Lima. 12 jun 2000. A unque los presidentes de la Comunidad Andina
de Naciones (CAN) enfocaron buena parte de su trabajo en afinar
los instrumentos que servirán para impulsar el mercado común
regional, el tema político siempre fue preponderante.
El acta de Lima, suscrita por los mandatarios de Ecuador,
Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia, entre otras cosas plantea las
directrices del proceso de integración, que tendrá uno de sus
puntos máximos de expresión, el 31 de diciembre del 2005, fecha en
la que este mercado -que agrupará a más de 110 millones de
personas- empiece a funcionar.
Algunos de los lineamientos aprobados son: la eliminación de
restricciones, cuyo objetivo es perfeccionar el sistema andino de
sanidad agropecuaria; el mejoramiento de los órganos nacionales
competentes en el tema. Además incluye el diseño y adopción de un
arancel externo común para el perfeccionamiento aduanero, así como
las mejoras de los procesos del sistema de intercambio de
información para la lucha contra el contrabando. Esto debe ir de
la mano con el desarrollo del comercio de servicios, que significa
generar una política de transporte comunitario y el crecimiento de
los servicios intracomunitarios. En el área de capitales se
plantea la libre circulación de los mismos.
Este documento, tal y como lo resaltaran los mandatarios Andrés
Pastrana (Colombia) y Alberto Fujimori (Perú), también plantea la
armonización de políticas macroeconómicas, así como la mayor
integración y desarrollo fronterizo. Para eso, se perfeccionará el
Banco de Proyectos de la CAN y se creará un fondo multilateral
para la integración de fronteras. Eso se complementará con
políticas para la libre circulación de personas y se planteó el
reconocimiento de documentos nacionales de identificación, la
homologación de requisitos migratorios para estudiantes, hombres
de negocios, inversionistas...
En cambio, el debate político giró alrededor de la democracia en
los países de esta zona. La rueda de prensa final de los jefes de
Estado, en la que no participaron Pastrana ni Hugo Bánzer
(Bolivia), por que dejaron el país luego de firmar el documento,
se centró en los problemas políticos que han afrontado en los
último meses Venezuela, Ecuador y Perú.
En el caso ecuatoriano, el presidente Gustavo Noboa hizo
referencia a la crisis del 21 de enero y a los mecanismos que el
Gobierno adoptó para superarla. Eso sin dejar de mencionar que ya
hay síntomas de mejora económica y de un mayor clima de paz
social.
Hugo Chávez, de su parte, habló sobre el proceso electoral de
Venezuela que se desarrollará en los próximos días y en la que él
es candidato a la reelección. Fujimori defendió el carácter
democrático de su gobierno. Democracia que la entiende como un
manejo decidido del país (rechazó el manejo gubernamental
"blandengue e indeciso que afecta a la población") para la
consecución de objetivos como la lucha contra el terrorismo (caso
Sendero Luminoso) y la firma de la Paz con el Ecuador.
Y, en medio de este ambiente de efervescencia política que se
vivió, el sábado, en Lima, el presidente de Brasil, Fernando
Henrique Cardoso, aprovechó la oportunidad para tratar el tema de
la debilidad de las democracias y buscarle alternativas a fin de
prevenir nuevas crisis en los países americanos.
A unque los presidentes de la Comunidad Andina de Naciones (CAN)
enfocaron buena parte de su trabajo en afinar los instrumentos que
servirán para impulsar el mercado común regional, el tema político
siempre fue preponderante.
El acta de Lima, suscrita por los mandatarios de Ecuador,
Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia, entre otras cosas plantea las
directrices del proceso de integración, que tendrá uno de sus
puntos máximos de expresión, el 31 de diciembre del 2005, fecha en
la que este mercado -que agrupará a más de 110 millones de
personas- empiece a funcionar.
Algunos de los lineamientos aprobados son: la eliminación de
restricciones, cuyo objetivo es perfeccionar el sistema andino de
sanidad agropecuaria; el mejoramiento de los órganos nacionales
competentes en el tema. Además incluye el diseño y adopción de un
arancel externo común para el perfeccionamiento aduanero, así como
las mejoras de los procesos del sistema de intercambio de
información para la lucha contra el contrabando. Esto debe ir de
la mano con el desarrollo del comercio de servicios, que significa
generar una política de transporte comunitario y el crecimiento de
los servicios intracomunitarios. En el área de capitales se
plantea la libre circulación de los mismos.
Este documento, tal y como lo resaltaran los mandatarios Andrés
Pastrana (Colombia) y Alberto Fujimori (Perú), también plantea la
armonización de políticas macroeconómicas, así como la mayor
integración y desarrollo fronterizo. Para eso, se perfeccionará el
Banco de Proyectos de la CAN y se creará un fondo multilateral
para la integración de fronteras. Eso se complementará con
políticas para la libre circulación de personas y se planteó el
reconocimiento de documentos nacionales de identificación, la
homologación de requisitos migratorios para estudiantes, hombres
de negocios, inversionistas...
En cambio, el debate político giró alrededor de la democracia en
los países de esta zona. La rueda de prensa final de los jefes de
Estado, en la que no participaron Pastrana ni Hugo Bánzer
(Bolivia), por que dejaron el país luego de firmar el documento,
se centró en los problemas políticos que han afrontado en los
último meses Venezuela, Ecuador y Perú.
En el caso ecuatoriano, el presidente Gustavo Noboa hizo
referencia a la crisis del 21 de enero y a los mecanismos que el
Gobierno adoptó para superarla. Eso sin dejar de mencionar que ya
hay síntomas de mejora económica y de un mayor clima de paz
social.
Hugo Chávez, de su parte, habló sobre el proceso electoral de
Venezuela que se desarrollará en los próximos días y en la que él
es candidato a la reelección. Fujimori defendió el carácter
democrático de su gobierno. Democracia que la entiende como un
manejo decidido del país (rechazó el manejo gubernamental
"blandengue e indeciso que afecta a la población") para la
consecución de objetivos como la lucha contra el terrorismo (caso
Sendero Luminoso) y la firma de la Paz con el Ecuador.
Y, en medio de este ambiente de efervescencia política que se
vivió, el sábado, en Lima, el presidente de Brasil, Fernando
Henrique Cardoso, aprovechó la oportunidad para tratar el tema de
la debilidad de las democracias y buscarle alternativas a fin de
prevenir nuevas crisis en los países americanos. (Texto tomado de
El Comercio)
de Naciones (CAN) enfocaron buena parte de su trabajo en afinar
los instrumentos que servirán para impulsar el mercado común
regional, el tema político siempre fue preponderante.
El acta de Lima, suscrita por los mandatarios de Ecuador,
Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia, entre otras cosas plantea las
directrices del proceso de integración, que tendrá uno de sus
puntos máximos de expresión, el 31 de diciembre del 2005, fecha en
la que este mercado -que agrupará a más de 110 millones de
personas- empiece a funcionar.
Algunos de los lineamientos aprobados son: la eliminación de
restricciones, cuyo objetivo es perfeccionar el sistema andino de
sanidad agropecuaria; el mejoramiento de los órganos nacionales
competentes en el tema. Además incluye el diseño y adopción de un
arancel externo común para el perfeccionamiento aduanero, así como
las mejoras de los procesos del sistema de intercambio de
información para la lucha contra el contrabando. Esto debe ir de
la mano con el desarrollo del comercio de servicios, que significa
generar una política de transporte comunitario y el crecimiento de
los servicios intracomunitarios. En el área de capitales se
plantea la libre circulación de los mismos.
Este documento, tal y como lo resaltaran los mandatarios Andrés
Pastrana (Colombia) y Alberto Fujimori (Perú), también plantea la
armonización de políticas macroeconómicas, así como la mayor
integración y desarrollo fronterizo. Para eso, se perfeccionará el
Banco de Proyectos de la CAN y se creará un fondo multilateral
para la integración de fronteras. Eso se complementará con
políticas para la libre circulación de personas y se planteó el
reconocimiento de documentos nacionales de identificación, la
homologación de requisitos migratorios para estudiantes, hombres
de negocios, inversionistas...
En cambio, el debate político giró alrededor de la democracia en
los países de esta zona. La rueda de prensa final de los jefes de
Estado, en la que no participaron Pastrana ni Hugo Bánzer
(Bolivia), por que dejaron el país luego de firmar el documento,
se centró en los problemas políticos que han afrontado en los
último meses Venezuela, Ecuador y Perú.
En el caso ecuatoriano, el presidente Gustavo Noboa hizo
referencia a la crisis del 21 de enero y a los mecanismos que el
Gobierno adoptó para superarla. Eso sin dejar de mencionar que ya
hay síntomas de mejora económica y de un mayor clima de paz
social.
Hugo Chávez, de su parte, habló sobre el proceso electoral de
Venezuela que se desarrollará en los próximos días y en la que él
es candidato a la reelección. Fujimori defendió el carácter
democrático de su gobierno. Democracia que la entiende como un
manejo decidido del país (rechazó el manejo gubernamental
"blandengue e indeciso que afecta a la población") para la
consecución de objetivos como la lucha contra el terrorismo (caso
Sendero Luminoso) y la firma de la Paz con el Ecuador.
Y, en medio de este ambiente de efervescencia política que se
vivió, el sábado, en Lima, el presidente de Brasil, Fernando
Henrique Cardoso, aprovechó la oportunidad para tratar el tema de
la debilidad de las democracias y buscarle alternativas a fin de
prevenir nuevas crisis en los países americanos.
A unque los presidentes de la Comunidad Andina de Naciones (CAN)
enfocaron buena parte de su trabajo en afinar los instrumentos que
servirán para impulsar el mercado común regional, el tema político
siempre fue preponderante.
El acta de Lima, suscrita por los mandatarios de Ecuador,
Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia, entre otras cosas plantea las
directrices del proceso de integración, que tendrá uno de sus
puntos máximos de expresión, el 31 de diciembre del 2005, fecha en
la que este mercado -que agrupará a más de 110 millones de
personas- empiece a funcionar.
Algunos de los lineamientos aprobados son: la eliminación de
restricciones, cuyo objetivo es perfeccionar el sistema andino de
sanidad agropecuaria; el mejoramiento de los órganos nacionales
competentes en el tema. Además incluye el diseño y adopción de un
arancel externo común para el perfeccionamiento aduanero, así como
las mejoras de los procesos del sistema de intercambio de
información para la lucha contra el contrabando. Esto debe ir de
la mano con el desarrollo del comercio de servicios, que significa
generar una política de transporte comunitario y el crecimiento de
los servicios intracomunitarios. En el área de capitales se
plantea la libre circulación de los mismos.
Este documento, tal y como lo resaltaran los mandatarios Andrés
Pastrana (Colombia) y Alberto Fujimori (Perú), también plantea la
armonización de políticas macroeconómicas, así como la mayor
integración y desarrollo fronterizo. Para eso, se perfeccionará el
Banco de Proyectos de la CAN y se creará un fondo multilateral
para la integración de fronteras. Eso se complementará con
políticas para la libre circulación de personas y se planteó el
reconocimiento de documentos nacionales de identificación, la
homologación de requisitos migratorios para estudiantes, hombres
de negocios, inversionistas...
En cambio, el debate político giró alrededor de la democracia en
los países de esta zona. La rueda de prensa final de los jefes de
Estado, en la que no participaron Pastrana ni Hugo Bánzer
(Bolivia), por que dejaron el país luego de firmar el documento,
se centró en los problemas políticos que han afrontado en los
último meses Venezuela, Ecuador y Perú.
En el caso ecuatoriano, el presidente Gustavo Noboa hizo
referencia a la crisis del 21 de enero y a los mecanismos que el
Gobierno adoptó para superarla. Eso sin dejar de mencionar que ya
hay síntomas de mejora económica y de un mayor clima de paz
social.
Hugo Chávez, de su parte, habló sobre el proceso electoral de
Venezuela que se desarrollará en los próximos días y en la que él
es candidato a la reelección. Fujimori defendió el carácter
democrático de su gobierno. Democracia que la entiende como un
manejo decidido del país (rechazó el manejo gubernamental
"blandengue e indeciso que afecta a la población") para la
consecución de objetivos como la lucha contra el terrorismo (caso
Sendero Luminoso) y la firma de la Paz con el Ecuador.
Y, en medio de este ambiente de efervescencia política que se
vivió, el sábado, en Lima, el presidente de Brasil, Fernando
Henrique Cardoso, aprovechó la oportunidad para tratar el tema de
la debilidad de las democracias y buscarle alternativas a fin de
prevenir nuevas crisis en los países americanos. (Texto tomado de
El Comercio)
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