El presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, advirtió ayer a dirigentes políticos y a diputados para que no subestimen mi tranquilidad, paciencia y tolerancia, al recordarles que la legislación sanciona la conspiración.
No solamente que haré respetar la Constitución y las leyes, sino que les recuerdo a esos diputados y dirigentes, que la constitución y la ley prohíben la conspiración y que el Código Penal sanciona la misma y cualquier atentado en contra de la estabilidad democrática y, allí, no habrá impunidad que los proteja, añadió el Mandatario.
Que se cuiden de la patada del buey manso, porque no permitiré ninguna decisión inconstitucional, dijo aunque no quiso identificar a quiénes advertía, pues no aceptó preguntas de la prensa.
El jefe de Estado se pronunció ayer, hacia las 09h20, luego de su trote matinal en el Parque Metropolitano, adonde fue con su hija Karina (a quien recogió de su casa de El Batán), los miembros de seguridad y algunos colaboradores.
Luego de reiterar un mensaje de paz y tranquilidad a los ecuatorianos, Gutiérrez aseguró que en el país no pasa nada y que el Presidente continúa trabajando con calma, en beneficio de todos.
A los supuestos conspiradores Gutiérrez les recordó que el poder se lo gana en las urnas. El poder no se gana y no se reparte en reuniones clandestinas como ahora lo están haciendo. Si hablan de renuncia, los primeros que deben renunciar son ellos, porque según las mismas encuestas ustedes (los diputados) no pasan del 3% de credibilidad y aceptación popular, indicó.
A diferencia de ocasiones anteriores, Gutiérrez pasó inadvertido en el parque; el único que se acercó para pedirle que se tome una foto con él fue el turista estadounidense Andrew Peters.
El Mandatario lucía descansado pese a que mantuvo reuniones en el Palacio de Carondelet hasta poco antes de la medianoche del sábado, mientras afuera la prensa esperaba algún pronunciamiento oficial sobre los rumores.
Después de su ejercicio, Gutiérrez regresó a Carondelet, donde se mantuvo la seguridad con alambradas.
El único funcionario que ingresó fue el subsecretario de la Administración, Guillermo Astudillo, y hacia las 16h00, el nuevo ministro de Bienestar Social, Antonio Vargas, que antes de su posesión de hoy presidirá una caravana de apoyo por algunos sectores de la capital.
Poco después de las 17h00 ingresó el hermano del Presidente, Gilmar Gutiérrez.
Mientras, el vicepresidente Alfredo Palacio, permaneció ayer en el Swissôtel descansando y no salió de Quito.
Por la tarde, Guillermo Landázuri (ID), leyó un boletín en su oficina de la Presidencia del Congreso indicando que los rumores de desestabilización provienen del mismo Palacio de Gobierno y que no hay diputados conspiradores.
Los bloques parlamentarios se reunirán el martes antes de la sesión del Congreso. De todas maneras, la ID mantiene su reunión partidista de hoy.
A su vez, el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot (PSC), declaró que su partido no se pronuncia sobre rumores, a la salida de una reunión de más de dos horas. (Ver más detalles en las páginas siguientes).
El sector indígena analizó también la situación, y uno de los temas fue el nombramiento de Vargas, que solo tiene respaldo en la Feine (indios evangélicos).
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) consultó con sus bases para tomar una posición sobre esta designación y sobre las manifestaciones de la próxima semana.
Desde las 09h00 de hoy, un grupo de mujeres de la Ecuarunari (regional Sierra de la Conaie) se reunirá en el Parque del Arbolito (norte de Quito) para marchar hacia el Ministerio de Comercio Exterior en protesta por el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y el Plan Colombia.
Por la tarde habrá sesión de Gabinete y se espera que Vargas ya participe. Ahí también se definirá el anuncio de renuncia del ministro de Agricultura, Salomón Larrea. De igual manera está contemplada la reunión del Frente Militar, en el Ministerio de Defensa, durante la mañana.
Código Penal sanciona la sedición
La sedición (sublevación contra el poder establecido) es un delito contra la seguridad interna del Estado previsto en el artículo 130 (capítulo III) del Código Penal ecuatoriano.
El cuerpo legal señala que el que en cualquier forma o por cualquier medio se alzare contra el Gobierno con el objeto de desconocer la Constitución de la República, deponer al Gobierno constituido, impedir la reunión del Congreso o disolverlo o provocar una guerra civil será reprimido con prisión de cuatro a ocho años.
El artículo siguiente indica una pena de seis meses a tres años para aquellos que armasen una conspiración para rebelarse con el objeto de violar la Constitución.
Cuatro juristas consultados por este Diario señalaron ayer que las reuniones realizadas por sectores políticos para analizar una posible revocatoria del mandato del presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, no responden a ninguna de las figuras citadas.
Vladimiro Álvarez, ex ministro de Gobierno de Jamil Mahuad, opinó que la sedición y la conspiración entrañan el desconocimiento o violación de leyes y la Constitución vigentes para derrocar a un gobierno.
Los diputados tienen el derecho constitucional de fiscalizar y, si hubiere motivos, destituir al mandatario, argumentó el ex miembro de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción (CCCC), Xavier Zavala Egas.
El ex candidato presidencial del movimiento Transformación Social Independiente y ex abogado de los militares que participaron en la asonada golpista del 21 de enero del 2000, Jacinto Velázquez, explicó que -sin embargo- el mismo Código (en su artículo 148) sanciona la propagación de rumores.
El decano de la facultad de Jurisprudencia de la Universidad Católica de Guayaquil, Iván Castro, indicó que la pena para la divulgación de noticias falsas que afecten el orden público o el honor nacional) es de seis meses a dos años de prisión.
Las actividades de sedición y conspiración también están tipificadas en el Código Penal Militar.
El artículo 100 de ese cuerpo legal señala que serán reprimidos con reclusión mayor extraordinaria los miembros de las Fuerzas Armadas que alterasen la paz o el orden constituido en la República, que depusieren o desconocieren al Gobierno constituido o atacaren a los poderes públicos.
El artículo 103 sanciona con reclusión menor ordinaria y expulsión de las FF.AA. a los que incurrieren en la conspiración encaminada a conseguir lo citado.
Ministro Raúl Baca: El rumor es una acción sediciosa
Vistiendo un terno gris y una corbata de tonos rojizos, como si fuese un día corriente de trabajo, el ministro de Gobierno, Raúl Baca, despachó ayer en su oficina particular las llamadas del presidente Lucio Gutiérrez y entrevistas con la prensa.
Aunque la reunión que mantuvo con el Mandatario, el sábado, no sobrepasó las 19h00, lucía cansado. Pese a la crítica situación política y a la jornada previa caracterizada por el rumor y el nerviosismo, Baca evitó la confrontación y prefirió hablar de concertación.
Pregunta: ¿El Gobierno no minimiza la situación política cuando permite que, ayer en la noche (sábado), Víctor Hugo Sicouret desmienta los rumores de golpe de Estado y se convierta en el único vocero oficial que abordó el tema?
Respuesta: Él no tiene autorización para hablar a nombre del Gobierno. Estuvimos con el Presidente hasta las 19h00 y no he sabido de requerimientos de prensa.
Los rumores tienen una intencionalidad política de alguien, que no creo que sean los partidos. Que las Fuerzas Armadas se han tomado el Palacio; que lo metieron preso al Vicepresidente; que había un decreto que terminaba con el Congreso; que el Parlamento había resuelto la destitución de Pozo; que Baca había salido del ministerio y que Xavier Ledesma era el nuevo ministro, y que se había reunido el Congreso y tenía 56 votos y con eso todo terminaba.
Y la repetición de estos temas comienza hoy (ayer), cuando se señala que hay fuerzas militares en movimiento por todo el país. Y es falso.
P: ¿Por qué no hubo una versión oficial al respecto?
R: No había por qué hacerlo, era sábado. El Presidente llegó, hizo una afirmación y fue suficiente para un país que tiene tranquilidad.
P: ¿En qué se percibe la tranquilidad de la que habla?
R: Las FF.AA. están en su puesto, la Policía está cumpliendo un rol adecuado para proteger la realización del Miss Universo y preparando las acciones para cumplir con la Asamblea de la OEA. No veo por qué tengo que admitir que no hay tranquilidad.
P: ¿Hay tranquilidad política?
R: Depende de qué es tranquilidad. Se dice que se están realizando acciones, fuera del Congreso, para reunir votos (para la destitución del Mandatario); el problema fundamental es que se necesitan las dos terceras partes para poder invitar al Presidente, según la Constitución, y en un juicio político se analiza cualquier denuncia. Si no sería un acto inconstitucional que no estamos dispuestos a respetar.
P: ¿Qué hará el Gobierno si el Congreso logra configurar una causal para destituir al Mandatario?
R: La Constitución está escrita con claridad absoluta. El momento que exista una causal de destitución y los votos necesarios para cumplir con los mecanismos constitucionales, el Gobierno está dispuesto a aceptar que es una acción democrática. Pero inventar causales es una acción negada por la Constitución; eso implica ya sedición.
P: Tras el concurso Miss Universo y la Asamblea de la OEA, finaliza la tregua política. ¿Qué ha hecho el Gobierno para aprovecharla?
R: No hay tregua política sino acciones que perturban lo que está viviendo el país. Y la gente se empieza a preguntar, después de esto qué.
P: Pero, ¿cómo piensa el Gobierno abordar los distintos frentes abiertos en su contra?
R: Vamos a invitar a reuniones que permitan discutir una concertación política y explicar las ventajas de una estabilidad económica.
P: ¿Será formal el llamado?
R: Puede ser formal o menos formal en función de la idiosincrasia de nuestra clase política. Alguien les vendió la idea de que era malo reunirse con el Presidente; cuando se producen las reuniones se hacen en secreto. Estrategias hay, pero no necesariamente para destruir rumores.
P: ¿Rumores que se originan, precisamente, en los partidos y sectores a los que el Gobierno llamará a concertar?
R: No creo. Yo respeto mucho a la organización indígena, que produce hechos, no rumores. Los sectores políticos serios producen desconcierto cuando, hasta ayer, defendían la estabilidad y, al siguiente día, comienzan a sentir que mejor no.
P: ¿Se refiere al Partido Social Cristiano?
R: Me refiero a los sectores políticos en general. No creo que nazcan los rumores de quienes pretenden algún día ser gobierno.
P: ¿De dónde surgen?
R: No tengo certezas. Podrían ser grupos que creen que con este tipo de acciones facilitan una acción de adhesión para el proceso electoral próximo; podría ser gente que cree que en el desconcierto puede lograr lo que no puede en procesos electorales. Estamos investigando y vamos a dar con ellos; ese rumor es una acción sediciosa.
Hay desconcierto porque no se sabe qué se pretende. Cómo puede ser posible que un día las cosas están bien y al siguiente día, por una pelea entre dos legisladores (Borbúa y Febres-Cordero) cambie todo un panorama político.
P: ¿Cómo ha cambiado?
R: Ha torcido la política nacional.
P: ¿Ha torcido la posición del PSC frente al Gobierno?
R: No le puedo garantizar.
P: ¿Las declaraciones de León Febres-Cordero sobre una posible causal para destituir al Presidente no es un síntoma de esa torcedura?
R: Me refiero al problema de la causal. No hay acción constitucional que permita invocar causales traídas de la imaginación. Febres-Cordero ha sido presidente de la República y estoy seguro de que valora la estabilidad política.
P: Poco antes de viajar a México el Presidente firma un decreto para remover al ministro de Bienestar Social, Patricio Acosta, y no ofrece mayores explicaciones. ¿No es el propio Gobierno el que facilita la conflictividad política?
R: Un día antes de viajar, el Presidente decide dar respuesta a una declaración de prensa que reclamaba por el tema de la visa supuestamente cancelada por los EE.UU. a Acosta. La única solución parcial fue el pedido de renuncia. No siempre se entienden las acciones del Gobierno.
P: Luego de la reunión con la Embajadora de los EE.UU., ¿tiene el Gobierno una respuesta sobre las razones por las que la esposa de Acosta no puede ingresar a dicho país?
R: No. Hemos planteado la necesidad de saber específicamente qué es lo que pasa, pero no hemos tenido respuesta.
P: ¿El tema no está cerrado?
R: No podríamos cerrarlo sin saber qué es lo que pasa.
No solamente que haré respetar la Constitución y las leyes, sino que les recuerdo a esos diputados y dirigentes, que la constitución y la ley prohíben la conspiración y que el Código Penal sanciona la misma y cualquier atentado en contra de la estabilidad democrática y, allí, no habrá impunidad que los proteja, añadió el Mandatario.
Que se cuiden de la patada del buey manso, porque no permitiré ninguna decisión inconstitucional, dijo aunque no quiso identificar a quiénes advertía, pues no aceptó preguntas de la prensa.
El jefe de Estado se pronunció ayer, hacia las 09h20, luego de su trote matinal en el Parque Metropolitano, adonde fue con su hija Karina (a quien recogió de su casa de El Batán), los miembros de seguridad y algunos colaboradores.
Luego de reiterar un mensaje de paz y tranquilidad a los ecuatorianos, Gutiérrez aseguró que en el país no pasa nada y que el Presidente continúa trabajando con calma, en beneficio de todos.
A los supuestos conspiradores Gutiérrez les recordó que el poder se lo gana en las urnas. El poder no se gana y no se reparte en reuniones clandestinas como ahora lo están haciendo. Si hablan de renuncia, los primeros que deben renunciar son ellos, porque según las mismas encuestas ustedes (los diputados) no pasan del 3% de credibilidad y aceptación popular, indicó.
A diferencia de ocasiones anteriores, Gutiérrez pasó inadvertido en el parque; el único que se acercó para pedirle que se tome una foto con él fue el turista estadounidense Andrew Peters.
El Mandatario lucía descansado pese a que mantuvo reuniones en el Palacio de Carondelet hasta poco antes de la medianoche del sábado, mientras afuera la prensa esperaba algún pronunciamiento oficial sobre los rumores.
Después de su ejercicio, Gutiérrez regresó a Carondelet, donde se mantuvo la seguridad con alambradas.
El único funcionario que ingresó fue el subsecretario de la Administración, Guillermo Astudillo, y hacia las 16h00, el nuevo ministro de Bienestar Social, Antonio Vargas, que antes de su posesión de hoy presidirá una caravana de apoyo por algunos sectores de la capital.
Poco después de las 17h00 ingresó el hermano del Presidente, Gilmar Gutiérrez.
Mientras, el vicepresidente Alfredo Palacio, permaneció ayer en el Swissôtel descansando y no salió de Quito.
Por la tarde, Guillermo Landázuri (ID), leyó un boletín en su oficina de la Presidencia del Congreso indicando que los rumores de desestabilización provienen del mismo Palacio de Gobierno y que no hay diputados conspiradores.
Los bloques parlamentarios se reunirán el martes antes de la sesión del Congreso. De todas maneras, la ID mantiene su reunión partidista de hoy.
A su vez, el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot (PSC), declaró que su partido no se pronuncia sobre rumores, a la salida de una reunión de más de dos horas. (Ver más detalles en las páginas siguientes).
El sector indígena analizó también la situación, y uno de los temas fue el nombramiento de Vargas, que solo tiene respaldo en la Feine (indios evangélicos).
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) consultó con sus bases para tomar una posición sobre esta designación y sobre las manifestaciones de la próxima semana.
Desde las 09h00 de hoy, un grupo de mujeres de la Ecuarunari (regional Sierra de la Conaie) se reunirá en el Parque del Arbolito (norte de Quito) para marchar hacia el Ministerio de Comercio Exterior en protesta por el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y el Plan Colombia.
Por la tarde habrá sesión de Gabinete y se espera que Vargas ya participe. Ahí también se definirá el anuncio de renuncia del ministro de Agricultura, Salomón Larrea. De igual manera está contemplada la reunión del Frente Militar, en el Ministerio de Defensa, durante la mañana.
Código Penal sanciona la sedición
La sedición (sublevación contra el poder establecido) es un delito contra la seguridad interna del Estado previsto en el artículo 130 (capítulo III) del Código Penal ecuatoriano.
El cuerpo legal señala que el que en cualquier forma o por cualquier medio se alzare contra el Gobierno con el objeto de desconocer la Constitución de la República, deponer al Gobierno constituido, impedir la reunión del Congreso o disolverlo o provocar una guerra civil será reprimido con prisión de cuatro a ocho años.
El artículo siguiente indica una pena de seis meses a tres años para aquellos que armasen una conspiración para rebelarse con el objeto de violar la Constitución.
Cuatro juristas consultados por este Diario señalaron ayer que las reuniones realizadas por sectores políticos para analizar una posible revocatoria del mandato del presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, no responden a ninguna de las figuras citadas.
Vladimiro Álvarez, ex ministro de Gobierno de Jamil Mahuad, opinó que la sedición y la conspiración entrañan el desconocimiento o violación de leyes y la Constitución vigentes para derrocar a un gobierno.
Los diputados tienen el derecho constitucional de fiscalizar y, si hubiere motivos, destituir al mandatario, argumentó el ex miembro de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción (CCCC), Xavier Zavala Egas.
El ex candidato presidencial del movimiento Transformación Social Independiente y ex abogado de los militares que participaron en la asonada golpista del 21 de enero del 2000, Jacinto Velázquez, explicó que -sin embargo- el mismo Código (en su artículo 148) sanciona la propagación de rumores.
El decano de la facultad de Jurisprudencia de la Universidad Católica de Guayaquil, Iván Castro, indicó que la pena para la divulgación de noticias falsas que afecten el orden público o el honor nacional) es de seis meses a dos años de prisión.
Las actividades de sedición y conspiración también están tipificadas en el Código Penal Militar.
El artículo 100 de ese cuerpo legal señala que serán reprimidos con reclusión mayor extraordinaria los miembros de las Fuerzas Armadas que alterasen la paz o el orden constituido en la República, que depusieren o desconocieren al Gobierno constituido o atacaren a los poderes públicos.
El artículo 103 sanciona con reclusión menor ordinaria y expulsión de las FF.AA. a los que incurrieren en la conspiración encaminada a conseguir lo citado.
Ministro Raúl Baca: El rumor es una acción sediciosa
Vistiendo un terno gris y una corbata de tonos rojizos, como si fuese un día corriente de trabajo, el ministro de Gobierno, Raúl Baca, despachó ayer en su oficina particular las llamadas del presidente Lucio Gutiérrez y entrevistas con la prensa.
Aunque la reunión que mantuvo con el Mandatario, el sábado, no sobrepasó las 19h00, lucía cansado. Pese a la crítica situación política y a la jornada previa caracterizada por el rumor y el nerviosismo, Baca evitó la confrontación y prefirió hablar de concertación.
Pregunta: ¿El Gobierno no minimiza la situación política cuando permite que, ayer en la noche (sábado), Víctor Hugo Sicouret desmienta los rumores de golpe de Estado y se convierta en el único vocero oficial que abordó el tema?
Respuesta: Él no tiene autorización para hablar a nombre del Gobierno. Estuvimos con el Presidente hasta las 19h00 y no he sabido de requerimientos de prensa.
Los rumores tienen una intencionalidad política de alguien, que no creo que sean los partidos. Que las Fuerzas Armadas se han tomado el Palacio; que lo metieron preso al Vicepresidente; que había un decreto que terminaba con el Congreso; que el Parlamento había resuelto la destitución de Pozo; que Baca había salido del ministerio y que Xavier Ledesma era el nuevo ministro, y que se había reunido el Congreso y tenía 56 votos y con eso todo terminaba.
Y la repetición de estos temas comienza hoy (ayer), cuando se señala que hay fuerzas militares en movimiento por todo el país. Y es falso.
P: ¿Por qué no hubo una versión oficial al respecto?
R: No había por qué hacerlo, era sábado. El Presidente llegó, hizo una afirmación y fue suficiente para un país que tiene tranquilidad.
P: ¿En qué se percibe la tranquilidad de la que habla?
R: Las FF.AA. están en su puesto, la Policía está cumpliendo un rol adecuado para proteger la realización del Miss Universo y preparando las acciones para cumplir con la Asamblea de la OEA. No veo por qué tengo que admitir que no hay tranquilidad.
P: ¿Hay tranquilidad política?
R: Depende de qué es tranquilidad. Se dice que se están realizando acciones, fuera del Congreso, para reunir votos (para la destitución del Mandatario); el problema fundamental es que se necesitan las dos terceras partes para poder invitar al Presidente, según la Constitución, y en un juicio político se analiza cualquier denuncia. Si no sería un acto inconstitucional que no estamos dispuestos a respetar.
P: ¿Qué hará el Gobierno si el Congreso logra configurar una causal para destituir al Mandatario?
R: La Constitución está escrita con claridad absoluta. El momento que exista una causal de destitución y los votos necesarios para cumplir con los mecanismos constitucionales, el Gobierno está dispuesto a aceptar que es una acción democrática. Pero inventar causales es una acción negada por la Constitución; eso implica ya sedición.
P: Tras el concurso Miss Universo y la Asamblea de la OEA, finaliza la tregua política. ¿Qué ha hecho el Gobierno para aprovecharla?
R: No hay tregua política sino acciones que perturban lo que está viviendo el país. Y la gente se empieza a preguntar, después de esto qué.
P: Pero, ¿cómo piensa el Gobierno abordar los distintos frentes abiertos en su contra?
R: Vamos a invitar a reuniones que permitan discutir una concertación política y explicar las ventajas de una estabilidad económica.
P: ¿Será formal el llamado?
R: Puede ser formal o menos formal en función de la idiosincrasia de nuestra clase política. Alguien les vendió la idea de que era malo reunirse con el Presidente; cuando se producen las reuniones se hacen en secreto. Estrategias hay, pero no necesariamente para destruir rumores.
P: ¿Rumores que se originan, precisamente, en los partidos y sectores a los que el Gobierno llamará a concertar?
R: No creo. Yo respeto mucho a la organización indígena, que produce hechos, no rumores. Los sectores políticos serios producen desconcierto cuando, hasta ayer, defendían la estabilidad y, al siguiente día, comienzan a sentir que mejor no.
P: ¿Se refiere al Partido Social Cristiano?
R: Me refiero a los sectores políticos en general. No creo que nazcan los rumores de quienes pretenden algún día ser gobierno.
P: ¿De dónde surgen?
R: No tengo certezas. Podrían ser grupos que creen que con este tipo de acciones facilitan una acción de adhesión para el proceso electoral próximo; podría ser gente que cree que en el desconcierto puede lograr lo que no puede en procesos electorales. Estamos investigando y vamos a dar con ellos; ese rumor es una acción sediciosa.
Hay desconcierto porque no se sabe qué se pretende. Cómo puede ser posible que un día las cosas están bien y al siguiente día, por una pelea entre dos legisladores (Borbúa y Febres-Cordero) cambie todo un panorama político.
P: ¿Cómo ha cambiado?
R: Ha torcido la política nacional.
P: ¿Ha torcido la posición del PSC frente al Gobierno?
R: No le puedo garantizar.
P: ¿Las declaraciones de León Febres-Cordero sobre una posible causal para destituir al Presidente no es un síntoma de esa torcedura?
R: Me refiero al problema de la causal. No hay acción constitucional que permita invocar causales traídas de la imaginación. Febres-Cordero ha sido presidente de la República y estoy seguro de que valora la estabilidad política.
P: Poco antes de viajar a México el Presidente firma un decreto para remover al ministro de Bienestar Social, Patricio Acosta, y no ofrece mayores explicaciones. ¿No es el propio Gobierno el que facilita la conflictividad política?
R: Un día antes de viajar, el Presidente decide dar respuesta a una declaración de prensa que reclamaba por el tema de la visa supuestamente cancelada por los EE.UU. a Acosta. La única solución parcial fue el pedido de renuncia. No siempre se entienden las acciones del Gobierno.
P: Luego de la reunión con la Embajadora de los EE.UU., ¿tiene el Gobierno una respuesta sobre las razones por las que la esposa de Acosta no puede ingresar a dicho país?
R: No. Hemos planteado la necesidad de saber específicamente qué es lo que pasa, pero no hemos tenido respuesta.
P: ¿El tema no está cerrado?
R: No podríamos cerrarlo sin saber qué es lo que pasa.
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