Beirut. 20 abr 96. Israel continuó ayer sus operaciones
militares en el sur del Líbano, donde aldeas de la región de
Tiro y otras sufren bombardeos desde tierra, mar y aire,
mientras Hizbolá volvió a disparar cohetes contra el norte de
Israel, aunque se iniciaron ya contactos para un alto el
fuego.
Por su parte, el primer ministro israelí, Simón Peres, afirmó
ayer que aceptará un alto al fuego en las hostilidades con los
guerrilleros libaneses, y que la solución del conflicto podrá
concretarse en tres etapas.
Tras un alto al fuego, "en interés de todos" y para lo cual se
intensifican los contactos diplomáticos con la participación
de Estados Unidos, puede negociarse un "acuerdo interino" y de
carácter militar entre su país y el Líbano, dijo Peres.
Para lograr este acuerdo interino, agregó el primer ministro
israelí, "las líneas están claras", pues "Israel no tiene
exigencias territoriales en el Líbano" y está dispuesto a
retirar sus tropas de la "zona de seguridad" a la frontera
internacional.
Para ello sería necesario que el Ejército nacional libanés,
según una vieja propuesta israelí, tome el control del Líbano
meridional, en lugar de los guerrilleros del Partido de Dios,
y ver si puede garantizar la seguridad para el norte de
Israel.
"La tercera etapa, agregó Peres, sería un tratado de paz, pero
no creo que sea posible sólo con el Líbano; esto dependerá de
Siria, y por tanto no creo que podamos llegar ahora a ellos",
dijo Peres, en referencia a las posturas aún muy distantes en
las negociaciones de paz entre ambos países.
Poco antes, sin embargo, el Ejército israelí había anunciado
que comenzaría a bombardear 44 pueblos más del sur del Líbano
a las 14,00 hora libanesa (11,00 gmt), y pidió a sus
habitantes que los abandonen, según la emisora "La Voz de
Líbano".
Varias otras aldeas del sur, especialmente de la región de
Tiro están siendo bombardeadas desde esta mañana por aviones y
artillería de Israel, aunque hasta el momento no se conoce si
ha habido víctimas.
Mientras tanto, buques de guerra israelíes bombardean la
carretera costera que une Beirut con el sur de Líbano,
especialmente la zona del puente Awali, a la entrada de Sidón
(38 kilómetros al sur de la capital), por lo que está cortado
el tráfico por dicha arteria.
Por su parte, el presidente de EEUU, Bill Clinton, recordó hoy
a las víctimas de estas hostilidades durante su visita a la
ciudad rusa de San Petersburgo. "Rezamos por que acabe la
violencia y se restablezca la paz en Oriente Medio, donde hay
vecinos que siguen peléandose por sus diferencias étnicas y
religiosas", dijo Clinton.
El presidente ruso, Borís Yeltsin, abogó hoy, de su lado, por
el cese inmediato de la operación militar israelí en el Líbano
y envió a Oriente Medio a su ministro de Exteriores, Yevgueni
Primakov.
"Desde el comienzo de las acciones militares, Rusia declaró
que lo que ocurre en el Líbano es inadmisible. La operación
militar israelí en territorio libanés debe ser detenida",
indica el comunicado de Yeltsin.
Por otra parte, el presidente francés, Jacques Chirac,
garantizó al Líbano la "solidaridad de Francia", y aseguró que
"París permanecerá al lado de Beirut", en un mensaje dirigido
al presidente libanés, Elías Haraui, tras el bombardeo israelí
sobre la localidad de Cana.
El Gobierno francés no descartó hoy un encuentro entre su
ministro de Asuntos Exteriores, Hervé de Charette, y su colega
iraní, Alí Akbar Velayati, en Damasco, hoy o mañana, para que
Teherán presione a Hizbolá en el sentido de que cese en sus
ataques contra el norte de Israel.
El portavoz francés de Exteriores rehusó hacer comentario
alguno sobre las declaraciones del Guía de la República
Islámica, el ayatolá Alí Jamenei, quien hizo un llamamiento a
Hizbolá a "atacar" a Israel tras el bombardeo sobre Cana.
También, la presidencia de la Unión Europea (UE) ha pedido el
inmediato cese de los bombardeos de Israel en el Líbano y
anunció la salida inmediata de la "troika" comunitaria,
formada por los ministros de Exteriores de Italia, España e
Irlanda, hacia Oriente Medio.
En un comunicado, la presidencia de la UE, que ahora recae en
Italia, afirma que "la noticia del bombardeo de un campo de
refugiados que produjo un número elevado de muertos y heridos
ha sido recibida por la UE con conmoción y profunda
consternación".
Por otra parte, la 95 Conferencia de la Unión
Interparlamentaria (UIP) condenó hoy en Estambul (Turquía) la
matanza de un centenar refugiados en un cuartel de la ONU en
el Líbano bombardeado por la artillería israelí, que a su
juicio, "representa un acto de terrorismo de Estado activo"
Entre otras repercusiones internacionales del conflicto
militar en el sur del Líbano, La Santa Sede expresó hoy su
"viva consternación y su clara condena" por la matanza de
Cana, en Líbano, "donde fueron alcanzados (por las bombas)
centenares de refugiados, en su mayor parte mujeres y niños".
El Departamento Humanitario de la ONU (DHA) solicitará 8,5
millones de dólares para socorrer a las víctimas de los
bombardeos.
Las cifras no definitivas difundidas por fuentes de seguridad
libanesas señalaron que el número de víctimas del bombardeo
israelí que ayer alcanzó el puesto del contingente fiyiano de
la ONU en Cana se eleva ya a 147 muertos y tres centenares de
heridos, pues se encontraron nuevos cadáveres bajo los
escombros.
Israel justificó el sangriento ataque señalando que Hizbolá
disparó anteriormente cohetes contra su territorio desde
posiciones situadas a unos 300 metros de la base de FINUL
(Fuerzas Interinas de las Naciones Unidas en el sur del
Líbano), donde se habían refugiado unos 700 civiles libaneses.
Reunión de las Naciones Unidas
Los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas
reanudaron el jueves por la noche sus discusiones sobre la
situación en el Líbano, que podrían desembocar en una
resolución de alto el fuego, indicaron diplomáticos
occidentales.
Las discusiones se realizaban en un clima de gran tensión e
intervenían en ellas el grupo árabe de la ONU, así como
Estados Unidos y Francia.
Según un proyecto de resolución, el Consejo apelará a un alto
el fuego inmediato, apoyará los esfuerzos diplomáticos para
llegar a ese fin y deplorará el bombardeo israelí del jueves
(contra un local de la ONU en el Líbano del sur, que causó 94
muertos y 105 heridos).
El texto del proyecto recordará los grandes principios como el
"estricto respeto de la integridad territorial, la soberanía e
independencia política del Líbano en sus fronteras
internacionalmente reconocidas y la seguridad de todos los
Estados de la región".
El grupo árabe de la ONU reclama que se mencione una retirada
israelí del Líbano, pero los norteamericanos se oponen.
También se opone Washington a que se exija a Israel el pago de
la destrucción causada con sus operaciones militares.
(EFE-AFP) (Diario HOY) (11A)
militares en el sur del Líbano, donde aldeas de la región de
Tiro y otras sufren bombardeos desde tierra, mar y aire,
mientras Hizbolá volvió a disparar cohetes contra el norte de
Israel, aunque se iniciaron ya contactos para un alto el
fuego.
Por su parte, el primer ministro israelí, Simón Peres, afirmó
ayer que aceptará un alto al fuego en las hostilidades con los
guerrilleros libaneses, y que la solución del conflicto podrá
concretarse en tres etapas.
Tras un alto al fuego, "en interés de todos" y para lo cual se
intensifican los contactos diplomáticos con la participación
de Estados Unidos, puede negociarse un "acuerdo interino" y de
carácter militar entre su país y el Líbano, dijo Peres.
Para lograr este acuerdo interino, agregó el primer ministro
israelí, "las líneas están claras", pues "Israel no tiene
exigencias territoriales en el Líbano" y está dispuesto a
retirar sus tropas de la "zona de seguridad" a la frontera
internacional.
Para ello sería necesario que el Ejército nacional libanés,
según una vieja propuesta israelí, tome el control del Líbano
meridional, en lugar de los guerrilleros del Partido de Dios,
y ver si puede garantizar la seguridad para el norte de
Israel.
"La tercera etapa, agregó Peres, sería un tratado de paz, pero
no creo que sea posible sólo con el Líbano; esto dependerá de
Siria, y por tanto no creo que podamos llegar ahora a ellos",
dijo Peres, en referencia a las posturas aún muy distantes en
las negociaciones de paz entre ambos países.
Poco antes, sin embargo, el Ejército israelí había anunciado
que comenzaría a bombardear 44 pueblos más del sur del Líbano
a las 14,00 hora libanesa (11,00 gmt), y pidió a sus
habitantes que los abandonen, según la emisora "La Voz de
Líbano".
Varias otras aldeas del sur, especialmente de la región de
Tiro están siendo bombardeadas desde esta mañana por aviones y
artillería de Israel, aunque hasta el momento no se conoce si
ha habido víctimas.
Mientras tanto, buques de guerra israelíes bombardean la
carretera costera que une Beirut con el sur de Líbano,
especialmente la zona del puente Awali, a la entrada de Sidón
(38 kilómetros al sur de la capital), por lo que está cortado
el tráfico por dicha arteria.
Por su parte, el presidente de EEUU, Bill Clinton, recordó hoy
a las víctimas de estas hostilidades durante su visita a la
ciudad rusa de San Petersburgo. "Rezamos por que acabe la
violencia y se restablezca la paz en Oriente Medio, donde hay
vecinos que siguen peléandose por sus diferencias étnicas y
religiosas", dijo Clinton.
El presidente ruso, Borís Yeltsin, abogó hoy, de su lado, por
el cese inmediato de la operación militar israelí en el Líbano
y envió a Oriente Medio a su ministro de Exteriores, Yevgueni
Primakov.
"Desde el comienzo de las acciones militares, Rusia declaró
que lo que ocurre en el Líbano es inadmisible. La operación
militar israelí en territorio libanés debe ser detenida",
indica el comunicado de Yeltsin.
Por otra parte, el presidente francés, Jacques Chirac,
garantizó al Líbano la "solidaridad de Francia", y aseguró que
"París permanecerá al lado de Beirut", en un mensaje dirigido
al presidente libanés, Elías Haraui, tras el bombardeo israelí
sobre la localidad de Cana.
El Gobierno francés no descartó hoy un encuentro entre su
ministro de Asuntos Exteriores, Hervé de Charette, y su colega
iraní, Alí Akbar Velayati, en Damasco, hoy o mañana, para que
Teherán presione a Hizbolá en el sentido de que cese en sus
ataques contra el norte de Israel.
El portavoz francés de Exteriores rehusó hacer comentario
alguno sobre las declaraciones del Guía de la República
Islámica, el ayatolá Alí Jamenei, quien hizo un llamamiento a
Hizbolá a "atacar" a Israel tras el bombardeo sobre Cana.
También, la presidencia de la Unión Europea (UE) ha pedido el
inmediato cese de los bombardeos de Israel en el Líbano y
anunció la salida inmediata de la "troika" comunitaria,
formada por los ministros de Exteriores de Italia, España e
Irlanda, hacia Oriente Medio.
En un comunicado, la presidencia de la UE, que ahora recae en
Italia, afirma que "la noticia del bombardeo de un campo de
refugiados que produjo un número elevado de muertos y heridos
ha sido recibida por la UE con conmoción y profunda
consternación".
Por otra parte, la 95 Conferencia de la Unión
Interparlamentaria (UIP) condenó hoy en Estambul (Turquía) la
matanza de un centenar refugiados en un cuartel de la ONU en
el Líbano bombardeado por la artillería israelí, que a su
juicio, "representa un acto de terrorismo de Estado activo"
Entre otras repercusiones internacionales del conflicto
militar en el sur del Líbano, La Santa Sede expresó hoy su
"viva consternación y su clara condena" por la matanza de
Cana, en Líbano, "donde fueron alcanzados (por las bombas)
centenares de refugiados, en su mayor parte mujeres y niños".
El Departamento Humanitario de la ONU (DHA) solicitará 8,5
millones de dólares para socorrer a las víctimas de los
bombardeos.
Las cifras no definitivas difundidas por fuentes de seguridad
libanesas señalaron que el número de víctimas del bombardeo
israelí que ayer alcanzó el puesto del contingente fiyiano de
la ONU en Cana se eleva ya a 147 muertos y tres centenares de
heridos, pues se encontraron nuevos cadáveres bajo los
escombros.
Israel justificó el sangriento ataque señalando que Hizbolá
disparó anteriormente cohetes contra su territorio desde
posiciones situadas a unos 300 metros de la base de FINUL
(Fuerzas Interinas de las Naciones Unidas en el sur del
Líbano), donde se habían refugiado unos 700 civiles libaneses.
Reunión de las Naciones Unidas
Los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas
reanudaron el jueves por la noche sus discusiones sobre la
situación en el Líbano, que podrían desembocar en una
resolución de alto el fuego, indicaron diplomáticos
occidentales.
Las discusiones se realizaban en un clima de gran tensión e
intervenían en ellas el grupo árabe de la ONU, así como
Estados Unidos y Francia.
Según un proyecto de resolución, el Consejo apelará a un alto
el fuego inmediato, apoyará los esfuerzos diplomáticos para
llegar a ese fin y deplorará el bombardeo israelí del jueves
(contra un local de la ONU en el Líbano del sur, que causó 94
muertos y 105 heridos).
El texto del proyecto recordará los grandes principios como el
"estricto respeto de la integridad territorial, la soberanía e
independencia política del Líbano en sus fronteras
internacionalmente reconocidas y la seguridad de todos los
Estados de la región".
El grupo árabe de la ONU reclama que se mencione una retirada
israelí del Líbano, pero los norteamericanos se oponen.
También se opone Washington a que se exija a Israel el pago de
la destrucción causada con sus operaciones militares.
(EFE-AFP) (Diario HOY) (11A)
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