LOURDES GUANIN

Guayaquil. 29 jun 97 .- Apoyo, servicio y asesoría son las
máximas de trabajo de la Fundación de Asistencia Sicopedagógica
para Niños-Adolescentes y Adultos con Retardo Mental (Fasinarm),
que atiende en su centro de educación y laboral a un promedio de
300 personas con discapacidad mental.

Desde que fue fundada hace 30 años por la educadora especial
Marcia Gilbert de Babra, esta entidad ha creado nuevas
alternativas para los discapacitados, en las que siempre se
promueve el mejoramiento de su calidad de vida y su integración
a la sociedad.

Apoyo al niño y adulto

La misión de trabajo se cumple todos los días en el Centro
Educativo y Laboral (CEL), donde los 93 miembros del equipo
trabajan con responsabilidad en tres programas de acción:
Programa de Estimulación Temprana, Unidad Básica Educativa (UBE)
y Centro de Entrenamiento Vocacional y Empleo (CEVE), que se
encuentran ubicados en Los Ceibos, atrás del colegio Alemán
Humboldt.

Cuando el niño ingresa a Fasinarm, un equipo técnico
multidisciplinario da un diagnóstico médico, sicológico y de
trabajo social previo, que sirve de referencia para que la
educadora especial, que es una pedagoga terapeuta, trabaje en las
habilidades que el infante puede desarrollar.

Pero los servicios que prestan estos programas no solo atañen a
los discapacitados sino que se proyectan al medio donde el niño,
adolescente o adulto con retardo mental se desenvuelve, expresó
el Sic. David Vallet Carroza, coordinador del departamento
técnico de Fasinarm.

Comenta: "Aquí, la familia se convierte en un pilar de la
educación de los enfermos pues los padres encuentran la
orientación del equipo técnico, que indica cuál es la manera como
deben atender a sus hijos de acuerdo con su problema".

Los programas

El Programa de Estimulación Temprana acoge a niños recién nacidos
hasta los 6 años. Brinda servicio individual a los infantes de
0 a 3 años y grupal, a los de 3 a 6 años, de edad cronológica.

En la Unidad Básica Educativa (UBE) se encuentran los niños y
adolescentes comprendidos entre 6 y 16 años, y en el Centro de
Entrenamiento Vocacional y Empleo (CEVE) est n los adolescentes
y adultos, a quienes se brindan servicios de formación,
capacitación ocupacional y colocación.

Los talleres protegidos de imprenta, subcontratos, costura,
serigrafía, prevocacional, club familiar sirven para integrar al
joven en la sociedad.

Soraya Saltos, pedagoga terapeuta y asistente de colocación y
seguimiento laboral, afirma que existe mucha dificultad para
encontrar un empleo para jóvenes con este problema, pues la
sociedad no ha entendido que ellos tienen las capacidades
suficientes para realizar un trabajo con responsabilidad.

Centro de recursos

Paralelo a estos servicios, Fasinarm cuenta con el Centro de
Recursos para que la comunidad en general tenga la posibilidad
de documentarse, actualizarse y recibir asistencia técnica en
sicopedagogía y administración gerencial.

El centro de información alberga una biblioteca y videoteca con
alrededor de 12.000 documentos en las áreas de pedagogía,
sicología, educación especial, rehabilitación y desarrollo
organizacional, distribuidos en folletos, tesis, diccionarios
especializados, catálogos, revistas, boletines, videos slides,
casetes, acetatos y láminas.

Se hacen préstamos a domicilio del material bibliográfico a
través de una membresía, se alquilan videos, se hacen consultas
dentro de la sala de lectura, préstamos interinstitucionales,
reproducción de documentos y venta de material bibliográfico y
didáctico.

La capacitación y asistencia técnica se presta a todas las
instituciones relacionadas con educación general, especial o
rehabilitación profesional.

Esto se hace a través de convenios y ejecución de proyectos
interinstitucionales, financiados por organismos nacionales como
internacionales, de acuerdo con la demanda de capacitación y
asistencia que requieren a través de módulos de capacitación y
desarrollo de nuevos.

Los seminarios se imparten en una sala equipada para 60 personas,
que está a disposición del público para alquiler.

No me olvides

El servicio directo que Fasinarm brinda a quienes tienen retardo
mental se ha complicado en los últimos años por el aumento de la
población de estudiantes con estas características, lo cual hace
más difícil la manutención del centro, indicó el Sic. David
Vallet Carroza.

Es por ello que bajo el lema "No me olvides", Fasinarm está en
permanente campaña para mantener su actividad, pues los rubros
que se cobran a los estudiantes por pensiones no cubren los
400.000 sucres que mensualmente cuesta la atención de cada
paciente.

Solo el 3% de los discapacitados puede pagar sus estudios, por
lo que desde el inicio se implantó un sistema de pensión
diferenciada que hace que los familiares paguen un monto de
acuerdo con sus ingresos económicos, que por lo general son
mínimos.

Este tipo de administración ha ocasionado un déficit en el
presupuesto, por lo que se han creado ciertas estrategias de
financiamiento, como la venta de la Agenda Mujer y otros eventos
para recaudar fondos como el bazar navideño y los programas:
regálese una tarde de madres, bingo de lujo, rifa de TV, mercado
de pulgas, la ejecución de una campaña de becas y donantes.

Además, este año se ha implantado un nuevo programa denominado
Ayúdenos a que este sol siga brillando, que intenta hacer que por
medio de la tarjeta de crédito el contribuyente done su aporte
mensual a beneficio de Fasinarm.

Mediante un pagaré, que llegará en el estado de cuenta de varios
bancos porteños, el público podrá hacer las donaciones, en la que
incluirá el monto que el cliente autoriza debitar de su cuenta.

La donación consiste en doce cuotas, que a consideración del
cliente puede ser de 5.000, 10.000, 20.000, 30.000, 50.000,
100.000 o más, según el donante indique en el pagaré.

Además, la comunidad puede ayudar comprando los productos que se
elaboran en los talleres y enviando donaciones de material
didáctico, de imprenta o serigráfico, pues la fundación busca a
toda costa evitar la clausura de los servicios.

En Ecuador

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 10% del total
de la población mundial tiene discapacidad; sin embargo, en
países como el nuestro, las condiciones de extrema pobreza
tienden a agravar este índice entre el 12% y 18%, pero no se ha
hecho un censo que calcule esta cifra con exactitud.

En el Ecuador existen alrededor de 500.000 niños y jóvenes entre
0 y 18 años con discapacidades y menos del 2% tienen acceso a los
servicios educativos que requieren.

Las discapacidades en el área de lenguaje (3,5%) y retardo mental
(2,3%) son las más frecuentes, siendo esta última la más atendida
(36,31%).

Para el año 2000 se estima que la cifra aumentará a 730.000 niños
y jóvenes discapacitados, para lo que se requerirá de 43.500
maestros especializados. (Texto tomado de El Universo)
EXPLORED
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