Analistas advierten riesgos en relaciones bilaterales y lamentan que presidentes de Ecuador y Venezuela privilegien su línea ideológica sobre el bienestar de sus pueblos
Que el Ecuador y Venezuela, como países aliados, están aplicando una estrategia conjunta frente a Colombia, como parte de su política internacional, que además es coherente con la postura ideológica de los presidentes Rafael Correa y Hugo Chávez, sostiene el politólogo internacional, Jaime Durán Barba.
"Consecuencia directa de esa posición es la demora en el restablecimiento de la relación con Colombia, lo cual es negativo porque el Ecuador debe mantener buenas relaciones con todos los países", dice Barba, aunque descarta que se trate de una sumisión de Correa ante Chávez, pues recuerda que el presidente ecuatoriano ha sido afín a esa ideología desde antes de llegar al poder.
Tal situación, dice el experto, explica el reciente reclamo del canciller Ricardo Patiño a Colombia por no remitir toda la información sobre cómo el Ejército de Colombia, al mando de Juan Manuel Santos, ex ministro de Defensa, hoy candidato a la presidencia del vecino país, bombardeó un campamento que las FARC habían instalado en el sector de Angostura, en suelo ecuatoriano. Patiño también insistió en la entrega de los discos duros de las computadoras de alias Raúl Reyes, ex número dos de ese grupo armado, que murió en esa incursión militar, por la cual Quito rompió relaciones con Bogotá, el 3 de marzo de 2008. Esas declaraciones las dio Patiño luego de que Nicolás Maduro, canciller de Venezuela, lo visitó en su despacho, para afinar los detalles de la nueva visita que Chávez realizará a Correa, pasado mañana. El analista Santiago Basabe lamenta que Correa y Chávez privilegien las tesis de la extrema izquierda por encima del bienestar de la población.
Mauricio Gándara, ex embajador en Londres, recordó que, mientras el presidente de República Dominicana, Leonel Fernández, líder de una comisión mediadora entre Colombia y Venezuela, dialogaba con el Gobierno de Uribe, Venezuela desautorizó esa mediación.
Acto seguido, el Congreso venezolano, dependiente de Chávez, dispuso que cualquier acercamiento se producirá con el sucesor de Uribe. "Espero que el distanciamiento que el señor Patiño ha marcado con Colombia, sea solo una coincidencia y no una posición conjunta, ya que los presidentes Correa y Uribe, acordaron una cita para superar los temas sensibles y aceptaron la mediación de la OEA y del Centro Carter.
Mientras más distancia guarde el Ecuador del ALBA, tanto mejor, ya que Chávez mantiene a Venezuela aislada", enfatizó el analista.
El asesor de Política Bilateral de la Cancillería, Kintto Lucas, descartó relación entre las declaraciones de Patiño y las visitas de Maduro y de Chávez "Una cosa es la relación fluida con Venezuela y otra la relación con Colombia, que está en proceso de mejoramiento, pero hay exigencias del Ecuador que lamentablemente Bogotá no ha cumplido", dijo Lucas. (MEVO-SC)
Que el Ecuador y Venezuela, como países aliados, están aplicando una estrategia conjunta frente a Colombia, como parte de su política internacional, que además es coherente con la postura ideológica de los presidentes Rafael Correa y Hugo Chávez, sostiene el politólogo internacional, Jaime Durán Barba.
"Consecuencia directa de esa posición es la demora en el restablecimiento de la relación con Colombia, lo cual es negativo porque el Ecuador debe mantener buenas relaciones con todos los países", dice Barba, aunque descarta que se trate de una sumisión de Correa ante Chávez, pues recuerda que el presidente ecuatoriano ha sido afín a esa ideología desde antes de llegar al poder.
Tal situación, dice el experto, explica el reciente reclamo del canciller Ricardo Patiño a Colombia por no remitir toda la información sobre cómo el Ejército de Colombia, al mando de Juan Manuel Santos, ex ministro de Defensa, hoy candidato a la presidencia del vecino país, bombardeó un campamento que las FARC habían instalado en el sector de Angostura, en suelo ecuatoriano. Patiño también insistió en la entrega de los discos duros de las computadoras de alias Raúl Reyes, ex número dos de ese grupo armado, que murió en esa incursión militar, por la cual Quito rompió relaciones con Bogotá, el 3 de marzo de 2008. Esas declaraciones las dio Patiño luego de que Nicolás Maduro, canciller de Venezuela, lo visitó en su despacho, para afinar los detalles de la nueva visita que Chávez realizará a Correa, pasado mañana. El analista Santiago Basabe lamenta que Correa y Chávez privilegien las tesis de la extrema izquierda por encima del bienestar de la población.
Mauricio Gándara, ex embajador en Londres, recordó que, mientras el presidente de República Dominicana, Leonel Fernández, líder de una comisión mediadora entre Colombia y Venezuela, dialogaba con el Gobierno de Uribe, Venezuela desautorizó esa mediación.
Acto seguido, el Congreso venezolano, dependiente de Chávez, dispuso que cualquier acercamiento se producirá con el sucesor de Uribe. "Espero que el distanciamiento que el señor Patiño ha marcado con Colombia, sea solo una coincidencia y no una posición conjunta, ya que los presidentes Correa y Uribe, acordaron una cita para superar los temas sensibles y aceptaron la mediación de la OEA y del Centro Carter.
Mientras más distancia guarde el Ecuador del ALBA, tanto mejor, ya que Chávez mantiene a Venezuela aislada", enfatizó el analista.
El asesor de Política Bilateral de la Cancillería, Kintto Lucas, descartó relación entre las declaraciones de Patiño y las visitas de Maduro y de Chávez "Una cosa es la relación fluida con Venezuela y otra la relación con Colombia, que está en proceso de mejoramiento, pero hay exigencias del Ecuador que lamentablemente Bogotá no ha cumplido", dijo Lucas. (MEVO-SC)
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