Alegría y llanto fueron las principales reacciones de miles de ciudadanos de diferentes puntos del país que se movilizaron al balneario de Salinas, en Guayas, con la finalidad de celebrar el Año Nuevo y la apertura de la temporada playera 2003.
La avenida principal del malecón, donde la Municipalidad y empresarios visionarios montaron varios espectáculos artísticos, fue la más concurrida por los turistas, quienes degustaron platos típicos en pequeños locales y se deleitaron con juegos pirotécnicos.
Por su parte, propietarios de hoteles y hostales, que se prepararon una semana antes para recibir a los bañistas, nunca imaginaron que una marea humana coparía el 100% de la capacidad de hospedaje.
Después de la medianoche, decenas de personas se bañaron (completamente vestidos) en el mar, como deseo de prosperidad y dicha. Otros optaron por caminar descalzos, comer uvas, lanzar monedas y dar la vuelta a la manzana con maletas.
La playa fue el lugar escogido por varias autoridades del Guayas para despedir el año.
En Santa Elena y Playas, los ciudadanos organizaron bailes en las calles, plazas, barrios y concursos de años viejos. Las autoridades solicitaron a la Policía más de 80 elementos para controlar el orden y la seguridad. (CHM)
Gustavo Noboa descansó en Punta Blanca
La suave brisa y el pintoresco paisaje del balneario de Punta Blanca, en Guayas, fue el sitio que escogió el presidente de la República, Gustavo Noboa Bejarano, para festejar 2003.
Junto con su esposa, Isabel Baquerizo, hijos y la escolta presidencial se movilizó el pasado lunes a este lugar.
Punta Blanca es, además, un conjunto residencial donde Noboa Bejarano adquirió una modesta vivienda, en el sector 4, hace varios años. Allí, cuando se celebró la Segunda Cumbre de Presidentes, en julio de 2002, el mandatario brindó un agasajo a sus amigos e invitó al presidente de Chile, Ricardo Lagos, quien disfrutó del mar, arena y sol. La prensa, por cuestiones de seguridad y privacidad, no pudo ingresar.
En un costado de la vía se divisan terrenos baldíos y varias construcciones privadas. A las 18:00 del 31 de diciembre de 2002, un equipo de HOY fue interceptado por un vehículo Chevrolet Rodeo, donde siete guardias de la Presidencia custodiaban minutos antes al secretario de Comunicación, Oscar Zuloaga, quien visitó a Noboa y le dio el abrazo de Año Nuevo.
¡Déjeme preguntar si los puede recibir!, señalan agitados. Mientras la espera desespera, dos guardianes fuertemente armados leen un diario local y realizan llamadas a Quito para saludar a familiares y amigos. Otros se comunican por radio y coordinan la seguridad en sitios estratégicos.
Luego de 15 minutos se acerca un guardián y dice: Que lo disculpen, no los puede atender. Les desea un feliz año. (CHM)
Lucio Gutiérrez: " 2002 fue mi mejor año"
No te olvidarás , harasme acuerdo de una gallina que tiene que llevar la doctora (Ximena Bohórquez), le dijo a las 18:35 uno de los miembros de seguridad a otro, en la residencia del presidente electo, Lucio Gutiérrez; mientras la futura primera dama se alistaba para salir con sus hijas Viviana y Karina al encuentro con el flamante presidente, quien las esperaba en un sitio indeterminado de Quito, con el objetivo de recibir el Año Nuevo en intimidad.
Los seis guardias que se encontraban en la residencia presidencial, ubicada en El Batán, se alistaban a quemar el año viejo. Compraron un muñeco de aserrín, lo sujetaron sobre el capó del vehículo que traslada a la primera dama, y le pusieron una careta de Gutiérrez, un poncho rojo y una bufanda ploma.
La casa, aparentemente desolada, echó abajo el anuncio que hizo por la mañana el futuro mandatario de que pasaría ahí, únicamente con los tres miembros de su familia. Gutiérrez tampoco viajó al Tena como tenía previsto, ya que mantuvo varias reuniones con sus ministros designados.
Tanto él como su esposa mantuvieron agendas por separado casi todo el día. Desde muy temprano, Gutiérrez tuvo una sesión de rehabilitación de su mano derecha, luego salió a trotar en el parque Metropolitano desde las 09:00 hasta las 11:00.
En este sitio, dijo que no tiene cábalas y anunció que solo haría dos cosas para recibir el Año Nuevo: "Me voy a santiguar y voy a decir: el año 2002 fue el mejor año de mi vida, 2003 será mucho mejor". (MHE)
El vicealcalde de Guayaquil disfrutó con los juegos pìrotécnicos
Luego de una pequeña siesta, el vicealcalde de Guayaquil y presidente de la Cruz Roja de Guayas, Luis Chiriboga Parra, se levantó para ducharse.
Minutos después, recibió a HOY en su departamento del condominio Torre Blanca, frente al malecón.
Mientras sus familiares se alistan para festejar el año en el Yacht Club de Salinas, comenta que el nuevo año tendrá que ser mejor: El presidente electo deberá respetar lo que dijo en la campaña electoral, pues 2003 será un año durísimo.
En el orden económico, este año será "tremendo, pues empresarios manifiestan que agoniza o muere", dice.
Desde el balcón del edificio señala el hermoso panorama arquitectónico de Salinas y recuerda que hace más de 30 años era un sitio con poca plusvalía. Tenemos que ser de una vez por todas una sola Nación". (CHM)
Monseñor Alberto Luna confía en las esperanzas
La intimidad fue la mejor compañera para monseñor Luis Alberto Luna la noche del año viejo y principios del nuevo. Recibió varias llamadas telefónicas de su familia hasta altas horas de la noche, pero una fue especial, la de su amigo José Gómez Izquierdo, es el sacerdote a quién yo más quiero y respeto en el Ecuador, dijo.
En la tarde del 31 de diciembre no dejó de lado sus obligaciones pastorales, ni tampoco durante el primer día del año; en las primeras horas de ayer acudió a la Catedral de la Inmaculada para dar su misa, allí le esperaban sus feligreses para darle el feliz año, pero también para contarle sus penas, para este año espero mucho optimismo en la gente y en mí, una esperanza muy grande, señaló Luna Tobar.
Monseñor, con sus casi 80 años de edad, manifestó que la vida hay que vivir con realismo, aunque las esperanzas siempre están presentes. siempre comienzo un año con la seguridad de que puede ser mejor que el que ha terminado, dijo agregando que en la vida política espera un cambio, "que nos quite la pesadumbre que ha sido la repetición de personajes en el poder, dijo. (RMT)
El prefecto Nicolás Lapentti recibió el 1º de enero en Salinas
El prefecto del Guayas, Nicolás Lapentti, y su familia se deplazaron hacia el balneario de Salinas para celebrar el año nuevo y dialogar con decenas de amigos y socios del Yacht Club.
Sus empleados acondicionaron con antelación varios dormitorios de la suite, ubicada en el condominio El Navegante, frente al malecón.
Lapentti se movilizó en un vehículo Toyota Land Cruiser, color beige, con placas de la Prefectura. Llevó en su equipaje ropa deportiva e informal, revistas y diarios locales.
Pese a que HOY intentó conocer si su hijo, Nicolás Lapentti Gómez, tenista internacional, acompañó a sus padres para festejar el Año Nuevo, no obtuvimos respuesta.
Un guardían del condominio señaló que hoy, en Guayaquil, reanudará sus actividades y que el fin de semana retornará al balneario para disfrutar de la temporada playera. (CHM)
La avenida principal del malecón, donde la Municipalidad y empresarios visionarios montaron varios espectáculos artísticos, fue la más concurrida por los turistas, quienes degustaron platos típicos en pequeños locales y se deleitaron con juegos pirotécnicos.
Por su parte, propietarios de hoteles y hostales, que se prepararon una semana antes para recibir a los bañistas, nunca imaginaron que una marea humana coparía el 100% de la capacidad de hospedaje.
Después de la medianoche, decenas de personas se bañaron (completamente vestidos) en el mar, como deseo de prosperidad y dicha. Otros optaron por caminar descalzos, comer uvas, lanzar monedas y dar la vuelta a la manzana con maletas.
La playa fue el lugar escogido por varias autoridades del Guayas para despedir el año.
En Santa Elena y Playas, los ciudadanos organizaron bailes en las calles, plazas, barrios y concursos de años viejos. Las autoridades solicitaron a la Policía más de 80 elementos para controlar el orden y la seguridad. (CHM)
Gustavo Noboa descansó en Punta Blanca
La suave brisa y el pintoresco paisaje del balneario de Punta Blanca, en Guayas, fue el sitio que escogió el presidente de la República, Gustavo Noboa Bejarano, para festejar 2003.
Junto con su esposa, Isabel Baquerizo, hijos y la escolta presidencial se movilizó el pasado lunes a este lugar.
Punta Blanca es, además, un conjunto residencial donde Noboa Bejarano adquirió una modesta vivienda, en el sector 4, hace varios años. Allí, cuando se celebró la Segunda Cumbre de Presidentes, en julio de 2002, el mandatario brindó un agasajo a sus amigos e invitó al presidente de Chile, Ricardo Lagos, quien disfrutó del mar, arena y sol. La prensa, por cuestiones de seguridad y privacidad, no pudo ingresar.
En un costado de la vía se divisan terrenos baldíos y varias construcciones privadas. A las 18:00 del 31 de diciembre de 2002, un equipo de HOY fue interceptado por un vehículo Chevrolet Rodeo, donde siete guardias de la Presidencia custodiaban minutos antes al secretario de Comunicación, Oscar Zuloaga, quien visitó a Noboa y le dio el abrazo de Año Nuevo.
¡Déjeme preguntar si los puede recibir!, señalan agitados. Mientras la espera desespera, dos guardianes fuertemente armados leen un diario local y realizan llamadas a Quito para saludar a familiares y amigos. Otros se comunican por radio y coordinan la seguridad en sitios estratégicos.
Luego de 15 minutos se acerca un guardián y dice: Que lo disculpen, no los puede atender. Les desea un feliz año. (CHM)
Lucio Gutiérrez: " 2002 fue mi mejor año"
No te olvidarás , harasme acuerdo de una gallina que tiene que llevar la doctora (Ximena Bohórquez), le dijo a las 18:35 uno de los miembros de seguridad a otro, en la residencia del presidente electo, Lucio Gutiérrez; mientras la futura primera dama se alistaba para salir con sus hijas Viviana y Karina al encuentro con el flamante presidente, quien las esperaba en un sitio indeterminado de Quito, con el objetivo de recibir el Año Nuevo en intimidad.
Los seis guardias que se encontraban en la residencia presidencial, ubicada en El Batán, se alistaban a quemar el año viejo. Compraron un muñeco de aserrín, lo sujetaron sobre el capó del vehículo que traslada a la primera dama, y le pusieron una careta de Gutiérrez, un poncho rojo y una bufanda ploma.
La casa, aparentemente desolada, echó abajo el anuncio que hizo por la mañana el futuro mandatario de que pasaría ahí, únicamente con los tres miembros de su familia. Gutiérrez tampoco viajó al Tena como tenía previsto, ya que mantuvo varias reuniones con sus ministros designados.
Tanto él como su esposa mantuvieron agendas por separado casi todo el día. Desde muy temprano, Gutiérrez tuvo una sesión de rehabilitación de su mano derecha, luego salió a trotar en el parque Metropolitano desde las 09:00 hasta las 11:00.
En este sitio, dijo que no tiene cábalas y anunció que solo haría dos cosas para recibir el Año Nuevo: "Me voy a santiguar y voy a decir: el año 2002 fue el mejor año de mi vida, 2003 será mucho mejor". (MHE)
El vicealcalde de Guayaquil disfrutó con los juegos pìrotécnicos
Luego de una pequeña siesta, el vicealcalde de Guayaquil y presidente de la Cruz Roja de Guayas, Luis Chiriboga Parra, se levantó para ducharse.
Minutos después, recibió a HOY en su departamento del condominio Torre Blanca, frente al malecón.
Mientras sus familiares se alistan para festejar el año en el Yacht Club de Salinas, comenta que el nuevo año tendrá que ser mejor: El presidente electo deberá respetar lo que dijo en la campaña electoral, pues 2003 será un año durísimo.
En el orden económico, este año será "tremendo, pues empresarios manifiestan que agoniza o muere", dice.
Desde el balcón del edificio señala el hermoso panorama arquitectónico de Salinas y recuerda que hace más de 30 años era un sitio con poca plusvalía. Tenemos que ser de una vez por todas una sola Nación". (CHM)
Monseñor Alberto Luna confía en las esperanzas
La intimidad fue la mejor compañera para monseñor Luis Alberto Luna la noche del año viejo y principios del nuevo. Recibió varias llamadas telefónicas de su familia hasta altas horas de la noche, pero una fue especial, la de su amigo José Gómez Izquierdo, es el sacerdote a quién yo más quiero y respeto en el Ecuador, dijo.
En la tarde del 31 de diciembre no dejó de lado sus obligaciones pastorales, ni tampoco durante el primer día del año; en las primeras horas de ayer acudió a la Catedral de la Inmaculada para dar su misa, allí le esperaban sus feligreses para darle el feliz año, pero también para contarle sus penas, para este año espero mucho optimismo en la gente y en mí, una esperanza muy grande, señaló Luna Tobar.
Monseñor, con sus casi 80 años de edad, manifestó que la vida hay que vivir con realismo, aunque las esperanzas siempre están presentes. siempre comienzo un año con la seguridad de que puede ser mejor que el que ha terminado, dijo agregando que en la vida política espera un cambio, "que nos quite la pesadumbre que ha sido la repetición de personajes en el poder, dijo. (RMT)
El prefecto Nicolás Lapentti recibió el 1º de enero en Salinas
El prefecto del Guayas, Nicolás Lapentti, y su familia se deplazaron hacia el balneario de Salinas para celebrar el año nuevo y dialogar con decenas de amigos y socios del Yacht Club.
Sus empleados acondicionaron con antelación varios dormitorios de la suite, ubicada en el condominio El Navegante, frente al malecón.
Lapentti se movilizó en un vehículo Toyota Land Cruiser, color beige, con placas de la Prefectura. Llevó en su equipaje ropa deportiva e informal, revistas y diarios locales.
Pese a que HOY intentó conocer si su hijo, Nicolás Lapentti Gómez, tenista internacional, acompañó a sus padres para festejar el Año Nuevo, no obtuvimos respuesta.
Un guardían del condominio señaló que hoy, en Guayaquil, reanudará sus actividades y que el fin de semana retornará al balneario para disfrutar de la temporada playera. (CHM)
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