Quito. 09 nov 96. Se desarrollará del 11 al 15 de
noviembre. Los 350 trabajos participan en cinco
categorías. Habrá 25 expositores de 15 países.
500 millones de sucres de inversión.

Qué es una bienal? En esencia, es un encuentro
artístico o cultural que se realiza cada dos años.
Sin embargo, como opina Gonzalo Bustamante,
director de Planificación del Distrito Metropolitano,
su significado va más allá de ese simple enunciado.
Una bienal tiene muchas lecturas y... muchas
connotaciones.

La Décima Bienal Panamericana de Quito, que se
realizará desde el lunes próximo, es un ejemplo,
afirma. A más de ser un evento de confrontación
creativa; por la cantidad de conferencias,
exposiciones artísticas y registros culturales de
su agenda, es un referente para medir el desarrollo
actual del urbanismo, la ciencia y la cultura del
país y del mundo.

Este evento es producto de un proceso que comenzó
en 1978, hace 18 años. En esa época, obviamente, su
alcance fue muy limitado. Tan solo 20 trabajos
participaron en la Primera Bienal.

Hoy, como opina José Román Ruiz, delegado de la
Junta de Andalucía, esta ha adquirido un espacio sólido
en el contexto mundial. Ha llegado a la madurez. Los
350 trabajos inscritos -venidos de todas las partes del
orbe- avalan esa afirmación.

Su cobertura se ha ampliado. Hoy se premian los
trabajos en cinco categorías: diseño arquitectónico;
diseño urbano; rehabilitación urbana y arquitectónica;
teoría, historia y crítica de la arquitectura y el
urbanismo; y, publicaciones especializadas.

En los cinco días de duración del encuentro, del 11 al
15 de noviembre, se podrá observar el proceso y los
alcances de la arquitectura posmoderna. La
participación de profesionales como el brasileño
Ruy Ohtake, el mexicano Pedro Ramírez, el
estadounidense Steve Goldberg, el español José Julio
Cañabate y la colombiana Silvia Arango, reforzará esa
visión.

José Ordóñez, presidente del Colegio de Arquitectos
de Pichincha, institución organizadora del evento,
afirma que este es una vitrina para mostrar las nuevas
tendencias constructivas y planificadoras que están en
boga en la actualidad. Y también para que jóvenes
arquitectos se den a conocer.

Será la oportunidad para observar las innovaciones
tecnológicas y materiales que se desarrollan en lugares
tan disímiles como Ecuador, EE.UU., España, Suiza o
Japón. Y las nuevas maneras de tratamiento de los
espacios, como la arquitectura del paisaje, la ecológica,
la autosustentable o la biodegradable. Muchos trabajos
enmarcados en esas líneas se han presentado al concurso.

Pero la Bienal no es solo para entendidos. Muchas
exposiciones estarán abiertas para todo el público y
abarcan un gran menú que va desde el lanzamiento de
un libro de Ruy Ohtake, hasta las exposiciones de
pintura y las muestras abiertas de imágenes de
ciudades como Curitiba (Brasil) Quito o Caracas.

Los escenarios son varios: el Teatro Nacional y la
sala Aguilera Malta de la Casa de la Cultura Ecuatoriana,
la Casa Museo de Arquitectura (Junín 610 y Jiménez),
la plaza y el convento de San Francisco y las tres
facultades de Arquitectura de la ciudad.

Muchas actividades para que el quiteño también
muestre su creatividad y administre bien su tiempo.

Encuentro

* 25 profesionales dictarán conferencias en el marco
de la Bienal

Nuevas formas de hacer ciudad

Expositores de 15 países estarán presentes en el
evento. Las ponencias más interesantes: la ciudad
sostenible y la arquitectura paisajística tropical.

El esfuerzo ha sido significativo. A pesar que
personalidades como el suizo Mario Botta y la
italiana Gae Aulenti, que confirmaron su asistencia
y a último momento desistieron de hacerlo, 25
profesionales pertenecientes a 15 países estarán
presentes.

Arquitectos de la talla de Sergio Brenna, de Italia;
José Julio Cañabate, de España; Mark Mulligan,
de Japón; Ken Martin, de Inglaterra; Silvia Arango
y Laureano Forero, de Colombia; Eduardo Folco, de
Uruguay; y, 18 más, dictarán conferencias y
expondrán sus obras en los cinco días que durará el
encuentro.

La representación española ha despertado gran
expectativa, dado el alto nivel que posee su
arquitectura. Cañabate disertará sobre un tema
candente hoy en la Península Ibérica: la ciudad
sostenible. El venezolano Godfrey Stodart también
es novedad. El hablará sobre la arquitectura tropical,
otro tema de moda en el urbanismo actual.

Ohtake: la libertad plástica

Es el abanderado de la segunda generación de
profesionales brasileños impulsores del Movimiento
Moderno.

Es, además, uno de los más prolíficos diseñadores
de su país: más de 300 proyectos a nivel nacional e
internacional en 36 años.

Ruy Ohtake, discípulo de Oscar Niemeyer busca, no
obstante, la libertad plástica y la ligereza formal; sin
dejar de lado el funcionalismo.

Nacido en Sao Paulo en 1938 y graduado en 1960 es,
sin embargo, ciudadano del mundo. Su obra está
regada por todo el orbe: la Embajada brasileña en
Tokio, el Resort de las Américas en Santo Domingo
(República Dominicana), el pabellón de Brasil en la
Feria de Osaka (Japón) y el jardín y museo a cielo
abierto de Washington D.C. (EE.UU.), son sus
proyectos más representativos.

Las curvas de Goldberg

La curva es su aval y las grandes luces la
característica de su forma de concebir la arquitectura.

Steven Goldberg, arquitecto formado en la firma
estadounidense Mitchel/Giurgola, ha logrado integrar
armónicamente la función y la estética.

Su masterado en diseño urbano obtenido en la
Universidad de Columbia y el de arquitectura logrado
en la Universidad de Pensilvania han sido el soporte
técnico para una creatividad fecunda.

Es el ganador del Primer Premio de la IX Bienal
Panamericana de Quito, realizada hace dos años.

El trabajo galardonado fue el proyecto Virginia
Air and Space Center, implantado en Hampton,
Virginia, Estados Unidos.

Entre sus obras destacan: el Museo Histórico de
Bellas Artes de Achorage y el Centro de Ciencias
Biológicas Sherman Fairchild (Columbia, EE.UU.).

Ramírez enseña y crea

Su actividad siempre se ha desarrollado a dos
puntas: la docencia y la creación arquitectónica.
Pedro Ramírez, mexicano nacido en 1919 en
México D.F., las ha combinado bien.

Durante 15 años ha sido maestro de composición
arquitectónica y urbanismo en la Autónoma de
México y en 1996, la Federación de Asociaciones
de Arquitectos le nombró "Arquitecto de América",
una distinción que se otorga cada dos años a los más
destacados.

Sus obras son monumentales: el estadio de fútbol
Azteca, con capacidad para cien mil espectadores;
los pabellones de México para las exposiciones de
Bruselas y Nueva York; los museos de Arte Moderno
y Nacional de Antropología, ambos ubicados en el
parque de Chapultepec; el Hospital Infantil de México
(300 camas). (FUENTE: EL COMERCIO)
EXPLORED
en

Otras Noticias del día 09/Noviembre/1996

Revisar otros años 2014 - 2013 - 2012 - 2011 - 2010 - 2009 - 2008 - 2007 - 2006 - 2005 -2004 - 2003 - 2002 - 2001 - 2000 - 1999 - 1998 - 1997 - 1996 - 1995 - 1994 1993 - 1992 - 1991 - 1990
  Más en el