Quito. 12.07.95. En los años 70, el Teatro Ensayo de la
Universidad Católica estaba en su mejor época. Después de su
participación en el IV Festival de Teatro de Manizales -al que
asistió con el auspicio de la Universidad- el grupo se
institucionalizó y obtuvo una serie de reivindicaciones. Cuando
Hernán Malo asumió el rectorado de la PUCE, el teatro, y la
cultura en general, se dispararon.
En ese entonces, el grupo estaba dirigido por el "Pájaro" Febres
Cordero, y había por lo menos 10 actores locos que tenían un
montón de ideas en la cabeza.
"Ahí la mentalidad de la Universidad no era economicista. Además,
el tesorero era Gustavo Riofrío, un hombre inquieto que amaba el
teatro". El "Pájaro" nos cuenta que en esa época existía un coro
y espacios permanentes para las artes plásticas. El Teatro de la
Católica recibía un presupuesto fijo; el director, y una actriz
que hacía las veces de secretaria, recibían sueldo como empleados
de la Universidad; y el trabajo de los actores era retribuido con
becas y medias becas. Además, el grupo de teatro tenía una casita
pequeña pero propia, el "Café Teatro de Universidad Católica",
que logró convertirse en un importante espacio de difusión. Ahí
se presentaron La Rana Sabia, Carlos Michelena, José Vacas, María
Escudero, Arístides Vargas...
Pero las cosas cambiaron.
CUESTA ABAJO
"Me acuerdo que un día llegó una orden del rector. Nos dijeron
que Administración necesitaba el espacio para una sala de
computación. Entonces arrasaron con las cortinas y hasta
rompieron un piano", dice Patricio Vallejo, actual director del
grupo de teatro de la Universidad Católica, al recordar que así
desapareció el espacio que tenía la actividad teatral en la PUCE.
Después, la cultura y el arte quedaron en el olvido...
Hace unos ocho años los talleres culturales fueron asumidos por
la Federación de Estudiantes. Se abrió cursos de formación para
la literatura, la música, la danza y el teatro, pero no había
presupuesto fijo ni tampoco espacios permanentes para la
difusión.
Hace año y medio los talleres fueron asumidos por las
autoridades, y al Comité de Deportes se unió el de Actividades
Culturales. Hoy la Universidad Católica ofrece talleres de
teatro, pintura, cerámica, formación vocal y guitarra, tiene un
grupo coral y uno de teatro, y además paga puntualmente a sus
maestros. Sin embargo, no parece que las cosas estén en su mejor
momento.
"Nosotros teníamos un aula amplia en la que ensayábamos. Pero un
buen día, en octubre del año pasado, mientras trabajábamos
entraron unos trabajadores y empezaron a meter pupitres en la
sala. Al poco tiempo nos dieron un aula más pequeña, pero que
todavía tenía ciertas condiciones", dice Vallejo. Sin embargo, en
marzo de este año la historia se volvió a repetir: "Cuando
llegamos a la sala encontramos que los trabajadores estaban
sacando nuestras cosas y tirándolas al corredor. Hoy tenemos una
sala más pequeña todavía, pero que no tiene ninguna condición".
Según explica Patricio Vallejo, cuando se creó el Comité de
Actividades Culturales, los directores de cada taller se
comprometieron a formar a los estudiantes, y en el caso del
teatro y el coro, a crear dos grupos estables que representen a
la Universidad. "Yo cumplí mi parte. Las autoridades se habían
comprometido a darme un local y el dinero para producir dos obras
cortas. Pero hasta ahora no han entregado el presupuesto".
Según Vallejo, los talleres han trabajado bien y también el
Comité. Sin embargo, "falta el último paso, el de las
autoridades". Con esto se lograría difundir la actividad cultural
y artística, por lo menos a los 7.000 potenciales espectadores
que tiene la Universidad Católica.
¿DEPORTE SI, CULTURA NO?
Jenny Arroyo, coordinadora del Comité de Actividades Culturales
de la Universidad Católica, responde algunas interrogantes.
- ¿En los últimos años, por qué la PUCE ha dado tan poco espacio
a la cultura?
Porque la prioridad es la parte académica.
- Pero se ha dado mucha importancia a lo deportivo. Hay un
coliseo inmenso, dos gimnasios, escuelas permanentes...
Todas las universidades tenemos, como esquema, la parte
deportiva. Además, la formación de nuestra sociedad no está
encaminada a la cultura. No creo que solo sea un problema de esta
Universidad.
- Pero en una época se dio mucha importancia a la cultura. Hubo
un buen espacio para el teatro, por ejemplo.
En verdad no sé por qué desapareció este espacio de teatro. Creo
que fue algo de estudiantes porque si hubiera sido algo
establecido seguiría funcionando; pero el Comité ha comenzado
desde cero.
- ¿Cómo funciona este Comité?
Depende directamente de la Dirección General de Estudiantes. No
tiene un capital de la Universidad hasta el momento, a pesar de
que con el cambio de rector, ya se nos ha ofrecido.
- ¿Entonces con qué dinero funciona?
Todos los estudiantes aportan semestralmente una cantidad muy
pequeña, y reunido ese capital se encamina al pago de profesores,
y compra de material.
- ¿Hay espacios para la difusión?
Espacios específicos no existen. Se está creando un centro
cultural que va a tener un teatro, espacios de difusión, aulas
para talleres, museos; la Biblioteca Aurelio Espinosa Pólit se va
a trasladar ahí. Está financiado todo, espero que a finales de
año empiece a funcionar.
- ¿Cómo están trabajando el coro y el grupo de teatro de la
Universidad?
Se les ha brindado, en la medida de lo posible, un espacio para
ensayar. Además, al grupo de teatro se le dio talleres de
actuación...
- ¿Tienen la oportunidad de difundir lo que hacen?
La actividad coral se ha podido desarrollar regularmente y se ha
desenvuelto bien. El grupo de teatro tenía que presentar sus
primeras obras este semestre, pero lamentablemente no surgió el
capital. La PUCE tiene una prioridad, y lamentablemente nosotros
no estamos institucionalizados. Pero con permitirnos estar aquí
podemos ir madurando a lo interno, sería más fácil no darnos ni
esa posibilidad.
- ¿En este año y medio de actividades qué ha salido en concreto,
además del coro?
Se ha logrado la formación de los estudiantes, se ha formado el
grupo de coro y teatro. Pero en un año qué quieres que
difundamos. Nosotros somos muy exigentes. Nuestra principal tarea
es la formación; la difusión la haremos cuando tengamos un buen
producto. (6B)
Universidad Católica estaba en su mejor época. Después de su
participación en el IV Festival de Teatro de Manizales -al que
asistió con el auspicio de la Universidad- el grupo se
institucionalizó y obtuvo una serie de reivindicaciones. Cuando
Hernán Malo asumió el rectorado de la PUCE, el teatro, y la
cultura en general, se dispararon.
En ese entonces, el grupo estaba dirigido por el "Pájaro" Febres
Cordero, y había por lo menos 10 actores locos que tenían un
montón de ideas en la cabeza.
"Ahí la mentalidad de la Universidad no era economicista. Además,
el tesorero era Gustavo Riofrío, un hombre inquieto que amaba el
teatro". El "Pájaro" nos cuenta que en esa época existía un coro
y espacios permanentes para las artes plásticas. El Teatro de la
Católica recibía un presupuesto fijo; el director, y una actriz
que hacía las veces de secretaria, recibían sueldo como empleados
de la Universidad; y el trabajo de los actores era retribuido con
becas y medias becas. Además, el grupo de teatro tenía una casita
pequeña pero propia, el "Café Teatro de Universidad Católica",
que logró convertirse en un importante espacio de difusión. Ahí
se presentaron La Rana Sabia, Carlos Michelena, José Vacas, María
Escudero, Arístides Vargas...
Pero las cosas cambiaron.
CUESTA ABAJO
"Me acuerdo que un día llegó una orden del rector. Nos dijeron
que Administración necesitaba el espacio para una sala de
computación. Entonces arrasaron con las cortinas y hasta
rompieron un piano", dice Patricio Vallejo, actual director del
grupo de teatro de la Universidad Católica, al recordar que así
desapareció el espacio que tenía la actividad teatral en la PUCE.
Después, la cultura y el arte quedaron en el olvido...
Hace unos ocho años los talleres culturales fueron asumidos por
la Federación de Estudiantes. Se abrió cursos de formación para
la literatura, la música, la danza y el teatro, pero no había
presupuesto fijo ni tampoco espacios permanentes para la
difusión.
Hace año y medio los talleres fueron asumidos por las
autoridades, y al Comité de Deportes se unió el de Actividades
Culturales. Hoy la Universidad Católica ofrece talleres de
teatro, pintura, cerámica, formación vocal y guitarra, tiene un
grupo coral y uno de teatro, y además paga puntualmente a sus
maestros. Sin embargo, no parece que las cosas estén en su mejor
momento.
"Nosotros teníamos un aula amplia en la que ensayábamos. Pero un
buen día, en octubre del año pasado, mientras trabajábamos
entraron unos trabajadores y empezaron a meter pupitres en la
sala. Al poco tiempo nos dieron un aula más pequeña, pero que
todavía tenía ciertas condiciones", dice Vallejo. Sin embargo, en
marzo de este año la historia se volvió a repetir: "Cuando
llegamos a la sala encontramos que los trabajadores estaban
sacando nuestras cosas y tirándolas al corredor. Hoy tenemos una
sala más pequeña todavía, pero que no tiene ninguna condición".
Según explica Patricio Vallejo, cuando se creó el Comité de
Actividades Culturales, los directores de cada taller se
comprometieron a formar a los estudiantes, y en el caso del
teatro y el coro, a crear dos grupos estables que representen a
la Universidad. "Yo cumplí mi parte. Las autoridades se habían
comprometido a darme un local y el dinero para producir dos obras
cortas. Pero hasta ahora no han entregado el presupuesto".
Según Vallejo, los talleres han trabajado bien y también el
Comité. Sin embargo, "falta el último paso, el de las
autoridades". Con esto se lograría difundir la actividad cultural
y artística, por lo menos a los 7.000 potenciales espectadores
que tiene la Universidad Católica.
¿DEPORTE SI, CULTURA NO?
Jenny Arroyo, coordinadora del Comité de Actividades Culturales
de la Universidad Católica, responde algunas interrogantes.
- ¿En los últimos años, por qué la PUCE ha dado tan poco espacio
a la cultura?
Porque la prioridad es la parte académica.
- Pero se ha dado mucha importancia a lo deportivo. Hay un
coliseo inmenso, dos gimnasios, escuelas permanentes...
Todas las universidades tenemos, como esquema, la parte
deportiva. Además, la formación de nuestra sociedad no está
encaminada a la cultura. No creo que solo sea un problema de esta
Universidad.
- Pero en una época se dio mucha importancia a la cultura. Hubo
un buen espacio para el teatro, por ejemplo.
En verdad no sé por qué desapareció este espacio de teatro. Creo
que fue algo de estudiantes porque si hubiera sido algo
establecido seguiría funcionando; pero el Comité ha comenzado
desde cero.
- ¿Cómo funciona este Comité?
Depende directamente de la Dirección General de Estudiantes. No
tiene un capital de la Universidad hasta el momento, a pesar de
que con el cambio de rector, ya se nos ha ofrecido.
- ¿Entonces con qué dinero funciona?
Todos los estudiantes aportan semestralmente una cantidad muy
pequeña, y reunido ese capital se encamina al pago de profesores,
y compra de material.
- ¿Hay espacios para la difusión?
Espacios específicos no existen. Se está creando un centro
cultural que va a tener un teatro, espacios de difusión, aulas
para talleres, museos; la Biblioteca Aurelio Espinosa Pólit se va
a trasladar ahí. Está financiado todo, espero que a finales de
año empiece a funcionar.
- ¿Cómo están trabajando el coro y el grupo de teatro de la
Universidad?
Se les ha brindado, en la medida de lo posible, un espacio para
ensayar. Además, al grupo de teatro se le dio talleres de
actuación...
- ¿Tienen la oportunidad de difundir lo que hacen?
La actividad coral se ha podido desarrollar regularmente y se ha
desenvuelto bien. El grupo de teatro tenía que presentar sus
primeras obras este semestre, pero lamentablemente no surgió el
capital. La PUCE tiene una prioridad, y lamentablemente nosotros
no estamos institucionalizados. Pero con permitirnos estar aquí
podemos ir madurando a lo interno, sería más fácil no darnos ni
esa posibilidad.
- ¿En este año y medio de actividades qué ha salido en concreto,
además del coro?
Se ha logrado la formación de los estudiantes, se ha formado el
grupo de coro y teatro. Pero en un año qué quieres que
difundamos. Nosotros somos muy exigentes. Nuestra principal tarea
es la formación; la difusión la haremos cuando tengamos un buen
producto. (6B)
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