GOBIERNO RECHAZA DEMANDAS ESCOBAR, PIDE ENTREGA INCONDICIONAL.
Por Alvaro Pardo
Bogota. 24.07.92. El gobierno colombiano rechazó hoy una serie
de exigencias planteadas por el prófugo jefe del cártel de
Medellín, Pablo Escobar, y dijo que su entrega a la justicia
debía ser incondicional.
'Lo único que procede es la entrega incondicional de los
procesados', señaló un comunicado emitido por la casa
presidencial. 'El gobierno garantizará un juicio justo y la
reclusión en un lugar seguro que garantice la vida de los
reclusos'.
El comunicado agregó que los abogados de Escobar, quien se
fugó el miércoles de una cárcel de máxima seguridad, dijeron
que su cliente estaba dispuesto a entregarse de inmediato bajo
ciertas condiciones.
Escobar pidió, entre otras cosas, que se respeten las
condiciones iniciales bajo las que aceptó el año pasado
someterse a la justicia y que se lo recluya nuevamente en la
cárcel de Envigado, bajo custodia civil.
Demandó además la reincorporación de los guardiacárceles
suspendidos, el mantenimiento de los refugios antiaéreos, la
continuidad de las visitas familiares y la devolución de sus
pertenencias incautadas en la cárcel.
'Los reclusos manifestaron estar dispuestos a pagar toda la
pena a que sean condenados, en la cárcel de Envigado, bajo las
anteriores condiciones', agregó el comunicado oficial.
Escobar y otros nueve peligrosos miembros del cártel de
Medellín huyeron de la cárcel el miércoles en medio de un
motín armado contra la decisión gubernamental de transferirlos
a una base militar segura.
Juan Gómez Martínez, gobernador de la provincia de Antioquia
cuya capital es Medellín, dijo haber recibido un llamado de
Roberto Escobar, hermano de Pablo, y también prófugo.
Según Gómez, Roberto Escobar le dijo que los 10 fugitivos
estaban 'dispuestos a entregarse nuevamente y que si el
gobierno lo quería, podía encargar a una organización
internacional la custodia de la prisión y que ellos estaban
dispuestos a aceptarlo'.
Gómez viajó en la mañana de hoy a Bogotá para conversar con el
ministro de defensa Pardo.
Unos 800 efectivos militares procuraban infructuosamente dar
caza a los prófugos en las montañas cercanas a Medellín,
mientras la prensa y los políticos multiplicaban sus críticas
contra el gobierno por la espectacular evasión.
Pablo Escobar dijo que la intención oficial de colocarlo bajo
custodia militar violaba un compromiso del gobierno asumido
cuando se entregó el año pasado de que no se lo trasladaría a
otra cárcel.
El jefe del peligroso cártel de Medellín teme por su propia
seguridad y cree que la cárcel de Envigado es la única que le
garantiza protección frente a sus muchos enemigos.
La policía lo acusa de haber organizado una sangrienta guerra
de las drogas que mató a centenares de colombianos en 1989 y
1990.
El escándalo desatado por la evasión, que deterioró la
política de Colombia contra las drogas y su imagen externa,
cobró hoy una de sus primeras víctimas en el comandante
interino de la fuerza áerea, mayor general Hernando Monsalve.
El ministro de defensa Rafael Pardo pidió la renuncia de
Monsalve por la demora en el transporte aéreo de tropas de
elite a Medellín el miércoles para tomar el control de la
cárcel donde se alojaba Escobar, dijeron fuentes oficiales.
El jueves por la noche, el Ministerio de Justicia destituyó al
director y al vicedirector del penal de Envigado y suspendió a
todos los guardiacárceles mientras se investigan los sucesos
que condujeron a la fuga de Escobar.
En respuesta a la indignación pública y a los interrogantes
sobre el manejo de la operación, el gobierno difundió nuevos
detalles de los episodios. Pero muchos aspectos seguían siendo
confusos y contradictorios.
El presidente César Gaviria había decidido el martes en una
reunión del Consejo Nacional de Seguridad transferir a Escobar
de la cárcel especialmente construída para él a una base
militar más segura, tras recibir información de que seguía
involucrado en actividades delictivas desde la prisión.
Pero antes de iniciarse la operación, el viceministro de
justicia Eduardo Mendoza y el director de prisiones, coronel
Hernando Navas, ingresaron a la cárcel sin escolta para avisar
a Escobar y sus 14 lugartenientes de los planes de Gaviria.
El gobierno confirmó hoy en una declaración que los dos
funcionarios ingresaron al penal 'por propia iniciativa, para
informar a los presos de las órdenes del Consejo de
Seguridad'.
Los reclusos rápidamente se apoderaron de las íarmas de sus
guardianes y tomaron en rehén durante varias horas a los dos
funcionarios hasta que fueron liberados por las fuerzas
especiales en la madrugada del miércoles tras un tiroteo. En
ese crítico lapso, Escobar y nueve de sus secuaces se
escaparon de la cárcel.
Treinta minutos antes de inciada la operación, altos jefes del
ejército advirtieron al gobierno sobre los riesgos que suponía
realizarla del modo planeado por el Consejo Nacional de
Seguridad, dijo el diario bogotano El Tiempo.
Un general del ejército dijo al gobierno que sería mejor tomar
la prisión en la madrugada, para preservar el factor sorpresa
y evitar una posible reacción de los presos y de los guardias,
algunos de los cuales se creía tenían connivencia con Escobar
y sus compañeros, agregó el diario.
No obstante, Gaviria y sus asesores hicieron caso omiso de la
recomendación y ordenaron que el ejército tomara posiciones en
torno del presidio en la noche del martes, dijo El Tiempo,
basándose en entrevistas con jefes militares.
En una declaración, el gobierno dijo que no podía explicar
informes de testigos acerca de que los narcotraficantes
contaron con máscaras de gas y poderosos radioteléfonos
durante el aseido a la prisión.
Agregó que no había hallado pruebas sobre la existencia de un
túnel bajo la prisión. Infomres de prensa dijeron que Escobar,
propietario de la tierra donde se edificó la cárcel, pudo
haber huído por un túnel secreto excavado años antes. (NOTA;
incluye declaraciones del gobernador de Antioquia
sobre su conversación con hermano de Escobar)
Por Alvaro Pardo
Bogota. 24.07.92. El gobierno colombiano rechazó hoy una serie
de exigencias planteadas por el prófugo jefe del cártel de
Medellín, Pablo Escobar, y dijo que su entrega a la justicia
debía ser incondicional.
'Lo único que procede es la entrega incondicional de los
procesados', señaló un comunicado emitido por la casa
presidencial. 'El gobierno garantizará un juicio justo y la
reclusión en un lugar seguro que garantice la vida de los
reclusos'.
El comunicado agregó que los abogados de Escobar, quien se
fugó el miércoles de una cárcel de máxima seguridad, dijeron
que su cliente estaba dispuesto a entregarse de inmediato bajo
ciertas condiciones.
Escobar pidió, entre otras cosas, que se respeten las
condiciones iniciales bajo las que aceptó el año pasado
someterse a la justicia y que se lo recluya nuevamente en la
cárcel de Envigado, bajo custodia civil.
Demandó además la reincorporación de los guardiacárceles
suspendidos, el mantenimiento de los refugios antiaéreos, la
continuidad de las visitas familiares y la devolución de sus
pertenencias incautadas en la cárcel.
'Los reclusos manifestaron estar dispuestos a pagar toda la
pena a que sean condenados, en la cárcel de Envigado, bajo las
anteriores condiciones', agregó el comunicado oficial.
Escobar y otros nueve peligrosos miembros del cártel de
Medellín huyeron de la cárcel el miércoles en medio de un
motín armado contra la decisión gubernamental de transferirlos
a una base militar segura.
Juan Gómez Martínez, gobernador de la provincia de Antioquia
cuya capital es Medellín, dijo haber recibido un llamado de
Roberto Escobar, hermano de Pablo, y también prófugo.
Según Gómez, Roberto Escobar le dijo que los 10 fugitivos
estaban 'dispuestos a entregarse nuevamente y que si el
gobierno lo quería, podía encargar a una organización
internacional la custodia de la prisión y que ellos estaban
dispuestos a aceptarlo'.
Gómez viajó en la mañana de hoy a Bogotá para conversar con el
ministro de defensa Pardo.
Unos 800 efectivos militares procuraban infructuosamente dar
caza a los prófugos en las montañas cercanas a Medellín,
mientras la prensa y los políticos multiplicaban sus críticas
contra el gobierno por la espectacular evasión.
Pablo Escobar dijo que la intención oficial de colocarlo bajo
custodia militar violaba un compromiso del gobierno asumido
cuando se entregó el año pasado de que no se lo trasladaría a
otra cárcel.
El jefe del peligroso cártel de Medellín teme por su propia
seguridad y cree que la cárcel de Envigado es la única que le
garantiza protección frente a sus muchos enemigos.
La policía lo acusa de haber organizado una sangrienta guerra
de las drogas que mató a centenares de colombianos en 1989 y
1990.
El escándalo desatado por la evasión, que deterioró la
política de Colombia contra las drogas y su imagen externa,
cobró hoy una de sus primeras víctimas en el comandante
interino de la fuerza áerea, mayor general Hernando Monsalve.
El ministro de defensa Rafael Pardo pidió la renuncia de
Monsalve por la demora en el transporte aéreo de tropas de
elite a Medellín el miércoles para tomar el control de la
cárcel donde se alojaba Escobar, dijeron fuentes oficiales.
El jueves por la noche, el Ministerio de Justicia destituyó al
director y al vicedirector del penal de Envigado y suspendió a
todos los guardiacárceles mientras se investigan los sucesos
que condujeron a la fuga de Escobar.
En respuesta a la indignación pública y a los interrogantes
sobre el manejo de la operación, el gobierno difundió nuevos
detalles de los episodios. Pero muchos aspectos seguían siendo
confusos y contradictorios.
El presidente César Gaviria había decidido el martes en una
reunión del Consejo Nacional de Seguridad transferir a Escobar
de la cárcel especialmente construída para él a una base
militar más segura, tras recibir información de que seguía
involucrado en actividades delictivas desde la prisión.
Pero antes de iniciarse la operación, el viceministro de
justicia Eduardo Mendoza y el director de prisiones, coronel
Hernando Navas, ingresaron a la cárcel sin escolta para avisar
a Escobar y sus 14 lugartenientes de los planes de Gaviria.
El gobierno confirmó hoy en una declaración que los dos
funcionarios ingresaron al penal 'por propia iniciativa, para
informar a los presos de las órdenes del Consejo de
Seguridad'.
Los reclusos rápidamente se apoderaron de las íarmas de sus
guardianes y tomaron en rehén durante varias horas a los dos
funcionarios hasta que fueron liberados por las fuerzas
especiales en la madrugada del miércoles tras un tiroteo. En
ese crítico lapso, Escobar y nueve de sus secuaces se
escaparon de la cárcel.
Treinta minutos antes de inciada la operación, altos jefes del
ejército advirtieron al gobierno sobre los riesgos que suponía
realizarla del modo planeado por el Consejo Nacional de
Seguridad, dijo el diario bogotano El Tiempo.
Un general del ejército dijo al gobierno que sería mejor tomar
la prisión en la madrugada, para preservar el factor sorpresa
y evitar una posible reacción de los presos y de los guardias,
algunos de los cuales se creía tenían connivencia con Escobar
y sus compañeros, agregó el diario.
No obstante, Gaviria y sus asesores hicieron caso omiso de la
recomendación y ordenaron que el ejército tomara posiciones en
torno del presidio en la noche del martes, dijo El Tiempo,
basándose en entrevistas con jefes militares.
En una declaración, el gobierno dijo que no podía explicar
informes de testigos acerca de que los narcotraficantes
contaron con máscaras de gas y poderosos radioteléfonos
durante el aseido a la prisión.
Agregó que no había hallado pruebas sobre la existencia de un
túnel bajo la prisión. Infomres de prensa dijeron que Escobar,
propietario de la tierra donde se edificó la cárcel, pudo
haber huído por un túnel secreto excavado años antes. (NOTA;
incluye declaraciones del gobernador de Antioquia
sobre su conversación con hermano de Escobar)
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