Quito. 19 dic 96. En Ecuador y Colombia, la prensa, como
institución democrática requiere un cuidadoso seguimiento y
protección.

Para eliminar la tendencia a ser muy complaciente sobre la
salud de las instituciones democráticas en América latina, he
aquí dos ejemplos en que por lo menos una de esas
instituciones, la prensa libre, se encuentra bajo constante
amenaza en la región.

En el Ecuador, el presidente Abdalá Bucaram, descontento por
la forma en que el periódico HOY ha estado cubriendo su
administración, desató una campaña contra ese diario a
principios del mes. Llegó a su climax, con una serie de
comerciales de televisión anónimos, contratados en dos
estaciones de televisión propiedad de personas muy cercanas al
gobierno, que pedían a los ecuatorianos que no compren dicho
periódico.

El presidente Bucaram acusa a HOY entre otras cosas, de ser
irrespetuoso con la majestad de la presidencia. Esta
acusación viene del mismo mandatario que en cadena nacional de
televisión el fin de semana pasado, cantaba el Rock de la
cárcel, mientras se contorneaba con una modelo escasamente
vestida y seis bailarines con trajes de presidiarios.

En Colombia, mientras tanto, el Congreso ha encontrado la
forma de presionar a los noticieros de televisión que han
transmitido las investigaciones sobre los lazos financieros
existentes entre congresistas recientemente electos y los
carteles de la droga.

En ese país, las estaciones privadas compran el tiempo de
transmisión a canales de propiedad estatal. Bajo una ley de
1991, aprobada con el propósito de proteger a las
organizaciones periodísticas de la interferencia
gubernamental, las estaciones arriendan el espacio de tiempo
en TV por un lapso de seis años, con el derecho de renovación
de los contratos.

Sin embargo, la semana pasada el congreso colombiano decidió
eliminar el derecho de renovación y aprobó una nueva ley que
obliga a las programadoras a rematar el espacio de TV. Muchos
temen que el gobierno utilice este proceso para castigar a
aquellos que denuncien hechos de corrupción.

Las situación en Ecuador y Colombia ha creado gran
preocupación dentro de la Sociedad Interamericana de Prensa.
La semana pasada, la organización interamericana solicitó al
presidente Bucaram que pare la presión del gobierno contra la
prensa. En agosto pasado, cuando el congreso colombiano estaba
debatiendo la ley de televisión, la misma organización
solicitó no cambiar la ley existente. Hasta la fecha no ha
tenido ninguna respuesta.

Los países latinoamericanos han realizado grandes esfuerzos de
reformas económicas y políticas en los años recientes, pero
pasará todavía mucho tiempo para que esas reformas sienten
raíces.

Los problemas de la prensa en Ecuador y Colombia deben ser
entendidos como dos nuevos signos de peligro: Estas
democracias emergentes requieren liderazgo, soporte y
cuidadoso monitoreo por parte de países y organizaciones
internacionales interesados en la promoción de las libertades.


CARTA DEL GOBIERNO A DANILO ARBILLA DE LA SIP

Señor Presidente:

Debo manifestarle con entera franqueza que me ha sorprendido,
sobre manera, la comunicación que usted, como Presidente de la
Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, ha
enviado al señor Presidente Abdalá Bucaram con fecha 13 de
diciembre y que fue publicada en el Diario HOY al día
siguiente.

La Comisión que usted preside, lamento decirlo, ha hecho caso
omiso de la regla regla más preciada del periodismo objetivo,
aquella que exige por elemental justicia y prudencia
profesional, el verificar la información recibida, dando a
conocer el contenido de las denuncias a la parte inculpada,
antes de pasar juicio sobre la veracidad de las mismas.

Esta omisión es más grave si se considera que, sin escuchar
para nada al denunciado, usted se precipita en su carta a
asegurar que en el Ecuador existe una "seria amenaza a la
libertad de prensa, agravada por una campaña en televisión
que, en su contenido, es de claro tinte totalitario" y que al
Presidente "no le hace ningún honor".

Finalmente, usted sugiere en su carta que el Presidente
Bucaram debería investigar "los orígenes responsables y
financiación de una campaña publicitaria en canales de
televisión" a la que califica de tener "un claro tinte
totalitario". Esta no es función del Presidente de la
República. En nuestro país los canales privados de televisión
gozan de plena libertad y autonomía y ellos deciden que hacer
o qué no hacer. Además, con qué lógica usted pide al
Presidente la intromisión en un canal de televisión?. No viola
eso los principios que usted defiende? Usted debería, más bien
sugerir al Diario HOY que acuda a los tribunales competentes
para hacer respetar sus derechos, si considera que han sido
conculcados. Probaría así que sus reclamos tiene validez
jurídica y objetividad.

No quiero terminar esta carta sin hacerle llegar una cordial
invitación para que usted y las comisión que preside visite
nuestro país, dialogue con nosotros y con todos aquellos que
considere oportuno y juzgue el caso con imparcialidad.

Igualmente, los invitamos a buscar conjuntamente un
investigador de Análisis de Contenido, profesional e
independiente, de las Facultades e Institutos de Comunicación
de los Estados Unidos para que realice un estudio del
tratamiento que el Presidente ha recibido del Diario HOY
durante los meses de su administración y los resultados sean
publicados por la prensa.

Por lo demás, opinamos que el pueblo es el juez supremo de las
acciones de todo gobierno y que su veredicto inapelable se
expresa en las urnas electorales.

Atentamente,
DIOS, PATRIA Y LIBERTAD,

Ing. Miguel Salem Kronfle,
SECRETARIO GENERAL DE LA ADMINISTRACION PUBLICA
(DIARIO HOY) (P. 10-A)
EXPLORED
en

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