REVUELTOS DE LA NATURALEZA Por Isaac Asimov

Bogotá. 15.01.92. En 1800, llegó a Inglaterra del recién
descubierto continenete de Australia un animal disecado. El
continente ya había sido fuente de plantas y animales nunca
antes visto, pero este era ridículo. Tenía casi 60 centímetros
de largo y una densa capa de pelo. También tenía un pico plano
y ahulado, patas en forma de red, como los patos, una cola
ancha y plana y un espolón en cada pata trasera claramente
utilizado para secretar veneno. Y aún más, bajo la cola había
una sola apertura.

Los zoólogos explotaron de furia. Era una broma estúpida.
Algún nada simpático bromista australiano había cosido partes
de diferentes criaturas para hacer pasar por tontos a los
inocentes zoólogos.

No había, sin embargo, señales de pegadura artificial.
Lentamente, luego de décadas, los zoólogos aceptaron tener una
nueva criatura. Cientificamente se le llama ornithorhynchus
paradoxical (pico de ave paradójico). Para el público, sin
embargo, se convirtió en el ornitorrinco.

Parecía un mamífero. La densa cubierta de piel era suficiente.
Solo los mamíferos tienen pelo. Sin embargo, parecía poner
huevos y la maquinaria para la ovoposición era muy parecida a
la de los reptiles.

No fue sino hasta 1884, sin embargo, cuando se encontraron
huevos de una criatura con pelo. Tales criaturas incluían a un
oso hormiguero espinoso, otro nativo de Australia y Nueva
Guinea. Los mamíferos que ponen huevos se conocen como
monotremas (un solo hoyo).

APARIENCIAS

Hasta el siglo XX no se conoció la vida íntima del
ornitorrinco. Es un animal acuático que vive en agua dulce. El
pico no se parece en nada al de un pato. Los hoyos de la nariz
se localizan de manera diferente yu tiene una estructura
ahulada más dura que la del pato.

El agua en que vive el ornitorrinco es invariablemente lodosa
en el fondo y en este lodo busca su alimento. Puede detectar
débiles corrientes eléctricas que le ayudaran a localizar su
presa.
Cuando llega la hora de que las hembras tengan vrías,
construye una morada especial que cubre de pasto y tapa con
extremo cuidado. Pone, entonces, dos huevos de aproximadamente
tres cuartos de pulgada de diámetro, de cáscara traslúcida.

La madre coloca los huevos entre su cola y el abdomen y se
enrolla a su alrededor. Necesita dos semanas para incubarlos.
Los ornitorrincos reciEn nacidos tienen dientes y picos muy
cortos y se alimentan de leche. La madre no tiene pezones,
pero la leche sale por los poros del abdomen y los pequeños la
lamen. Al crecer, sus picos se hacen más largos y sus dientes
caen.

¿REPTILES O MAMIFEROS?

Pero a pesar de todo lo que los zoólogos aprendieron del
ornitorrinco sigue existiendo una duda: ¿son mamíferos con
características de reptiles o reptieles con características de
mamíferos?

No podemos decirlo de las criaturas vivas, pero, ¿qué hay de
las del pasado? Tenemos fósiles de diversos animales que
consisten principalmente de dientes y huesos. ¿Puede juzgarse
algo de ello?

Bueno, todos los reptiles vivos tienen sus patas de manera que
la parte de encima de la rodilla es horizontal. Todos los
mamíferos, por otro lado, tienen patas verticales hasta abajo.
Los reptiles tienden a tener los dientes similares, mientras
que los mamíferos tienden a tenerlos diferenciados, con agudos
incisivos al frente, molares planos en la parte de atrás y
dientes cónicos en medio.

De hecho, hay un fósil llamado therapsid con piernas
verticales y dientes diferenciados, pero se le considera sin
duda un reptil. ¿Por qué?

Porque hay otras diferencias. En los mamíferos vivos, la
mandíbula inferior consiste de un solo hueso. En los reptiles
se compone de diversos huesos. La mandíbula inferior del
therapsid se compone de siete huesos.

Sin embargo, uno de ellos es muy grande. Los otros seis son
pequeños y están en la parte posterior de la mandíbula. Es
como si se tratara de un reptil rumbo a convertirse en
mamífero.

Los mamíferos tienen un paladar para que el aire inhalado
llegue hasta los pulmones. Esto significa que la respiración
no se interrumpe más que por uno o dos segundos al tragar. Los
reptiles no tienen paladar porque, al ser de sangre fría, no
necesitan una constante provisión de oxígeno.

Algunos de los últimos therapsid tiene paladar, lo que parece
indicar una cierta temperatura en su sangre y quizá hasta una
puel con pelo. Están en camino a convertirse en mamíferos,
pero se han extinguido. Los últimos therapsid que sobreviven
son aquellos que desarrollaron características completamente
de mamíferos y son mamíferos.

Pero aún nos quedan el ornitorrinco y el oso hormiguero con
espinas.

Gilest T. McIntyre, del Queens College, estudia el nervio
trigeminal. En todos los mamíferos este nervio pasa a través
de un hueso en particular. En los reptiles, pasa entre dos
huesos. En los ornitorrincos jóvenes, en los que no se han
findido los huesosde la quijada, el nervio pasa entre dos
huesos. McIntyre considera que esto hace del ornitorrinco un
reptil. El argumento, sin embargo, persiste.

Reptiles con pelo, mamíferos que ponen huevos, picos con
dientes...

El ornitorrinco es el mejor representante de estas aparentes
contradicciones ¿Camuflaje?. (3-A)


EXPLORED
en Ciudad N/D

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