UN JUEGO TRIADICO PARA LATINOAMERICA. Por Kléber Mantilla
Exite una fueza magnética en sus palabras. Se parece a un
profeta, a un gurú latinoamericano, a un filósofo muy moderno.
Se llama Waldemar de Gregori y la justicia entre los hombres
es su "juego triádico".
No es muy difícil perderse en el mundo de la ciencia o en los
inhóspitos rumbos de la mente humana con las palabras de este
maestro brasileño. Waldemar de Gregori estuvo hace pocos días
en Ecuador para llevar a cabo una propuesta, la misma que la
ha transportado por toda América Latina y el Caribe.
"La experiencia ha mostrado que una de las cosas que
ha fallado en el cambio en Latinoamérica es que le han metido
mucha fuerza a la educación. La educación no tiene fuerza de
cambio, tiene muy poca fuerza. Nuestra propuesta la
llevamos a los educadores. Pero también a empresarios y a
políticos a todos los que tengan poder para mover el cambio y
se lo llevamos también al pueblo, a la comunidad, a las
asociaciones del pueblo; por que el mensaje les interesa a
todos. A los tres subgrupos. Al subgrupo que comanda. al
subgrupo comandado que es el pueblo, la sociedad y también a
los subgrupos que hacen oposición, que hacen crítica. Tenemos
que ponernos de acuerdo para replantear el cambio, el
desarrollo, la organización de la sociedad, de la cultura para
que podamos vivir desentemente. Sí, es una propuesta de
cambio. Pero no es una propuesta de lucha armada, es una
propuesta de pacto".
Waldemar de Gregori convoca a repenzar a toda latinoamérica,
después de estos quinientos años, desde nuestra cultura,
sociedad, religión, experiencias, métodos, desde nuestro mismo
proceso de desarrollo. Las que más tendrán que aportar serán
las mamás, las maestras, las catequistas que son las que
preparan los cerebros de las futuras generaciones. Es una
revolución mental y las revolucionarias son las mamás. Las
estructuras mentales de una mala sociedad hay que cambiarlas
por un nuevo tipo de cabeza que pueda organizar una nueva
sociedad.
EL JUEGO TRIADICO
El principio triádico -dice Waldemar de Gregori- es una manera
que la ciencia física tiene de explicar la energía en el
universo, de la cual nosotros somos parte. Nosotros traemos el
principio triádico de la energía dentro de nosotros. Significa
que nos organizamos como átomos, o como grandes átomos en tres
lados, tenemos: un protón, un electrón y un neutrón pero
aúnque esos tres elementos sean distintos y tengan cargas
distintas, ellos se únen proporcionalmente y cada uno haciendo
su papel conforma un sistema, un átomo.
En la sociedad, también somos un átomo gigante con un protón,
un neutrón y un electrón tenemos que conformar un gran átomo.
No se trata de lucha sino de cooperar para formar este gran
átomo.
LA PROPORCIONALIDAD
Este juego triádico se ha elaborado para rechazar
el viejo modelo europeo al que Waldemar de Gregori lo llama
modelo cartesiano, capitalista, monádico, positivista. Afirma
que es necesario rechazar el anterior y desarrollar un modelo
nuestro: ".. porque hasta ahora el modelo que ellos nos
metieron durante quinientos años nos está destruyendo. Nos
hizo colonia y nos impidió nuestro autodesarrollo. El
capitalismo lo dice: desarrollo para todos, pero hay que ser
un poco más exacto y concreto. La justicia social significa
una distribución x y esta distribución tiene una regla
matemática. El 38 por ciento de la población más alta dominará
el 62 por ciento de los bienes y que el 62 por ciento de la
población más baja controlará el 38% de los bienes.
Alguien puede decir, sigue la desigualdad. Pero no. La
difencia es imposición de la energía de la naturaleza y eso
nadie lo podrá suprimir jamás. El escandalo aparece cuando el
80 por ciento o 90 por ciento de la población se queda con el
10 por ciento de recursos".
El principio triádico, que es un principio de la
naturaleza, obliga a que toda la especie humana y las demás
especies puedan llegar al proporcionalismo. Se aceptaría como
un anhelo de justicia entre el hombre y la naturaleza. La
idea del proporcionalismo para el brasileño es un llamamiento
ético para vivir mejor frente a la distribución de tierras,
riquezas y bienes. "La producción no importa, ya hay mucha
producción en el planeta, sólo que está concentrada. El modelo
de desarrollo de cultura y de ciencia que nos han aportado los
europeos está destruyendo el planeta, está rompiendo con el
ecosistema, está empobreciendo el planeta, y concentrando la
riqueza solo en el primer mundo. El tercermundo necesita de
nosotros. Somos tercer mundo y sí queremos salir de eso hay
que empezar creando nuestro nuevo modelo." Waldemar de
Gregori es fatídico en sus descripciones pero es consecuente
en sus soluciones. A su modelo lo ha llamado: "paradigma
sistémico triádico".
LA TECNOLOGIA EN LOS MEDIOS DE COMUNICION.
"La tecnología está maravillosa. Tenemos tecnología
espectacular: satélites, televisión, agencias y redes de
computadoras internacionales; magnífico. Pero, como política
de información los periódicos son para gente que tiene más
cultura y más lado izquierdo en su cerebro, por lo tanto son
oficiales, las redes informáticas también son para las élites,
y las redes de grupos empresariales. La televisión y la radio
están dirigidas hacia el "oscilante", hacia en 80 % de la
población, para conducirlos al consumismo y para mantenerlos
en un sistema de diversión muy enajenante. La tecnología tiene
que cambiar su rumbo".
Waldemar de Gregori se opone a la prensa alternativa, dice que
pertenece a lo que él denomina "subgrupos naturales" que
pretenden cuestionar la sociedad y plantear liberaciones. "Yo
creo que ésta política de información - alternativa- está
completamente equivocada, se necesita hacer que el pueblo
reflexione y participe en el poder. Entonces, la televisión
tendría que cambiar su rumbo y programación para enseñarle al
pueblo no solo a divertise e informarse de lo que hay para
consumir. También lo debería ayudar a discernir lo que es
bueno para el él, para el país y para latinoamérica".
Exite una fueza magnética en sus palabras. Se parece a un
profeta, a un gurú latinoamericano, a un filósofo muy moderno.
Se llama Waldemar de Gregori y la justicia entre los hombres
es su "juego triádico".
No es muy difícil perderse en el mundo de la ciencia o en los
inhóspitos rumbos de la mente humana con las palabras de este
maestro brasileño. Waldemar de Gregori estuvo hace pocos días
en Ecuador para llevar a cabo una propuesta, la misma que la
ha transportado por toda América Latina y el Caribe.
"La experiencia ha mostrado que una de las cosas que
ha fallado en el cambio en Latinoamérica es que le han metido
mucha fuerza a la educación. La educación no tiene fuerza de
cambio, tiene muy poca fuerza. Nuestra propuesta la
llevamos a los educadores. Pero también a empresarios y a
políticos a todos los que tengan poder para mover el cambio y
se lo llevamos también al pueblo, a la comunidad, a las
asociaciones del pueblo; por que el mensaje les interesa a
todos. A los tres subgrupos. Al subgrupo que comanda. al
subgrupo comandado que es el pueblo, la sociedad y también a
los subgrupos que hacen oposición, que hacen crítica. Tenemos
que ponernos de acuerdo para replantear el cambio, el
desarrollo, la organización de la sociedad, de la cultura para
que podamos vivir desentemente. Sí, es una propuesta de
cambio. Pero no es una propuesta de lucha armada, es una
propuesta de pacto".
Waldemar de Gregori convoca a repenzar a toda latinoamérica,
después de estos quinientos años, desde nuestra cultura,
sociedad, religión, experiencias, métodos, desde nuestro mismo
proceso de desarrollo. Las que más tendrán que aportar serán
las mamás, las maestras, las catequistas que son las que
preparan los cerebros de las futuras generaciones. Es una
revolución mental y las revolucionarias son las mamás. Las
estructuras mentales de una mala sociedad hay que cambiarlas
por un nuevo tipo de cabeza que pueda organizar una nueva
sociedad.
EL JUEGO TRIADICO
El principio triádico -dice Waldemar de Gregori- es una manera
que la ciencia física tiene de explicar la energía en el
universo, de la cual nosotros somos parte. Nosotros traemos el
principio triádico de la energía dentro de nosotros. Significa
que nos organizamos como átomos, o como grandes átomos en tres
lados, tenemos: un protón, un electrón y un neutrón pero
aúnque esos tres elementos sean distintos y tengan cargas
distintas, ellos se únen proporcionalmente y cada uno haciendo
su papel conforma un sistema, un átomo.
En la sociedad, también somos un átomo gigante con un protón,
un neutrón y un electrón tenemos que conformar un gran átomo.
No se trata de lucha sino de cooperar para formar este gran
átomo.
LA PROPORCIONALIDAD
Este juego triádico se ha elaborado para rechazar
el viejo modelo europeo al que Waldemar de Gregori lo llama
modelo cartesiano, capitalista, monádico, positivista. Afirma
que es necesario rechazar el anterior y desarrollar un modelo
nuestro: ".. porque hasta ahora el modelo que ellos nos
metieron durante quinientos años nos está destruyendo. Nos
hizo colonia y nos impidió nuestro autodesarrollo. El
capitalismo lo dice: desarrollo para todos, pero hay que ser
un poco más exacto y concreto. La justicia social significa
una distribución x y esta distribución tiene una regla
matemática. El 38 por ciento de la población más alta dominará
el 62 por ciento de los bienes y que el 62 por ciento de la
población más baja controlará el 38% de los bienes.
Alguien puede decir, sigue la desigualdad. Pero no. La
difencia es imposición de la energía de la naturaleza y eso
nadie lo podrá suprimir jamás. El escandalo aparece cuando el
80 por ciento o 90 por ciento de la población se queda con el
10 por ciento de recursos".
El principio triádico, que es un principio de la
naturaleza, obliga a que toda la especie humana y las demás
especies puedan llegar al proporcionalismo. Se aceptaría como
un anhelo de justicia entre el hombre y la naturaleza. La
idea del proporcionalismo para el brasileño es un llamamiento
ético para vivir mejor frente a la distribución de tierras,
riquezas y bienes. "La producción no importa, ya hay mucha
producción en el planeta, sólo que está concentrada. El modelo
de desarrollo de cultura y de ciencia que nos han aportado los
europeos está destruyendo el planeta, está rompiendo con el
ecosistema, está empobreciendo el planeta, y concentrando la
riqueza solo en el primer mundo. El tercermundo necesita de
nosotros. Somos tercer mundo y sí queremos salir de eso hay
que empezar creando nuestro nuevo modelo." Waldemar de
Gregori es fatídico en sus descripciones pero es consecuente
en sus soluciones. A su modelo lo ha llamado: "paradigma
sistémico triádico".
LA TECNOLOGIA EN LOS MEDIOS DE COMUNICION.
"La tecnología está maravillosa. Tenemos tecnología
espectacular: satélites, televisión, agencias y redes de
computadoras internacionales; magnífico. Pero, como política
de información los periódicos son para gente que tiene más
cultura y más lado izquierdo en su cerebro, por lo tanto son
oficiales, las redes informáticas también son para las élites,
y las redes de grupos empresariales. La televisión y la radio
están dirigidas hacia el "oscilante", hacia en 80 % de la
población, para conducirlos al consumismo y para mantenerlos
en un sistema de diversión muy enajenante. La tecnología tiene
que cambiar su rumbo".
Waldemar de Gregori se opone a la prensa alternativa, dice que
pertenece a lo que él denomina "subgrupos naturales" que
pretenden cuestionar la sociedad y plantear liberaciones. "Yo
creo que ésta política de información - alternativa- está
completamente equivocada, se necesita hacer que el pueblo
reflexione y participe en el poder. Entonces, la televisión
tendría que cambiar su rumbo y programación para enseñarle al
pueblo no solo a divertise e informarse de lo que hay para
consumir. También lo debería ayudar a discernir lo que es
bueno para el él, para el país y para latinoamérica".
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