Quito. 18.11.94. Aferrada a la boina roja que distinguía a Miguel
Iturralde como el primer paracaidista ecuatoriano, Blanca
Jaramillo, madre del malogrado oficial fallecido este miércoles
en un fatídico accidente aéreo, clamaba al cielo con gritos
desconsolados y los puños cerrados.
"Que me devuelvan a mi hijo", exclamaba con voz desesperada al
tiempo que perdía lentamente la vitalidad en su cuerpo.
"Ya no me quedan lágrimas para derramar por mi hijo", señalaba
sacando fuerzas de flaqueza, mientras sus familiares en abrazo
común le pedían calma; una doctora, visiblemente consternada,
seguía discretamente los acontecimientos e intentaba ayudar a los
deudos.
En el Casino de Oficiales de la Escuela Superior Militar "Eloy
Alfaro", en Parcayacu, se levantó una imponente capilla ardiente
para rendir homenaje al extinto comandante general del Ejército,
general de División, Miguel Gustavo Iturralde Jaramillo y siete
militares y civiles fallecidos en el accidente de aviación. Las
dos víctimas restantes recibieron cristiana sepultura en la
ciudad de Puyo, provincia de Pastaza.
Pérdida irreparable
A su llegada al sitio de la velación el Ministro de Defensa, Jose
Gallardo Román, relievó la trayectoria y personalidad del
fallecido comandante general del Ejército, Miguel Iturralde, un
latacungueño amante de su tierra a la que prometió servir hasta
el último día de su existencia.
"Es una pérdida irreparable para las Fuerzas Armadas y más aún
para el país", señaló al destacar los méritos y virtudes del
general Miguel Iturralde, de quien dijo "como muy pocas personas
tienen las virtudes que el tuvo, un hombre absolutamente honesto,
un hombre de una inmensa sencillez y de un gran compañerismo y
lealtad".
Puntualizó que en todas las actividades que el general Iturralde
desempeñó en su vida dejó una huella imperecedera de admiración y
de cariño. "Las Fuerzas Armadas han sufrido una inmensa pérdida.
Y, yo creo que nuestro país".
Mientras tanto, el alcalde de Latacunga, Rubén Terán Vásconez,
quien llegó a la Escuela Militar Eloy Alfaro, portando el emblema
amarillo y celeste, de su ciudad natal para cobijar el féretro,
dijo que "Miguel fue su hijo predilecto".
Narró que el miércoles a las 11 horas, recibió una comunicación
del general Miguel Iturralde, quien entre otras cosas le señalaba
su voluntad de servir a Latacunga "hasta el fin de mi propia
existencia".
"Ese creo que es el testamento más grande que la ciudad de
Latacunga tiene de ese gran hombre, caballero y militar de la
República", puntualizó el alcalde Rubén Terán Vásconez.
TRISTEZA EN LA BASE AEREA DEL EJERCITO
Escenas desgarradoras se vivieron ayer en la pista de la Aviación
del Ejército, en Quito, hasta donde llegaron los cuerpos de los
militares y civiles, accidentados la tarde del miércoles, en la
zona de Ishpingo Viejo, en la provincia de Pastaza.
Madres, esposas, hijos y demás familiares de los militares
fallecidos lanzaban gritos imposibles de consolar. Inútilmente
algunos intentaban buscar alguna explicación justa a este
luctuoso hecho que deja varios hogares desamparados y niños en la
horfandad.
Este jueves un avión del Ejército transportó los féretros de los
seis militares y dos civiles, que de inmediato fueron trasladados
a la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro, en donde se levantó
una capilla ardiente para dar el último adiós a los militares
fallecidos.
Una caravana de vehículos de campaña se organizó para trasladar
los féretros hacia la capilla ardiente. A su paso, recibieron la
solidaridad de la población que con profundo pesar se fue sumando
al homenaje póstumo.
UNA NOCHE DE TENSION Y ESPERA
Una larga y angustiosa espera tuvieron los familiares de los
accidentados en el accidente. Apostados desde las 21h00, los
familiares esperaron el avión en el que se transportaron a los
oficiales y soldados que se accidentaron en el Super Puma.
Recién cerca de la medianoche llegaron los cuerpos del comandante
general fallecido y de los heridos, éstos últimos que fueron
trasladados inmediatamente al Hospital Militar. Estuvieron a la
espera del avión el vicepresidente Alberto Dahik, el ministro de
Gobierno, de Defensa, el jefe del comando conjunto y una serie de
altos oficiales militares y policiales así como los atribulados
familiares.
- Los familiares de los fallecidos y heridos empezaron a llegar
pasadas las 21h00 a la terminal aérea del Ejército lo que hizo
pensar que se enteraron del accidente algunas horas después del
mismo.
- La primera en llegar fue una hija del general Miguel Iturralde
quien estuvo un largo tiempo sola en el terminal. También llegó
más tarde un hermano quien estuvo visiblemente afectado, al igual
que todos.
- El presidente de la Democracia Popular, Absalón Rocha, fue uno
de los primeros en estar presentes. Rocha ha sido amigo muy
cercano a Iturralde por ser paisanos. Luego llegaron los otros
hermanos Rocha, Angel y Francisco, ambos muy amigos también de
Iturralde.
- Algunos familiares que se acercaban al terminal no sabían si
sus allegados habían fallecido o muerto. Muchos se quebraban en
llanto cuando se les informaba que su familiar había muerto y
otros no podían ocultar su alivio cuando sabían que los suyos
solo estaban heridos.
- El presidente encargado, Alberto Dahik, llegó a las 11h30
seguido por un impresionante séquito de automóviles de seguridad
que para la único que sirvieron fue para impedir la rápida salida
de las ambulancias.
- El eficaz operativo de la Policía para liberar las calles con
el fin de que circulen de la mejor manera las ambulancias fue
afectado por las interminables filas de automóviles de la
seguridad de Dahik y de los otros ministros que fueron al lugar.
- Las ambulancias salían a toda velocidad pero se encontraban con
esos vehículos y tenían que dar retro y hacer una serie de
maniobras para esquivar a los oscuros vehículos de los
guardaespaldas.
- El ministro de Gobierno, Marcelo Santos aseguró que el
presidente Sixto Durán Ballén fue informado del suceso apenas se
supo del mismo.
- Una de las personas más visiblemente afectada era el ex jefe de
Estado, Guillermo Rodríguez Lara quien llegó casi imperceptible
junto a su esposa.
- Rodríguez Lara dijo que había sido durante toda su vida muy
cercano a Iturralde quien fue incluso jefe de la guardia
presidencial durante su mandato.
- Un piloto militar tuvo un serio altercado con los periodistas
puesto que de manera soez pretendió desalojar a los comunicadores
del lugar. Un fotógrafo fue prácticamente agredido por este
militar quien tuvo por poco que salir corriendo cuando vio que
todos los periodistas lo cercaron con cámaras y airados reclamos.
- La viuda de Iturralde llegó en el carro de la Comandancia
pocos minutos después de Dahik.
EN PARCAYACU
- Durante las primeras horas de ayer concurrieron a las
instalaciones de la Aviación del Ejército al norte de Quito,
familiares, amigos, parientes y compañeros de los muertos en el
accidente aviatorio del pasado miércoles en Ishpingo viejo.
- Nerviosismo, llanto, gritos estridentes, fue el denominador
común que se vivió en la pista de la Aviación del Ejército
minutos antes de que el avión que transportaba los cadáveres
aterrizara.
- Un grueso cordón militar formaron los uniformados para evitar
desmanes. No obstante, varios niños burlaron las seguridades y
con gritos trataban de abrazar un féretro en el que se decía
estaba su padre.
- Más de una persona resultó desmayada. Médicos y enfermeros
atendieron a estas personas que no hallaban explicación a lo que
estaba ocurriendo.
- Uno a uno fueron identificados los féretros; compañeros de
promoción, familiares y amigos cargaron en su hombros los ataúdes
para luego depositarlos en un carro de campaña, que los trasladó
hasta el lugar de la capilla ardiente.
- El avión despegó del aeropuerto Río Amazonas de Shell cerca de
las 11h00. En dicho lugar se instaló una capilla ardiente a la
que asistieron compañeros de arma, autoridades civiles,
familiares y ciudadanía. Los cuerpos del teniente coronel Flavio
Bastidas, oriundo de Puyo, y del sargento Aníbal Guanga, son
velados en Puyo y en Shell, respectivamente. Sus excequias se
cumplirán este viernes.
- Hasta la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro llegaron varios
ministros de Estado, diputados, conocidos políticos, militares en
servicio pasivo y amigos de los fallecidos para sumarse al dolor
que embargó a los familiares de los desaparecidos.
- Todos coincidieron en destacar la personalidad del general
Miguel Iturralde. En general los compañeros de los fallecidos
comentaban en tono triste las últimas acciones desarrolladas por
éstos.
- Un amigo del sargento Marco Gaibor lloraba como un niño al
comentar las virtudes de su compañero. "Era un hombre bueno, un
verdadero compañero en la institución", dijo.
- Los camarógrafos de Teleamazonas, ex compañeros de Kléber
Recalde, también se mostraron consternados por la muerte de quien
fue el creador del Club de Paracaidismo de la cadena de
televisión.
- "Fue él, quien incentivó a sus compañeros para sacar adelante
el nombre de la institución, comentó Luis Ibarra, ex
caricaturista de Teleamazonas y actual jefe de Relaciones
Públicas de la Comandancia del Ejército.
- Luis Ibarra comentó que Kléber Recalde era un amante de los
aviones y las alturas; siempre le gustó volar. (2A)
Iturralde como el primer paracaidista ecuatoriano, Blanca
Jaramillo, madre del malogrado oficial fallecido este miércoles
en un fatídico accidente aéreo, clamaba al cielo con gritos
desconsolados y los puños cerrados.
"Que me devuelvan a mi hijo", exclamaba con voz desesperada al
tiempo que perdía lentamente la vitalidad en su cuerpo.
"Ya no me quedan lágrimas para derramar por mi hijo", señalaba
sacando fuerzas de flaqueza, mientras sus familiares en abrazo
común le pedían calma; una doctora, visiblemente consternada,
seguía discretamente los acontecimientos e intentaba ayudar a los
deudos.
En el Casino de Oficiales de la Escuela Superior Militar "Eloy
Alfaro", en Parcayacu, se levantó una imponente capilla ardiente
para rendir homenaje al extinto comandante general del Ejército,
general de División, Miguel Gustavo Iturralde Jaramillo y siete
militares y civiles fallecidos en el accidente de aviación. Las
dos víctimas restantes recibieron cristiana sepultura en la
ciudad de Puyo, provincia de Pastaza.
Pérdida irreparable
A su llegada al sitio de la velación el Ministro de Defensa, Jose
Gallardo Román, relievó la trayectoria y personalidad del
fallecido comandante general del Ejército, Miguel Iturralde, un
latacungueño amante de su tierra a la que prometió servir hasta
el último día de su existencia.
"Es una pérdida irreparable para las Fuerzas Armadas y más aún
para el país", señaló al destacar los méritos y virtudes del
general Miguel Iturralde, de quien dijo "como muy pocas personas
tienen las virtudes que el tuvo, un hombre absolutamente honesto,
un hombre de una inmensa sencillez y de un gran compañerismo y
lealtad".
Puntualizó que en todas las actividades que el general Iturralde
desempeñó en su vida dejó una huella imperecedera de admiración y
de cariño. "Las Fuerzas Armadas han sufrido una inmensa pérdida.
Y, yo creo que nuestro país".
Mientras tanto, el alcalde de Latacunga, Rubén Terán Vásconez,
quien llegó a la Escuela Militar Eloy Alfaro, portando el emblema
amarillo y celeste, de su ciudad natal para cobijar el féretro,
dijo que "Miguel fue su hijo predilecto".
Narró que el miércoles a las 11 horas, recibió una comunicación
del general Miguel Iturralde, quien entre otras cosas le señalaba
su voluntad de servir a Latacunga "hasta el fin de mi propia
existencia".
"Ese creo que es el testamento más grande que la ciudad de
Latacunga tiene de ese gran hombre, caballero y militar de la
República", puntualizó el alcalde Rubén Terán Vásconez.
TRISTEZA EN LA BASE AEREA DEL EJERCITO
Escenas desgarradoras se vivieron ayer en la pista de la Aviación
del Ejército, en Quito, hasta donde llegaron los cuerpos de los
militares y civiles, accidentados la tarde del miércoles, en la
zona de Ishpingo Viejo, en la provincia de Pastaza.
Madres, esposas, hijos y demás familiares de los militares
fallecidos lanzaban gritos imposibles de consolar. Inútilmente
algunos intentaban buscar alguna explicación justa a este
luctuoso hecho que deja varios hogares desamparados y niños en la
horfandad.
Este jueves un avión del Ejército transportó los féretros de los
seis militares y dos civiles, que de inmediato fueron trasladados
a la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro, en donde se levantó
una capilla ardiente para dar el último adiós a los militares
fallecidos.
Una caravana de vehículos de campaña se organizó para trasladar
los féretros hacia la capilla ardiente. A su paso, recibieron la
solidaridad de la población que con profundo pesar se fue sumando
al homenaje póstumo.
UNA NOCHE DE TENSION Y ESPERA
Una larga y angustiosa espera tuvieron los familiares de los
accidentados en el accidente. Apostados desde las 21h00, los
familiares esperaron el avión en el que se transportaron a los
oficiales y soldados que se accidentaron en el Super Puma.
Recién cerca de la medianoche llegaron los cuerpos del comandante
general fallecido y de los heridos, éstos últimos que fueron
trasladados inmediatamente al Hospital Militar. Estuvieron a la
espera del avión el vicepresidente Alberto Dahik, el ministro de
Gobierno, de Defensa, el jefe del comando conjunto y una serie de
altos oficiales militares y policiales así como los atribulados
familiares.
- Los familiares de los fallecidos y heridos empezaron a llegar
pasadas las 21h00 a la terminal aérea del Ejército lo que hizo
pensar que se enteraron del accidente algunas horas después del
mismo.
- La primera en llegar fue una hija del general Miguel Iturralde
quien estuvo un largo tiempo sola en el terminal. También llegó
más tarde un hermano quien estuvo visiblemente afectado, al igual
que todos.
- El presidente de la Democracia Popular, Absalón Rocha, fue uno
de los primeros en estar presentes. Rocha ha sido amigo muy
cercano a Iturralde por ser paisanos. Luego llegaron los otros
hermanos Rocha, Angel y Francisco, ambos muy amigos también de
Iturralde.
- Algunos familiares que se acercaban al terminal no sabían si
sus allegados habían fallecido o muerto. Muchos se quebraban en
llanto cuando se les informaba que su familiar había muerto y
otros no podían ocultar su alivio cuando sabían que los suyos
solo estaban heridos.
- El presidente encargado, Alberto Dahik, llegó a las 11h30
seguido por un impresionante séquito de automóviles de seguridad
que para la único que sirvieron fue para impedir la rápida salida
de las ambulancias.
- El eficaz operativo de la Policía para liberar las calles con
el fin de que circulen de la mejor manera las ambulancias fue
afectado por las interminables filas de automóviles de la
seguridad de Dahik y de los otros ministros que fueron al lugar.
- Las ambulancias salían a toda velocidad pero se encontraban con
esos vehículos y tenían que dar retro y hacer una serie de
maniobras para esquivar a los oscuros vehículos de los
guardaespaldas.
- El ministro de Gobierno, Marcelo Santos aseguró que el
presidente Sixto Durán Ballén fue informado del suceso apenas se
supo del mismo.
- Una de las personas más visiblemente afectada era el ex jefe de
Estado, Guillermo Rodríguez Lara quien llegó casi imperceptible
junto a su esposa.
- Rodríguez Lara dijo que había sido durante toda su vida muy
cercano a Iturralde quien fue incluso jefe de la guardia
presidencial durante su mandato.
- Un piloto militar tuvo un serio altercado con los periodistas
puesto que de manera soez pretendió desalojar a los comunicadores
del lugar. Un fotógrafo fue prácticamente agredido por este
militar quien tuvo por poco que salir corriendo cuando vio que
todos los periodistas lo cercaron con cámaras y airados reclamos.
- La viuda de Iturralde llegó en el carro de la Comandancia
pocos minutos después de Dahik.
EN PARCAYACU
- Durante las primeras horas de ayer concurrieron a las
instalaciones de la Aviación del Ejército al norte de Quito,
familiares, amigos, parientes y compañeros de los muertos en el
accidente aviatorio del pasado miércoles en Ishpingo viejo.
- Nerviosismo, llanto, gritos estridentes, fue el denominador
común que se vivió en la pista de la Aviación del Ejército
minutos antes de que el avión que transportaba los cadáveres
aterrizara.
- Un grueso cordón militar formaron los uniformados para evitar
desmanes. No obstante, varios niños burlaron las seguridades y
con gritos trataban de abrazar un féretro en el que se decía
estaba su padre.
- Más de una persona resultó desmayada. Médicos y enfermeros
atendieron a estas personas que no hallaban explicación a lo que
estaba ocurriendo.
- Uno a uno fueron identificados los féretros; compañeros de
promoción, familiares y amigos cargaron en su hombros los ataúdes
para luego depositarlos en un carro de campaña, que los trasladó
hasta el lugar de la capilla ardiente.
- El avión despegó del aeropuerto Río Amazonas de Shell cerca de
las 11h00. En dicho lugar se instaló una capilla ardiente a la
que asistieron compañeros de arma, autoridades civiles,
familiares y ciudadanía. Los cuerpos del teniente coronel Flavio
Bastidas, oriundo de Puyo, y del sargento Aníbal Guanga, son
velados en Puyo y en Shell, respectivamente. Sus excequias se
cumplirán este viernes.
- Hasta la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro llegaron varios
ministros de Estado, diputados, conocidos políticos, militares en
servicio pasivo y amigos de los fallecidos para sumarse al dolor
que embargó a los familiares de los desaparecidos.
- Todos coincidieron en destacar la personalidad del general
Miguel Iturralde. En general los compañeros de los fallecidos
comentaban en tono triste las últimas acciones desarrolladas por
éstos.
- Un amigo del sargento Marco Gaibor lloraba como un niño al
comentar las virtudes de su compañero. "Era un hombre bueno, un
verdadero compañero en la institución", dijo.
- Los camarógrafos de Teleamazonas, ex compañeros de Kléber
Recalde, también se mostraron consternados por la muerte de quien
fue el creador del Club de Paracaidismo de la cadena de
televisión.
- "Fue él, quien incentivó a sus compañeros para sacar adelante
el nombre de la institución, comentó Luis Ibarra, ex
caricaturista de Teleamazonas y actual jefe de Relaciones
Públicas de la Comandancia del Ejército.
- Luis Ibarra comentó que Kléber Recalde era un amante de los
aviones y las alturas; siempre le gustó volar. (2A)
Más en el