Quito. 05 oct 98. Agustina Caiza, a sus 83 años, recuerda que
hace 25 años un aluvión bajó por la quebrada de Rumihurco (al
noroccidente a la altura de la calle Legarda) arrastrando gran
cantidad de rocas, troncos y lodo.
Ella vive a seis metros de donde se construyó el colector en
esta quebrada, junto a la calle Legarda a una cuadra la
avenida Occidental. "Por allí pasaba un chaquiñán, recuerda,
ahora está esa calle. En ese sitio, el lodo se represó por los
troncos que estaban caídos".
Afortunadamente nadie salió afectado. Muy pocas personas
vivían en este sitio. Ahora, la situación cambiado: a ambos
lados de la quebrada y del colector hay viviendas e,
inclusive, urbanizaciones y programas de vivienda.
Olga Bazán, moradora de Santa Isabel desde hace 23 años,
también se refiere a ese aluvión en el que grandes troncos y
rocas fueron acarreados hasta lo que hoy se conoce como El
Condado y el Quito Tenis, sitios donde se acumularon.
Agustina, con cierta ira, señala con su dedo al colector. Está
lleno de basura, piedras, rocas y mucha tierra. No sabe qué va
a pasar en caso de una erupción.
El temor es cierto, a más de la basura, el colector construido
en este sitio es pequeño que pierde capacidad por los
escombros y basuras que están al inicio del entubamiento.
Es más, a lo largo de la quebrada, los flancos están llenos de
más basura y restos de materiales de construcción: los
moradores de Bellavista, Santa Anita y San José los utilizan
como botaderos, todos los días.
Hasta ahora, la maquinaria de limpieza no se ha hecho
presente, al pie del colector. Sin embargo, unos 250 metros
más arriba, al altura del barrio San Joaquín, un grupo de
topógrafos, trabajadores de la empresa de construcciones
Hidalgo Hidalgo, realizan las mediciones necesarias.
Ellos están actualizando la información para la posterior
construcción de las obras de escurrimiento en la zona de
influencia de esta quebrada. Se prevé construir represas en la
parte altas y túneles para el paso de las aguas que bajan
desde las faldas del volcán Pichincha.
Al momento, maquinaria de la empresa contratista continuaba
con el movimiento de tierras que empezó hace dos meses.
La situación, en otra de las quebradas más grandes de las
laderas del Pichincha, la de Rumipamba, a la altura de las
avenidas Mariana de Jesús y Occidental, no varía. El colector
está en iguales condiciones: lleno de rocas, piedras, basura
doméstica y todo tipo de desechos.
Ramón Paillacho vive 42 de sus 74 años junto a la quebrada,
tras las instalaciones de la Empresa de Agua Potable y
Alcantarillado. El recuerda que el colector se taponó por
todos los escombros y basuras que impidieron el paso del lodo
y las rocas.
La diferencia es que en este sitio hay construcciones (no solo
viviendas de un piso sino edificios de tres) en la base misma
de la quebrada y en los lados.
Manuel Simbaña es el propietario de una de ellas que está
ubicada en el camino que cruza la quebrada y que une el barrio
San Vicente y La Primavera.
Don Manuel desconoce los peligros que representa vivir en el
cauce mismo del pequeño riachuelo, en caso de que se produzca
la erupción. Sí reclama que por las noches, cuando no existe
vigilancia de los empleados de la Emaap, van los conductores
de volquetes y camionetas a botar los restos de materiales de
construcción, sin que nadie pueda parar esta situación.
La familia de Manuel Simbaña tiene diferentes criterios en
torno a lo que puede suceder con el volcán. Uno de ellos pide
que las autoridades informen sobre los peligros que pueden
ocurrir a quienes viven en este sector.
Y, lo más importante, que se les informe qué deben hacer en el
momento que comience la erupción. Pero un yerno de Manuel cree
que es una falsa alarma y que no hay de qué preocuparse ya que
"nada va a pasar. Todo esto -dice- es fruto de los políticos
que quieren desviar la atención por las medidas económicas".
En cambio Juan Brito, morador de La Primavera tiene miedo de
lo que pueda pasar con su casa, la de su mamá y de sus dos
hermanos, construidas en el filo.
Como medida preventiva, y a nombre de los moradores del
barrio, pidió que el Municipio, a través de la Emaap, realice
la limpieza del colector. "Y si es de colaborar todo el barrio
con una minga -dice- que pidan a los dirigentes: todos
colaboraremos. Hace poco vinieron trabajadores de la Emaap a
limpiar pero con las lluvias, otra vez se acumuló la basura y
los desechos".
Más abajo, a la altura de la avenida Occidental, al igual que
en la quebrada de Rumihurco, un grupo de trabajadores de la
empresa Hidalgo Hidalgo con un fiscalizador de la Emaap
realizaban el replanteo de las obras para el control del
escurrimiento.
Oswaldo Granda, director de Parques y Jardines del Municipio,
dijo que en el parque Metropolitano se concentrarán la
maquinaria, los equipos y 400 trabajadores que se encargarán
de la limpieza de las quebradas. La tarea comenzará en estos
días, a más tardar la próxima semana.
La emanación de ceniza produciría varios problemas a los seres
humanos: uno es la conjuntivitis química. Las plantas y
jardines también se afectarían.
Cómo enfrentar la ceniza y cuidar el entorno
Las emergencias evidencian la falta de educación de la
población para enfrentar los desastres naturales. Por lo
general la gente no comprende o minimiza la magnitud de los
fenómenos.
Uno de los temas que más debería preocupar a la ciudadanía es
cómo proteger la salud humana y su entorno natural. El país,
en este caso Quito, no ha vivido experiencias de erupciones
volcánicas desde el siglo 18. Por ende, poco es lo que se
conoce sobre los efectos que produciría la ceniza en el cuerpo
de las personas y en sus órganos más delicados.
Los médicos y ecologistas advierten los peligros que
ocasionaría una lluvia de ceniza. Los primeros hablan de los
síntomas más evidentes: problemas en los ojos, la piel, el
sistema respiratorio... Las potenciales víctimas son los
niños, personas discapacitadas y ancianos.
Los ecologistas, en cambio, recomiendan proteger la mayor
cantidad de plantas. Todos los especialistas coinciden en que
lo fundamental es mantener lazos de solidaridad. Lo primordial
es guardar la cordura y el equilibrio anímico. Este Diario le
ofrece algunos consejos básicos.
Humanos
La lluvia de cenizas podría causar daños a las personas
demasiado expuestas. Lo mejor es permanecer dentro de la casa.
Sin embargo, hay que proteger órganos vitales como: pulmones,
nariz, ojos y piel.
OJOS
Las afecciones * La emanación de ceniza produciría una
conjuntivitis química, señala el oftalmólogo Javier Aguirre.
Los sulfuros y gases afectarían directamente a los ojos,
progresivamente aparecería una infección ocular por la
cantidad de cuerpos extraños, además de enrojecimiento. El
ambiente se resecaría y lo menos recomendable es frotarse los
ojos.
Las recomendaciones para proteger los ojos: utilizar colirios
simples, suero fisiológico para la limpieza, lentes para ir a
la piscina o gafas especiales con protector. Hay que mantener
la lubricación ocular durante los días críticos. Evitar el
contacto con la ceniza.
NARIZ
Los problemas * Las fosas nasales también se inflaman, se
enrojecen y aparece prurito (comezón), además aumentan las
secreciones de moco, el mismo que se va infectando
paulatinamente.
Ernesto Quiñónez, especialista en alergias y asma infantil,
recomienda usar mascarillas y tener varias franelas o toallas
de mano húmedas, para respirar a través de ellas.
PIEL
La parte más sensible * La epidermis es el receptor de primer
impacto. Las cenizas pueden irritar la piel produciendo
dermatitis urticariana (picazón), dice el dermatólogo Oswaldo
Viteri.
Hay que utilizar aceites, cremas humectantes sin alcohol y
vaselina. Se recomienda el baño diario. Usar cremas que
contengan desinflamantes y antialérgicos.
PULMONES
Prohibido fumar * La presencia de diversos gases dificultará
la respiración. Los pulmones y los bronquios se cierran. El
ambiente se torna difícil para las víctimas de asma, rinitis y
bronco espasmos.
La falta de oxígeno obliga a no fumar. También se recomienda
no prender ventiladores y tampoco hacer ejercicios. Lo
recomendable es humedecer el ambiente y tomar jugos cítricos.
Prioridades
Los niños *
Para los menores de 12 años se aconseja evacuar las zonas de
riesgo antes de una posible erupción. Si tiene amigos o
familiares en valles o provincias trate de enviarlos,
especialmente a los pequeños alérgicos y asmáticos. Las madres
que tienen hijos recién nacidos deben colocar sobre la cuna
una sábana húmeda. Los niños alérgicos están más predispuestos
a tener problemas porque sus bronquios se cierran e inflaman.
La nariz también se inflama, enrojece, aparece prurito y moco
que se va infectando.
Los más frágiles *
Las personas con algún tipo de discapacidad, los enfermos
siquíatricos, y los ancianos que utilizan muletas, bastones y
sillas de ruedas también deben evacuar antes de una probable
erupción del volcán. Estas personas requieren de la ayuda de
otras para movilizarse y por ello deben estar en un lugar
seguro. Las personas asmáticas deben tener a la mano su
medicación usual, además de cámaras inhalatorias, dilatador de
bronquios y un antiinflamatorio. Los pacientes que adolecen de
problemas de bronquitis, enfisema, neumonía, asma y líos
cardíacos también deben protegerse.
LA CALMA ES VITAL
Los gritos no ayudan *
Para la sicóloga y terapeuta familiar, Laura Iñiguez, hay que
enfatizar en mantener la calma. La interiorización de
seguridad y tranquilidad es vital para poder actuar en los
momentos críticos. Una situación concreta como el pánico
paraliza a las personas, tanto física como mentalmente. Una
persona aterrorizada no tiene actitudes acertadas para actuar
y salvar su vida. Hay pánicos que ponen a la gente en estado
de estupor, se quedan mirando fíjamente y no reaccionan ante
nada.
La oscuridad y la penumbra, por la lluvia de cenizas y el
corte de fluido eléctrico, son dos factores negativos contra
los que hay que luchar sicológicamente. Los adultos deben ser
los primeros en mantener la calma, si los adultos gritan el
miedo es mayor, y los niños pierden fácilmente el control. Hay
que tranquilizar a los niños con palabras afectuosas y
paciencia. El llanto de un niño puede alterar mucho más a un
adulto.
La solidaridad es la clave *
Otro de los valores que hay que fortalecer en estos días
críticos es la solidaridad. Es importante, añade Iñiguez, que
el que más tiene le de al que menos tiene. La recomendación es
que los barrios, grupos de vecinos y los clubes de amigos se
unan y organicen, no solo para actuar ante una posible
erupción, sino también para darse ánimo, mantener la esperanza
y pensar positivamente. Es necesario que se forme una
directiva para la emergencia que se encargue de ayudar a los
más necesitados: discapacitados, personas solas y ancianos.
Mantenerse informados *
En cada casa deberá existir un par de pilas para que funcione
la radio. Además de recibir información este medio de
comunicación juega un papel fundamental, afirma Iñiguez.
Porque a través de él llegarán los mensajes de cómo actuar
ante la erupción, pero sobre todo los mensajes de calma,
serenidad y esperanza. Existe un programa de intervención en
crisis y recuperación emocional en casos de desastres
naturales.
Vegetales
Las plantas serían las más afectadas por la lluvia de cenizas.
Una alta densidad puede provocar la caída de las hojas, ramas
e incluso destruir los pastos de las áreas verdes.
Los jardines deben ser cubiertos *
Es recomendable que las plantas de macetas sean guardadas bajo
techo.
Los jardines de las casas deben ser protegidos con plásticos
fuertes a manera de invernaderos. Inmediatamente después que
termine el fenómeno hay que retirar las cubiertas de
polietileno.
Los parques en peligro *
De los 1.700 que existen en Quito el Municipio solo realizará
la limpieza de los grandes: La Carolina, El Ejido, La Alameda,
La Raya, la Plaza de la Independencia..., según Osvaldo
Granda, director de Parques y Jardines del Municipio. Sin
embargo, las pequeñas áreas verdes deben ser limpiadas
manualmente por los vecinos del sector, luego que termine la
lluvia de cenizas.
La ceniza altera el suelo *
Los daños que puede causar en la flora son incalculables,
según Miguel Morejón, funcionario de la Fundación Maquipucuna
que tiene proyectos en el noroccidente de Pichincha. Se teme
que los cultivos y pastos que rodean al volcán Pichincha
queden cubiertos con la ceniza y mueran al igual que la fauna
nativa. La capa de ceniza no permitirá que las plantas
realicen la fotosíntesis a la vez que alterará las condiciones
del suelo. El ganado también se verá afectado.
Al día
Apoyo del Consejo *
Para prever daños en las poblaciones de Mindo y San Miguel de
Los Bancos, el prefecto de Pichincha, Rafael Reyes Uribe, dijo
en rueda de prensa, que colaborará con volquetes, tanqueros de
agua y todo el personal de campo. Afirmó que un problema grave
será el posible colapso del río Mindo, que proporciona agua a
la población. Para esto está previsto dotar de varios
tanqueros de agua, si se llegara a producir una erupción.
También estuvo presente el alcalde de Mindo, Patricio
Veintimilla quien afirmó que los habitantes se encuentran en
completa calma y que ya se están realizando, junto con la
Defensa Civil, algunos talleres para la población. En cuanto a
una posible evacuación, Uribe afirmó que si eso sucediera, lo
único que la gente tendría que hacer es subir a la carretera
asfaltada, que ya es un sitio más alto y protegido. Allí,
estarían vehículos de la Prefectura.
Para proteger el agua *
Las tres plantas de tratamiento que existen en la ciudad y los
cinco sistemas de bombeo y purificación de agua serán
protegidos. Eduardo Jácome, gerente de la Empresa de Agua
Potable y Alcantarillado (Emaap) y Roque Sevilla, alcalde de
Quito se reunieron para tratar esta situación.
A cuidar las torres *
Desde el miércoles pasado, personal del Departamento de
Mantenimiento de Líneas de Transmisión de la Empresa Eléctrica
Quito S.A., comenzaron con las tareas de prevención de las
líneas de transmisión que cruzan las laderas del Pichincha.
Ayer, por ejemplo, una cuadrilla de 10 trabajadores limpiaba
cunetas, cortaban maleza de las torres situadas en el barrio
San Isabel. Desde Miraflores, a la salida de los túneles,
hasta la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro existen,
aproximadamente 100 torres que sostiene estos cables de alta
tensión. En la parte alta están ubicados 45 de 138 kilovatios;
mientras tanto, hacia las partes bajas hay cerca de 55 que son
de 46 kilovatios. En los próximos días, los técnicos de
Distribución realizarán el mantenimiento de las líneas que van
hacia los domicilios.
El volcán en Internet *
Según el alcalde Roque Sevilla, en declaraciones dadas a Radio
Visión, desde mañana, las personas que tengan acceso a
Internet podrán obtener información sobre la situación en la
que se encuentra el volcán Pichincha. De los que se sabe esta
página detallará aspectos técnicos como la sismicidad, las
explosiones freáticas, las observaciones visuales y un
diagnóstico general del estado del volcán.
El Metropolitano se prepara *
El director de Parques y Jardines del Municipio de Quito,
Oswaldo Granda, dijo que el reservorio de agua de Bellavista,
ubicada en el Parque Metropolitano, y una de las principales
fuentes de agua de la ciudad, será cubierto con un plástico
especial para evitar la contaminación del líquido vital, si es
que se produce la lluvia de cenizas que se presentaría en caso
de erupción. (Texto tomado de El Comercio)
hace 25 años un aluvión bajó por la quebrada de Rumihurco (al
noroccidente a la altura de la calle Legarda) arrastrando gran
cantidad de rocas, troncos y lodo.
Ella vive a seis metros de donde se construyó el colector en
esta quebrada, junto a la calle Legarda a una cuadra la
avenida Occidental. "Por allí pasaba un chaquiñán, recuerda,
ahora está esa calle. En ese sitio, el lodo se represó por los
troncos que estaban caídos".
Afortunadamente nadie salió afectado. Muy pocas personas
vivían en este sitio. Ahora, la situación cambiado: a ambos
lados de la quebrada y del colector hay viviendas e,
inclusive, urbanizaciones y programas de vivienda.
Olga Bazán, moradora de Santa Isabel desde hace 23 años,
también se refiere a ese aluvión en el que grandes troncos y
rocas fueron acarreados hasta lo que hoy se conoce como El
Condado y el Quito Tenis, sitios donde se acumularon.
Agustina, con cierta ira, señala con su dedo al colector. Está
lleno de basura, piedras, rocas y mucha tierra. No sabe qué va
a pasar en caso de una erupción.
El temor es cierto, a más de la basura, el colector construido
en este sitio es pequeño que pierde capacidad por los
escombros y basuras que están al inicio del entubamiento.
Es más, a lo largo de la quebrada, los flancos están llenos de
más basura y restos de materiales de construcción: los
moradores de Bellavista, Santa Anita y San José los utilizan
como botaderos, todos los días.
Hasta ahora, la maquinaria de limpieza no se ha hecho
presente, al pie del colector. Sin embargo, unos 250 metros
más arriba, al altura del barrio San Joaquín, un grupo de
topógrafos, trabajadores de la empresa de construcciones
Hidalgo Hidalgo, realizan las mediciones necesarias.
Ellos están actualizando la información para la posterior
construcción de las obras de escurrimiento en la zona de
influencia de esta quebrada. Se prevé construir represas en la
parte altas y túneles para el paso de las aguas que bajan
desde las faldas del volcán Pichincha.
Al momento, maquinaria de la empresa contratista continuaba
con el movimiento de tierras que empezó hace dos meses.
La situación, en otra de las quebradas más grandes de las
laderas del Pichincha, la de Rumipamba, a la altura de las
avenidas Mariana de Jesús y Occidental, no varía. El colector
está en iguales condiciones: lleno de rocas, piedras, basura
doméstica y todo tipo de desechos.
Ramón Paillacho vive 42 de sus 74 años junto a la quebrada,
tras las instalaciones de la Empresa de Agua Potable y
Alcantarillado. El recuerda que el colector se taponó por
todos los escombros y basuras que impidieron el paso del lodo
y las rocas.
La diferencia es que en este sitio hay construcciones (no solo
viviendas de un piso sino edificios de tres) en la base misma
de la quebrada y en los lados.
Manuel Simbaña es el propietario de una de ellas que está
ubicada en el camino que cruza la quebrada y que une el barrio
San Vicente y La Primavera.
Don Manuel desconoce los peligros que representa vivir en el
cauce mismo del pequeño riachuelo, en caso de que se produzca
la erupción. Sí reclama que por las noches, cuando no existe
vigilancia de los empleados de la Emaap, van los conductores
de volquetes y camionetas a botar los restos de materiales de
construcción, sin que nadie pueda parar esta situación.
La familia de Manuel Simbaña tiene diferentes criterios en
torno a lo que puede suceder con el volcán. Uno de ellos pide
que las autoridades informen sobre los peligros que pueden
ocurrir a quienes viven en este sector.
Y, lo más importante, que se les informe qué deben hacer en el
momento que comience la erupción. Pero un yerno de Manuel cree
que es una falsa alarma y que no hay de qué preocuparse ya que
"nada va a pasar. Todo esto -dice- es fruto de los políticos
que quieren desviar la atención por las medidas económicas".
En cambio Juan Brito, morador de La Primavera tiene miedo de
lo que pueda pasar con su casa, la de su mamá y de sus dos
hermanos, construidas en el filo.
Como medida preventiva, y a nombre de los moradores del
barrio, pidió que el Municipio, a través de la Emaap, realice
la limpieza del colector. "Y si es de colaborar todo el barrio
con una minga -dice- que pidan a los dirigentes: todos
colaboraremos. Hace poco vinieron trabajadores de la Emaap a
limpiar pero con las lluvias, otra vez se acumuló la basura y
los desechos".
Más abajo, a la altura de la avenida Occidental, al igual que
en la quebrada de Rumihurco, un grupo de trabajadores de la
empresa Hidalgo Hidalgo con un fiscalizador de la Emaap
realizaban el replanteo de las obras para el control del
escurrimiento.
Oswaldo Granda, director de Parques y Jardines del Municipio,
dijo que en el parque Metropolitano se concentrarán la
maquinaria, los equipos y 400 trabajadores que se encargarán
de la limpieza de las quebradas. La tarea comenzará en estos
días, a más tardar la próxima semana.
La emanación de ceniza produciría varios problemas a los seres
humanos: uno es la conjuntivitis química. Las plantas y
jardines también se afectarían.
Cómo enfrentar la ceniza y cuidar el entorno
Las emergencias evidencian la falta de educación de la
población para enfrentar los desastres naturales. Por lo
general la gente no comprende o minimiza la magnitud de los
fenómenos.
Uno de los temas que más debería preocupar a la ciudadanía es
cómo proteger la salud humana y su entorno natural. El país,
en este caso Quito, no ha vivido experiencias de erupciones
volcánicas desde el siglo 18. Por ende, poco es lo que se
conoce sobre los efectos que produciría la ceniza en el cuerpo
de las personas y en sus órganos más delicados.
Los médicos y ecologistas advierten los peligros que
ocasionaría una lluvia de ceniza. Los primeros hablan de los
síntomas más evidentes: problemas en los ojos, la piel, el
sistema respiratorio... Las potenciales víctimas son los
niños, personas discapacitadas y ancianos.
Los ecologistas, en cambio, recomiendan proteger la mayor
cantidad de plantas. Todos los especialistas coinciden en que
lo fundamental es mantener lazos de solidaridad. Lo primordial
es guardar la cordura y el equilibrio anímico. Este Diario le
ofrece algunos consejos básicos.
Humanos
La lluvia de cenizas podría causar daños a las personas
demasiado expuestas. Lo mejor es permanecer dentro de la casa.
Sin embargo, hay que proteger órganos vitales como: pulmones,
nariz, ojos y piel.
OJOS
Las afecciones * La emanación de ceniza produciría una
conjuntivitis química, señala el oftalmólogo Javier Aguirre.
Los sulfuros y gases afectarían directamente a los ojos,
progresivamente aparecería una infección ocular por la
cantidad de cuerpos extraños, además de enrojecimiento. El
ambiente se resecaría y lo menos recomendable es frotarse los
ojos.
Las recomendaciones para proteger los ojos: utilizar colirios
simples, suero fisiológico para la limpieza, lentes para ir a
la piscina o gafas especiales con protector. Hay que mantener
la lubricación ocular durante los días críticos. Evitar el
contacto con la ceniza.
NARIZ
Los problemas * Las fosas nasales también se inflaman, se
enrojecen y aparece prurito (comezón), además aumentan las
secreciones de moco, el mismo que se va infectando
paulatinamente.
Ernesto Quiñónez, especialista en alergias y asma infantil,
recomienda usar mascarillas y tener varias franelas o toallas
de mano húmedas, para respirar a través de ellas.
PIEL
La parte más sensible * La epidermis es el receptor de primer
impacto. Las cenizas pueden irritar la piel produciendo
dermatitis urticariana (picazón), dice el dermatólogo Oswaldo
Viteri.
Hay que utilizar aceites, cremas humectantes sin alcohol y
vaselina. Se recomienda el baño diario. Usar cremas que
contengan desinflamantes y antialérgicos.
PULMONES
Prohibido fumar * La presencia de diversos gases dificultará
la respiración. Los pulmones y los bronquios se cierran. El
ambiente se torna difícil para las víctimas de asma, rinitis y
bronco espasmos.
La falta de oxígeno obliga a no fumar. También se recomienda
no prender ventiladores y tampoco hacer ejercicios. Lo
recomendable es humedecer el ambiente y tomar jugos cítricos.
Prioridades
Los niños *
Para los menores de 12 años se aconseja evacuar las zonas de
riesgo antes de una posible erupción. Si tiene amigos o
familiares en valles o provincias trate de enviarlos,
especialmente a los pequeños alérgicos y asmáticos. Las madres
que tienen hijos recién nacidos deben colocar sobre la cuna
una sábana húmeda. Los niños alérgicos están más predispuestos
a tener problemas porque sus bronquios se cierran e inflaman.
La nariz también se inflama, enrojece, aparece prurito y moco
que se va infectando.
Los más frágiles *
Las personas con algún tipo de discapacidad, los enfermos
siquíatricos, y los ancianos que utilizan muletas, bastones y
sillas de ruedas también deben evacuar antes de una probable
erupción del volcán. Estas personas requieren de la ayuda de
otras para movilizarse y por ello deben estar en un lugar
seguro. Las personas asmáticas deben tener a la mano su
medicación usual, además de cámaras inhalatorias, dilatador de
bronquios y un antiinflamatorio. Los pacientes que adolecen de
problemas de bronquitis, enfisema, neumonía, asma y líos
cardíacos también deben protegerse.
LA CALMA ES VITAL
Los gritos no ayudan *
Para la sicóloga y terapeuta familiar, Laura Iñiguez, hay que
enfatizar en mantener la calma. La interiorización de
seguridad y tranquilidad es vital para poder actuar en los
momentos críticos. Una situación concreta como el pánico
paraliza a las personas, tanto física como mentalmente. Una
persona aterrorizada no tiene actitudes acertadas para actuar
y salvar su vida. Hay pánicos que ponen a la gente en estado
de estupor, se quedan mirando fíjamente y no reaccionan ante
nada.
La oscuridad y la penumbra, por la lluvia de cenizas y el
corte de fluido eléctrico, son dos factores negativos contra
los que hay que luchar sicológicamente. Los adultos deben ser
los primeros en mantener la calma, si los adultos gritan el
miedo es mayor, y los niños pierden fácilmente el control. Hay
que tranquilizar a los niños con palabras afectuosas y
paciencia. El llanto de un niño puede alterar mucho más a un
adulto.
La solidaridad es la clave *
Otro de los valores que hay que fortalecer en estos días
críticos es la solidaridad. Es importante, añade Iñiguez, que
el que más tiene le de al que menos tiene. La recomendación es
que los barrios, grupos de vecinos y los clubes de amigos se
unan y organicen, no solo para actuar ante una posible
erupción, sino también para darse ánimo, mantener la esperanza
y pensar positivamente. Es necesario que se forme una
directiva para la emergencia que se encargue de ayudar a los
más necesitados: discapacitados, personas solas y ancianos.
Mantenerse informados *
En cada casa deberá existir un par de pilas para que funcione
la radio. Además de recibir información este medio de
comunicación juega un papel fundamental, afirma Iñiguez.
Porque a través de él llegarán los mensajes de cómo actuar
ante la erupción, pero sobre todo los mensajes de calma,
serenidad y esperanza. Existe un programa de intervención en
crisis y recuperación emocional en casos de desastres
naturales.
Vegetales
Las plantas serían las más afectadas por la lluvia de cenizas.
Una alta densidad puede provocar la caída de las hojas, ramas
e incluso destruir los pastos de las áreas verdes.
Los jardines deben ser cubiertos *
Es recomendable que las plantas de macetas sean guardadas bajo
techo.
Los jardines de las casas deben ser protegidos con plásticos
fuertes a manera de invernaderos. Inmediatamente después que
termine el fenómeno hay que retirar las cubiertas de
polietileno.
Los parques en peligro *
De los 1.700 que existen en Quito el Municipio solo realizará
la limpieza de los grandes: La Carolina, El Ejido, La Alameda,
La Raya, la Plaza de la Independencia..., según Osvaldo
Granda, director de Parques y Jardines del Municipio. Sin
embargo, las pequeñas áreas verdes deben ser limpiadas
manualmente por los vecinos del sector, luego que termine la
lluvia de cenizas.
La ceniza altera el suelo *
Los daños que puede causar en la flora son incalculables,
según Miguel Morejón, funcionario de la Fundación Maquipucuna
que tiene proyectos en el noroccidente de Pichincha. Se teme
que los cultivos y pastos que rodean al volcán Pichincha
queden cubiertos con la ceniza y mueran al igual que la fauna
nativa. La capa de ceniza no permitirá que las plantas
realicen la fotosíntesis a la vez que alterará las condiciones
del suelo. El ganado también se verá afectado.
Al día
Apoyo del Consejo *
Para prever daños en las poblaciones de Mindo y San Miguel de
Los Bancos, el prefecto de Pichincha, Rafael Reyes Uribe, dijo
en rueda de prensa, que colaborará con volquetes, tanqueros de
agua y todo el personal de campo. Afirmó que un problema grave
será el posible colapso del río Mindo, que proporciona agua a
la población. Para esto está previsto dotar de varios
tanqueros de agua, si se llegara a producir una erupción.
También estuvo presente el alcalde de Mindo, Patricio
Veintimilla quien afirmó que los habitantes se encuentran en
completa calma y que ya se están realizando, junto con la
Defensa Civil, algunos talleres para la población. En cuanto a
una posible evacuación, Uribe afirmó que si eso sucediera, lo
único que la gente tendría que hacer es subir a la carretera
asfaltada, que ya es un sitio más alto y protegido. Allí,
estarían vehículos de la Prefectura.
Para proteger el agua *
Las tres plantas de tratamiento que existen en la ciudad y los
cinco sistemas de bombeo y purificación de agua serán
protegidos. Eduardo Jácome, gerente de la Empresa de Agua
Potable y Alcantarillado (Emaap) y Roque Sevilla, alcalde de
Quito se reunieron para tratar esta situación.
A cuidar las torres *
Desde el miércoles pasado, personal del Departamento de
Mantenimiento de Líneas de Transmisión de la Empresa Eléctrica
Quito S.A., comenzaron con las tareas de prevención de las
líneas de transmisión que cruzan las laderas del Pichincha.
Ayer, por ejemplo, una cuadrilla de 10 trabajadores limpiaba
cunetas, cortaban maleza de las torres situadas en el barrio
San Isabel. Desde Miraflores, a la salida de los túneles,
hasta la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro existen,
aproximadamente 100 torres que sostiene estos cables de alta
tensión. En la parte alta están ubicados 45 de 138 kilovatios;
mientras tanto, hacia las partes bajas hay cerca de 55 que son
de 46 kilovatios. En los próximos días, los técnicos de
Distribución realizarán el mantenimiento de las líneas que van
hacia los domicilios.
El volcán en Internet *
Según el alcalde Roque Sevilla, en declaraciones dadas a Radio
Visión, desde mañana, las personas que tengan acceso a
Internet podrán obtener información sobre la situación en la
que se encuentra el volcán Pichincha. De los que se sabe esta
página detallará aspectos técnicos como la sismicidad, las
explosiones freáticas, las observaciones visuales y un
diagnóstico general del estado del volcán.
El Metropolitano se prepara *
El director de Parques y Jardines del Municipio de Quito,
Oswaldo Granda, dijo que el reservorio de agua de Bellavista,
ubicada en el Parque Metropolitano, y una de las principales
fuentes de agua de la ciudad, será cubierto con un plástico
especial para evitar la contaminación del líquido vital, si es
que se produce la lluvia de cenizas que se presentaría en caso
de erupción. (Texto tomado de El Comercio)
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