Quito. 01.10.92. La inversión en el Ecuador se ha tornado
netamente especulativa a raíz de la devaluación del 35%
decretada por el gobierno del presidente Sixto Durán Ballén.

Ante esa medida, mucha gente transformó los sucres en dólares
o depositó en el exterior las divisas de que disponía. Pero
inicialmente la operación no resultó del todo beneficiosa, ya
que la cotización del dólar en el mercado libre no subió a los
niveles que se esperaban.

Otro de los caminos que han tomado quienes se han inclinado
por la inversión especulativa (aquella que no se destina a la
producción directa de bienes) es colocar su dinero a plazo
fijo o adquirir pólizas de acumulación.

Sin embargo, para este tipo de operaciones, los bancos y
financieras han limitado en 5.000 dólares las transacciones en
efectivo y para cantidades más grandes se exigía un depósito
en cheque. En este campo tampoco fue fructífera la inversión,
puesto que las tasas de interés se encontraban -al cierre de
esta edición- en alrededor del 50% anual para las pólizas de
acumulación (antes estaban al 68%) y en alrededor del 70% para
los depósitos a plazo fijo a 90 días (antes alcanzaron casi el
100%).

Estas últimas son consideradas "de menor riesgo" ya que se
realizan en instituciones solventes (bancos y financieras) y
no están sujetas a bajas o alzas de precio, ni a variaciones o
fenómenos que puedan ocasionar la pérdida de la inversión.

INVERSION PRODUCTIVA

Sin embargo, existen otros campos en donde invertir:
construcción, bienes inmuebles, agricultura o industria. Pero
una de las mejores, con la cual mucha gente ha hecho dinero,
son las exportaciones. Producir en sucres y vender en dólares
es, sin duda alguna, un gran negocio.

Según el director ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de
Exportadores (FEDEXPOR), Manuel Vivanco, el fomento de esa
actividad puede ser de mucho beneficio para el Ecuador, puesto
que las reservas de petróleo se agotarán después de 10 o 15
años y ese es actualmente nuestro principal producto de
exportación.

Vivanco dijo a 15 DIAS que el valor de los productos para
consumo interno son muy inferiores al de los productos de
exportación y que mientras más cantidad se produce, menor es
el costo de producción. Por tanto, el precio puede ser más
competitivo fuera del país.

Una condición indispensable para poder entrar en el mercado de
otras naciones es lograr un buen producto a un buen precio.
"La competencia es dura en el exterior y la calidad es la
única manera de mantenerse en el mercado", agregó Vivanco.

LAS AREAS DE EXPORTACION

Las exportaciones ecuatorianas están divididas en productos
tradicionales, petróleo y derivados, y productos no
tradicionales. Esta última sección está subdividida en
primarios e industrializados. La diferencia entre ellos la
marca -dice Vivanco- el volumen de exportación.

Están considerados productos tradicionales el banano, el café,
el cacao y el camarón, cuyo volumen alcanza los 1.300 millones
de dólares anuales (camarón 500 millones y banano 700
millones). Los no tradicionales llegan a casi 50 millones de
dólares anuales.

Si bien el volumen de exportación de los no tradicionales es
mucho más pequeño, sus posibilidades de exportación son
mejores pues hay alrededor de 30 productos que tienen gran
demanda en el exterior.

EN QUE INVERTIR

Según el director de FEDEXPOR, uno de los productos que pueden
tener el crecimiento más espectacular es la exportación de
flores. Ahora Ecuador produce flores de mejor calidad que
Colombia, pero ese país exporta 200 millones de dólares
anuales por ese concepto, mientras que en nuestro país la
cifra apenas llega a 20 millones.

Manuel Vivanco dice que la mejor opción es industrializar los
productos de exportación. Para ello -afirma-, se pueden
aprovechar los excedentes de exportación para los cuales no se
obtiene un mercado foráneo.

Uno de los proyectos que se está realizando en Ecuador con
gran éxito es la eternización de las flores. La empresa que
esa encarga de esa labor, compra a los floricultores el
excedente que no se exporta y con un proceso químico se
petrifica la flor y se hacen arreglos muy cotizados en el
extranjero.

También hay proyectos relacionados con el banano. Ecuador
exporta puré de esta fruta y, según Vivanco, se podría, por
ejemplo, industrializar otras frutas y producir mermeladas
para el mercado andino y para un segmento de los consumidores
de los Estados Unidos, al igual que concentrados, pulpas y
jugos de frutas. El país ya ha exportado pequeños volúmenes. Y
se puede industrializar, también, sombreros de paja toquilla y
fabricar ciertas partes a mano y otras con máquinas.

Asimismo, en diversas zonas del país, se han iniciado
proyectos de exportación de productos tales como minivegetales
-que no necesitan de grandes extensiones ni de mucha inversión
sino solamente de una semilla especial-, entre ellos tomates,
brécol y suquino.

De igual manera, en la región oriental existen plantaciones de
flores silvestres -agapanto, anturios, heliconeas, lirios y
otras- que se exportan y se venden en valores de hasta 50
dólares cada una, Como referencia se puede decir que una rosa
se comercializa a un dólar o un dólar y medio en Estados
Unidos. La semilla para estas flores se consigue en la propia
vegetación.

Igualmente se ha instalado piscinas para variedad de peces
bastante bien cotizados en el exterior, como trucha y tilapia.
Y se han hecho cultivos de espárragos, de gran acogida en el
mercado externo.

ALTO NIVEL TECNICO

El director de FEDEXPOR comentó que para competir en el
exterior es necesario un alto nivel de calidad, con controles
permanentes, apoyo, preparación y, sobre todo, contactos en el
extranjero, lo cual se obtiene solamente a través de la
asistencia técnica.

La característica primordial de un buen exportador es un alto
nivel técnico en su producción. "Hay que sembrar la variedad
adecuada en el lugar adecuado, con estructura y administración
adecuadas", dijo.

Aclaró que para industrializar un producto no necesariamente
se requiere de una inversión fuerte.

"También se pueden instalar pequeños talleres industriales. Y
para contrarrestar su escaso volumen de producción podrían
conformarse consorcios o asociaciones de exportación para, de
esa manera, unir a los pequeños productores que quieran
exportar", sostuvo.

La venta en el extranjero, en caso de que no se consiga un
contacto confiable, se puede hacer a través de empresas
comercializadoras que se encargan de transportar, embarcar y
vender el producto en el exterior, cobrando un porcentaje que
varía de acuerdo con la venta.

*FUENTE: Texto tomado de 15 DIAS (p.36-37)
EXPLORED
en Ciudad N/D

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