Quito. 6 mar 98. La propuesta del Gobierno de elevar el
Impuesto al Valor Agregado (IVA) al 14 por ciento causó
sorpresa en los sectores productivos y entre los analistas.

Francisco Ponce, apoderado de Ponce-Yépez, no se mostró
entusiasta, pero no encontró alternativas: debe ir acompañada
de austeridad y una mejora en la recaudación. "Es un impuesto
inflacionario que paga el consumidor. Nuestro sector se verá
directamente afectado. Era la salida más cómoda para el
Gobierno pero...no hay otra medida".

"Ahora nadie va a querer que le facturen", señala un ejecutivo
del Banco La Previsora que solicitó mantener el anonimato.

Según Gustavo Muñoz, vicepresidente de la Cámara de Industrias
de Cuenca, todas las propuestas afectarán al consumidor y no a
quienes evaden. Tampoco exhibe alternativas ante las medidas
adoptadas ayer.

Una vez más, el Consejo de Cámaras y Asociaciones de la
Producción se pronunció contra el anuncio. Su presidente,
Patricio Aguilar, dijo que el Gobierno no ataca la evasión,
pero castiga a las personas que tributan.

"Si el Gobierno no toma medidas coherentes, como el retiro de
subsidios y un estricto control del gasto público, a fines de
año la inflación bordeará el 34 por ciento y el déficit
alcanzará 4 por ciento. El crecimiento será nulo, la inflación
llegará mínimo al 35 por ciento y el déficit superará el 5 por
ciento". Un diagnóstico que tampoco da muchas salidas y más
bien se concentra en las crítica gremial.

Walter Spurrier, editor de Análisis Semanal, sostiene que las
medidas serían sanas, pero en otras circunstancias.

"En 1997, el IVA equivalía al 3,2 por ciento del PIB. Eso
quiere decir que el 68 por ciento corresponde a exenciones y
evasión. Por lo tanto, al elevar la tasa provocamos mayor
evasión e informalizamos más la economía. Lo que cabe ahora es
reducir las exenciones".

Para el analista Marx Carrasco, la propuesta de Alarcón
impedirá que se cumpla con el crecimiento, inflación y el
déficit.

No más impuestos, la tesis que se extiende en el Congreso

La posibilidad de que el Congreso apruebe las medidas se
diluye. La principal fuerza política que opera en ese recinto
-el Partido Social Cristiano (PSC)- se mostró opuesta a las
medidas. Ayer, a mediodía, Jaime Nebot difundió un boletín de
prensa que dice: "el partido no aprobará con sus votos en el
Congreso ningún impuesto". Agregó que "gobernar no es
extorsionar al pueblo continuamente para financiar el
despilfarro".

Sin embargo, antes de conocerse el comunicado de Nebot, su
coideario y presidente del Congreso, Heinz Moeller, movió sus
criterios, luego de escuchar al Presidente de la República y
al Frente Económico, quienes explicaron la actuación fiscal y
las graves consecuencias que se avecinan, si no se toman las
acciones previstas. Sin embargo, en lo esencial, Moeller
coincidió con la idea de Nebot: no aprobar la creación de más
impuestos, "porque afectarían a los pobres del país".

Luego añadió que el Ejecutivo, como una forma de superar la
crisis, debería implementar mejores políticas de recaudación.
No obstante, antes de que termine la reunión reservada con el
presidente Alarcón habló de una emergencia de coyuntura o
solución temporal, para luego determinar medidas fijas que no
afecten drásticamente.

Para Marco Landázuri, vicepresidente del Congreso, la medidas
son injustas, pero necesarias para contrarrestar la situación.
Juan Manuel Fuertes (DP) sostiene que el Gobierno no puede
lanzar globos de ensayo. Para él, es necesario buscar los
consensos necesarios para aprobar el monto más justo del IVA.

Por su parte, Oswaldo Riofrío (DP) dijo que su bloque se
reunirá para decidir, pero que está consciente de que la
crisis necesita de acciones gubernamentales, "siempre y cuando
se busque mecanismos para no afectar a los más pobres" .

Patricio Velasco de Unidad Nacional se opone a establecer un
ajuste económico definitivo . En la misma posición están Farid
Yapur, Pachakutik, PRE y varios independientes, como Patricio
Viteri y Carlos Vallejo...

UN SECTOR AFECTADO

Las ventas de autos bajarían 10% * César Galarza, gerente
financiero de Aymesa, señala que su empresa esperaba vender en
este año unas 34.000 unidades, pero de ser ratificada por el
Poder Legislativo la propuesta del Gobierno, esta meta bajaría
a 28.000 unidades.

La apreciación de Galarza es compartida por Francisco Ponce.
"Nuestra demanda se va a bajar. Tenemos cálculos que por cada
punto que se incrementa el impuesto nosotros bajamos tres en
demanda... la gente dejará de comprar automóviles".

SERVICIOS MAS CAROS

Los costos se pasarán al consumidor * El gerente de banquetes
del Hotel Colón, Raúl Granda dijo que "francamente es un golpe
duro para el cliente. No vamos a bajar cuatro puntos a los
costos de los servicios para compensar". Todos los servicios
hoteleros, desde la habitación hasta las llamadas telefónicas
sufrirán el incremento por ley. Asimismo, el dueño de un
restaurante que pidió no ser identificado dijo que la medida
obligará a cobrar 24 por ciento de impuestos: 10 por servicios
y 14 de IVA. "Seguro bajará nuestra demanda".

¿Y LOS BANQUEROS?

División de criterios * Fernando Pozo, vicepresidente del
Banco del Pichincha, ve la medida necesaria por lo rápido que
genera recursos. Advierte que debe estar íntimamente unida con
un recorte de gastos. No cree que la medida sea inflacionaria.
Francisco Zalles, del Banco Amazonas, coincide en el carácter
necesario de la medida, aunque dice que es "absolutamente
inflacionaria" y que se toma en un mal momento: " vivimos el
cuarto año de recesión. Tributar es bueno, lo negativo es que
financiamos la ineficiencia del régimen".

Finanzas * La caída del precio del crudo cuesta USD 480
millones

El déficit fiscal sería 6,5 por ciento sin medidas

Para Carlos Parada, gerente regional de Filancard, el
incremento de 4 puntos porcentuales por el Impuesto al Valor
Agregado (IVA), afecta a todo el comercio y no solo a las
tarjetas.

El incremento va a provocar una mayor evasión. "Para una
persona que compre con tarjeta ahora se le sube un 10 por
ciento de IVA, mientras que si paga en efectivo se le
descuenta un 15 por ciento. Esto significa que a las compras
de contado se les rebaja un 25 por ciento".

Para el negocio de las tarjetas de crédito el perjuicio se da
por la disminución en el volumen de facturación. "Se deja de
comprar con tarjetas y se van al efectivo".

Aunque a veces las compras son por valores muy altos, la gente
preferiría usar el efectivo, señala.

Parada es partidario de conservar el actual porcentaje de IVA
(10 por ciento) y controlar la evasión. "El 14 por ciento lo
va a pagar directamente el pueblo. "No se eliminan los
subsidios pero se imponen más tributos". En el fondo se está
afectando cada días más a la economía ecuatoriana.

Para María Troya, de la Tribuna del Consumidor, el incremento
del IVA es negativo porque implica un incremento en el costo
de los bienes que se adquieres y que se consumen. El aumento
encarece el poder adquisitivo de la población pobre. "Pero el
problema es más grave es que sube el costo de los alimentos,
lo que encarece la canasta alimenticia, afecta a la economía
de los consumidores.

Esta aseveración no tendría sustento toda vez que Danilo
Carrera, presidente de la Junta Monetaria, señaló que existen
excepciones: la salud, la agricultura, alimentos, cultura,
libros. Las exportaciones no se afectan porque no tienen
impuesto.

Carrera señaló que el IVA en el Ecuador es el más bajo de
América Latina. En Perú, por ejemplo, el IVA es el 16 por
ciento y en Chile es del 18 por ciento.

Además, la caída del precio del petróleo significa una pérdida
de ingresos por 480 millones de dólares en el Presupuesto
Estatal.

A esto se deben sumar los gastos que se harán por el fenómeno
de El Niño. "La suma de los dos rubros significa unos 740
millones de dólares, que sumado al déficit anterior del 2,5%
del PIB, unos 500 millones de dólares, equivalen de USD 1.200
a 1.300 millones en déficit, que es inmanejable".

Si esta situación se mantiene, sin hacer nada, "tendríamos que
soportar una inflación de alrededor del 100 por ciento.
Tendría que cambiarse la banda cambiaria del 21 por ciento y
la tasa de interés se subiría en alrededor de 60 o 70 por
ciento".

La propuesta no es nueva. En los años 84-85 ya se vivió una
situación similar, cuando cayó el petróleo y en 1987, cuando
se rompió el oleoducto por seis meses. "La medida del Gobierno
de Febres Cordero fue elevar el IVA del seis al diez por
ciento, además de triplicar el precio de la gasolina".

Desde el punto de vista técnico y económico, la medida de
incrementar el IVA es la mejor opción señala Carrera. La
razón: para una persona que gasta 5 millones de sucres en
comprar bienes afectados con el IVA, por ejemplo, el
incremento en el gasto será de 200 mil sucres. O lo que es lo
mismo, la restricción de compra de bienes es de 200 mil
sucres.

En cambio, si no se toman medidas, y asumiendo que la
inflación llegue al 50 por ciento, el costo de los bienes se
duplica, o sea, 2,5 millones de sucres más.

LA PROPUESTA DE AJUSTE

Rubro Valor (en USD)
Incremento del IVA del 10 al 14 por ciento 400 millones
Eliminación de las excenciones del IVA 80 millones
Reducción de los gastos corrientes
del Presupuesto del Estado 100 millones
Recorte de los gastos de inversión y
compromisos de deuda 180 millones
Total 760 millones
Otros indicadores de ayer
Dólar interbancario 4.596 sucres
Tasa de interés interbancaria 33 por ciento
Precio del petróleo USD 9,69
Fuente: Sección Negocios
(Texto tomado de El Comercio)
EXPLORED
en Ciudad Quito

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