" AMERICA LATINA: LA INDECISA BATALLA DE LAS EMPRESAS
MILITARES (II)"
San José. 10.04.93.Confrontada con la brutal pérdida de
recursos estatales, la jerarquía castrense aceptó el reto
neoliberal y se ha lanzado a los negocios tipicamente civiles.
Poseen fábricas de aviones y funerarias, bancos y equipos de
fútbol. Sin embargo, sus compañías no siempre vencen y muchas
se han quedado en el campo de la dura batalla empresarial.
La privatización se ha transformado en pesadilla para algunos
ejércitos,mientas varios gobiernos han adoptado una doble
táctica: apoyan la venta de las compañías estatales que no
están controladas por las fuerzas armadas.

TRISTE DESTINO DE UN PIONERO

Brasil fue pionero en América Latina en el esfuerzo por crear
industrias militares modernas y llegó a ser uno de los centros
más importantes de producción bélica en el Tercer Mundo. Hace
dos décadas, existieron cerca de 20 promisorias industrias
militares.

Ahora, los resultados decepcionan: de aquellas empresas solo
quedan dos. Algunas fábricas son cementerios de chatarra.
La empresa brasileña de aeronátuica "Embrauer", con un
patrimonio de 176 millones de dólares y 5 mil 800
funcionarios, sobrevive gracias a la producción de aviones
civiles.

En 1992, "Embrauer" registró pérdidas contables por 11.3
millones de dólares y ha debido recurrir a una ayuda de
emergencia del Gobierno para no interrumpir el polémico
proyecto de construir el caza subsónico AMX, en sociedad con
la italiana "Aermacchi". El proyecto ya sobrepasó mucho los
plazos de conclusión y el aparato aun no es eficiente.

Las ventas del avión de entrenamiento "Tucano" mermaron y solo
el turbohélice civil "Brasilia" ha logrado nuevos clientes. El
proyecto del avión civil EMB-123, iniciativa
argentino-brasileña, no ha salido del papel. Embraer no ha
sido privatizada, pero continúan las presiones en ese sentido.

PRIVATIZADO LO MAS ATRACTIVO

La crisis en la industria bélica argentina es aun más aguda.
"Fabricaciones Militares", controlada por el Ejército, y que
quizo competir con empresas brasileñas, está hoy
semiparalizada.

Las empresas más promisorias ya han sido privatizadas, como
EMECA, (fabricante de cables eléctricos con capital de 15
millones de dólares). Mientras, astilleros, fábricas de armas,
municiones y blindados no logran atraer la atención de
inversionistas, por el mal estado de sus instalaciones y sus
enormes pasivos.

Según el teniente coronel retirado Carlos Doglioli, "cuando se
cumpla el plan argentino de privatización de industrias
militares, solo quedarán en manos del Estado pequeñas fábricas
de botas, uniformes y armas livianas".

ECUADOR: INTENSA POLEMICA

Después de Argentina, Ecuador es el país sudamericano donde la
privatización de empresas militares ha generado más polémica.
Teóricamente, las veinte empresas, controladas por la
Dirección de Industrias del Ejército, DINE, pueden ser
vendidas al sector privado, pero hay una guerra sorda entre el
gobierno y militares en la elaboración de la lista final de
bienes sujetos a subasta.

La DINE, creada en 1973, controla una ensambladora de omnibus,
de la cual General Motors posee 33% de las acciones, y
"Acerías Nacionales del Ecuador", la sexta empresa más grande
del país, de la cual la DINE tiene 72% del accionariado.

Asimismo, la DINE es dueña de la empresa de fundiciones
nacionales, una fábrica de municiones, otra de herramientas,
de electrodomésticos y varias pequeñas empresas
agroindustriales.

La armada Ecuatoriana controla la empresa "Transnave" (que
posee nueve barcos valorados en 360 millones de dólares),
mientras la Fuerza Aérea es propietaria de la aerolínea TAME,
de transporte interno de pasajeros y carga.

El ejército ecuatoriano sigue adelante con su proyecto de
construír un hotel de cinco estrellas en Quito, en
asociación minoritaria con capitales norteamericanos.

DIFICULTADES EN BOLIVIA Y BRASIL

Los generales bolivianos también gerencian. Controlan 25
negocios, pequeños y medianos, como empresas de perforación de
pozos, una fábrica de quinina, otra de café molido, un ingenio
de arroz, una fábrica de explosivos y otra de productos
químicos.

Su marina lacustre controla una naviera. La Fuerza Aérea posee
la Empresa de Transportes Aéreos Militares, la menor de las
tres aerolíneas del país. Casi todas las empresas militares
han registrado pérdidas en su balances de 1991.

En Perú, el presidente Alberto Fujimori se proclama uno de los
discípulos más fieles de la reducción del papel empresarial
del Estado, pero hasta ahora ha excluido las tres principales
industrias militares de los planes de privatización.

Ese es el caso del Servicio Industrial de la Marina, SIMA, que
en el pasado tuvo el más importante astillero del Pacífico
latinoamericano. SIMA llegó a fabricar nueve buques petroleros
y graneleros e intentó montar metralletas, pero hoy se limita
a utilizar sus 400 empleados en reparaciones navales.

El Ejército controla la empresa INDUMIL, que fabrica botas y
uniformes, y tiene una pequeña planta de municiones. La Fuerza
Aérea mantiene una empresa de reparaciones de aviones, después
de abandonar los planes de construir aeronaves de
entrenamiento.

EXCEPCIONES A LA PRIVATIZACION

El gobierno de México también proclama las excelencias de la
privatización, pero no tiene planes de vender empresas
militares.

En conjunto, las secretarías de Defensa y Marina manejan un
presupuesto de 1084 millones de dólares (6.02% del
presupuesto nacional) y controlan dos empresas financieras que
han escapado de la privatización bancaria: el Banco del
Ejército y el Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas
Armadas.

La principal empresa militar de Venezuela, la Compañía Anónima
Venezolana de la Industria Militar, CAVIM, no está incluída en
el plan de privatización de bienes estatales.

CAVIM controla la producción de municiones y granadas y una
empresa de repotenciamiento de pistolas y de metralletas.
También participa en pequeñas empresas de vestuario, lencería
y zapatos.

CHILE: DINAMICO POLO TECNOLOGICO

Chile y, en menor escala, Colombia son los dos casos en que
las empresas militares han registrado progresos.

En los últimos dos años, la fábrica de maestranzas del
Ejército, FAMAE, la Empresa Nacional de Aeronaútica, ENAER, y
los astilleros y maestranzas de la Armada, todas de Chile,
han logrado asociarse con importantes grupos extranjeros en la
producción de equipamiento bélico avanzado.

El país sureño reemplazó a Brasil como el polo industrial
militar más dinámico del continente, con un total de siete mil
empleados e ingresos considerados como un secreto de estado.
FAMAE está asociada con capitales suizos en la fabricación de
metralletas, blindados "mowas" y fusiles SIG 542-1. Intenta
desarrollar el ambicioso proyecto de misil inteligente "Rayo"
(de 40 kilómetros de alcance), en sociedad con la firma
inglesa Royal Ordonance. FAMAE pretende producir 120 cohetes
al mes y exportarlos a 12 clientes.

Por su lado, ENAER, la más avanzada tecnológicamente de las
empresas militares de Chile, ha desarrollado un proyecto de
modernización de caza-bombarderos Mirage.

Además, ENAER fabrica un avión militar de entrenamiento T-35
Pillan, ya vendido a Panamá, Paraguay y España. Según expertos
chilenos, este aparato tiene un costo operacional 30 veces
inferior que el de su competidor brasileño Tucano.

ENAER también esta asociada con la empresa española CASA en la
producción de aviones militares, con la norteamericana
"General Electric" en la manufactura de piezas de motores de
reacción y con la firma israelí Elta en el montaje de
detectores de radar.

COLOMBIA: EFICIENCIA FINANCIERA

Los militares colombianos están lejos de haber logrado la
sofisticación tecnológica de sus colegas chilenos, pero han
dado una demostración elocuente de eficiencia financiera en
1991.

Ese año, su principal empresa, Industria Militar, INDUMIL,
presentó una rentabilidad del 46%, mientras que las cien
principales industrias privadas de Colombia crecieron 23% en
promedio, según la revista "Semana".

Los activos de INDUMIL son similares a los de la Nestle de
Colombia: 63. 5 millones de dólares. La compañía militar
controla una empresa aérea, SATENA, y una naviera, SERNAC.
Además, INDUMIL posee la mayoría de las acciones del hotel
Tequendama, de cinco estrellas, administrado por la cadena
Sheraton, en el centro de Bogotá. (2A)
EXPLORED
en Ciudad N/D

Otras Noticias del día 10/Abril/1993

Revisar otros años 2014 - 2013 - 2012 - 2011 - 2010 - 2009 - 2008 - 2007 - 2006 - 2005 -2004 - 2003 - 2002 - 2001 - 2000 - 1999 - 1998 - 1997 - 1996 - 1995 - 1994 1993 - 1992 - 1991 - 1990
  Más en el