Ecuador recibió hoy con mesura el anuncio de Colombia de fortalecer la vigilancia militar en la frontera común e insistió en sus demás exigencias para retomar las relaciones diplomáticas, rotas desde hace casi un año por un ataque militar en su territorio.
"Si lo llevan a cabo, si esas palabras son seguidas por acciones consecuentes, es un paso", afirmó el ministro de Gobierno, Fernando Bustamante, en declaraciones difundidas por un medio de televisión nacional.
El Gobierno colombiano anunció el domingo la creación de una unidad militar de élite para mejorar el control de la frontera con Ecuador, en un gesto tendiente a normalizar las relaciones diplomáticas, según el presidente Alvaro Uribe.
Bustamante reaccionó con cautela a las intenciones de Bogotá, enfatizando en que Ecuador ha puesto cinco condiciones -incluida el resguardo de la zona limítrofe por parte de Colombia- para restablecer el diálogo diplomático.
"No bastan las buenas palabras y las acciones deben ir acompañándolas. Ecuador ha planteado cinco condiciones en las que no podemos retroceder", declaró.
Como parte de esas exigencias, Ecuador espera que el Gobierno de Uribe termine con los señalamientos que involucran a Quito con las FARC y el envío de toda la información relacionada con el bombardeo colombiano del 1 de marzo pasado en Angostura.
El ataque -rechazado por la OEA como una violación a la soberanía ecuatoriana - terminó con la vida del número dos de la guerrilla de las FARC, Raúl Reyes, y otra veintena de personas que estaban al momento del bombardeo en un campamento clandestino de la guerrilla.
El plan anunciado por Bogotá prevé el traslado de 27 mil militares a la zona fronteriza, de casi 700 km de extensión, donde ejercen influencia grupos rebeldes, paramilitares y bandas del narcotráfico. (AFP)
"Si lo llevan a cabo, si esas palabras son seguidas por acciones consecuentes, es un paso", afirmó el ministro de Gobierno, Fernando Bustamante, en declaraciones difundidas por un medio de televisión nacional.
El Gobierno colombiano anunció el domingo la creación de una unidad militar de élite para mejorar el control de la frontera con Ecuador, en un gesto tendiente a normalizar las relaciones diplomáticas, según el presidente Alvaro Uribe.
Bustamante reaccionó con cautela a las intenciones de Bogotá, enfatizando en que Ecuador ha puesto cinco condiciones -incluida el resguardo de la zona limítrofe por parte de Colombia- para restablecer el diálogo diplomático.
"No bastan las buenas palabras y las acciones deben ir acompañándolas. Ecuador ha planteado cinco condiciones en las que no podemos retroceder", declaró.
Como parte de esas exigencias, Ecuador espera que el Gobierno de Uribe termine con los señalamientos que involucran a Quito con las FARC y el envío de toda la información relacionada con el bombardeo colombiano del 1 de marzo pasado en Angostura.
El ataque -rechazado por la OEA como una violación a la soberanía ecuatoriana - terminó con la vida del número dos de la guerrilla de las FARC, Raúl Reyes, y otra veintena de personas que estaban al momento del bombardeo en un campamento clandestino de la guerrilla.
El plan anunciado por Bogotá prevé el traslado de 27 mil militares a la zona fronteriza, de casi 700 km de extensión, donde ejercen influencia grupos rebeldes, paramilitares y bandas del narcotráfico. (AFP)
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