El presidente chileno, Sebastián Piñera, calculó en $30 000 millones los daños por el terremoto y tsunami
SANTIAGO . El flamante presidente chileno, Sebastián Piñera, dio inicio formal a su Gobierno con un discurso centrado en la reconstrucción tras el sismo y el tsunami del 27 de febrero, que costará unos $30 mil millones según las expectativas económicas del Banco Central de Chile.
Las 14 réplicas que sacudieron al país en la tarde del jueves y tres más en la mañana de ayer han dejado a los chilenos de la zona central, incluyendo a los santiaguinos, en un estado de tensión permanente.
En las primeras horas de su presidencia, Piñera hizo un paseo a bordo de un descapotable para participar en un Te Deum en la Plaza de Armas de Santiago, que no se realizó en la Catedral sino al aire libre en solidaridad con los damnificados de los sismos que quedaron sin techo, según dijo el sacerdote Fernando Santelices al inicio de la ceremonia.
Poco antes, Piñera señaló a la prensa que tomó una decisión respecto a dos temas críticos: el derrumbe de locales escolares y la falta de atención para miles de enfermos en Maule y Biobío, las dos regiones más devastadas por el sismo y tsunami de hace casi dos semanas.
Piñera dijo que encomendó a los ministros respectivos que antes de 45 días todos los niños de las zonas afectadas estén de vuelta a clases, y que en 30 días todos los enfermos desplazados como producto de la catástrofe, deben ser atendidos según sus requerimientos.
La prisa que el nuevo mandatario intenta imprimirle a la labor de reconstrucción la simbolizó durante la primera reunión de Gabinete la madrugada de ayer.
"Durante nuestra primera reunión de Gabinete, entregué simbólicamente a cada ministro un casco y un cronómetro. El casco, porque hay que reconstruir, y el cronómetro porque hay que hacerlo muy rápido", dijo Piñera.
En horas muy tempranas de ayer, Piñera confesó que jamás pensó que iba a dejar plantados a todos los presidentes de América Latina, en referencia a la agitada ceremonia del cambio de mando que vivió a causa de los temblores.
Explicó que "había invitado a la mesa" a los presidentes de la Argentina, Bolivia, Colombia, el Ecuador, Perú, Paraguay y Uruguay, y al príncipe de Asturias, pero no pudo acompañarlos.
"Les quiero pedir una disculpa a los presidentes de tantos países amigos, porque ayer no pude almorzar con ellos. Les expliqué que el deber de un presidente es estar cerca de donde están los problemas, cerca de donde está la gente sufriendo", señaló.
Ausencia de Chávez. Pese a la presencia del canciller venezolano, Nicolás Maduro, en representación del Gobierno de Venezuela e incluso la asistencia de Antonio Ledezma, alcalde opositor del actual Régimen, se notó la ausencia del presidente Hugo Chávez en el acto de investidura de Piñera.
Según Alejandro Villalobos, periodista del diario venezolano El Carabobeño. "no existe una razón oficial para explicar la ausencia del mandatario; sin embargo, los rumores señalan que a partir que el nuevo presidente de Chile fue electo, la diplomacia de micrófono que se usa por estas tierras mostró un enfrentamiento entre ambos un día después de la elección de Piñera. Además, no se puede olvidar que uno es de izquierda y otro de derecha, lo cual muestra diferencias políticas".
Asimismo, un peridista chileno del diario La Cuarta, explicó que las diferencias ideológicas entre los mandatarios es la razón de la ausencia de Chávez, aunque aclaró que este sí fue invitado a la ceremonia. (AFP-ACT-VET)
¿Más sismos?
El sismólogo Sergio Barrientos, director científico del Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, consideró ayer que es muy poco probable que se produzca un nuevo terremoto de gran magnitud en el centro y sur del país, aunque el resto del territorio está expuesto a fuertes sismos.
"Pueden ocurrir terremotos en cualquier parte del país exceptuando las zonas donde ocurrieron estos últimos terremotos, el de 1960 y el del 2010", dijo el sismólogo a una radio local.
Y explicó que en el sur del país se ha liberado ya tanta energía en el último tiempo que es muy poco probable que se genere otro fuerte sismo. (EFE)
Cecilia Morel es la flamante primera dama de Chile y ahora debe cumplir con sus promesas sociales de Campaña. Desde que su esposo, Sebastián Piñera, empezó a hacer campaña, ella lo acompañó todos los días y le dio un matiz cálido a la misma, siempre dispuesta a escuchar a los más necesitados.
A sus 56 años es una mujer muy querida por todos los chilenos y también la mujer más influyente en el nuevo presidente, sobretodo a la hora que este diseñe sus políticas en beneficio de las mujeres, los jubilados y los niños, dice la prensa chilena.
Según la web Perfiles.com, lleva 36 años casada con Piñera, quien le pidió matrimonio el 11 de septiembre de 1973, el día que Salvador Allende fue derrocado. (VET)
SANTIAGO . El flamante presidente chileno, Sebastián Piñera, dio inicio formal a su Gobierno con un discurso centrado en la reconstrucción tras el sismo y el tsunami del 27 de febrero, que costará unos $30 mil millones según las expectativas económicas del Banco Central de Chile.Las 14 réplicas que sacudieron al país en la tarde del jueves y tres más en la mañana de ayer han dejado a los chilenos de la zona central, incluyendo a los santiaguinos, en un estado de tensión permanente.
En las primeras horas de su presidencia, Piñera hizo un paseo a bordo de un descapotable para participar en un Te Deum en la Plaza de Armas de Santiago, que no se realizó en la Catedral sino al aire libre en solidaridad con los damnificados de los sismos que quedaron sin techo, según dijo el sacerdote Fernando Santelices al inicio de la ceremonia.
Poco antes, Piñera señaló a la prensa que tomó una decisión respecto a dos temas críticos: el derrumbe de locales escolares y la falta de atención para miles de enfermos en Maule y Biobío, las dos regiones más devastadas por el sismo y tsunami de hace casi dos semanas.
Piñera dijo que encomendó a los ministros respectivos que antes de 45 días todos los niños de las zonas afectadas estén de vuelta a clases, y que en 30 días todos los enfermos desplazados como producto de la catástrofe, deben ser atendidos según sus requerimientos.
La prisa que el nuevo mandatario intenta imprimirle a la labor de reconstrucción la simbolizó durante la primera reunión de Gabinete la madrugada de ayer.
"Durante nuestra primera reunión de Gabinete, entregué simbólicamente a cada ministro un casco y un cronómetro. El casco, porque hay que reconstruir, y el cronómetro porque hay que hacerlo muy rápido", dijo Piñera.
En horas muy tempranas de ayer, Piñera confesó que jamás pensó que iba a dejar plantados a todos los presidentes de América Latina, en referencia a la agitada ceremonia del cambio de mando que vivió a causa de los temblores.
Explicó que "había invitado a la mesa" a los presidentes de la Argentina, Bolivia, Colombia, el Ecuador, Perú, Paraguay y Uruguay, y al príncipe de Asturias, pero no pudo acompañarlos.
"Les quiero pedir una disculpa a los presidentes de tantos países amigos, porque ayer no pude almorzar con ellos. Les expliqué que el deber de un presidente es estar cerca de donde están los problemas, cerca de donde está la gente sufriendo", señaló.
Ausencia de Chávez. Pese a la presencia del canciller venezolano, Nicolás Maduro, en representación del Gobierno de Venezuela e incluso la asistencia de Antonio Ledezma, alcalde opositor del actual Régimen, se notó la ausencia del presidente Hugo Chávez en el acto de investidura de Piñera.
Según Alejandro Villalobos, periodista del diario venezolano El Carabobeño. "no existe una razón oficial para explicar la ausencia del mandatario; sin embargo, los rumores señalan que a partir que el nuevo presidente de Chile fue electo, la diplomacia de micrófono que se usa por estas tierras mostró un enfrentamiento entre ambos un día después de la elección de Piñera. Además, no se puede olvidar que uno es de izquierda y otro de derecha, lo cual muestra diferencias políticas".
Asimismo, un peridista chileno del diario La Cuarta, explicó que las diferencias ideológicas entre los mandatarios es la razón de la ausencia de Chávez, aunque aclaró que este sí fue invitado a la ceremonia. (AFP-ACT-VET)
¿Más sismos?
El sismólogo Sergio Barrientos, director científico del Servicio Sismológico de la Universidad de Chile, consideró ayer que es muy poco probable que se produzca un nuevo terremoto de gran magnitud en el centro y sur del país, aunque el resto del territorio está expuesto a fuertes sismos.
"Pueden ocurrir terremotos en cualquier parte del país exceptuando las zonas donde ocurrieron estos últimos terremotos, el de 1960 y el del 2010", dijo el sismólogo a una radio local.
Y explicó que en el sur del país se ha liberado ya tanta energía en el último tiempo que es muy poco probable que se genere otro fuerte sismo. (EFE)
La mujer más influyente de Piñera
Cecilia Morel es la flamante primera dama de Chile y ahora debe cumplir con sus promesas sociales de Campaña. Desde que su esposo, Sebastián Piñera, empezó a hacer campaña, ella lo acompañó todos los días y le dio un matiz cálido a la misma, siempre dispuesta a escuchar a los más necesitados.A sus 56 años es una mujer muy querida por todos los chilenos y también la mujer más influyente en el nuevo presidente, sobretodo a la hora que este diseñe sus políticas en beneficio de las mujeres, los jubilados y los niños, dice la prensa chilena.
Según la web Perfiles.com, lleva 36 años casada con Piñera, quien le pidió matrimonio el 11 de septiembre de 1973, el día que Salvador Allende fue derrocado. (VET)
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