AL-BIREH, Cisjordania. 15 ene 96. Austera, pero rebosante de
energía, Samiha Khalil esta acostumbrada a salirse con la
suya. Su candidatura a la Presidencia del Consejo Palestino
para las elecciones del día 20 es la única de oposición a la
del líder histórico Yasser Arafat.
Aunque no gane -y ella misma admite que tiene pocas
posibilidades-, esta abuela de 72 años que recoge su cabello
en un rodete quiere hacer oír su rechazo al acuerdo entre su
pueblo e Israel.
"Estoy furiosa. En lugar de hacer nuestra vida más fácil,
este acuerdo la hizo más difícil. Si gano la batalla,
detendré las negociaciones" con Israel, exclamó khalil en su
oficina en el pueblo cisjordano de Al-Bireh, donde dirige la
institución de caridad In-Ash el -Usra ("Ayudar a nuestra
gente").
La dirigente comparece ante el electorado como candidata
independiente, pero su retórica es semejante a la del radical
Frente Democrático para la Liberación de Palestina de George
Habash, al que estuvo ligada.
Khalil quiere la liberación total de los 4.000 prisioneros
palestino que aún permanecen en las cárceles israelíes y
aspira al desmantelamiento de los destacamentos que el Estado
judío mantiene en Cisjordania.
También pretende que se autorice a los palestinos a entrar en
Jerusalén Oriental sin que se les exija un permiso de las
autoridades israelíes, que los refugiados regresen y que los
asentamientos judíos desaparezcan.
Pero su principal desvelo consiste en que las negociaciones
con Israel conduzcan a la creación de Estado palestino
independiente con Jerusalén oriental como capital.
"Sería bueno, tanto para ellos como para nosotros, que nos den
lo que necesitamos. Israel obtendrá la seguridad que pretende
cuando reconozca nuestros derechos", advirtió.
Los escépticos podrían burlarse de su afán por arrebatar el
liderazgo al hombre que ha simbolizado mas que ningún otro la
causa palestina, pero khalil tiene credenciales para cosechar
votos.
Integrante del Consejo Nacional Palestino desde 1965, ha
desarrollado una intensa actividad para promover los derechos
de las mujeres dentro de la organización.
Debido a sus antecedentes, Israel le prohibió el ingreso a su
territorio para visitar a tres de sus cinco hijos, que
sufrieron la prisión y el exilio forzado.
Ella es la única mujeres que compite por la Presidencia del
Consejo Palestino (parlamento), pero no esta sola en la
campaña, pues entre los 691 aspirantes a legisladores se
presentan 27 candidatas que tienen ciertas posibilidades de
ser electas.
La mas conocida de ellas es Hanan Ashrawi, la vocera del
equipo palestino que participó en las negociaciones realizadas
hacia 1993 en Washington para el lanzamiento del proceso de
paz. Esta ex profesora universitaria de 49 años tiene
perspectivas de ingresar en el parlamento.
Educada en Estados Unidos, Ashrawi es consciente de los
desafíos que enfrentaran las mujeres palestinas en la
construcción de una nación a la se pretende elevar a la
categoría de Estado independiente.
"Necesitamos igualdad de género ante la ley y candidatos
conscientes de los derechos femeninos, porque ellos serán los
encargados de legislar al respecto", dice Ashrawi.
Los asuntos prioritarios en su campaña son la prevención de
los matrimonios prematuros, la obligatoriedad de la enseñanza
media para mujeres y el establecimiento de programas de
desarrollo económico que permitan la creación de empresas de
mujeres.
Ashrawi, además, se opone a un proyecto actualmente en
discusión que obligaría a las mujeres que desean obtener un
pasaporte a solicitar permiso a un miembro masculino de su
familia.
Pero la mayoría de las candidatas no tienen muchas ilusiones
de resultar electas. "Nuestra sociedad es tradicionalista",
señaló Rawya Shawa, una popular dirigente de Gaza de 48 años.
"No podemos aspirar a que los hombres voten masivamente por
mujeres. Ni siquiera creo que las mujeres voten por mujeres,
porque ellas no creen que seamos capaces de trabajar en
cuestiones políticas", agregó.
Las últimas encuestas confirmaron que es improbable que tanto
el electorado masculino como el femenino se pronuncien a favor
de mujeres, aunque los votantes estén de acuerdo con sus
propuestas.
Pero las normas electorales pueden jugar a favor de las
candidatas. Como los territorios de Cisjordania y Gaza están
divididos en 16 distritos electorales, las mujeres competirán
con los hombres en sus lugares de residencia, donde son bien
conocidas aunque no tengan actividad de jerarquía nacional.
Docenas de personas pujan en cada distrito por entre uno y dos
escanos en el Consejo Palestino, de acuerdo con la población
de la jurisdicción. En Jerusalén, por ejemplo, 76 dirigentes
se disputan solo siete cargos.
Los votantes elegirán tanto candidatos como consejeros que
representarán a su distrito. Muchas de las mujeres que se
postulan pertenecen a familias conocidas, mientras numerosos
competidores hombres son virtualmente ignorados por la
población.
Ashrawi tiene una ventaja adicional, pues es cristiana y la
ley electoral establece una cuota para la representación de
esa minoría religiosa.
Algunas mujeres que aspiran a integrar el Consejo Palestino se
han coligado con candidatos masculinos con quienes tienen
ideas afines.
Ashrawi formó una alianza con otra conocida activista
femenina, Zahira Kamal. Mientras Ashrawi se presenta como
candidata independiente, Kamal integra la corriente principal
de Al Fatah, el grupo de Arafat.
Pero todos los aspirantes a integrar el Consejo Palestino,
tanto hombres como mujeres, comparten la intención de influir
a través de este órgano en las negociaciones con Israel.
Ashrawi, Kamal y Shawa sostienen que las elecciones permitirán
que la voluntad popular tenga mas influencia que los
seguidores de Arafat en la mesa de negociaciones.
Shawa, cuyo marido es alcalde de Gaza, va incluso un paso mas
adelante, pues sostiene que el grupo radical musulmán Hamas,
contrario al proceso de paz, debería presentar candidatos a
las elecciones para asegurar una oposición activa en el
parlamento.
"Algunos piensan que el Consejo Palestino será un sello de
goma. Pero otros creemos que tendrá intervención en el
resultado de las negociaciones. Estoy segura de que el pueblo
palestino alcanzará sus metas si elige a la gente adecuada",
afirmó Shawa. (IPS) (DIARIO HOY) ( P. 12-A)
energía, Samiha Khalil esta acostumbrada a salirse con la
suya. Su candidatura a la Presidencia del Consejo Palestino
para las elecciones del día 20 es la única de oposición a la
del líder histórico Yasser Arafat.
Aunque no gane -y ella misma admite que tiene pocas
posibilidades-, esta abuela de 72 años que recoge su cabello
en un rodete quiere hacer oír su rechazo al acuerdo entre su
pueblo e Israel.
"Estoy furiosa. En lugar de hacer nuestra vida más fácil,
este acuerdo la hizo más difícil. Si gano la batalla,
detendré las negociaciones" con Israel, exclamó khalil en su
oficina en el pueblo cisjordano de Al-Bireh, donde dirige la
institución de caridad In-Ash el -Usra ("Ayudar a nuestra
gente").
La dirigente comparece ante el electorado como candidata
independiente, pero su retórica es semejante a la del radical
Frente Democrático para la Liberación de Palestina de George
Habash, al que estuvo ligada.
Khalil quiere la liberación total de los 4.000 prisioneros
palestino que aún permanecen en las cárceles israelíes y
aspira al desmantelamiento de los destacamentos que el Estado
judío mantiene en Cisjordania.
También pretende que se autorice a los palestinos a entrar en
Jerusalén Oriental sin que se les exija un permiso de las
autoridades israelíes, que los refugiados regresen y que los
asentamientos judíos desaparezcan.
Pero su principal desvelo consiste en que las negociaciones
con Israel conduzcan a la creación de Estado palestino
independiente con Jerusalén oriental como capital.
"Sería bueno, tanto para ellos como para nosotros, que nos den
lo que necesitamos. Israel obtendrá la seguridad que pretende
cuando reconozca nuestros derechos", advirtió.
Los escépticos podrían burlarse de su afán por arrebatar el
liderazgo al hombre que ha simbolizado mas que ningún otro la
causa palestina, pero khalil tiene credenciales para cosechar
votos.
Integrante del Consejo Nacional Palestino desde 1965, ha
desarrollado una intensa actividad para promover los derechos
de las mujeres dentro de la organización.
Debido a sus antecedentes, Israel le prohibió el ingreso a su
territorio para visitar a tres de sus cinco hijos, que
sufrieron la prisión y el exilio forzado.
Ella es la única mujeres que compite por la Presidencia del
Consejo Palestino (parlamento), pero no esta sola en la
campaña, pues entre los 691 aspirantes a legisladores se
presentan 27 candidatas que tienen ciertas posibilidades de
ser electas.
La mas conocida de ellas es Hanan Ashrawi, la vocera del
equipo palestino que participó en las negociaciones realizadas
hacia 1993 en Washington para el lanzamiento del proceso de
paz. Esta ex profesora universitaria de 49 años tiene
perspectivas de ingresar en el parlamento.
Educada en Estados Unidos, Ashrawi es consciente de los
desafíos que enfrentaran las mujeres palestinas en la
construcción de una nación a la se pretende elevar a la
categoría de Estado independiente.
"Necesitamos igualdad de género ante la ley y candidatos
conscientes de los derechos femeninos, porque ellos serán los
encargados de legislar al respecto", dice Ashrawi.
Los asuntos prioritarios en su campaña son la prevención de
los matrimonios prematuros, la obligatoriedad de la enseñanza
media para mujeres y el establecimiento de programas de
desarrollo económico que permitan la creación de empresas de
mujeres.
Ashrawi, además, se opone a un proyecto actualmente en
discusión que obligaría a las mujeres que desean obtener un
pasaporte a solicitar permiso a un miembro masculino de su
familia.
Pero la mayoría de las candidatas no tienen muchas ilusiones
de resultar electas. "Nuestra sociedad es tradicionalista",
señaló Rawya Shawa, una popular dirigente de Gaza de 48 años.
"No podemos aspirar a que los hombres voten masivamente por
mujeres. Ni siquiera creo que las mujeres voten por mujeres,
porque ellas no creen que seamos capaces de trabajar en
cuestiones políticas", agregó.
Las últimas encuestas confirmaron que es improbable que tanto
el electorado masculino como el femenino se pronuncien a favor
de mujeres, aunque los votantes estén de acuerdo con sus
propuestas.
Pero las normas electorales pueden jugar a favor de las
candidatas. Como los territorios de Cisjordania y Gaza están
divididos en 16 distritos electorales, las mujeres competirán
con los hombres en sus lugares de residencia, donde son bien
conocidas aunque no tengan actividad de jerarquía nacional.
Docenas de personas pujan en cada distrito por entre uno y dos
escanos en el Consejo Palestino, de acuerdo con la población
de la jurisdicción. En Jerusalén, por ejemplo, 76 dirigentes
se disputan solo siete cargos.
Los votantes elegirán tanto candidatos como consejeros que
representarán a su distrito. Muchas de las mujeres que se
postulan pertenecen a familias conocidas, mientras numerosos
competidores hombres son virtualmente ignorados por la
población.
Ashrawi tiene una ventaja adicional, pues es cristiana y la
ley electoral establece una cuota para la representación de
esa minoría religiosa.
Algunas mujeres que aspiran a integrar el Consejo Palestino se
han coligado con candidatos masculinos con quienes tienen
ideas afines.
Ashrawi formó una alianza con otra conocida activista
femenina, Zahira Kamal. Mientras Ashrawi se presenta como
candidata independiente, Kamal integra la corriente principal
de Al Fatah, el grupo de Arafat.
Pero todos los aspirantes a integrar el Consejo Palestino,
tanto hombres como mujeres, comparten la intención de influir
a través de este órgano en las negociaciones con Israel.
Ashrawi, Kamal y Shawa sostienen que las elecciones permitirán
que la voluntad popular tenga mas influencia que los
seguidores de Arafat en la mesa de negociaciones.
Shawa, cuyo marido es alcalde de Gaza, va incluso un paso mas
adelante, pues sostiene que el grupo radical musulmán Hamas,
contrario al proceso de paz, debería presentar candidatos a
las elecciones para asegurar una oposición activa en el
parlamento.
"Algunos piensan que el Consejo Palestino será un sello de
goma. Pero otros creemos que tendrá intervención en el
resultado de las negociaciones. Estoy segura de que el pueblo
palestino alcanzará sus metas si elige a la gente adecuada",
afirmó Shawa. (IPS) (DIARIO HOY) ( P. 12-A)
Más en el