Quito. 9 oct 2001. Los paquetes se harán en función de los posibles
compradores. Solo el remate de vehículos se realizará al martillo.

Debido al universo de activos fijos que posee Filanbanco, la subasta de
bienes inmuebles que se efectuará dentro de la segunda quincena de
octubre será a sobre cerrado, y contará con un comité de adjudicación en
el que se incluirá a un representante de los acreedores.

Así lo aclaró en una entrevista concedida a HOY el administrador temporal
de la entidad, Salvador Aguirre, quien explicó que solo el remate de
vehículos se efectuará al martillo, por cuestiones prácticas.

Para el efecto, Aguirre y la ING Barings se reunían ayer para finiquitar
los listados y las bases que se publicarán esta semana, que contemplan
$200 millones en bienes inmuebles, muebles, vehículos, maquinarias,
terrenos, etc; $211 millones en bonos y $600 millones en cartera, para la
que se aplicará la disposición de no vender la de más baja calificación
en menos del 80% de su valor nominal.

"Estamos trabajando para que estén todos los activos elegibles. No
podrían entrar los que ya están castigados, porque están fuera del
balance y ya fueron notificados a la Superintendencia de Bancos, en
algunos casos, hace muchísimos años", indicó. Tampoco se incluirán
aquellos con problemas de tipo legal o documental.

Los oferentes de la cartera pueden ser instituciones financieras por
interés propio o por cuenta ajena. "Podría ser que una persona no deseara
utilizar este mecanismo, y hubiera un entendimiento directo del deudor
que representa el activo de esa cartera y el depositante que tiene en su
poder el Certificado de Depósito", dijo.

En el caso de los bonos, dado el pronunciamiento favorable del procurador
general del Estado, se plantea hacer el remate a escala nacional en un
solo sitio y día. Pero ¿cómo asegurarse de que habrá suficientes postores
en las subastas? Aguirre expresa que para ello están los
empaquetamientos, que consisten en identificar quiénes tienen la
capacidad de comprar y hacerles saber qué pueden adquirir.

En cambio, para la venta de cartera, por localización geográfica, se
realizaría en Guayaquil, para el sector regional Costa; y en Quito, para
la Sierra y Amazonía.

Filanbanco tiene pendiente devolver $450 millones a los depositantes; $25
millones correspondientes a la última parte de la liquidación de sus
empleados.

Filanbanco Monserrat no entra en el proceso

Respecto a las off shore, Aguirre señaló que las acreencias de Filanbanco
Trust de Panamá si entrarán a las subastas, pues se trata de un cruce de
cuentas entre Ecuador y Panamá. En el caso de Filanbanco International
Bank de Monserrat (off shore de La Previsora), que posee alrededor de $60
millones en acreencias, la suerte es distinta.

Esta entidad tiene suficientes activos para cubrir a sus depositantes,
pero, aunque está funcionando, se encuentra bajo intervención de las
autoridades internacionales. "La intención es solicitar una internación
de activos y pasivos de mutuo acuerdo entre autoridades de Ecuador y
Monserrat, con el propósito de poder hacer un proceso complementario, y
si es dentro del plazo estipulado hasta el 4 de noviembre, en buena
hora", dice.

De darse esa internación, lo único que correspondería a las autoridades
de control ecuatorianas y a la administración del banco es acoplar un
proceso complementario inmediato para atender a esos depositantes.

La capitalización aún está por definirse

A pesar de que las posibilidades de no someter a liquidación a Filanbanco
son mínimas, Aguirre explica que hay salidas para las que no se
requeriría la capitalización por $175 millones, pero el tiempo es corto.

Las opciones: recuperar la cartera a un valor mayor que el de libros a
fin de que haya mayores ingresos a los estados financieros y no se
requieran provisiones; que los títulos valores que tiene el banco sean
colocados favorablemente y que los activos que van a subastarse puedan
rebasar su valor de libros.

"Si esos procesos terminan felizmente, las nuevas ponderaciones
indicarían que no necesariamente para que el banco tenga un patrimonio
positivo se tendría que inyectar capital", indica.

"La meta es llegar hasta el 4 de noviembre con una situación tal que no
haya necesidad de poner un valor adicional al capital o, si hay que
ponerlo, sea un valor proporcional, financieramente aceptable, con
relación al tamaño que en ese momento ya tendría el banco", finaliza.

En corto

- En el caso de la subasta de bienes, el depositante interesado solo
podrá inscribirse en dos bienes como máximo, de tal manera que si es
beneficiado en uno de los dos, se dé oportunidad a más depositantes para
participar dentro de la totalidad de los bienes.

- El imponente edificio matriz de Filanbanco, ubicado en Nueve de Octubre
y Malecón, no se encuentra dentro del listado de las subastas, pues es un
activo perteneciente a Filanbanco International Bank de Monserrat. (LMI)
(Diario Hoy)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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