Quito. 3 sept 2000. Al rededor de 50 aspectos es necesario considerar al
momento de evaluar un auto usado. No solo cuenta la pinta como muchos
consumidores piensan; influyen aspectos como motor, estado de frenos y
condiciones de seguridad.
HOY consultó a tres expertos en mecánica automotriz: Fausto Calispa
propietario de Motorfiat; Mario Caiza, jefe de taller de Autolandia, y
Miguel Granja, propietario de Automotriz Granja, quienes concluyeron que,
por la seguridad del comprador y de la inversión que este hace, es
preferible que antes de tomar una decisión el cliente se asesore de un
experto.
Esta actitud le evitará futuros dolores de cabeza.
Los modelos y marcas analizados en la esta entrega fueron escogidos a
partir de los índices de demanda del mercado local, en lo que a autos
compactos se refiere. En cada uno de ellos, es indispensable evaluar al
menos tres aspectos; la mayoría vinculados al kilometraje de cada
vehículo, al tipo de uso al que ha sido destinado e, incluso, a la región
de la que proviene. (CAZ)
Forsa, Corsa y Swift
Los Forsa
Los autos Chevrolet Forsa 2 tienen una comprensión de motor que se ubica
en 125 libras. Si esta se encuentra en menos de 100, es posible que el
auto presente, con posterioridad, problemas de motor. Su reparación
cuesta de $1 000 a $1 200 en un concesionario General Motors.
Si este indicador se encuentra en niveles mayores de 100 libras, se
considera que el auto está en condiciones normales; el auto tendrá un
período de vida útil más avanzado.
El segundo parámetro es una prueba de carretera, con el auto en marcha,
para verificar el estado de la caja de cambios y la corona (la parte
interior de la transmisión que le da la fuerza al auto). Si se detecta
una falla, ameritaría un cambio de sincronizados, mecanismo que permite
que la orden de cambio de marcha sea receptada de inmediato por la caja.
La mano de obra para este cambio asciende a $50.
Mecánicamente, es necesario que el consumidor verifique si el auto
presenta fugas de aceite. El motor debe estar totalmente seco. Es
importante, además, determinar que no existe consumo de aceite; la manera
más simple de hacerlo es observar el desfogue del auto. Si el humo que
sale es azul, es el primer síntoma de que se presenta un consumo excesivo
de aceite. Un factor que incide, directamente, en la máquina.
Los Corsa
Este auto maneja niveles de compresión que oscilan entre 130 y 140
libras.
Por ser un compacto de inyección electrónica se debe analizar el estado
del sistema eléctrico del auto; para este tipo de proceso, es necesario
realizar pruebas mediante computador. El costo es de $20. La instalación
eléctrica debe estar en perfecto estado y los cables sin ningún tipo de
cinta adhesiva (esto es muestra de adulteración).
Si el sistema eléctrico esta modificado, el usuario corre el peligro de
que el computador central, cerebro del auto, se queme.
Los Swift
La revisión de un Chevrolet Swift cuesta alrededor de $16,3. Las
recomendaciones son similares a las del Forsa. Este auto debe registrar
una compresión de 140 libras.
En los tres casos analizados, solo la mano de obra de una reparación de
motor, motivada por niveles de comprensión menores de 100 libras, tiene
un costo en el mercado de aproximadamente $80. (CAZ)
Fiat y Ford
Las marcas Fiat y Ford, en sus modelos Uno y Festiva, tienen diseños
mecánicos similares. Se sugieren analizar, al menos, cuatro parámetros.
Es importante, en primer lugar, que la banda de la distribución, ubicada
en el motor, sea cambiada a los 20 000 km; aunque aparente un buen
estado.
Las repercuciones de no tomar en cuenta este elemento son varias: luego
de comprado el auto, las válvulas (encargadas de que no escape la
gasolina y se mantenga la presión) podrían doblarse; existe la
posibilidad de una ruptura del pistón, lo que le significaría al
comprador una inversión de mínimo $40.
El costo de una banda nueva es $14.
El Fiat Uno tiene una particularidad: como consecuencia de un cierto
kilometraje recorrido (que no es preciso, ya que varía en función de los
cuidados del propietario) falla un instrumento llamado módulo, ubicado en
el distribuidor.
Si el auto se apaga de un momento a otro, existe un primer síntoma de que
este componente está en mal estado. El cambio de esta pieza cuesta unos
$68, incluyendo repuestos y mano de obra.
Una reparación de máquina necesita una inversión de $560, con mano de
obra y rectificadora.
Un auto de cualquiera de las dos marcas tiene una vida útil de 200 mil
kilómetros. Para llegar a esos niveles es importante que los cambios de
aceite se realicen cada 5 000 km, procedimiento que tiene un costo
promedio de $11.
El mismo criterio debe aplicarse al aceite de la caja de cambios. La
reposición debe efectuarse cada 10 000 km y su precio en el mercado
bordea los $9,6: depende de la marca del aceite.
Los Mazda 323
Para los automóviles Mazda 323 Coupe, de origen japonés y ensamblados en
el país, la compresión del motor óptima es de 125 libras; sin embargo, un
vehículo en uso puede tener una compresión de 115 libras en los cuatro
cilindros del auto. La diferencia no afecta al desempeño del motor.
Es importante considerar la presión del aceite con el auto en marcha
lenta y con el motor caliente. El nivel debe ubicarse en un mínimo de 20
libras. Este comportamiento se refleja en un motor que funciona a 800
revoluciones por minuto. El auto está, entonces, en óptimas condiciones.
Estos elementos solo pueden identificarse mediante un manómetro y un
tacómetro; se recomienda la asesoría de un experto para la evaluación del
automotor previa a la compra; el diagnóstico cuesta como mínimo $8.
Otro aspecto para no olvidar: los golpeteos de distribución, que revelan
el estado de los piñones del auto. Si fallan, se presenta un ruido
similar al sonido que emiten las maracas. El costo de una reparación de
motor varía en función de la magnitud de la falla; en el caso de que esta
sea mínima, el valor asciende a $300. Si es mayor, llega a $600. (CAZ)
El Vitara
El Vitara tres puertas, de General Motors, es un auto con carburador. Por
tanto, el motor tiende a recalentar con facilidad. Por ello, es
importante que, a la hora de comprar un auto de este tipo, se revise
cuidadosamente el estado del motor. Si no está en buenas condiciones,
luego de determinado lapso, presentará una ruptura de los bloques del
cilindro (ubicados en el motor).
El bloque debe estar íntegro, sin fisuras. Un daño de este tipo puede
derivar en un daño mécanico grave, cuya reparación tiene un costo
elevado. Ojo: no existen los repuestos necesarios, en este momento, en el
mercado.
Existen vendedores que conocen trucos para los autos y utilizan líquidos
especiales para sellar dichas rupturas; este procedimiento no tiene un
efecto duradero. Luego de pocos kilómetros, puede presentarse una ruptura
total del bloque. La fisura más común se ubica en la parte inferior del
auto, cerca de la salida de la bomba de agua.
La mano de obra para un arreglo de esta clase llega a los $80. Una
reparación de motor para un Vitara, necesaria luego de los 200 000 km,
tiene un valor de $145 (en un concesionario de la marca). El diagnóstico
para determinar el estado de un Vitara está en $16,3, en los
concesionarios General Motors. (CAZ)
Antes de comprar un auto
1. Escuche los sonidos
El sonido del motor es parte esencial a la hora de comprar un auto usado.
Este debe ser constante, debe asimilarse al sonido de un reloj. El auto
debe probarse en una cuesta; en este tipo de trayectos, los motores que
no están bien afinados suenan como maracas. Allí se pone a prueba la
potencia del auto.
El sonido de la caja de cambios debe estar libre de ronquidos y los
cambios deben entrar con total normalidad. La corona, parte fundamental
para el funcionamiento de la transmisión, no debe roncar ni silbar
mientras el auto esté encendido. Su sonido es perceptible con facilidad.
2. Mida la compresión
La compresión muestra el equilibrio del motor; para determinar su estado,
es necesaria la ayuda de un barómetro de compresión, que mide en libras
de presión. Cada auto tiene sus niveles de compresión específicos. Si un
motor registra menos de 100 libras, el comprador debe considerar que se
necesitará a corto plazo una reparación de máquina.
3. Chequeo del auto en la fosa
Esta prueba es necesaria para detectar el estado del auto en su parte
inferior. Se puede observar que la máquina no presente problemas en los
brazos de suspensión y en los terminales de dirección, determinantes en
las maniobras del conductor.
Se determina, además, si latas que recubren la zona inferior del auto se
encuentran en buen estado. La suspensión se evalúa mediante el movimiento
de la dirección, lo que facilita la detección de fuego (cuando la
dirección no responde a los requerimientos del conductor).
4. Ojo con las latas
Los expertos aconsejan tener cuidado con los autos registrados en la
Costa; en dicha región, los niveles de salinidad facilitan el deterioro
de las latas de los autos. Su descomposición se detecta en la presencia
de fisuras por efecto de la corrosión.
5. Estado de los frenos
Es importante que el pedal del freno se encuentre a buena altura y que no
baje continuamente. Por la complejidad del sistema de frenos de un auto,
este tipo de chequeo debe efectuarlo un ingeniero mecánico.
6. Que los números coincidan
Los automoviles cuentan con un numero de registro en cada una de sus
partes. Para identificar si el auto es robado o no, se deben comparar los
números de chasis con los del motor. Partes como llantas o las piezas
pueden no coincidir con las del manual del auto. Es necesario revisar que
los números de identificación del auto coincidan. (CAZ)
Después de comprar un auto
Los expertos consultados por HOY afirman que hay vendedores que conocen
muy bien la materia, saben cómo y qué hacer para que el comprador
encuentre un automóvil de primera. Sugieren, por tanto, que el nuevo
dueño efectúe una serie de gastos en mantenimiento para que la inversión
no sea en vano.
Luego de recibir el auto, el comprador debe optar por un cambio de
aceite. Ciertos vendedores acostumbran colocar aditivos en el motor al
momento de la venta. Esta decisión garantiza que, durante la revisión
previa, se registre una compresión adecuada del motor. Al aplicar, por su
propia cuenta, un cambio de aceite al automotor, el usuario podrá
constatar si los niveles registrados son reales o no.
Asimismo, los mecánicos recomiendan un ABC para el nuevo automóvil. El
propietario podrá llevar, directamente, los registros de cuándo debe
aplicarse un mantenimiento (cambio de aceite del motor, de la caja de
cambios, de la transmisión, entre otros), conocer con exactitud la fecha
para los diferentes procesos de reparación.
Otra de las recomendaciones es realizar una alineación y balanceo de las
llantas, para conocer su estado exacto (esto se puede detectar, en
algunos casos, en la evaluación previa a la compra).
Finalmente, es necesario revisar las zapatas para constatar su estado y
calcular su vida útil. (DIARIO HOY) (P.5-A)
momento de evaluar un auto usado. No solo cuenta la pinta como muchos
consumidores piensan; influyen aspectos como motor, estado de frenos y
condiciones de seguridad.
HOY consultó a tres expertos en mecánica automotriz: Fausto Calispa
propietario de Motorfiat; Mario Caiza, jefe de taller de Autolandia, y
Miguel Granja, propietario de Automotriz Granja, quienes concluyeron que,
por la seguridad del comprador y de la inversión que este hace, es
preferible que antes de tomar una decisión el cliente se asesore de un
experto.
Esta actitud le evitará futuros dolores de cabeza.
Los modelos y marcas analizados en la esta entrega fueron escogidos a
partir de los índices de demanda del mercado local, en lo que a autos
compactos se refiere. En cada uno de ellos, es indispensable evaluar al
menos tres aspectos; la mayoría vinculados al kilometraje de cada
vehículo, al tipo de uso al que ha sido destinado e, incluso, a la región
de la que proviene. (CAZ)
Forsa, Corsa y Swift
Los Forsa
Los autos Chevrolet Forsa 2 tienen una comprensión de motor que se ubica
en 125 libras. Si esta se encuentra en menos de 100, es posible que el
auto presente, con posterioridad, problemas de motor. Su reparación
cuesta de $1 000 a $1 200 en un concesionario General Motors.
Si este indicador se encuentra en niveles mayores de 100 libras, se
considera que el auto está en condiciones normales; el auto tendrá un
período de vida útil más avanzado.
El segundo parámetro es una prueba de carretera, con el auto en marcha,
para verificar el estado de la caja de cambios y la corona (la parte
interior de la transmisión que le da la fuerza al auto). Si se detecta
una falla, ameritaría un cambio de sincronizados, mecanismo que permite
que la orden de cambio de marcha sea receptada de inmediato por la caja.
La mano de obra para este cambio asciende a $50.
Mecánicamente, es necesario que el consumidor verifique si el auto
presenta fugas de aceite. El motor debe estar totalmente seco. Es
importante, además, determinar que no existe consumo de aceite; la manera
más simple de hacerlo es observar el desfogue del auto. Si el humo que
sale es azul, es el primer síntoma de que se presenta un consumo excesivo
de aceite. Un factor que incide, directamente, en la máquina.
Los Corsa
Este auto maneja niveles de compresión que oscilan entre 130 y 140
libras.
Por ser un compacto de inyección electrónica se debe analizar el estado
del sistema eléctrico del auto; para este tipo de proceso, es necesario
realizar pruebas mediante computador. El costo es de $20. La instalación
eléctrica debe estar en perfecto estado y los cables sin ningún tipo de
cinta adhesiva (esto es muestra de adulteración).
Si el sistema eléctrico esta modificado, el usuario corre el peligro de
que el computador central, cerebro del auto, se queme.
Los Swift
La revisión de un Chevrolet Swift cuesta alrededor de $16,3. Las
recomendaciones son similares a las del Forsa. Este auto debe registrar
una compresión de 140 libras.
En los tres casos analizados, solo la mano de obra de una reparación de
motor, motivada por niveles de comprensión menores de 100 libras, tiene
un costo en el mercado de aproximadamente $80. (CAZ)
Fiat y Ford
Las marcas Fiat y Ford, en sus modelos Uno y Festiva, tienen diseños
mecánicos similares. Se sugieren analizar, al menos, cuatro parámetros.
Es importante, en primer lugar, que la banda de la distribución, ubicada
en el motor, sea cambiada a los 20 000 km; aunque aparente un buen
estado.
Las repercuciones de no tomar en cuenta este elemento son varias: luego
de comprado el auto, las válvulas (encargadas de que no escape la
gasolina y se mantenga la presión) podrían doblarse; existe la
posibilidad de una ruptura del pistón, lo que le significaría al
comprador una inversión de mínimo $40.
El costo de una banda nueva es $14.
El Fiat Uno tiene una particularidad: como consecuencia de un cierto
kilometraje recorrido (que no es preciso, ya que varía en función de los
cuidados del propietario) falla un instrumento llamado módulo, ubicado en
el distribuidor.
Si el auto se apaga de un momento a otro, existe un primer síntoma de que
este componente está en mal estado. El cambio de esta pieza cuesta unos
$68, incluyendo repuestos y mano de obra.
Una reparación de máquina necesita una inversión de $560, con mano de
obra y rectificadora.
Un auto de cualquiera de las dos marcas tiene una vida útil de 200 mil
kilómetros. Para llegar a esos niveles es importante que los cambios de
aceite se realicen cada 5 000 km, procedimiento que tiene un costo
promedio de $11.
El mismo criterio debe aplicarse al aceite de la caja de cambios. La
reposición debe efectuarse cada 10 000 km y su precio en el mercado
bordea los $9,6: depende de la marca del aceite.
Los Mazda 323
Para los automóviles Mazda 323 Coupe, de origen japonés y ensamblados en
el país, la compresión del motor óptima es de 125 libras; sin embargo, un
vehículo en uso puede tener una compresión de 115 libras en los cuatro
cilindros del auto. La diferencia no afecta al desempeño del motor.
Es importante considerar la presión del aceite con el auto en marcha
lenta y con el motor caliente. El nivel debe ubicarse en un mínimo de 20
libras. Este comportamiento se refleja en un motor que funciona a 800
revoluciones por minuto. El auto está, entonces, en óptimas condiciones.
Estos elementos solo pueden identificarse mediante un manómetro y un
tacómetro; se recomienda la asesoría de un experto para la evaluación del
automotor previa a la compra; el diagnóstico cuesta como mínimo $8.
Otro aspecto para no olvidar: los golpeteos de distribución, que revelan
el estado de los piñones del auto. Si fallan, se presenta un ruido
similar al sonido que emiten las maracas. El costo de una reparación de
motor varía en función de la magnitud de la falla; en el caso de que esta
sea mínima, el valor asciende a $300. Si es mayor, llega a $600. (CAZ)
El Vitara
El Vitara tres puertas, de General Motors, es un auto con carburador. Por
tanto, el motor tiende a recalentar con facilidad. Por ello, es
importante que, a la hora de comprar un auto de este tipo, se revise
cuidadosamente el estado del motor. Si no está en buenas condiciones,
luego de determinado lapso, presentará una ruptura de los bloques del
cilindro (ubicados en el motor).
El bloque debe estar íntegro, sin fisuras. Un daño de este tipo puede
derivar en un daño mécanico grave, cuya reparación tiene un costo
elevado. Ojo: no existen los repuestos necesarios, en este momento, en el
mercado.
Existen vendedores que conocen trucos para los autos y utilizan líquidos
especiales para sellar dichas rupturas; este procedimiento no tiene un
efecto duradero. Luego de pocos kilómetros, puede presentarse una ruptura
total del bloque. La fisura más común se ubica en la parte inferior del
auto, cerca de la salida de la bomba de agua.
La mano de obra para un arreglo de esta clase llega a los $80. Una
reparación de motor para un Vitara, necesaria luego de los 200 000 km,
tiene un valor de $145 (en un concesionario de la marca). El diagnóstico
para determinar el estado de un Vitara está en $16,3, en los
concesionarios General Motors. (CAZ)
Antes de comprar un auto
1. Escuche los sonidos
El sonido del motor es parte esencial a la hora de comprar un auto usado.
Este debe ser constante, debe asimilarse al sonido de un reloj. El auto
debe probarse en una cuesta; en este tipo de trayectos, los motores que
no están bien afinados suenan como maracas. Allí se pone a prueba la
potencia del auto.
El sonido de la caja de cambios debe estar libre de ronquidos y los
cambios deben entrar con total normalidad. La corona, parte fundamental
para el funcionamiento de la transmisión, no debe roncar ni silbar
mientras el auto esté encendido. Su sonido es perceptible con facilidad.
2. Mida la compresión
La compresión muestra el equilibrio del motor; para determinar su estado,
es necesaria la ayuda de un barómetro de compresión, que mide en libras
de presión. Cada auto tiene sus niveles de compresión específicos. Si un
motor registra menos de 100 libras, el comprador debe considerar que se
necesitará a corto plazo una reparación de máquina.
3. Chequeo del auto en la fosa
Esta prueba es necesaria para detectar el estado del auto en su parte
inferior. Se puede observar que la máquina no presente problemas en los
brazos de suspensión y en los terminales de dirección, determinantes en
las maniobras del conductor.
Se determina, además, si latas que recubren la zona inferior del auto se
encuentran en buen estado. La suspensión se evalúa mediante el movimiento
de la dirección, lo que facilita la detección de fuego (cuando la
dirección no responde a los requerimientos del conductor).
4. Ojo con las latas
Los expertos aconsejan tener cuidado con los autos registrados en la
Costa; en dicha región, los niveles de salinidad facilitan el deterioro
de las latas de los autos. Su descomposición se detecta en la presencia
de fisuras por efecto de la corrosión.
5. Estado de los frenos
Es importante que el pedal del freno se encuentre a buena altura y que no
baje continuamente. Por la complejidad del sistema de frenos de un auto,
este tipo de chequeo debe efectuarlo un ingeniero mecánico.
6. Que los números coincidan
Los automoviles cuentan con un numero de registro en cada una de sus
partes. Para identificar si el auto es robado o no, se deben comparar los
números de chasis con los del motor. Partes como llantas o las piezas
pueden no coincidir con las del manual del auto. Es necesario revisar que
los números de identificación del auto coincidan. (CAZ)
Después de comprar un auto
Los expertos consultados por HOY afirman que hay vendedores que conocen
muy bien la materia, saben cómo y qué hacer para que el comprador
encuentre un automóvil de primera. Sugieren, por tanto, que el nuevo
dueño efectúe una serie de gastos en mantenimiento para que la inversión
no sea en vano.
Luego de recibir el auto, el comprador debe optar por un cambio de
aceite. Ciertos vendedores acostumbran colocar aditivos en el motor al
momento de la venta. Esta decisión garantiza que, durante la revisión
previa, se registre una compresión adecuada del motor. Al aplicar, por su
propia cuenta, un cambio de aceite al automotor, el usuario podrá
constatar si los niveles registrados son reales o no.
Asimismo, los mecánicos recomiendan un ABC para el nuevo automóvil. El
propietario podrá llevar, directamente, los registros de cuándo debe
aplicarse un mantenimiento (cambio de aceite del motor, de la caja de
cambios, de la transmisión, entre otros), conocer con exactitud la fecha
para los diferentes procesos de reparación.
Otra de las recomendaciones es realizar una alineación y balanceo de las
llantas, para conocer su estado exacto (esto se puede detectar, en
algunos casos, en la evaluación previa a la compra).
Finalmente, es necesario revisar las zapatas para constatar su estado y
calcular su vida útil. (DIARIO HOY) (P.5-A)
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