Lima. 04.11.94. Los antiguos peruanos creían que los eclipses
podían causar el fin del mundo, ahora la preocupación de los
habitantes en Perú ante el fenómeno astronómico de mañana jueves
se centra en el daño ocular que puede causar su observación sin
filtros adecuados.
Estos fenómenos celestes provocaban un enorme temor entre los
pobladores de la antiguedad en este país andino, inculcados por
una mitología que contaba de experiencias cataclísmicas por el
eclipsamiento del sol.
Temían que los eclipses, que ocultaban su luz y daban paso a la
oscuridad, provocaran la desaparición permanente del "astro rey"
y llegara con ello el fin del mundo.
Cuentan los cronistas e historiadores que los incas creían que el
ocultamiento del sol se debía a que estaba enojado por algún
delito cometido contra él.
El fenómeno daba lugar a una serie de ritos y prácticas
mágico-religiosas de los peruanos de la antigüedad, llevadas a
cabo por toda la comunidad.
En medio de las tinieblas, todos lanzaban gritos clamando por el
retorno de la luz solar, hacendo sonar instrumentos de viento y
tambores y unían a ello los ladridos y aullidos de perros atados
a los que golpeaban para incrementar las súplicas.
La vuelta del brillo solar tras el ruidoso rito era motivo de
festejo, con algarabía y gratitud.
Hoy, las autoridades peruanas lo que más temen es que muchos
peruanos puedan verse afectados por lesiones irreversibles
incluso la ceguera, si observan el eclipse de sol, el último
total del siglo XX, sin ninguna portección o sin utilizar filtros
adecuados.
Uno de los científicos visitantes afirmó que el eclipse total de
sol, un fenómeno que no se podrá observar al menos hasta el 2059,
permitirá ver la corona solar en toda su magnitud, así como las
explosiones y nubes rosadas del astro rey.
La fase total del eclipse, que para los científicos es el más
hermoso fenómeno natural y el que más atemoriza al hombre, durará
casi tres minutos y comenzará a las 12:15 GMT.
POTOSI ATARDECIO DE DIA
El último eclipse solar del siglo XX fue seguido este jueves con
gran expectativa en todo Bolivia por grandes y pequeños que se
movilizaron desde tempranas horas hacia zonas descampadas para
contemplar con mayor nitidez ese fenómeno natural.
En La Paz, el eclipse alcanzó su punto culminante a las 08H18
locales (12H18 GMT), cuando el cielo comenzó a oscurecerse
levemente como si fuera un atardecer.
En cambio, en Potosí, a 574 km al sur de La Paz, el eclipse fue
total.
En ese departamento boliviano, hasta donde se trasladaron unos
tres mil estudiosos y turistas extranjeros y locales, el fenómeno
se apreció en toda su grandeza natural.
De pronto, hacia las 08H23 locales (12H23 GMT), Potosí se vio de
noche ante la insólita admiración de su población.
Otro punto importante de expectación fue Huachacalla, una
población rural ubicada a 200 km al sudoeste de Oruro, donde
científicos extranjeros y nacionales se trasladaron con
sofisticados equipos de filmación y fotografía.
AMANECIO DOS VECES EN LIMA
Las ciudades peruanas amanecieron este jueves, en menos de media
hora, dos veces, al vivir en desbordante euforia el último
eclipse solar del siglo en el hemisferio sur.
A las 07H18 locales (12H18 GMT) y por casi cuatro minutos "la
noche se apoderó del día" en Mikulla, alturas del sur del
departamento de Tacna, en el momento cumbre del eclipse solar,
reportó emocionado un eviado especial de prensa.
Las ciudades de Arequipa, Moquegua y Tacna fueron escogidas para
seguir el fenómeno astral, que se repetirá en esta zona recién en
el año 2059, recordaron los expertos en astronomía.
Los habitantes de Lima sólo pudieron experimentar un
oscurecimiento parcial de un 25 % en toda la ciudad, que duró
casi tres minutos, dijo un experto del Instituto Geofísico del
Perú. Esto obligó a los automovilistas a encender los faros y a
las viviendas a prender la luz elecéctrica hacia las 07H10
locales.
Los reportes confirmaron que el hecho científico produjo la
alteración de vida en los animales. "Las gallinas se vuelven a
dormir, los perros ladran", se informó desde lugares campestres.
Los científicos anunciaron que la marea en la costa del Pacífico
peruano se alteró durante varios minutos.
PARAGUAYOS VIERON AL SOL Y LA LUNA
Los pobladores de una gran parte del territorio paraguayo,
incluida Asunción, gozaron hoy, con admiración de un inusual
momento de oscuridad generado por un eclipse total de Sol, el
primero que se observa en el país desde 1947 y el último del
siglo.
La trayectoria del fenómeno abarcó una franja con dirección
noroeste-sureste de 185 kilómetros de ancho y más de 900
kilómetros de largo, donde la duración de "la nueva noche" fue de
entre 41 segundos y tres minutos y medio.
En el caso de Asunción, miles de personas con lentes especiales
salieron a las calles y a las azoteas de los edificios para
seguir paso a paso los detalles del espectáculo celeste de
"Hermano Sol, Hermana Luna", como lo describió la prensa local.
En el centro de Asunción se escucharon aplausos, sirenas y
petardos, reacción muy distinta a la que había tenido la
población paraguaya hace casi cinco décadas, cuando el 20 de mayo
de 1947, en pleno día, el Sol se ocultó imprevistamente por unos
minutos.
OSCURIDAD TOTAL EN CHILE
A diferencia de los habitantes de un tramo del extremo norte del
país, en donde el oscurecimiento fue total por casi tres minutos,
los restantes habitantes de Chile miraron hoy con curiosidad
parsimoniosa el último eclipse lunar del Sol en Sudamérica.
En Santiago, la Luna tapó el 65 % del disco solar en el momento
cumbre y la mañana - hacia las 09H40 locales - adquirió solo un
tono invernal, sin espectacularidades ni reencendido de luces y
faroles.
En Punta Arenas, a 2.200 km de Santiago, en las proximidades de
los mares antárticos, en el extremo austral sudamericano, en
donde el ensombrecimiento fue menor aún, gruesos nubes
dificultaron la visión cabal de la superposición de la Luna sobre
el Sol, que se mostro alli tapado en una cuarta parte.
En Santiago, al igual que en la provincias, las observaciones
callejeras masivas las protagonizaron los estudiantes y sus
profesores, dotados con gafas filtrantes y cámaras oscuras de
cartón fabricadas en las aulas.
En cambio, una mayoría hogareña de millones de amas de casa,
niños y mayores inactivos siguió el eclipse por la televisión,
que transmitió el colorido fenómeno minuto a minutos desde la
zona de Putre, 1650 km de la capital.
MAL TIEMPO ACABO CON EXPECTATIVAS DE ECUATORIANOS
Los cielos nublados, las lloviznas y el día festivo que vive hoy
Ecuador terminaron con las expectativas de ver el último eclipse
total del Sol del siglo en el hemisferio sur, del que se esperaba
que ocasionara en este país una oscuridad promedio del 52 por
ciento.
En Quito, las personas que dedicaron el tiempo extra de descanso
propio de un día festivo para ver el eclipse volvieron a sus
camas poco después por el mal tiempo.
En la ciudad portuaria y tropical de Guayaquil varias decenas de
ciudadanos se reunieron en el malecón, pero no lograron apreciar
gran cosa por la nubosidad y la llovizna.
En nada quedaron las advertencias de que las gafas, los vidrios
ahumados y las películas negras de negativos fotográficos son,
entre otros, métodos inseguros para apreciar los eclipses, ya que
pueden causar ceguera parcial, inicialmente no advertida porque
la retina del ojo carece de sensores de dolor.
Desde la tropical ciudad de Machala, fronteriza con Perú, donde
se anunció que se apreciaría mejor el eclipse que en el resto de
Ecuador, al cubrirse allí el 67 por ciento de la luz solar, un
periodista del diario "El Nacional" reveló a EFE que "poco
después del amanecer, el cielo se puso algo oscuro, de un gris
tenue, pero nada más". (EFE,AFP) (9A)
podían causar el fin del mundo, ahora la preocupación de los
habitantes en Perú ante el fenómeno astronómico de mañana jueves
se centra en el daño ocular que puede causar su observación sin
filtros adecuados.
Estos fenómenos celestes provocaban un enorme temor entre los
pobladores de la antiguedad en este país andino, inculcados por
una mitología que contaba de experiencias cataclísmicas por el
eclipsamiento del sol.
Temían que los eclipses, que ocultaban su luz y daban paso a la
oscuridad, provocaran la desaparición permanente del "astro rey"
y llegara con ello el fin del mundo.
Cuentan los cronistas e historiadores que los incas creían que el
ocultamiento del sol se debía a que estaba enojado por algún
delito cometido contra él.
El fenómeno daba lugar a una serie de ritos y prácticas
mágico-religiosas de los peruanos de la antigüedad, llevadas a
cabo por toda la comunidad.
En medio de las tinieblas, todos lanzaban gritos clamando por el
retorno de la luz solar, hacendo sonar instrumentos de viento y
tambores y unían a ello los ladridos y aullidos de perros atados
a los que golpeaban para incrementar las súplicas.
La vuelta del brillo solar tras el ruidoso rito era motivo de
festejo, con algarabía y gratitud.
Hoy, las autoridades peruanas lo que más temen es que muchos
peruanos puedan verse afectados por lesiones irreversibles
incluso la ceguera, si observan el eclipse de sol, el último
total del siglo XX, sin ninguna portección o sin utilizar filtros
adecuados.
Uno de los científicos visitantes afirmó que el eclipse total de
sol, un fenómeno que no se podrá observar al menos hasta el 2059,
permitirá ver la corona solar en toda su magnitud, así como las
explosiones y nubes rosadas del astro rey.
La fase total del eclipse, que para los científicos es el más
hermoso fenómeno natural y el que más atemoriza al hombre, durará
casi tres minutos y comenzará a las 12:15 GMT.
POTOSI ATARDECIO DE DIA
El último eclipse solar del siglo XX fue seguido este jueves con
gran expectativa en todo Bolivia por grandes y pequeños que se
movilizaron desde tempranas horas hacia zonas descampadas para
contemplar con mayor nitidez ese fenómeno natural.
En La Paz, el eclipse alcanzó su punto culminante a las 08H18
locales (12H18 GMT), cuando el cielo comenzó a oscurecerse
levemente como si fuera un atardecer.
En cambio, en Potosí, a 574 km al sur de La Paz, el eclipse fue
total.
En ese departamento boliviano, hasta donde se trasladaron unos
tres mil estudiosos y turistas extranjeros y locales, el fenómeno
se apreció en toda su grandeza natural.
De pronto, hacia las 08H23 locales (12H23 GMT), Potosí se vio de
noche ante la insólita admiración de su población.
Otro punto importante de expectación fue Huachacalla, una
población rural ubicada a 200 km al sudoeste de Oruro, donde
científicos extranjeros y nacionales se trasladaron con
sofisticados equipos de filmación y fotografía.
AMANECIO DOS VECES EN LIMA
Las ciudades peruanas amanecieron este jueves, en menos de media
hora, dos veces, al vivir en desbordante euforia el último
eclipse solar del siglo en el hemisferio sur.
A las 07H18 locales (12H18 GMT) y por casi cuatro minutos "la
noche se apoderó del día" en Mikulla, alturas del sur del
departamento de Tacna, en el momento cumbre del eclipse solar,
reportó emocionado un eviado especial de prensa.
Las ciudades de Arequipa, Moquegua y Tacna fueron escogidas para
seguir el fenómeno astral, que se repetirá en esta zona recién en
el año 2059, recordaron los expertos en astronomía.
Los habitantes de Lima sólo pudieron experimentar un
oscurecimiento parcial de un 25 % en toda la ciudad, que duró
casi tres minutos, dijo un experto del Instituto Geofísico del
Perú. Esto obligó a los automovilistas a encender los faros y a
las viviendas a prender la luz elecéctrica hacia las 07H10
locales.
Los reportes confirmaron que el hecho científico produjo la
alteración de vida en los animales. "Las gallinas se vuelven a
dormir, los perros ladran", se informó desde lugares campestres.
Los científicos anunciaron que la marea en la costa del Pacífico
peruano se alteró durante varios minutos.
PARAGUAYOS VIERON AL SOL Y LA LUNA
Los pobladores de una gran parte del territorio paraguayo,
incluida Asunción, gozaron hoy, con admiración de un inusual
momento de oscuridad generado por un eclipse total de Sol, el
primero que se observa en el país desde 1947 y el último del
siglo.
La trayectoria del fenómeno abarcó una franja con dirección
noroeste-sureste de 185 kilómetros de ancho y más de 900
kilómetros de largo, donde la duración de "la nueva noche" fue de
entre 41 segundos y tres minutos y medio.
En el caso de Asunción, miles de personas con lentes especiales
salieron a las calles y a las azoteas de los edificios para
seguir paso a paso los detalles del espectáculo celeste de
"Hermano Sol, Hermana Luna", como lo describió la prensa local.
En el centro de Asunción se escucharon aplausos, sirenas y
petardos, reacción muy distinta a la que había tenido la
población paraguaya hace casi cinco décadas, cuando el 20 de mayo
de 1947, en pleno día, el Sol se ocultó imprevistamente por unos
minutos.
OSCURIDAD TOTAL EN CHILE
A diferencia de los habitantes de un tramo del extremo norte del
país, en donde el oscurecimiento fue total por casi tres minutos,
los restantes habitantes de Chile miraron hoy con curiosidad
parsimoniosa el último eclipse lunar del Sol en Sudamérica.
En Santiago, la Luna tapó el 65 % del disco solar en el momento
cumbre y la mañana - hacia las 09H40 locales - adquirió solo un
tono invernal, sin espectacularidades ni reencendido de luces y
faroles.
En Punta Arenas, a 2.200 km de Santiago, en las proximidades de
los mares antárticos, en el extremo austral sudamericano, en
donde el ensombrecimiento fue menor aún, gruesos nubes
dificultaron la visión cabal de la superposición de la Luna sobre
el Sol, que se mostro alli tapado en una cuarta parte.
En Santiago, al igual que en la provincias, las observaciones
callejeras masivas las protagonizaron los estudiantes y sus
profesores, dotados con gafas filtrantes y cámaras oscuras de
cartón fabricadas en las aulas.
En cambio, una mayoría hogareña de millones de amas de casa,
niños y mayores inactivos siguió el eclipse por la televisión,
que transmitió el colorido fenómeno minuto a minutos desde la
zona de Putre, 1650 km de la capital.
MAL TIEMPO ACABO CON EXPECTATIVAS DE ECUATORIANOS
Los cielos nublados, las lloviznas y el día festivo que vive hoy
Ecuador terminaron con las expectativas de ver el último eclipse
total del Sol del siglo en el hemisferio sur, del que se esperaba
que ocasionara en este país una oscuridad promedio del 52 por
ciento.
En Quito, las personas que dedicaron el tiempo extra de descanso
propio de un día festivo para ver el eclipse volvieron a sus
camas poco después por el mal tiempo.
En la ciudad portuaria y tropical de Guayaquil varias decenas de
ciudadanos se reunieron en el malecón, pero no lograron apreciar
gran cosa por la nubosidad y la llovizna.
En nada quedaron las advertencias de que las gafas, los vidrios
ahumados y las películas negras de negativos fotográficos son,
entre otros, métodos inseguros para apreciar los eclipses, ya que
pueden causar ceguera parcial, inicialmente no advertida porque
la retina del ojo carece de sensores de dolor.
Desde la tropical ciudad de Machala, fronteriza con Perú, donde
se anunció que se apreciaría mejor el eclipse que en el resto de
Ecuador, al cubrirse allí el 67 por ciento de la luz solar, un
periodista del diario "El Nacional" reveló a EFE que "poco
después del amanecer, el cielo se puso algo oscuro, de un gris
tenue, pero nada más". (EFE,AFP) (9A)
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