Cada jugador fija su futuro
La mayoría de equipos mantiene en reserva los detalles de los contratos con cada futbolista. La razón: para cada uno existe un pago diferenciado que, si otro se entera, genera recelos y líos internos
"El año 2003 me quedé sin liguilla y ahí se terminó todo, ya no te pagan nada", cuenta Walter Iza, refiriéndose a su última temporada en Aucas. Ahora milita en LDU, de Quito, y las cosas cambiaron: el contrato es seguro, las primas son buenas y la estabilidad le da confianza para hacer lo que más le gusta.
En esta situación viven muchos jugadores, nacionales y foráneos. La mayoría de equipos mantiene en reserva los detalles de cada contrato. "Quizá porque hay injusticia, privilegios, falta de transparencia y de una verdadera ley que nos proteja", dice un jugador del Aucas.
En el Ecuador, tras un sondeo, en casi todos los equipos hay jugadores que ganan hasta $10 mil, como sueldo nominal, pero, con los extras, llegan hasta $35 mil, como ocurre con Álex Aguinaga y Agustín Delgado. Y hay una mayoría que no supera los $500 mensuales.
En casi todos los equipos no se firma un contrato para un año calendario, sino solo lo que dura la participación en el campeonato. Un ejemplo: el Deportivo Quito, que el año pasado no logró su pase a la liguilla final. A pesar de que los integrantes del equipo no recibieron sueldo alguno durante los últimos meses de 2004, continuaron entrenándose para el actual torneo.
Sandro Borja, ex arquero del Deportivo Quito, indicó que todos los jugadores del equipo recibieron su paga hasta septiembre, que fue el último mes activo para la institución y de ahí en adelante utilizaron sus ahorros para subsistir durante el período final del año. Pero hay excepciones: el volante colombiano, Óscar Díaz, negoció su contrato hasta el 31 de diciembre.
El contrato pactado necesita obligatoriamente ser inscrito en la Secretaría de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) dentro del plazo de 15 días contados a partir de la fecha de su suscripción.
A excepción de pocos clubes, en el proceso de negociación mediante representantes, los atletas simplemente dan las pautas de lo que desean ganar y los empresarios son los encargados de negociar el contrato con la dirigencia del equipo. Al ser ellos los que manejan los contratos, obtienen entre el 10% y 15% del acuerdo pactado, cuando se trata de venta a otro equipo. Luis González, de Liga de Quito y Sandro Borja, ahora de Liga de Loja, coincidieron en que el manejo mediante apoderados es lo óptimo a la hora de definir un contrato, puesto que ellos están más capacitados para negociar.
El sueldo se "redondea" con los premios que reciben a lo largo del año: por cada partido ganado de local, de visitante o empatado. Estas recompensas se arreglan antes de cada encuentro. Este valor es el mismo para todos los futbolistas titulares mientras que los alternos reciben la mitad de esta cantidad. De igual manera, se acuerdan gratificaciones especiales por clasificación a la Copa Libertadores de América o a la Copa Sudamericana. Otro ingreso son los contratos publicitarios. Son comerciales que duran dos o tres meses, según la empresa, dijo Franklin Salas, de Liga.
Otra forma de garantizar sus ingresos es la inversión. Alfonso Obregón posee su propio negocio. Tengo unas volquetas que me dan un ingreso adicional y, cuando tengo trabajo, me va muy bien. Será otra entrada para después de mi retiro. En el año 2003, captó un salario de $6 000 mensuales aparte de los sobresueldos y premios como la obtención del campeonato nacional.
El subgerente y director de la página web de Liga de Quito, Fabián Espinoza, señaló que los jugadores no declaran todas sus ganancias al Servicio de Rentas Internas (SRI), puesto que el porcentaje que esta entidad retiene es sumamente elevado y no es conveniente para los futbolistas. Únicamente presentan un porcentaje de su sueldo, dentro de este valor no constan ni las primas ni los premios adicionales como incentivos por partidos ganados, participación en torneos internacionales, los llamados clásicos, entre otros.
El "regimen salarial" del fútbol ecuatoriano se fija regularmente en los siguientes términos: el jugador, al firmar el contrato, acuerda una prima anual, generalmente la suma de todos los sueldos. Para ilustrar: si el sueldo mensual es de $ 1 000, la prima anual es de $10 000. Casi siempre los jugadores piden que el 12% de IVA lo asuma el club, a la hora de rendir cuentas al SRI.
En El Nacional se realizan contratos por uno, dos, tres y cuatro años, "con todas las de ley, incluido el Seguro Social y todos los décimos", indica el coronel Galo Moscoso, gerente de esa institución. Uno de sus jugadores lo confirma, pero hace una observación: "Aquí no se sabe por qué uno gana más que otro y no se valora bien el esfuerzo de todos. Solo fíjese en el caso de Ebelio Ordóñez: se fue porque aquí no tiene futuro, aunque haya sido el goleador máximo del torneo".
Algo similar ocurre en Liga de Quito: los futbolistas perciben un salario fijo desde que se encuentran en la categoría Sub 18, dijo el sub-gerente de la institución azucena. El sueldo mínimo de estos es de $300 mensuales. La paga comprendida entre las categorías Sub 18 y Sub 20 oscila entre $300 y $800 al mes. Además de esta remuneración, el club brinda gratuitamente atención médica, educación y en algunos casos, hasta vivienda y comida para los jugadores que son originarios de otras provincias, sostuvo Fabián Espinoza.
A todo esto se suma la existencia de equipos que dependen mucho del aporte de los dirigentes y de algunos hinchas. Por lo general, en los clubes de segunda categoría hay jugadores que reciben su sueldo directamente del bolsillo del presidente. (OP/AG/MS)
Los contratos son reservados
Las leyes amparan al futbolista cuando se incumplen los pagos, siempre y cuando exista la denuncia por parte del jugador. Por el desconocimiento de los términos legales, los deportistas no siempre reclaman sus derechos
Una dificultad generalizada entre los jugadores ecuatorianos es que no tienen suficiente asesoría para firmar un contrato. Bien sea por su procedencia social o por la "habilidad" de los empresarios del deporte, muchos caen en la trampa de firmar cualquier papel, según cuentan varios futbolistas.
Para presentar una denuncia a la Asociación de Futbolistas del Ecuador (AFE), el deportista o su abogado defensor debe hacer contacto telefónico con la institución, si se trata de deudas o incumplimiento de contrato laboral.
Por ejemplo, hay claúsulas en los contratos laborales de los futbolistas (palabras que lo pueden confundir) donde se manifiesta pagos y beneficios por un partido, clasificación o adjudicación de campeonato, pero a veces se añade una trampa: el bajo rendimiento físico (que no existe). "Para dar por terminado un contrato debe existir el visto bueno de la Subsecretaría de Trabajo o un inspector. Y, en el Ecuador, no se cumple. Entonces hay ilegalidad", dice el presidente de la AFE, Emilio Valencia.
Por concepto de multas (tarjetas amarillas y rojas), los clubes cometen abusos, según la AFE, pues estas deben ser desde el 10% hasta el 25%. Para dar por terminado un contrato laboral, debe existir incumplimiento por una de las dos partes (jugador o contratante).
Las leyes amparan al futbolista cuando hay incumplimiento por retraso en el pago de sus haberes. Ahí, el empleado puede reclamar al club o denunciar el caso a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
Hay contratos en los que se señala que un jugador no puede hacer publicidad en la cancha. Es decir, cuando tiene que lucir la casaca del plantel con publicidad de firmas comerciales (bebidas hidratantes u alcohólicas, celulares, artefactos eléctricos, tarjetas de crédito, etcétera). No obstante, fuera del campo de juego, tiene la libertad para firmar contrato con cualquier empresa privada.
La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) recomienda a los directivos de los clubes elaborar contratos por entre uno y 10 años, a fin de que el plantel protega su inversión y activos.
Una vez que se termina un contrato, el jugador tiene el derecho -si es dueño de su pase- de negociar sus servicios laborales (también llamados derechos deportivos y federativos).
Si el club no le ha ofrecido la oportunidad de renovar su contrato, tiene la ventaja de poder negociarlo con quien crea conveniente, pues cuenta con el aval de la FIFA.
Los jugadores Pavel Caicedo y Richard Borja, por ejemplo, afrontan problemas laborales con su ex equipo (Emelec), ya que no se les renovó el contrato.
En Barcelona y Emelec hay jugadores que ganan según su ubicación técnica, anotaciones y desempeño por temporada (premios). Es decir, si un delantero, durante el torneo local, ha marcado una decena de goles, a fin de mes recibe un rubro adicional (que no se considera ilegal), que puede ser de $500 y $1 000.
Fredy Brito, del Centro Deportivo Olmedo, se limitó a decir que su contrato es por cinco años: "No revelamos cuánto ganamos". Y para el gerente de este club, Fausto Navarrete, las cuentas son secretas; la medida quiere evitar "problemas con el Servicio de Rentas Internas. Es una política no revelar el manejo económico". Eso sí, aduce que el Olmedo está al día con el fisco: "Somos el único club que es contribuyente especial".
En el SRI, el Olmedo consta como contribuyente especial y no tiene deudas con el Fisco. Se le grava el 12% al boletaje que emite. Según Jean Carrera López, director regional del SRI, una modificación en el Reglamento de Comprobantes de venta retención obliga a los clubes a pedir autorización al SRI para que se emitan los boletos. Respecto a la venta de jugadores, esta se encuentra exenta del IVA, debido a que no es su actividad principal.
Pese a ser un club privado, Olmedo recibió 17 aportes del Consejo Provincial de Chimborazo durante 2002 y 2003, que suman $184 738,83. Con eso aumentó su patrimonio al edificar su complejo deportivo. "Se hacen gestiones para otra asignación", dice Navarrete. (OP/CHM/JP)
LA HORA DE LA INVERSIÓN
La AFE realiza visitas mensuales
En Loja, el año anterior, el futbolista mejor pagado bordeaba los $1 000. Ahora, por el ascenso a la Serie A, el pago no solo se duplicó, sino que fue más allá. Un futbolista está ganando entre los $4 000 y $5 000 y los que menos ganan son los jóvenes suplentes, entre $200 y $300.
El equipo lojano invierte, según su presidente, Max González, alrededor de $1 500 000, para afrontar su primera participación en un Campeonato Nacional de Fútbol en la primera categoría.
Los peritos de la Asociación de Futbolistas del Ecuador (AFE) realizan visitas cada 30 días a todos los clubes para brindar asesoramiento y dialogar con los jugadores para verificar su situación laboral.
Los equipos de la Serie A y B del torneo nacional aportan con $30 y $15 mensuales, respectivamente, para utilizar los servicios profesionales de la AFE.
El directorio de la AFE está compuesto por Emilio Valencia (presidente), Juan Ayala (vicepresidente), Jorge Coroso (secretario), José Francisco Cevallos, Alfonso Obregón e Iván Hurtado (vocales principales), Robin Pico, Gerson Soto y Marlon Ayoví (vocales suplentes). El organismo se mantiene con un presupuesto anual de $40 mil y $50 mil. (CHM/RMT)
En el Austro, subieron cotizaciones y sueldos
Aunque el torneo de mayor atracción nacional empieza hoy, para varios futbolistas todavía está pendiente la definición de su contrato y de sus pases
Los términos de los contratos con los futbolistas son el secreto mejor guardado por los dirigentes deportivos del Ecuador.
En el sur del país, donde el boom del fútbol volvió con la conquista del campeonato de 2004 por parte de D. Cuenca, no trascienden ni los costos de las transferencias, peor los acuerdos a los que llegan los dirigentes con los futbolistas.
Un hecho preocupa a los hinchas y a algunos integrantes del club: ¿cuánto pagó la dirigencia azuaya por el pase de Cristian Carnero? Aunque la práctica es que sea en reserva, otros jugadores miran con "sana envidia" que se le pague por encima de los $10 mil.
Sin embargo, los periodistas especulan y señalan que el año anterior, el mensual de un futbolista llegaba a los $10 mil, a más de dotarle de departamento y vehículo como parte de las primas y premios y, en algunos casos, incluso ayuda para que sus hijos ingresaran a establecimientos de educación.
"En Deportivo Cuenca, ahora los mensuales deben pasar de los $13 mil en muchos de los casos", dijo el periodista Rafael Guamán, agregando que los contratos se guardan "para evitar pugnas internas entre los mismos futbolistas".
En cambio, el periodista Juan Pablo Campoverde señala que el año anterior, en Deportivo Cuenca, el que más ganaba era $10 mil y los que menos lo hacían, eran los jóvenes suplentes que recibían entre $500 y $1 000.
Según los dirigentes del cuadro campeón, los futbolistas y el club están exentos del pago al SRI, debido a que cada jugador tiene una relación laboral y no presta servicios. También señalan que los pagos al IESS se debe cumplir para con todos los integrantes, como están haciendo actualmente.
Según el presidente de la Comisión de Fútbol de la entidad, Mario Esteban Espinoza, el equipo va a invertir cerca de $4 millones este año para afrontar Copa Libertadores y Campeonato Nacional.
A condición de mantener la reserva, algunos jugadores revelaron algunas cifras: NN1, que el año anterior ganó $3 500, ahora, por el trabajo que hizo en el club y por ser campeón, llegó a un acuerdo con los dirigentes y firmó por $5 500.
NN2, que el año anterior ganó $5 300, y su pretensión para este fue de $13 mil, acordó y firmó por $ 8 500.
En la Liga de Loja, un jugador ganaba, el año anterior alrededor de $750, ahora, por la clasificación de su equipo, subió a los $3 500.
"No es fácil la negociación, muchas de las veces no les cumplen los contratos y quedan grandes deudas que nunca pueden ser cobradas", dice uno de los integrantes del club cuencano.
Y otro acota: "A mitad de año nos despiden, pese a que existe un contrato firmado, se entabla el juicio, pero no siempre se gana". (RMT/OP)
PUNTO DE VISTA
Un sector que genera y no explica
¿Qué impide conocer cuánto gana un jugador de fútbol?
A la afición ecuatoriana se le informa muy poco de lo que sus ídolos perciben. Parecería que son seres ajenos a la realidad económica del país. Sin embargo, los más famosos son admirados por su ascenso social, luego de ganar prestigio y gloria antes de cumplir los 30 años de edad. Del otro lado está el drama de muchos futbolistas que, tras una lesión o por su bajo rendimiento, quedan en la miseria, pues dejaron todo de lado por practicar su deporte favorito. No cuentan con un sistema de seguridad que los proteja.
Y también, como lo detalla este informe, no existe claridad de lo que tienen que contribuir al Fisco ni los jugadores y ni los equipos de fútbol, tomando en cuenta que perciben grandes sumas de dinero por auspicios publicitarios, contribuciones especiales y taquillas de los estadios.
Parecería que es una zona del Ecuador que no es conocida a fondo, a pesar de estar en escena pública todos los días de la semana.
Por los jugadores y su bienestar, así como por la transparencia que se exige a todos los sectores, ¿es importante conocer en detalle los ingresos, las cuentas, los contratos y las negociaciones que se hacen en este campo?
Claro, se dirá que se trata de un asunto privado; pero existe una responsabilidad social. De hecho, el deporte, y todo el negocio que existe en él, crea una pedagogía social que afecta a la sociedad ecuatoriana. (OP) (Blanco y Negro)
La mayoría de equipos mantiene en reserva los detalles de los contratos con cada futbolista. La razón: para cada uno existe un pago diferenciado que, si otro se entera, genera recelos y líos internos
"El año 2003 me quedé sin liguilla y ahí se terminó todo, ya no te pagan nada", cuenta Walter Iza, refiriéndose a su última temporada en Aucas. Ahora milita en LDU, de Quito, y las cosas cambiaron: el contrato es seguro, las primas son buenas y la estabilidad le da confianza para hacer lo que más le gusta.
En esta situación viven muchos jugadores, nacionales y foráneos. La mayoría de equipos mantiene en reserva los detalles de cada contrato. "Quizá porque hay injusticia, privilegios, falta de transparencia y de una verdadera ley que nos proteja", dice un jugador del Aucas.
En el Ecuador, tras un sondeo, en casi todos los equipos hay jugadores que ganan hasta $10 mil, como sueldo nominal, pero, con los extras, llegan hasta $35 mil, como ocurre con Álex Aguinaga y Agustín Delgado. Y hay una mayoría que no supera los $500 mensuales.
En casi todos los equipos no se firma un contrato para un año calendario, sino solo lo que dura la participación en el campeonato. Un ejemplo: el Deportivo Quito, que el año pasado no logró su pase a la liguilla final. A pesar de que los integrantes del equipo no recibieron sueldo alguno durante los últimos meses de 2004, continuaron entrenándose para el actual torneo.
Sandro Borja, ex arquero del Deportivo Quito, indicó que todos los jugadores del equipo recibieron su paga hasta septiembre, que fue el último mes activo para la institución y de ahí en adelante utilizaron sus ahorros para subsistir durante el período final del año. Pero hay excepciones: el volante colombiano, Óscar Díaz, negoció su contrato hasta el 31 de diciembre.
El contrato pactado necesita obligatoriamente ser inscrito en la Secretaría de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) dentro del plazo de 15 días contados a partir de la fecha de su suscripción.
A excepción de pocos clubes, en el proceso de negociación mediante representantes, los atletas simplemente dan las pautas de lo que desean ganar y los empresarios son los encargados de negociar el contrato con la dirigencia del equipo. Al ser ellos los que manejan los contratos, obtienen entre el 10% y 15% del acuerdo pactado, cuando se trata de venta a otro equipo. Luis González, de Liga de Quito y Sandro Borja, ahora de Liga de Loja, coincidieron en que el manejo mediante apoderados es lo óptimo a la hora de definir un contrato, puesto que ellos están más capacitados para negociar.
El sueldo se "redondea" con los premios que reciben a lo largo del año: por cada partido ganado de local, de visitante o empatado. Estas recompensas se arreglan antes de cada encuentro. Este valor es el mismo para todos los futbolistas titulares mientras que los alternos reciben la mitad de esta cantidad. De igual manera, se acuerdan gratificaciones especiales por clasificación a la Copa Libertadores de América o a la Copa Sudamericana. Otro ingreso son los contratos publicitarios. Son comerciales que duran dos o tres meses, según la empresa, dijo Franklin Salas, de Liga.
Otra forma de garantizar sus ingresos es la inversión. Alfonso Obregón posee su propio negocio. Tengo unas volquetas que me dan un ingreso adicional y, cuando tengo trabajo, me va muy bien. Será otra entrada para después de mi retiro. En el año 2003, captó un salario de $6 000 mensuales aparte de los sobresueldos y premios como la obtención del campeonato nacional.
El subgerente y director de la página web de Liga de Quito, Fabián Espinoza, señaló que los jugadores no declaran todas sus ganancias al Servicio de Rentas Internas (SRI), puesto que el porcentaje que esta entidad retiene es sumamente elevado y no es conveniente para los futbolistas. Únicamente presentan un porcentaje de su sueldo, dentro de este valor no constan ni las primas ni los premios adicionales como incentivos por partidos ganados, participación en torneos internacionales, los llamados clásicos, entre otros.
El "regimen salarial" del fútbol ecuatoriano se fija regularmente en los siguientes términos: el jugador, al firmar el contrato, acuerda una prima anual, generalmente la suma de todos los sueldos. Para ilustrar: si el sueldo mensual es de $ 1 000, la prima anual es de $10 000. Casi siempre los jugadores piden que el 12% de IVA lo asuma el club, a la hora de rendir cuentas al SRI.
En El Nacional se realizan contratos por uno, dos, tres y cuatro años, "con todas las de ley, incluido el Seguro Social y todos los décimos", indica el coronel Galo Moscoso, gerente de esa institución. Uno de sus jugadores lo confirma, pero hace una observación: "Aquí no se sabe por qué uno gana más que otro y no se valora bien el esfuerzo de todos. Solo fíjese en el caso de Ebelio Ordóñez: se fue porque aquí no tiene futuro, aunque haya sido el goleador máximo del torneo".
Algo similar ocurre en Liga de Quito: los futbolistas perciben un salario fijo desde que se encuentran en la categoría Sub 18, dijo el sub-gerente de la institución azucena. El sueldo mínimo de estos es de $300 mensuales. La paga comprendida entre las categorías Sub 18 y Sub 20 oscila entre $300 y $800 al mes. Además de esta remuneración, el club brinda gratuitamente atención médica, educación y en algunos casos, hasta vivienda y comida para los jugadores que son originarios de otras provincias, sostuvo Fabián Espinoza.
A todo esto se suma la existencia de equipos que dependen mucho del aporte de los dirigentes y de algunos hinchas. Por lo general, en los clubes de segunda categoría hay jugadores que reciben su sueldo directamente del bolsillo del presidente. (OP/AG/MS)
Los contratos son reservados
Las leyes amparan al futbolista cuando se incumplen los pagos, siempre y cuando exista la denuncia por parte del jugador. Por el desconocimiento de los términos legales, los deportistas no siempre reclaman sus derechos
Una dificultad generalizada entre los jugadores ecuatorianos es que no tienen suficiente asesoría para firmar un contrato. Bien sea por su procedencia social o por la "habilidad" de los empresarios del deporte, muchos caen en la trampa de firmar cualquier papel, según cuentan varios futbolistas.
Para presentar una denuncia a la Asociación de Futbolistas del Ecuador (AFE), el deportista o su abogado defensor debe hacer contacto telefónico con la institución, si se trata de deudas o incumplimiento de contrato laboral.
Por ejemplo, hay claúsulas en los contratos laborales de los futbolistas (palabras que lo pueden confundir) donde se manifiesta pagos y beneficios por un partido, clasificación o adjudicación de campeonato, pero a veces se añade una trampa: el bajo rendimiento físico (que no existe). "Para dar por terminado un contrato debe existir el visto bueno de la Subsecretaría de Trabajo o un inspector. Y, en el Ecuador, no se cumple. Entonces hay ilegalidad", dice el presidente de la AFE, Emilio Valencia.
Por concepto de multas (tarjetas amarillas y rojas), los clubes cometen abusos, según la AFE, pues estas deben ser desde el 10% hasta el 25%. Para dar por terminado un contrato laboral, debe existir incumplimiento por una de las dos partes (jugador o contratante).
Las leyes amparan al futbolista cuando hay incumplimiento por retraso en el pago de sus haberes. Ahí, el empleado puede reclamar al club o denunciar el caso a la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
Hay contratos en los que se señala que un jugador no puede hacer publicidad en la cancha. Es decir, cuando tiene que lucir la casaca del plantel con publicidad de firmas comerciales (bebidas hidratantes u alcohólicas, celulares, artefactos eléctricos, tarjetas de crédito, etcétera). No obstante, fuera del campo de juego, tiene la libertad para firmar contrato con cualquier empresa privada.
La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) recomienda a los directivos de los clubes elaborar contratos por entre uno y 10 años, a fin de que el plantel protega su inversión y activos.
Una vez que se termina un contrato, el jugador tiene el derecho -si es dueño de su pase- de negociar sus servicios laborales (también llamados derechos deportivos y federativos).
Si el club no le ha ofrecido la oportunidad de renovar su contrato, tiene la ventaja de poder negociarlo con quien crea conveniente, pues cuenta con el aval de la FIFA.
Los jugadores Pavel Caicedo y Richard Borja, por ejemplo, afrontan problemas laborales con su ex equipo (Emelec), ya que no se les renovó el contrato.
En Barcelona y Emelec hay jugadores que ganan según su ubicación técnica, anotaciones y desempeño por temporada (premios). Es decir, si un delantero, durante el torneo local, ha marcado una decena de goles, a fin de mes recibe un rubro adicional (que no se considera ilegal), que puede ser de $500 y $1 000.
Fredy Brito, del Centro Deportivo Olmedo, se limitó a decir que su contrato es por cinco años: "No revelamos cuánto ganamos". Y para el gerente de este club, Fausto Navarrete, las cuentas son secretas; la medida quiere evitar "problemas con el Servicio de Rentas Internas. Es una política no revelar el manejo económico". Eso sí, aduce que el Olmedo está al día con el fisco: "Somos el único club que es contribuyente especial".
En el SRI, el Olmedo consta como contribuyente especial y no tiene deudas con el Fisco. Se le grava el 12% al boletaje que emite. Según Jean Carrera López, director regional del SRI, una modificación en el Reglamento de Comprobantes de venta retención obliga a los clubes a pedir autorización al SRI para que se emitan los boletos. Respecto a la venta de jugadores, esta se encuentra exenta del IVA, debido a que no es su actividad principal.
Pese a ser un club privado, Olmedo recibió 17 aportes del Consejo Provincial de Chimborazo durante 2002 y 2003, que suman $184 738,83. Con eso aumentó su patrimonio al edificar su complejo deportivo. "Se hacen gestiones para otra asignación", dice Navarrete. (OP/CHM/JP)
LA HORA DE LA INVERSIÓN
La AFE realiza visitas mensuales
En Loja, el año anterior, el futbolista mejor pagado bordeaba los $1 000. Ahora, por el ascenso a la Serie A, el pago no solo se duplicó, sino que fue más allá. Un futbolista está ganando entre los $4 000 y $5 000 y los que menos ganan son los jóvenes suplentes, entre $200 y $300.
El equipo lojano invierte, según su presidente, Max González, alrededor de $1 500 000, para afrontar su primera participación en un Campeonato Nacional de Fútbol en la primera categoría.
Los peritos de la Asociación de Futbolistas del Ecuador (AFE) realizan visitas cada 30 días a todos los clubes para brindar asesoramiento y dialogar con los jugadores para verificar su situación laboral.
Los equipos de la Serie A y B del torneo nacional aportan con $30 y $15 mensuales, respectivamente, para utilizar los servicios profesionales de la AFE.
El directorio de la AFE está compuesto por Emilio Valencia (presidente), Juan Ayala (vicepresidente), Jorge Coroso (secretario), José Francisco Cevallos, Alfonso Obregón e Iván Hurtado (vocales principales), Robin Pico, Gerson Soto y Marlon Ayoví (vocales suplentes). El organismo se mantiene con un presupuesto anual de $40 mil y $50 mil. (CHM/RMT)
En el Austro, subieron cotizaciones y sueldos
Aunque el torneo de mayor atracción nacional empieza hoy, para varios futbolistas todavía está pendiente la definición de su contrato y de sus pases
Los términos de los contratos con los futbolistas son el secreto mejor guardado por los dirigentes deportivos del Ecuador.
En el sur del país, donde el boom del fútbol volvió con la conquista del campeonato de 2004 por parte de D. Cuenca, no trascienden ni los costos de las transferencias, peor los acuerdos a los que llegan los dirigentes con los futbolistas.
Un hecho preocupa a los hinchas y a algunos integrantes del club: ¿cuánto pagó la dirigencia azuaya por el pase de Cristian Carnero? Aunque la práctica es que sea en reserva, otros jugadores miran con "sana envidia" que se le pague por encima de los $10 mil.
Sin embargo, los periodistas especulan y señalan que el año anterior, el mensual de un futbolista llegaba a los $10 mil, a más de dotarle de departamento y vehículo como parte de las primas y premios y, en algunos casos, incluso ayuda para que sus hijos ingresaran a establecimientos de educación.
"En Deportivo Cuenca, ahora los mensuales deben pasar de los $13 mil en muchos de los casos", dijo el periodista Rafael Guamán, agregando que los contratos se guardan "para evitar pugnas internas entre los mismos futbolistas".
En cambio, el periodista Juan Pablo Campoverde señala que el año anterior, en Deportivo Cuenca, el que más ganaba era $10 mil y los que menos lo hacían, eran los jóvenes suplentes que recibían entre $500 y $1 000.
Según los dirigentes del cuadro campeón, los futbolistas y el club están exentos del pago al SRI, debido a que cada jugador tiene una relación laboral y no presta servicios. También señalan que los pagos al IESS se debe cumplir para con todos los integrantes, como están haciendo actualmente.
Según el presidente de la Comisión de Fútbol de la entidad, Mario Esteban Espinoza, el equipo va a invertir cerca de $4 millones este año para afrontar Copa Libertadores y Campeonato Nacional.
A condición de mantener la reserva, algunos jugadores revelaron algunas cifras: NN1, que el año anterior ganó $3 500, ahora, por el trabajo que hizo en el club y por ser campeón, llegó a un acuerdo con los dirigentes y firmó por $5 500.
NN2, que el año anterior ganó $5 300, y su pretensión para este fue de $13 mil, acordó y firmó por $ 8 500.
En la Liga de Loja, un jugador ganaba, el año anterior alrededor de $750, ahora, por la clasificación de su equipo, subió a los $3 500.
"No es fácil la negociación, muchas de las veces no les cumplen los contratos y quedan grandes deudas que nunca pueden ser cobradas", dice uno de los integrantes del club cuencano.
Y otro acota: "A mitad de año nos despiden, pese a que existe un contrato firmado, se entabla el juicio, pero no siempre se gana". (RMT/OP)
PUNTO DE VISTA
Un sector que genera y no explica
¿Qué impide conocer cuánto gana un jugador de fútbol?
A la afición ecuatoriana se le informa muy poco de lo que sus ídolos perciben. Parecería que son seres ajenos a la realidad económica del país. Sin embargo, los más famosos son admirados por su ascenso social, luego de ganar prestigio y gloria antes de cumplir los 30 años de edad. Del otro lado está el drama de muchos futbolistas que, tras una lesión o por su bajo rendimiento, quedan en la miseria, pues dejaron todo de lado por practicar su deporte favorito. No cuentan con un sistema de seguridad que los proteja.
Y también, como lo detalla este informe, no existe claridad de lo que tienen que contribuir al Fisco ni los jugadores y ni los equipos de fútbol, tomando en cuenta que perciben grandes sumas de dinero por auspicios publicitarios, contribuciones especiales y taquillas de los estadios.
Parecería que es una zona del Ecuador que no es conocida a fondo, a pesar de estar en escena pública todos los días de la semana.
Por los jugadores y su bienestar, así como por la transparencia que se exige a todos los sectores, ¿es importante conocer en detalle los ingresos, las cuentas, los contratos y las negociaciones que se hacen en este campo?
Claro, se dirá que se trata de un asunto privado; pero existe una responsabilidad social. De hecho, el deporte, y todo el negocio que existe en él, crea una pedagogía social que afecta a la sociedad ecuatoriana. (OP) (Blanco y Negro)
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