeraldas, Carchi y Sucumbíos no sólo con zonas de control de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sino también con integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN), también colombiano.
Asimismo, indicó que también hacen frente a los grupos de antiguos paramilitares.
"Sumémosle a esto un dato aún más importante, y es que en la zona del Tumaco colombiano hay más de 14 mil hectáreas de sembríos de cultivos de coca, y en el Putumayo otras 15 mil hectáreas", explicó el ministro.
"Con esto, además de la presencia de grupos irregulares, tenemos (que hacer frente) a una economía regional basada en la coca, en una zona afectada por la guerra interna de Colombia", apostilló.
Ecuador y Colombia tienen una frontera común de unos 640 kilómetros, en su mayor parte territorio selvático, cuya inaccesibilidad facilita las actividades ilícitas de grupos irregulares y dificulta un control efectivo de la zona. (EFE)
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