Quito. 02 jun 2000. Las empresas distribuidoras y
comercializadoras de combustible dicen trabajar a pérdida. La
gasolinera de Petrocomercial genera USD 1 200 diarios de utilidad.
El último incremento de precios a los combustibles no fue del
agrado de los dueños de las gasolineras, como tampoco de las
empresas comercializadoras de hidrocarburos.
El argumento es el mismo. "lo que se obtiene por la venta de
gasolinas no alcanza para cubrir los costos", según José Miranda,
presidente de los distribuidores asociados a las comercializadoras
transnacionales. Según él, fue un error del Gobierno la reducción
del margen de comercialización del 19,5 al 15 por ciento, medida
que está vigente desde el 26 de mayo pasado.
La razón: ellos ahora enfrentan mayores gastos, por el aumento de
la electricidad y salarios. "Si antes pagábamos 4 millones de luz,
ahora serán unos 12". Pero además se necesitará más dinero para
comprar el mismo volumen de combustibles.
Sin embargo, las cifras oficiales muestran que la reducción de
este margen de no significará una baja en los ingresos de las
empresas distribuidoras y comercializadoras. Por el contrario,
tendrán más ingresos, porque el porcentaje de aumento de precios
fue mayor a la reducción del margen.
En efecto, el precio anterior de la gasolina extra a nivel de
terminal (como El Beaterio, Pascuales, etc.)era de 0,40 dólares
por galón, mientras el margen de comercialización era del 19,5 por
ciento, equivalente a 0,078 dólares por galón.
Ahora, el nuevo precio subió a 0,48 dólares por galón y, aunque el
margen de comercialización bajó al 15 por ciento, éste equivale a
0,10 dólares por galón. Este último valor es 32 por ciento
superior al que obtenían antes las empresas.
La misma situación se repite en el caso del diesel, donde el
aumento de ingresos es del 47 por ciento. En ambos casos se
evidencia que los ingresos por galón de gasolina extra y diesel sí
aumentan pese a la reducción del margen de comercialización. Y
esto se debe a que se aplica un porcentaje más bajo, pero sobre un
precio más elevado, como es el caso del diesel y la extra.
Fuentes de las comercializadoras transnacionales aceptan este
hecho, pero señalan que no es suficiente para recuperar las
pérdidas que han acumulando desde hace siete años, cuando el
Estado ecuatoriano dio paso a la inversión privada.
"Lamentablemente, en los siete años que estamos en el Ecuador, las
comercializadoras transnacionales no hemos podido generar
utilidades, y por tanto no hemos pagado Impuesto a la Renta", dijo
el gerente de una empresa que prefirió no ser citado.
Pese a que generará más ingresos, lo que se hará es reducir las
pérdidas, pero éstas seguirán, señaló.
Esta situación no la comparten funcionarios de Petrocomercial. El
negocio es rentable y como ejemplo ponen a la estación de servicio
de Petrocomercial, que generaba utilidades netas diarias de al
menos USD 1 200 con los precios anteriores. "Si se considera que
el aumento de precios rinde más, la utilidades subirán", dijo.
El ministro de Energía, Pablo Terán, señaló que este no es el año
de las utilidades sino de la estabilización. De ahí que hizo un
llamado a estas empresas, para que todos apoyen en la reactivación
del país .
Según Terán, se habló con algunas comercializadoras y "ellas están
conscientes de que son parte del Ecuador y tienen que hacer su
sacrificio. No podemos pedir a todo el mundo que se sacrifique
menos a las comercializadoras".
Además, dice, la demanda de la gasolina extra y el diesel es
inelástica, es decir, el aumento en el precio no bajará la demanda
del combustible. De ahí que se puso un techo al margen de
comercialización en el 15 por ciento. Pero además, en una economía
dolarizada como la ecuatoriana, "el tener ese margen de
comercialización es absolutamete adecuado, porque no existe ningún
riesgo cambiario".
Según datos oficiales, los balances de la comercializadora Texaco
muestran pérdidas durante el año pasado, pero fueron producto
básicamente de la devaluación del sucre frente al dólar. Ahora,
con una moneda estable, se espera que la empresa no gane, pero
tampoco pierda.
Ayer en al tarde, el ministro Pablo Terán y el presidente
ejecutivo de Petroecuador, Rodolfo Barniol, tenían prevista una
reunión con representantes de las empresas comercializadoras y
distribuidoras de combustible. Ahí se esperaba que las autoridades
expliquen el alcance de las últimas medidas y sobre todo de la
política que aplicará el Estado en el futuro.
Dos propuestas para estudio de las autoridades
El gerente de una comercializadora extranjera señaló que pedirán a
las autoridades medidas compensatorias para cubrir sus supuestas
pérdidas. Una salida sería cambiar la garantía que estas empresas
entregan a Petrocomercial para operar.
Este requisito les significa 80 mil dólares anuales, producto de
la tasa que les cobra el banco por emitir esa garantía. Lo que se
puede hacer es que Petrocomercial acepte una garantía de la casa
matriz de la comercializadora internacional. "Eso reducirá
nuestros gastos".
Por su parte, el presidente de los distribuidores asociados a las
comercializadoras transnacionales, José Miranda, señaló que
pedirán una reducción en el precio de los combustibles a nivel de
terminal, pero mantener el precio de venta al público.
En la práctica, esta propuesta significa elevar el margen de
comercialización a los niveles anteriores, lo que generará más
recursos a estas empresas. De lo contrario, dice, "tendremos que
reducir costos y eso significa despedir personal".
Para Miranda, el capital de trabajo que se tiene al momento
permitirá comprar menos combustible que antes y eso significará
que la atención al público se reduzca. "Se podrá trabajar solo de
06:00 a 20:00". (Texto tomado de El Comercio)
comercializadoras de combustible dicen trabajar a pérdida. La
gasolinera de Petrocomercial genera USD 1 200 diarios de utilidad.
El último incremento de precios a los combustibles no fue del
agrado de los dueños de las gasolineras, como tampoco de las
empresas comercializadoras de hidrocarburos.
El argumento es el mismo. "lo que se obtiene por la venta de
gasolinas no alcanza para cubrir los costos", según José Miranda,
presidente de los distribuidores asociados a las comercializadoras
transnacionales. Según él, fue un error del Gobierno la reducción
del margen de comercialización del 19,5 al 15 por ciento, medida
que está vigente desde el 26 de mayo pasado.
La razón: ellos ahora enfrentan mayores gastos, por el aumento de
la electricidad y salarios. "Si antes pagábamos 4 millones de luz,
ahora serán unos 12". Pero además se necesitará más dinero para
comprar el mismo volumen de combustibles.
Sin embargo, las cifras oficiales muestran que la reducción de
este margen de no significará una baja en los ingresos de las
empresas distribuidoras y comercializadoras. Por el contrario,
tendrán más ingresos, porque el porcentaje de aumento de precios
fue mayor a la reducción del margen.
En efecto, el precio anterior de la gasolina extra a nivel de
terminal (como El Beaterio, Pascuales, etc.)era de 0,40 dólares
por galón, mientras el margen de comercialización era del 19,5 por
ciento, equivalente a 0,078 dólares por galón.
Ahora, el nuevo precio subió a 0,48 dólares por galón y, aunque el
margen de comercialización bajó al 15 por ciento, éste equivale a
0,10 dólares por galón. Este último valor es 32 por ciento
superior al que obtenían antes las empresas.
La misma situación se repite en el caso del diesel, donde el
aumento de ingresos es del 47 por ciento. En ambos casos se
evidencia que los ingresos por galón de gasolina extra y diesel sí
aumentan pese a la reducción del margen de comercialización. Y
esto se debe a que se aplica un porcentaje más bajo, pero sobre un
precio más elevado, como es el caso del diesel y la extra.
Fuentes de las comercializadoras transnacionales aceptan este
hecho, pero señalan que no es suficiente para recuperar las
pérdidas que han acumulando desde hace siete años, cuando el
Estado ecuatoriano dio paso a la inversión privada.
"Lamentablemente, en los siete años que estamos en el Ecuador, las
comercializadoras transnacionales no hemos podido generar
utilidades, y por tanto no hemos pagado Impuesto a la Renta", dijo
el gerente de una empresa que prefirió no ser citado.
Pese a que generará más ingresos, lo que se hará es reducir las
pérdidas, pero éstas seguirán, señaló.
Esta situación no la comparten funcionarios de Petrocomercial. El
negocio es rentable y como ejemplo ponen a la estación de servicio
de Petrocomercial, que generaba utilidades netas diarias de al
menos USD 1 200 con los precios anteriores. "Si se considera que
el aumento de precios rinde más, la utilidades subirán", dijo.
El ministro de Energía, Pablo Terán, señaló que este no es el año
de las utilidades sino de la estabilización. De ahí que hizo un
llamado a estas empresas, para que todos apoyen en la reactivación
del país .
Según Terán, se habló con algunas comercializadoras y "ellas están
conscientes de que son parte del Ecuador y tienen que hacer su
sacrificio. No podemos pedir a todo el mundo que se sacrifique
menos a las comercializadoras".
Además, dice, la demanda de la gasolina extra y el diesel es
inelástica, es decir, el aumento en el precio no bajará la demanda
del combustible. De ahí que se puso un techo al margen de
comercialización en el 15 por ciento. Pero además, en una economía
dolarizada como la ecuatoriana, "el tener ese margen de
comercialización es absolutamete adecuado, porque no existe ningún
riesgo cambiario".
Según datos oficiales, los balances de la comercializadora Texaco
muestran pérdidas durante el año pasado, pero fueron producto
básicamente de la devaluación del sucre frente al dólar. Ahora,
con una moneda estable, se espera que la empresa no gane, pero
tampoco pierda.
Ayer en al tarde, el ministro Pablo Terán y el presidente
ejecutivo de Petroecuador, Rodolfo Barniol, tenían prevista una
reunión con representantes de las empresas comercializadoras y
distribuidoras de combustible. Ahí se esperaba que las autoridades
expliquen el alcance de las últimas medidas y sobre todo de la
política que aplicará el Estado en el futuro.
Dos propuestas para estudio de las autoridades
El gerente de una comercializadora extranjera señaló que pedirán a
las autoridades medidas compensatorias para cubrir sus supuestas
pérdidas. Una salida sería cambiar la garantía que estas empresas
entregan a Petrocomercial para operar.
Este requisito les significa 80 mil dólares anuales, producto de
la tasa que les cobra el banco por emitir esa garantía. Lo que se
puede hacer es que Petrocomercial acepte una garantía de la casa
matriz de la comercializadora internacional. "Eso reducirá
nuestros gastos".
Por su parte, el presidente de los distribuidores asociados a las
comercializadoras transnacionales, José Miranda, señaló que
pedirán una reducción en el precio de los combustibles a nivel de
terminal, pero mantener el precio de venta al público.
En la práctica, esta propuesta significa elevar el margen de
comercialización a los niveles anteriores, lo que generará más
recursos a estas empresas. De lo contrario, dice, "tendremos que
reducir costos y eso significa despedir personal".
Para Miranda, el capital de trabajo que se tiene al momento
permitirá comprar menos combustible que antes y eso significará
que la atención al público se reduzca. "Se podrá trabajar solo de
06:00 a 20:00". (Texto tomado de El Comercio)
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