Quito. 02 nov 97. Fabián Alarcón, presidente interino de la
República, mantiene su postura frente a los paros: dentro de
la Constitución se impedirá que se "secuestre al país". Ahora
estudia la situación de Raúl Baca y defiende la coherencia de
los cambios en el Gabinete.
ENTREVISTA
¿Hay apertura en su Gobierno? ¿El nombramiento de Wilson
Merino como Secretario de la Administración no demuestra que
usted se repliega sobre su propio partido y sobre el espacio
político?
No. La apertura está dada. Le doy algún nombre: el Ministro de
la Vivienda, un hombre de la empresa privada y no un político.
Usted anunció cambios en esta segunda etapa. ¿Esos cambios son
meter al Gobierno más gente de su partido?
No. Los cambios no son ni de meter ni de sacar gente. Los
cambios son conceptuales en el sentido de decir: primero vamos
a planificar el asunto del desarrollo del país con el sector
privado. En ese sentido, es de ética conceptual, de ahí una
contradicción, si yo digo eso y pongo una persona totalmente
de otro criterio en esa posición, el mensaje lo da el
Presidente de la República y el vocero del Gobierno, el
Secretario General de la Administración que repito tiene que
tener como ningún otro funcionario las propiedades de
identificación plenas del Presidente de la República. Lo único
que hace es reflejar, transmitir los conceptos del Presidente
de la República .
Es otro mensaje que estoy dando dentro de la misma línea de
coherencia del Gobierno.
La situación del ministro de Energía, Raúl Baca, pone al
Gobierno en apuros. Al parecer, para su Administración no
sería favorable ni que renuncie ni que se quede en el puesto
para afrontar un juicio político con el desgaste que este
implica. ¿Qué hacer con Raúl Baca?
En las próximas horas voy a conversar con el Ministro Baca
sobre el Congreso para saber cuál es la posición final que
tiene sobre esa materia, yo he hecho ya algunos análisis sobre
esto, pensando en el país, en el Gobierno y en las personas,
tengo mi concepción definida. Pero no puedo adelantarla antes
de hablar con Baca.
¿Hacia dónde va su Administración? Usted anunció para esta
segunda etapa cambios de procedimientos, pero no ha quedado
claro cuáles. ¿En qué puntos específicos tomará decisiones,
cómo evitará que se hagan públicas discrepancias internas en
el Régimen?
De acuerdo, usted ha tocado algunos aspectos que están dentro
del cambio y conciliación de procedimientos. Puede hacerse una
autocrítica y es saludable. Yo creo que muchas de las
decisiones que hemos tomado oportunamente no han sido tan
rápidamente ejecutadas por otros organismos. Al haber tomado
decisiones que las he tomado porque el caso por ejemplo del
Reglamento de la Ley del Sector Eléctrico, estuvo en mi
despacho más de 48 horas y fue aprobado. La demora no es culpa
ni del Ministro, ni de nadie sino del sistema administrativo,
entonces eso es un cambio importante que se tiene que hacer,
darle mayor agilidad y las decisiones que se toman sean
ejecutadas con mucha mayor rapidez.
No permitiré diferencias públicas. Toda diferencia tiene que
darse en el Gobierno, está bien que se den, inclusive pueden
darse en varios puntos de vista sobre un problema pero no
puede haber falta de coherencia en el Gobierno.
¿Va a haber más cambios, a parte de los anunciados, en el
Gabinete de Ministros?
No. Ha habido rápidamente un análisis de todos. Mire: el
Ministro de Vivienda se queda, el Ministro de Industrias está
haciendo gran papel, inclusive ha presentado reformas muy
importantes sobre la inversión extranjera en el país. El
Ministro de Obras Públicas está trabajando muy bien, es todo
un profesional muy activo en el país. La Ministra de Medio
Ambiente es una ministra de extraordinarias cualidades, ha
preparado en poquísimo tiempo la Ley de Medio Ambiente, la de
Galápagos, tiene una actividad muy importante. El Ministro de
Educación tiene gran trascendencia; el Ministro de Salud
también; el Ministro de Trabajo ha logrado el entendimiento
con trabajadores y empresarios, usted verá que no hay
prácticamente huelgas en el país. El Ministro de Finanzas está
con gran ímpetu de renovación, de modernización.
He analizado Ministro por Ministro para ver qué puedo
dinamizar en cuanto al estilo de Gobierno.
Su Gobierno tiene poco margen de acción frente al Congreso.
Depende del trabajo legislativo para la aprobación de leyes.
¿No teme una maniobra del Partido Social Cristiano en el
Congreso en contra suya?
Como todo gobierno dependemos de que el Congreso nos apruebe
las leyes correspondientes más aún este Gobierno que tiene dos
diputados. Indudablemente que dependemos en gran medida de la
agilidad con la que el Congreso pueda tomar las decisiones.
Hay algunos proyectos que están en el Congreso, la Ley de
Solicitud de Costos, la Ley de Mercado de Valores, están las
reformas a la Ley del Sector Eléctrico que aspiro que el
Congreso lo más pronto agilite, porque ya voy a enviar otras.
¿Entonces, como interpreta la actitud del PSC frente al
ministro Raúl Baca?
Mire, yo no quisiera calificar porque es un derecho que tienen
los legisladores que no están de acuerdo con los
procedimientos del Ministro y pueden llegar a juicio político.
¿Pero esto no le da, por decirlo así, "mala espina"?
Yo no me atrevería a decir que es una mala espina o que tenga
el presentimiento de que quieren obstruir al Gobierno, creo
que ellos también tienen sus concepciones acertadas o erradas
que tienen derecho a practicarlas, yo lo he oído, fui
legislador y conozco y sé las funciones que tiene el Congreso
y es una cuestión clave para el Congreso la fiscalización,
pero la cosa es que yo no comparto en absoluto los argumentos
para interpelar al ministro Baca, pero eso es otra cosa.
Yo aspiro que al menos la opinión pública, que como nunca está
actuando, trabajando, para que haya unas elecciones para la
Asamblea que si ahora cualquier sector a pesar de que está
convencido de que eso es necesario se opone a eso o no da
trámite qué le va a decir al país cuando sean candidatos, qué
reformas van a hacer en la Asamblea Nacional.
Frente a los paros y huelgas, la mayoría injustificados, su
Subsecretario de Gobierno habló de una política de "mano
dura". Pero es bien sabido que frente a los paros de la salud
y la educación las movilizaciones por decreto no dan
resultado. ¿En qué está pensando usted cuando se habla de
"mano dura"?
Cuando yo me hice cargo del Gobierno en febrero había una
sociedad "hipertrofiada" eso significaba que todos los
sectores del país tenían una activa participación por el
cambio institucional, se sentían con mucho derecho para
actuar, para decidir, eso no es malo en la medida en que no se
distorsione, en que esa participación sea canalizada, el
ambiente por tanto de febrero, marzo, abril, mayo, etc. era un
ambiente en que se debía actuar con mucho cuidado porque era
una sociedad muy susceptible de que cualquier actitud no
reflexionada, no pensada por parte del gobernante pudiera
haber ocasionado peores enfrentamientos con los sectores
sociales del país.
¿El país qué quiere en este momento? El país quiere orden,
tranquilidad, y cambio pero dentro de la Asamblea Nacional. Si
es que percibimos cualquier actitud de paro, de violencia, de
pequeños grupos importantes, pero lógicamente pequeños, que
puedan "secuestrar" al país en determinado momento,
interrumpan servicios básicos, entonces interpretando ese
mensaje de la actual sociedad, la posición del Gobierno en
cuanto a su procedimiento cambia. Si anteriormente agoté el
diálogo, y más allá de lo que pueda opinarse en cada caso fue
prácticamente lo que el Gobierno planteó lo que se acordó,
creo que el país con esas actitudes de rechazo a toda medida
de hecho está diciendo al Gobierno -y ese es en un mensaje
claro- que tiene actuar de acuerdo a la Constitución. No me
salté nada, actuaré respetando los derechos humanos pero
utilizando todos los mecanismos que me permiten para frenar
cualquier intento de paro que perjudique a los ecuatorianos.
(Texto tomado de El Comercio)
República, mantiene su postura frente a los paros: dentro de
la Constitución se impedirá que se "secuestre al país". Ahora
estudia la situación de Raúl Baca y defiende la coherencia de
los cambios en el Gabinete.
ENTREVISTA
¿Hay apertura en su Gobierno? ¿El nombramiento de Wilson
Merino como Secretario de la Administración no demuestra que
usted se repliega sobre su propio partido y sobre el espacio
político?
No. La apertura está dada. Le doy algún nombre: el Ministro de
la Vivienda, un hombre de la empresa privada y no un político.
Usted anunció cambios en esta segunda etapa. ¿Esos cambios son
meter al Gobierno más gente de su partido?
No. Los cambios no son ni de meter ni de sacar gente. Los
cambios son conceptuales en el sentido de decir: primero vamos
a planificar el asunto del desarrollo del país con el sector
privado. En ese sentido, es de ética conceptual, de ahí una
contradicción, si yo digo eso y pongo una persona totalmente
de otro criterio en esa posición, el mensaje lo da el
Presidente de la República y el vocero del Gobierno, el
Secretario General de la Administración que repito tiene que
tener como ningún otro funcionario las propiedades de
identificación plenas del Presidente de la República. Lo único
que hace es reflejar, transmitir los conceptos del Presidente
de la República .
Es otro mensaje que estoy dando dentro de la misma línea de
coherencia del Gobierno.
La situación del ministro de Energía, Raúl Baca, pone al
Gobierno en apuros. Al parecer, para su Administración no
sería favorable ni que renuncie ni que se quede en el puesto
para afrontar un juicio político con el desgaste que este
implica. ¿Qué hacer con Raúl Baca?
En las próximas horas voy a conversar con el Ministro Baca
sobre el Congreso para saber cuál es la posición final que
tiene sobre esa materia, yo he hecho ya algunos análisis sobre
esto, pensando en el país, en el Gobierno y en las personas,
tengo mi concepción definida. Pero no puedo adelantarla antes
de hablar con Baca.
¿Hacia dónde va su Administración? Usted anunció para esta
segunda etapa cambios de procedimientos, pero no ha quedado
claro cuáles. ¿En qué puntos específicos tomará decisiones,
cómo evitará que se hagan públicas discrepancias internas en
el Régimen?
De acuerdo, usted ha tocado algunos aspectos que están dentro
del cambio y conciliación de procedimientos. Puede hacerse una
autocrítica y es saludable. Yo creo que muchas de las
decisiones que hemos tomado oportunamente no han sido tan
rápidamente ejecutadas por otros organismos. Al haber tomado
decisiones que las he tomado porque el caso por ejemplo del
Reglamento de la Ley del Sector Eléctrico, estuvo en mi
despacho más de 48 horas y fue aprobado. La demora no es culpa
ni del Ministro, ni de nadie sino del sistema administrativo,
entonces eso es un cambio importante que se tiene que hacer,
darle mayor agilidad y las decisiones que se toman sean
ejecutadas con mucha mayor rapidez.
No permitiré diferencias públicas. Toda diferencia tiene que
darse en el Gobierno, está bien que se den, inclusive pueden
darse en varios puntos de vista sobre un problema pero no
puede haber falta de coherencia en el Gobierno.
¿Va a haber más cambios, a parte de los anunciados, en el
Gabinete de Ministros?
No. Ha habido rápidamente un análisis de todos. Mire: el
Ministro de Vivienda se queda, el Ministro de Industrias está
haciendo gran papel, inclusive ha presentado reformas muy
importantes sobre la inversión extranjera en el país. El
Ministro de Obras Públicas está trabajando muy bien, es todo
un profesional muy activo en el país. La Ministra de Medio
Ambiente es una ministra de extraordinarias cualidades, ha
preparado en poquísimo tiempo la Ley de Medio Ambiente, la de
Galápagos, tiene una actividad muy importante. El Ministro de
Educación tiene gran trascendencia; el Ministro de Salud
también; el Ministro de Trabajo ha logrado el entendimiento
con trabajadores y empresarios, usted verá que no hay
prácticamente huelgas en el país. El Ministro de Finanzas está
con gran ímpetu de renovación, de modernización.
He analizado Ministro por Ministro para ver qué puedo
dinamizar en cuanto al estilo de Gobierno.
Su Gobierno tiene poco margen de acción frente al Congreso.
Depende del trabajo legislativo para la aprobación de leyes.
¿No teme una maniobra del Partido Social Cristiano en el
Congreso en contra suya?
Como todo gobierno dependemos de que el Congreso nos apruebe
las leyes correspondientes más aún este Gobierno que tiene dos
diputados. Indudablemente que dependemos en gran medida de la
agilidad con la que el Congreso pueda tomar las decisiones.
Hay algunos proyectos que están en el Congreso, la Ley de
Solicitud de Costos, la Ley de Mercado de Valores, están las
reformas a la Ley del Sector Eléctrico que aspiro que el
Congreso lo más pronto agilite, porque ya voy a enviar otras.
¿Entonces, como interpreta la actitud del PSC frente al
ministro Raúl Baca?
Mire, yo no quisiera calificar porque es un derecho que tienen
los legisladores que no están de acuerdo con los
procedimientos del Ministro y pueden llegar a juicio político.
¿Pero esto no le da, por decirlo así, "mala espina"?
Yo no me atrevería a decir que es una mala espina o que tenga
el presentimiento de que quieren obstruir al Gobierno, creo
que ellos también tienen sus concepciones acertadas o erradas
que tienen derecho a practicarlas, yo lo he oído, fui
legislador y conozco y sé las funciones que tiene el Congreso
y es una cuestión clave para el Congreso la fiscalización,
pero la cosa es que yo no comparto en absoluto los argumentos
para interpelar al ministro Baca, pero eso es otra cosa.
Yo aspiro que al menos la opinión pública, que como nunca está
actuando, trabajando, para que haya unas elecciones para la
Asamblea que si ahora cualquier sector a pesar de que está
convencido de que eso es necesario se opone a eso o no da
trámite qué le va a decir al país cuando sean candidatos, qué
reformas van a hacer en la Asamblea Nacional.
Frente a los paros y huelgas, la mayoría injustificados, su
Subsecretario de Gobierno habló de una política de "mano
dura". Pero es bien sabido que frente a los paros de la salud
y la educación las movilizaciones por decreto no dan
resultado. ¿En qué está pensando usted cuando se habla de
"mano dura"?
Cuando yo me hice cargo del Gobierno en febrero había una
sociedad "hipertrofiada" eso significaba que todos los
sectores del país tenían una activa participación por el
cambio institucional, se sentían con mucho derecho para
actuar, para decidir, eso no es malo en la medida en que no se
distorsione, en que esa participación sea canalizada, el
ambiente por tanto de febrero, marzo, abril, mayo, etc. era un
ambiente en que se debía actuar con mucho cuidado porque era
una sociedad muy susceptible de que cualquier actitud no
reflexionada, no pensada por parte del gobernante pudiera
haber ocasionado peores enfrentamientos con los sectores
sociales del país.
¿El país qué quiere en este momento? El país quiere orden,
tranquilidad, y cambio pero dentro de la Asamblea Nacional. Si
es que percibimos cualquier actitud de paro, de violencia, de
pequeños grupos importantes, pero lógicamente pequeños, que
puedan "secuestrar" al país en determinado momento,
interrumpan servicios básicos, entonces interpretando ese
mensaje de la actual sociedad, la posición del Gobierno en
cuanto a su procedimiento cambia. Si anteriormente agoté el
diálogo, y más allá de lo que pueda opinarse en cada caso fue
prácticamente lo que el Gobierno planteó lo que se acordó,
creo que el país con esas actitudes de rechazo a toda medida
de hecho está diciendo al Gobierno -y ese es en un mensaje
claro- que tiene actuar de acuerdo a la Constitución. No me
salté nada, actuaré respetando los derechos humanos pero
utilizando todos los mecanismos que me permiten para frenar
cualquier intento de paro que perjudique a los ecuatorianos.
(Texto tomado de El Comercio)
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