Quito. 3 nov 98. Luego de que piscinas, coliseos y pistas
atléticas quedan vacías de público y deportistas, carecen, por
regla general, de un uso adecuado.
Los altos costos del mantenimiento de la infraestructura y el
quemeimportismo de las Federaciones Deportivas ha dejado al
país con una serie de monumentos inútiles, como lo constató
HOY en un recorrido por varias provincias.
En Cuenca acaban de terminar los Juegos Sudamericanos, en
total se invirtieron 2,7 millones de dólares en el
mejoramiento de varios escenarios.
¿Qué garantías existen de que la inversión realizada estará
protegida y qué posibilidades hay de que nuevos atletas y
nadadores utilicen la infraestructura?
"Debemos confiar en los dirigentes", dice el presidente del
Comité Organizador de los Juegos CORSUR, Ernesto Cañizares,
pero la experiencia de anteriores competencias como el Mundial
de Natación de Guayas y los Juegos Nacionales no abonan en
beneficio de sus expresiones.
En todo caso, Cuenca aprovechó la presencia de los principales
directivos de América para conseguir otro evento
internacional: el velódromo de la ciudad tendrá nuevamente
actividad en el año 2000, cuando se efectúe el Panamericano.
En cambio, existe otro velódromo, el de Tulcán, inagurado hace
11 años y cuya construcción jamás se terminó.
¿Alguien analizó alguna vez la conveniencia de construir un
velódromo en una provincia que se caracteriza por contar con
excelentes ciclistas de ruta? Absurdos como estos se han
producido en otras provincias y fuera de las fronteras del
país. Una vez finalizados los Juegos Deportivos Bolivarianos
de Arequipa, los jueces se llevaron de recuerdo marcadores y
cronómetros. Es fácil, entonces, comprender que el trabajo de
los directivos, por precautelar, la inversión, empieza cuando
la última delegación deja el estadio, no después.
El futuro de los escenarios azuayos
Susana Kinklicht
Un delegado extranjero, que vino hace tres años a Cuenca para
inspeccionar los escenarios deportivos y su aptitud para los
VI Juegos Sudamericanos, no pudo ocultar su sorpresa cuando
una directora de colegio le mostró un coliseo que le fuera
entregado años atrás, después de un evento internacional
parecido, para que lo administrara: el piso no tenía un solo
rayón.
Este es uno de los motivos por los que la Federación Deportiva
del Azuay, según su presidente Eduardo Encalada, favorece
ahora la administración directa. El objetivo es conseguir que
los escenarios que quedan de estas grandes competencias se
utilicen intensamente.
El primer paso que se dio en este sentido tuvo éxito, el nuevo
velódromo construido por CORSUR ha sido escogido para acoger
los Panamericanos de Ciclismo en el año 2.000.
Sin embargo, no basta con organizar cada vez nuevas
competencias. La utilización cotidiana, en favor del deporte
élite y masivo, es lo único que justifica, en opinión de
Encalada, la inversión de 2, 7 millones de dólares en la
edificación y mejoramiento de los escenarios para los Juegos.
Con este fin, la Federación, que por ejemplo gasta 15 millones
de sucres mensuales en combustible, cloro y mantenimiento de
la piscina, piensa recuperar este dinero a través de
matrículas y entradas para nadadores.
Alentador es el panorama en el nuevo patinódromo, donde más de
300 deportistas y aficionados esperan que se acaben los Juegos
para utilizarlo, asimismo pagando.
El futuro de la Pista Sintética Jefferson Pérez parece
asegurado, si se utiliza como termómetro el desarrollo de la
marcha en esta ciudad. Velocistas, lanzadores de jabalina,
bala y martillo, etc., que no han tenido más que el Parque de
la Madre, la Subida a Turi y el Estadio para entrenar ahora
dispondrán de un escenario adecuado, que no parece destinado a
aficionados.
La atleta múltiple esmeraldeña, María Cangá, dijo que la
inversión que ha hecho Cuenca no servirá solo a los cuencanos,
sino a todos los ecuatorianos.
Para ellos y porque incluso sería un buen proyecto de
autogestión, la Federación está presionando para terminar el
Centro de Alto Rendimiento Rolando Vera, que por falta de
dinero se quedó sin el hotel para 200 atletas y sin los
aparatos y laboratorios.
El mismo Rolando Vera se ha comprometido a gestionar ante la
Embajada del Japón y la Fundación Jica, que fue la misma que
implementó el Polideportivo Huancavilca en Guayaquil, la ayuda
necesaria.
La Federación tiene la palabra
¿Qué garantías existen de que los escenarios deportivos no
empezarán a deteriorarse una vez que concluyan los Juegos?
En Cuenca existe una dirigencia deportiva probada, que
permitirá que la experiencia de las piscinas de Guayaquil y
otros escenario que han quedado abandonados no se vuelva a
reproducir.
Yo creo que la Federación Deportiva será capaz de responder el
duro reto de mantener la infraestructura deportiva para forjar
campeones.
Sin embargo, durante los mismos Juegos, la prensa
internacional criticó el mal estado del coliseo de
Totoracocha, que es prácticamente nuevo.
Todos los escenarios deportivos construidos en Cuenca cuestan
17 mil millones de sucres, cuando un estadio en un provincia
de la Costa está presupuesta den 14 mil millones. Con esto le
quiero demostrar que tuvimos que manejarlos con muy poco
presupuesto. En Totoracocha sí existen goteras, pero no en la
medida que la prensa internacional lo divulgó. Son cosas que
no se consiguieron prever, pero no fueron de gran magnitud.
¿Se han buscado nuevas competencias?
Esa es labor de la Federación, pero conozco que en patinaje ya
se han buscado nuevas competencias, de la misma forma se busca
actividad para los ciclistas.
Dirigente
- Ernesto Cañizares, dirigente deportivo. Fue el encargado de
la organización de los Juegos ODESUR de Cuenca.
- Su trabajo seguirá hasta Córdoba 2002.
Las piscinas del Mundial no soportaron el fuerte invierno
Los eventos deportivos internacionales pasan, pero la costosa
infraestructura montada a propósito, queda. Pocas veces se da
un real uso y mantenimiento a los escenarios, que, por lo
general, se destruyen. Este es el caso del Complejo Cuatro
Mosqueteros, construido en Guayaquil para el desarrollo del
Campeonato Mundial de Natación de 1982.
En este se puede realizar natación, nado sincronizado, polo
acuático y clavados. Su piscina tiene 50,3 metros de largo y
25,3 de ancho, la torre de saltos ornamentales tiene una
profundidad de cinco y una altura de diez metros, con
plataformas de diez, siete y medio, cinco, tres y un metro.
Hay una piscina de 50 metros para enseñar a nadar y para los
calentamientos durante las competencias.
Sin embargo, con el paso del tiempo, este complejo deportivo
se ha deteriorado. El período invernal del año 82-83 inundó y
destrozó las instalaciones, las que se han ido arreglando sin
conseguir ponerlas en el estado en que estaban originalmente.
Entre los mayores problemas se encuentran los de iluminación,
ya que se han retirado dos torres para llevarlas al Estadio
Modelo Guayaquil. Los motores están viejos, faltan
clorinadores, se necesita cambiar los trampolines que son de
la época del mundial, hace falta completar los andariveles.
Las cabinas de radio están completamente destruidas y el
sistema de sonido está defectuoso.
En el complejo entrena en la actualidad el Club Thoret, que ha
hecho una escuela de saltos ornamentales.
Esta piscina también es utilizada por la Policía Nacional, por
personas que van a aprender natación submarina con equipos
sofisticados de buceo, por DINADER.
"Esta piscina tiene mala fama porque estuvo muy abandonada,
pero ahora está en buenas condiciones. La Federación Deportiva
del Guayas cada vez que se daña algo lo compone, eso si no se
puede discutir, tal vez haya un poquito de falta de
mantenimiento, pero los desperfectos sí son solucionados",
expresó Gastón Thoret, presidente de la Ecuatoriana de
Natación.
Subutilizada infraestructura de Manabí
En Manabí se construyeron varios escenarios deportivos para la
realización de los sextos Juegos Nacionales de 1985. En
Portoviejo el Coliseo La California, la piscina olímpica,
pista atlética, polígono de tiro y ampliación del estadio
Reales Tamarindos, en Manta el Coliseo y la piscina olímpica,
en ciudades como Bahía y Chone se construyeron coliseos.
Una vez terminadas las competencias deportivas los escenarios
fueron entregados por DINADER a las ligas cantonales para su
administración y mantenimiento en el caso de Portoviejo las
obras pasaron a manos de la Federación Deportiva de Manabí.
Lenin Delgado Martínez, actual vicepresidente de la FDM, y que
presidió la institución durante 14 años consecutivos, asegura
que de no ser por los sextos juegos, Manabí no tendría la
infraestructura deportiva que posee, lo que le ha permitido
llevar la calidad deportiva de los manabitas que han logrado
importantes triunfos para el país.
Luego de trece años de los Juegos Nacionales, los escenarios
en Manabí permanecen en buen estado, salvo la piscina olímpica
de Portoviejo que fue sepultada por las inundaciones y que
ahora se encuentran subutilizados por la poca asistencia de
los deportistas y la falta de planificación.
Delgado sostuvo que desconocía el costo de las obras
entregadas por DINADER, pero un examen de Contraloría
determinó que los escenarios alcanzaron un monto de 1.250
millones de sucres solo en Portoviejo, lo lamentable es que
apenas unos 1.500 deportistas se benefician de estos centros.
Dijo además, que a pesar de no contar con los recursos para
mejoramiento y mantenimiento de los escenarios, se ha podido
mantener las obras para entrenamiento y cursos vacacionales.
"A la mayoría de los escenarios de la provincia se les da
mantenimiento y a través de convenios con las ligas cantonales
y los Municipios, solo así hemos impedido que se destruyan,
del Estado no recibimos más que el 5 por ciento de la tarifa
telefónica y este rubro varía según la cantidad de usuarios
del servicio y la forma como Pacifitel cobre la planillas,
hasta hoy nos deben 10 meses atrasados" aclaró Lenin Delgado.
En la FDM no se informó el monto del presupuesto y los gastos
que se realizan en beneficio del deporte.
El karma que inunda el Complejo de San Rafael
Por Juan Montaño
En el Complejo Deportivo de San Rafael viven familias
arruinadas por el fenómeno de El Niño. Están allí esperando
recuerdo misericordiosos del Gobierno y un tiempo propicio
para mudarse a un sitio de mayor intimidad familiar. Unas
familias están en el Coliseo de Gimnasia, otras en el de
combate Alfonso Fernández Ruiz. En las canchas de tenis hay
carpas y tendederos de ropa. Los niños juegan cualquier juego
entre la maleza. Abunda la maleza , a pesar de estos soles
violentos.
El Complejo Deportivo de San Rafael es la de la Federación
Deportiva de Esmeraldas, pero nadie lo administra. Está
botado. Nadie lo necesita, únicamente los desahuciados
sociales. A los edificios deportivos no se les da
mantenimiento. El césped de la cancha del estadio Carlos Jorge
Castillo es de un amarillo triste. Es lo que se puede ver a
través de la cortina de enredaderas.
La pista del estadio atlético Carola Castro Jijón no está
terminada y ya se le van las grietas. Parece que los atletas
se entrenan en otros sitio. Nadie los ve por allá.
Para los VIII Juegos Nacionales se planificaron las obras con
años de sobra para realizarlas, pero terminaron
construyéndolas a velocidad de improvisación.
El DINADER y los dirigentes deportivos esmeraldeños se la
jugaron a lo que salga y a lo que quede sin hacer o mal hecho.
Total las vanidades fueron hartadas y los sucres que se gasten
después ¿a quién le importan?
Por estos días se gastaron más de 20 millones en reparar, dos
años después al fin, la piscina del Complejo Deportivo Walter
Quiñónez. De los 66 mil millones de sucres que se hicieron
nada, 700 millones se entregaron para la iluminación del
Estadio Folke Anderson y la construcción de las residencia de
deportistas. ¿Otra vez? De todas maneras la luz en la ex
polverita aún tendrá que esperar.
Los atletas siguen corriendo en donde pueden, consiguiendo
alas para los pies y firmeza en la voluntad. Y ganan. Y
Esmeraldas es un dragón deportivo, desafiando la desgana
administrativa de la Federación Deportiva. Que al Complejo de
San Rafael lo proteja su santo patrono.
Un recuerdito de los últimos Bolivarianos
La experiencia de los últimos Juegos Bolivarianos de
Arequipa, desarrollados el año pasado, es de la más
representativa de lo que puede ocurrir luego de una
competición a gran escala.
Según el periodista, Julio Avalos del diario Expreso, jueces
de varias disciplinas, como el ciclismo se llevaron un
recuerdito de su paso por la ciudad; así que agarraron
cronómetros, marcadores y otros aparatos,"Muchos de los jueces
son coleccionistas y gustan de llevarse cualquier recuerdo de
su paso por una ciudad". En lo referente a infraestructura de
mayor envergadura, esta ha sido bastante bien aprovechada por
la población de Arequipa.
"El instituto de práctica deportiva (IPD) se encarga de que la
población de la ciudad sea quien utilice la piscina, las
espadas del esgrima y el velódromo que fue refaccionado con
ocasión de la cita bolivariana".
Esta institución también ha facilitado los aparatos a ligas
deportivas que han solicitado aparatos para mejorar sus
entrenamientos, especialmente vallas, pértigas, jabalinas,
discos, etc.
Nadie pedalea en el antiguo velódromo de Tulcán
Alejandro Ribadeneira
Diego Paucar tiene 14 años, pero no va al colegio. Todo su
tiempo y energía los emplea en cuidar el enorme velódromo
"Ciudad de Tulcán".
Es una tarea sencilla, en la que ya lleva cinco años y que
inició cuando su padre, su madre y sus dos hermanos
construyeron, en el exterior del velódromo y con los graderíos
como techo, su hogar.
Es una vida tranquila la de Diego. Su misión consiste en tener
a mano, cada martes, las llaves del candado de la puerta
principal, para que puedan entrenar los escasos ciclistas (20
infantiles y 10 juveniles) de la Federación Deportiva
provincial. Cada cierto tiempo, Diego y su padre podan un poco
el césped. Eso es todo, porque no hay nada más que cuidar.
El velódromo de Tulcán se inauguró con gran pompa en 1987,
pese a que solamente estaban concluidos la pista y los
graderíos. Fue construido por la administración de León Febres
Cordero, "como un homenaje al Carchi", pero ni ese ni los
demás Gobiernos se preocuparon en terminar la obra, destinada
para el ciclismo de velocidad (hay que recordar que los
carchenses son destacados ruteros antes que pisteros).
Nunca se culminó la construcción de las baterías sanitarias,
ni las oficinas administrativas, ni de las pistas de
calentamiento, ni de la residencia deportiva ni del adoquinado
de los alrededores de la obra. Además, la pista jamás ha
recibido mantenimiento: existen, en algunos tramos, peligrosos
baches y grietas.
Por eso, muchos ciclistas carchenses que anhelaban dedicarse a
la pista se vieron obligados a cambiarse a la especialidad de
carretera. Los más constantes prefieren entrenar en la pista
del aeropuerto de Tulcán, para evitar que el despecho los
derrote. El resultado: Carchi no tiene exponentes de
velocidad.
El destacado rutero Juan Carlos Rosero piensa que Carchi, con
un velódromo adecuado, podría generar nuevos valores de pista.
Rosero explica que, con el velódromo completo y un buen
calendario de competencias, en poco tiempo saldrían buenos
velocistas.
No obstante, hasta que el DINADER o el Gobierno se animen a
financiar la obra, Diego Paucar seguirá cuidando bodegas
vacías, baches cada vez más profundos y desolados pasillos
para ciclistas que nunca llegaron.
Partidas
- En la Federación Deportiva del Carchi parece que el tiempo
no existiera para los dirigentes.
- El secretario general, Hefraín Ortiz Cevallos, explicó a HOY
su versión sobre la inauguración del velódromo: "me parece que
fue inaugurado hace cuatro años, en el Gobierno de León, en
1982...". Sin comentarios.
- El velódromo solamente acoge esporádicas competencias
colegiales.
Después de un torneo internacional, en 1987, y de ser punto de
partida de una vuelta a Colombia, Tulcán nunca pudo dar cabida
a una competencia importante de pista.
- El velódromo de Tulcán nació homologado por la UCI, el
organismo internacional que rige los destinos del ciclismo de
pista.
- La Federación Provincial afirma que se gestiona, la
obtención de un crédito, para culminar con la obra, de una vez
por todas.
- DINADER no confirmó ni negó esta versión. (DIARIO HOY) (P.
6-A y 7-A)
atléticas quedan vacías de público y deportistas, carecen, por
regla general, de un uso adecuado.
Los altos costos del mantenimiento de la infraestructura y el
quemeimportismo de las Federaciones Deportivas ha dejado al
país con una serie de monumentos inútiles, como lo constató
HOY en un recorrido por varias provincias.
En Cuenca acaban de terminar los Juegos Sudamericanos, en
total se invirtieron 2,7 millones de dólares en el
mejoramiento de varios escenarios.
¿Qué garantías existen de que la inversión realizada estará
protegida y qué posibilidades hay de que nuevos atletas y
nadadores utilicen la infraestructura?
"Debemos confiar en los dirigentes", dice el presidente del
Comité Organizador de los Juegos CORSUR, Ernesto Cañizares,
pero la experiencia de anteriores competencias como el Mundial
de Natación de Guayas y los Juegos Nacionales no abonan en
beneficio de sus expresiones.
En todo caso, Cuenca aprovechó la presencia de los principales
directivos de América para conseguir otro evento
internacional: el velódromo de la ciudad tendrá nuevamente
actividad en el año 2000, cuando se efectúe el Panamericano.
En cambio, existe otro velódromo, el de Tulcán, inagurado hace
11 años y cuya construcción jamás se terminó.
¿Alguien analizó alguna vez la conveniencia de construir un
velódromo en una provincia que se caracteriza por contar con
excelentes ciclistas de ruta? Absurdos como estos se han
producido en otras provincias y fuera de las fronteras del
país. Una vez finalizados los Juegos Deportivos Bolivarianos
de Arequipa, los jueces se llevaron de recuerdo marcadores y
cronómetros. Es fácil, entonces, comprender que el trabajo de
los directivos, por precautelar, la inversión, empieza cuando
la última delegación deja el estadio, no después.
El futuro de los escenarios azuayos
Susana Kinklicht
Un delegado extranjero, que vino hace tres años a Cuenca para
inspeccionar los escenarios deportivos y su aptitud para los
VI Juegos Sudamericanos, no pudo ocultar su sorpresa cuando
una directora de colegio le mostró un coliseo que le fuera
entregado años atrás, después de un evento internacional
parecido, para que lo administrara: el piso no tenía un solo
rayón.
Este es uno de los motivos por los que la Federación Deportiva
del Azuay, según su presidente Eduardo Encalada, favorece
ahora la administración directa. El objetivo es conseguir que
los escenarios que quedan de estas grandes competencias se
utilicen intensamente.
El primer paso que se dio en este sentido tuvo éxito, el nuevo
velódromo construido por CORSUR ha sido escogido para acoger
los Panamericanos de Ciclismo en el año 2.000.
Sin embargo, no basta con organizar cada vez nuevas
competencias. La utilización cotidiana, en favor del deporte
élite y masivo, es lo único que justifica, en opinión de
Encalada, la inversión de 2, 7 millones de dólares en la
edificación y mejoramiento de los escenarios para los Juegos.
Con este fin, la Federación, que por ejemplo gasta 15 millones
de sucres mensuales en combustible, cloro y mantenimiento de
la piscina, piensa recuperar este dinero a través de
matrículas y entradas para nadadores.
Alentador es el panorama en el nuevo patinódromo, donde más de
300 deportistas y aficionados esperan que se acaben los Juegos
para utilizarlo, asimismo pagando.
El futuro de la Pista Sintética Jefferson Pérez parece
asegurado, si se utiliza como termómetro el desarrollo de la
marcha en esta ciudad. Velocistas, lanzadores de jabalina,
bala y martillo, etc., que no han tenido más que el Parque de
la Madre, la Subida a Turi y el Estadio para entrenar ahora
dispondrán de un escenario adecuado, que no parece destinado a
aficionados.
La atleta múltiple esmeraldeña, María Cangá, dijo que la
inversión que ha hecho Cuenca no servirá solo a los cuencanos,
sino a todos los ecuatorianos.
Para ellos y porque incluso sería un buen proyecto de
autogestión, la Federación está presionando para terminar el
Centro de Alto Rendimiento Rolando Vera, que por falta de
dinero se quedó sin el hotel para 200 atletas y sin los
aparatos y laboratorios.
El mismo Rolando Vera se ha comprometido a gestionar ante la
Embajada del Japón y la Fundación Jica, que fue la misma que
implementó el Polideportivo Huancavilca en Guayaquil, la ayuda
necesaria.
La Federación tiene la palabra
¿Qué garantías existen de que los escenarios deportivos no
empezarán a deteriorarse una vez que concluyan los Juegos?
En Cuenca existe una dirigencia deportiva probada, que
permitirá que la experiencia de las piscinas de Guayaquil y
otros escenario que han quedado abandonados no se vuelva a
reproducir.
Yo creo que la Federación Deportiva será capaz de responder el
duro reto de mantener la infraestructura deportiva para forjar
campeones.
Sin embargo, durante los mismos Juegos, la prensa
internacional criticó el mal estado del coliseo de
Totoracocha, que es prácticamente nuevo.
Todos los escenarios deportivos construidos en Cuenca cuestan
17 mil millones de sucres, cuando un estadio en un provincia
de la Costa está presupuesta den 14 mil millones. Con esto le
quiero demostrar que tuvimos que manejarlos con muy poco
presupuesto. En Totoracocha sí existen goteras, pero no en la
medida que la prensa internacional lo divulgó. Son cosas que
no se consiguieron prever, pero no fueron de gran magnitud.
¿Se han buscado nuevas competencias?
Esa es labor de la Federación, pero conozco que en patinaje ya
se han buscado nuevas competencias, de la misma forma se busca
actividad para los ciclistas.
Dirigente
- Ernesto Cañizares, dirigente deportivo. Fue el encargado de
la organización de los Juegos ODESUR de Cuenca.
- Su trabajo seguirá hasta Córdoba 2002.
Las piscinas del Mundial no soportaron el fuerte invierno
Los eventos deportivos internacionales pasan, pero la costosa
infraestructura montada a propósito, queda. Pocas veces se da
un real uso y mantenimiento a los escenarios, que, por lo
general, se destruyen. Este es el caso del Complejo Cuatro
Mosqueteros, construido en Guayaquil para el desarrollo del
Campeonato Mundial de Natación de 1982.
En este se puede realizar natación, nado sincronizado, polo
acuático y clavados. Su piscina tiene 50,3 metros de largo y
25,3 de ancho, la torre de saltos ornamentales tiene una
profundidad de cinco y una altura de diez metros, con
plataformas de diez, siete y medio, cinco, tres y un metro.
Hay una piscina de 50 metros para enseñar a nadar y para los
calentamientos durante las competencias.
Sin embargo, con el paso del tiempo, este complejo deportivo
se ha deteriorado. El período invernal del año 82-83 inundó y
destrozó las instalaciones, las que se han ido arreglando sin
conseguir ponerlas en el estado en que estaban originalmente.
Entre los mayores problemas se encuentran los de iluminación,
ya que se han retirado dos torres para llevarlas al Estadio
Modelo Guayaquil. Los motores están viejos, faltan
clorinadores, se necesita cambiar los trampolines que son de
la época del mundial, hace falta completar los andariveles.
Las cabinas de radio están completamente destruidas y el
sistema de sonido está defectuoso.
En el complejo entrena en la actualidad el Club Thoret, que ha
hecho una escuela de saltos ornamentales.
Esta piscina también es utilizada por la Policía Nacional, por
personas que van a aprender natación submarina con equipos
sofisticados de buceo, por DINADER.
"Esta piscina tiene mala fama porque estuvo muy abandonada,
pero ahora está en buenas condiciones. La Federación Deportiva
del Guayas cada vez que se daña algo lo compone, eso si no se
puede discutir, tal vez haya un poquito de falta de
mantenimiento, pero los desperfectos sí son solucionados",
expresó Gastón Thoret, presidente de la Ecuatoriana de
Natación.
Subutilizada infraestructura de Manabí
En Manabí se construyeron varios escenarios deportivos para la
realización de los sextos Juegos Nacionales de 1985. En
Portoviejo el Coliseo La California, la piscina olímpica,
pista atlética, polígono de tiro y ampliación del estadio
Reales Tamarindos, en Manta el Coliseo y la piscina olímpica,
en ciudades como Bahía y Chone se construyeron coliseos.
Una vez terminadas las competencias deportivas los escenarios
fueron entregados por DINADER a las ligas cantonales para su
administración y mantenimiento en el caso de Portoviejo las
obras pasaron a manos de la Federación Deportiva de Manabí.
Lenin Delgado Martínez, actual vicepresidente de la FDM, y que
presidió la institución durante 14 años consecutivos, asegura
que de no ser por los sextos juegos, Manabí no tendría la
infraestructura deportiva que posee, lo que le ha permitido
llevar la calidad deportiva de los manabitas que han logrado
importantes triunfos para el país.
Luego de trece años de los Juegos Nacionales, los escenarios
en Manabí permanecen en buen estado, salvo la piscina olímpica
de Portoviejo que fue sepultada por las inundaciones y que
ahora se encuentran subutilizados por la poca asistencia de
los deportistas y la falta de planificación.
Delgado sostuvo que desconocía el costo de las obras
entregadas por DINADER, pero un examen de Contraloría
determinó que los escenarios alcanzaron un monto de 1.250
millones de sucres solo en Portoviejo, lo lamentable es que
apenas unos 1.500 deportistas se benefician de estos centros.
Dijo además, que a pesar de no contar con los recursos para
mejoramiento y mantenimiento de los escenarios, se ha podido
mantener las obras para entrenamiento y cursos vacacionales.
"A la mayoría de los escenarios de la provincia se les da
mantenimiento y a través de convenios con las ligas cantonales
y los Municipios, solo así hemos impedido que se destruyan,
del Estado no recibimos más que el 5 por ciento de la tarifa
telefónica y este rubro varía según la cantidad de usuarios
del servicio y la forma como Pacifitel cobre la planillas,
hasta hoy nos deben 10 meses atrasados" aclaró Lenin Delgado.
En la FDM no se informó el monto del presupuesto y los gastos
que se realizan en beneficio del deporte.
El karma que inunda el Complejo de San Rafael
Por Juan Montaño
En el Complejo Deportivo de San Rafael viven familias
arruinadas por el fenómeno de El Niño. Están allí esperando
recuerdo misericordiosos del Gobierno y un tiempo propicio
para mudarse a un sitio de mayor intimidad familiar. Unas
familias están en el Coliseo de Gimnasia, otras en el de
combate Alfonso Fernández Ruiz. En las canchas de tenis hay
carpas y tendederos de ropa. Los niños juegan cualquier juego
entre la maleza. Abunda la maleza , a pesar de estos soles
violentos.
El Complejo Deportivo de San Rafael es la de la Federación
Deportiva de Esmeraldas, pero nadie lo administra. Está
botado. Nadie lo necesita, únicamente los desahuciados
sociales. A los edificios deportivos no se les da
mantenimiento. El césped de la cancha del estadio Carlos Jorge
Castillo es de un amarillo triste. Es lo que se puede ver a
través de la cortina de enredaderas.
La pista del estadio atlético Carola Castro Jijón no está
terminada y ya se le van las grietas. Parece que los atletas
se entrenan en otros sitio. Nadie los ve por allá.
Para los VIII Juegos Nacionales se planificaron las obras con
años de sobra para realizarlas, pero terminaron
construyéndolas a velocidad de improvisación.
El DINADER y los dirigentes deportivos esmeraldeños se la
jugaron a lo que salga y a lo que quede sin hacer o mal hecho.
Total las vanidades fueron hartadas y los sucres que se gasten
después ¿a quién le importan?
Por estos días se gastaron más de 20 millones en reparar, dos
años después al fin, la piscina del Complejo Deportivo Walter
Quiñónez. De los 66 mil millones de sucres que se hicieron
nada, 700 millones se entregaron para la iluminación del
Estadio Folke Anderson y la construcción de las residencia de
deportistas. ¿Otra vez? De todas maneras la luz en la ex
polverita aún tendrá que esperar.
Los atletas siguen corriendo en donde pueden, consiguiendo
alas para los pies y firmeza en la voluntad. Y ganan. Y
Esmeraldas es un dragón deportivo, desafiando la desgana
administrativa de la Federación Deportiva. Que al Complejo de
San Rafael lo proteja su santo patrono.
Un recuerdito de los últimos Bolivarianos
La experiencia de los últimos Juegos Bolivarianos de
Arequipa, desarrollados el año pasado, es de la más
representativa de lo que puede ocurrir luego de una
competición a gran escala.
Según el periodista, Julio Avalos del diario Expreso, jueces
de varias disciplinas, como el ciclismo se llevaron un
recuerdito de su paso por la ciudad; así que agarraron
cronómetros, marcadores y otros aparatos,"Muchos de los jueces
son coleccionistas y gustan de llevarse cualquier recuerdo de
su paso por una ciudad". En lo referente a infraestructura de
mayor envergadura, esta ha sido bastante bien aprovechada por
la población de Arequipa.
"El instituto de práctica deportiva (IPD) se encarga de que la
población de la ciudad sea quien utilice la piscina, las
espadas del esgrima y el velódromo que fue refaccionado con
ocasión de la cita bolivariana".
Esta institución también ha facilitado los aparatos a ligas
deportivas que han solicitado aparatos para mejorar sus
entrenamientos, especialmente vallas, pértigas, jabalinas,
discos, etc.
Nadie pedalea en el antiguo velódromo de Tulcán
Alejandro Ribadeneira
Diego Paucar tiene 14 años, pero no va al colegio. Todo su
tiempo y energía los emplea en cuidar el enorme velódromo
"Ciudad de Tulcán".
Es una tarea sencilla, en la que ya lleva cinco años y que
inició cuando su padre, su madre y sus dos hermanos
construyeron, en el exterior del velódromo y con los graderíos
como techo, su hogar.
Es una vida tranquila la de Diego. Su misión consiste en tener
a mano, cada martes, las llaves del candado de la puerta
principal, para que puedan entrenar los escasos ciclistas (20
infantiles y 10 juveniles) de la Federación Deportiva
provincial. Cada cierto tiempo, Diego y su padre podan un poco
el césped. Eso es todo, porque no hay nada más que cuidar.
El velódromo de Tulcán se inauguró con gran pompa en 1987,
pese a que solamente estaban concluidos la pista y los
graderíos. Fue construido por la administración de León Febres
Cordero, "como un homenaje al Carchi", pero ni ese ni los
demás Gobiernos se preocuparon en terminar la obra, destinada
para el ciclismo de velocidad (hay que recordar que los
carchenses son destacados ruteros antes que pisteros).
Nunca se culminó la construcción de las baterías sanitarias,
ni las oficinas administrativas, ni de las pistas de
calentamiento, ni de la residencia deportiva ni del adoquinado
de los alrededores de la obra. Además, la pista jamás ha
recibido mantenimiento: existen, en algunos tramos, peligrosos
baches y grietas.
Por eso, muchos ciclistas carchenses que anhelaban dedicarse a
la pista se vieron obligados a cambiarse a la especialidad de
carretera. Los más constantes prefieren entrenar en la pista
del aeropuerto de Tulcán, para evitar que el despecho los
derrote. El resultado: Carchi no tiene exponentes de
velocidad.
El destacado rutero Juan Carlos Rosero piensa que Carchi, con
un velódromo adecuado, podría generar nuevos valores de pista.
Rosero explica que, con el velódromo completo y un buen
calendario de competencias, en poco tiempo saldrían buenos
velocistas.
No obstante, hasta que el DINADER o el Gobierno se animen a
financiar la obra, Diego Paucar seguirá cuidando bodegas
vacías, baches cada vez más profundos y desolados pasillos
para ciclistas que nunca llegaron.
Partidas
- En la Federación Deportiva del Carchi parece que el tiempo
no existiera para los dirigentes.
- El secretario general, Hefraín Ortiz Cevallos, explicó a HOY
su versión sobre la inauguración del velódromo: "me parece que
fue inaugurado hace cuatro años, en el Gobierno de León, en
1982...". Sin comentarios.
- El velódromo solamente acoge esporádicas competencias
colegiales.
Después de un torneo internacional, en 1987, y de ser punto de
partida de una vuelta a Colombia, Tulcán nunca pudo dar cabida
a una competencia importante de pista.
- El velódromo de Tulcán nació homologado por la UCI, el
organismo internacional que rige los destinos del ciclismo de
pista.
- La Federación Provincial afirma que se gestiona, la
obtención de un crédito, para culminar con la obra, de una vez
por todas.
- DINADER no confirmó ni negó esta versión. (DIARIO HOY) (P.
6-A y 7-A)
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