Cuenca. 3 may 2001. Quienes están bajo la lupa de la Superintendencia de
Bancos apoyan el plan oficial. El BID ofrece USD 600 000 para él. Pero la
Fecoac no lo acepta.
La expansión de las cooperativas de ahorro y crédito es innegable, pero
su control genera controversia. Por un lado, las entidades que están
supervisadas por la Superintendencia de Bancos (SB) apoyan el proyecto de
Ley planteado por este organismo.
En cambio, las sujetas a la Dirección Nacional de Cooperativas del
Ministerio de Bienestar Social y afiliadas a la Federación Nacional de
Cooperativas de Ahorro y Crédito (Fecoac) proponen que existan controles,
pero con una nueva Ley y su respectivo reglamento de cooperativas.
El proyecto de Ley preparado por la Superintendencia tiene el respaldo
económico del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este organismo
internacional entregará 600 000 dólares para su ejecución. Entre varios
puntos, el plan prevé, por ejemplo, la reducción del monto mínimo
necesario para la constitución de una cooperativa: hoy es 50 000 dólares
y la nueva propuesta plantea 25 000 dólares.
Ahora la Fecoac agrupa a 350 cooperativas y la Asociación de Cooperativas
de Ahorro y Crédito bajo control de la Superintendencia de Bancos (ACBS)
a 27 instituciones (a partir de abril se incorporó la cooperativa Coopad,
con matriz en Quito).
Según Esteban Burneo, director ejecutivo de la Asociación, el análisis de
la propuesta oficial se realizó con más de 180 cooperativas, en
aproximadamente 20 reuniones en todo el país. También se tomaron en
cuenta las experiencias europeas y de EE.UU. donde este sector representa
más de 10 por ciento del total del mercado financiero.
Este proyecto fue presentado al Presidente de la República para su
posterior envío al Congreso.
El año anterior, las cooperativas de la Asociación tuvieron un
crecimiento de los depósitos a la vista en 22,26 por ciento con respecto
a 1999. "Algunos recursos provienen de la banca y del denominado colchón
bank".
Burneo asegura que las instituciones que son controladas por la
Superintendencia representan alrededor del 80 por ciento del total de
activos del sistema cooperativo. Mientras, sus socios en 1999 eran 767
772 en el año anterior fueron 779 657 y el total cooperativo nacional,
incluidas las de Fecoac, alcanza los 2 500 000.
Para Burneo, el control de la Superintendencia es más riguroso porque se
presentan balances diarios al Banco Central y por intermedio de este a la
SB.
También se entregan balances mensuales y se da seguimiento a los índices
de liquidez, control y calificación de la cartera vencida y general.
Además, sobre las provisiones de total de la cartera.
En tanto, las entidades que son controladas por la Dirección de
Cooperativas del Ministerio de Bienestar presentan un balance semestral
de acuerdo a la Ley de Cooperativas. Burneo estima que uno de los
factores más polémicos del proyecto es el mismo control, que a muchos no
les interesa. Asimismo, las categorías en que se dividen las cooperativas
de ahorro y crédito (ver recuadro).
Mientras tanto, Gualberto Segovia, presidente de la Fecoac, se ratifica
en que el anteproyecto apunta a que las cooperativas, a nivel nacional,
se conviertan en 10 ó 15 macrocooperativas, a pesar de las reformas al
proyecto.
Asimismo, Julio Obando, gerente de Fecoac, manifiesta que al aprobarse
este plan puede cambiarse el sentido mismo de la creación de estas
entidades, pues se destinarán a fines de lucro, para lo que no fueron
conformadas.
La Federación preparó un documento que, según ella, señala la
inconstitucionalidad del anteproyecto, que será presentado en el Congreso
Nacional.
Para Obando, el único objetivo de la Superintendencia es liquidar al
sistema cooperativo, pues implantar tres niveles significa que algunas de
las 350 cooperativas ni siquiera lleguen a la última categoría y
desaparecerán.
"Las cooperativas bajo control de la Superintendencia e, incluso, algunas
de las nuestras dicen que no tenemos control. El mejor que podemos tener
es el de los mismos socios, porque ellos garantizan sus depósitos".
También lo hace la Dirección del Ministerio de Bienestar Social, aunque
no es una supervisión inmediata.
Por ello, Obando agrega que su gremio plantea al Congreso Nacional la
discusión de un nuevo proyecto que se enmarque en los criterios con los
que fueron creadas estas instituciones.
Por su parte, César Izurieta, representante del Consejo Mundial de
Cooperativas de Ahorro y Crédito, señala que el proyecto oficial es
positivo desde el punto de vista técnico. "La Dirección de Cooperativas
del Ministerio de Bienestar Social pone en el mismo saco a las
cooperativas de ahorro y crédito con las de transporte". Por ello destaca
la necesidad de que se implante un control diferenciado. (Texto tomado de
El Comercio)
Bancos apoyan el plan oficial. El BID ofrece USD 600 000 para él. Pero la
Fecoac no lo acepta.
La expansión de las cooperativas de ahorro y crédito es innegable, pero
su control genera controversia. Por un lado, las entidades que están
supervisadas por la Superintendencia de Bancos (SB) apoyan el proyecto de
Ley planteado por este organismo.
En cambio, las sujetas a la Dirección Nacional de Cooperativas del
Ministerio de Bienestar Social y afiliadas a la Federación Nacional de
Cooperativas de Ahorro y Crédito (Fecoac) proponen que existan controles,
pero con una nueva Ley y su respectivo reglamento de cooperativas.
El proyecto de Ley preparado por la Superintendencia tiene el respaldo
económico del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este organismo
internacional entregará 600 000 dólares para su ejecución. Entre varios
puntos, el plan prevé, por ejemplo, la reducción del monto mínimo
necesario para la constitución de una cooperativa: hoy es 50 000 dólares
y la nueva propuesta plantea 25 000 dólares.
Ahora la Fecoac agrupa a 350 cooperativas y la Asociación de Cooperativas
de Ahorro y Crédito bajo control de la Superintendencia de Bancos (ACBS)
a 27 instituciones (a partir de abril se incorporó la cooperativa Coopad,
con matriz en Quito).
Según Esteban Burneo, director ejecutivo de la Asociación, el análisis de
la propuesta oficial se realizó con más de 180 cooperativas, en
aproximadamente 20 reuniones en todo el país. También se tomaron en
cuenta las experiencias europeas y de EE.UU. donde este sector representa
más de 10 por ciento del total del mercado financiero.
Este proyecto fue presentado al Presidente de la República para su
posterior envío al Congreso.
El año anterior, las cooperativas de la Asociación tuvieron un
crecimiento de los depósitos a la vista en 22,26 por ciento con respecto
a 1999. "Algunos recursos provienen de la banca y del denominado colchón
bank".
Burneo asegura que las instituciones que son controladas por la
Superintendencia representan alrededor del 80 por ciento del total de
activos del sistema cooperativo. Mientras, sus socios en 1999 eran 767
772 en el año anterior fueron 779 657 y el total cooperativo nacional,
incluidas las de Fecoac, alcanza los 2 500 000.
Para Burneo, el control de la Superintendencia es más riguroso porque se
presentan balances diarios al Banco Central y por intermedio de este a la
SB.
También se entregan balances mensuales y se da seguimiento a los índices
de liquidez, control y calificación de la cartera vencida y general.
Además, sobre las provisiones de total de la cartera.
En tanto, las entidades que son controladas por la Dirección de
Cooperativas del Ministerio de Bienestar presentan un balance semestral
de acuerdo a la Ley de Cooperativas. Burneo estima que uno de los
factores más polémicos del proyecto es el mismo control, que a muchos no
les interesa. Asimismo, las categorías en que se dividen las cooperativas
de ahorro y crédito (ver recuadro).
Mientras tanto, Gualberto Segovia, presidente de la Fecoac, se ratifica
en que el anteproyecto apunta a que las cooperativas, a nivel nacional,
se conviertan en 10 ó 15 macrocooperativas, a pesar de las reformas al
proyecto.
Asimismo, Julio Obando, gerente de Fecoac, manifiesta que al aprobarse
este plan puede cambiarse el sentido mismo de la creación de estas
entidades, pues se destinarán a fines de lucro, para lo que no fueron
conformadas.
La Federación preparó un documento que, según ella, señala la
inconstitucionalidad del anteproyecto, que será presentado en el Congreso
Nacional.
Para Obando, el único objetivo de la Superintendencia es liquidar al
sistema cooperativo, pues implantar tres niveles significa que algunas de
las 350 cooperativas ni siquiera lleguen a la última categoría y
desaparecerán.
"Las cooperativas bajo control de la Superintendencia e, incluso, algunas
de las nuestras dicen que no tenemos control. El mejor que podemos tener
es el de los mismos socios, porque ellos garantizan sus depósitos".
También lo hace la Dirección del Ministerio de Bienestar Social, aunque
no es una supervisión inmediata.
Por ello, Obando agrega que su gremio plantea al Congreso Nacional la
discusión de un nuevo proyecto que se enmarque en los criterios con los
que fueron creadas estas instituciones.
Por su parte, César Izurieta, representante del Consejo Mundial de
Cooperativas de Ahorro y Crédito, señala que el proyecto oficial es
positivo desde el punto de vista técnico. "La Dirección de Cooperativas
del Ministerio de Bienestar Social pone en el mismo saco a las
cooperativas de ahorro y crédito con las de transporte". Por ello destaca
la necesidad de que se implante un control diferenciado. (Texto tomado de
El Comercio)
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